¿Qué está pasando en el cómic americano? (Season Five)

Desde que Ron Marz la introdujese en el maravilloso mundo de la maternidad, la vida de la detective Sarah Pezzini no ha dejado de dar vueltas mandando al traste cualquier posibilidad de estabilidad personal mientras continuaban apareciendo nuevos portadores y artefactos para complicar todavía más su existencia. Con su tórrida pero poco sana relación con el icono emo gótico de la Top Cow de los 90 Jakie Estacado, la detective del departamento de homicidios de Nueva York no solo se ha visto obligada a superar la desaparición de su hija y sus cada vez más violentos cambios de carácter, sino que recientemente se sumaría a las filas del INEM tras ser suspendida de empleo y sueldo como una Harry Callahad cualquiera. Con la oportunidad de volcarse en el ocio entre ofertas laborales (que son como las Meigas, haberlas dicen que hailas), Sarah decide entregar su intratable carácter en la lucha contra amenazas como Tiamat, diosa sumeria del caos que reaparece en nuestra época clamando venganza contra aquellos que la exiliaron. Con Danielle Baptiste y los Guerreros Angelus para asistirla, la épica batalla contra los engendros invocados por Tiamat tiene como espectador de escepción al antiguo jefe en el departamento de policía de Sarah, lo que le da la oportunidad de lucirse a la par que salva el mundo, que con los magistrales lápices de Seljic siempre luce mejor:

En cuanto a dibujo se refiere, la verdad es que podemos considerarnos afortunados por el alto nivel de calidad de muchas de las series de hoy en día. En el bando deceita tenemos a un JH Williams III, haciendo historia en su Batwoman y marcandose unas páginas absolutamente fascinantes, con cambios de registro tan radicales como realistas, y a Francis Manapul llevando más alla lo hasta ahora explorado la visualización a través de la viñeta de los poderes de Barry Allen. En Marvel, un barroco Jerome Opeña está «petandolo» en Uncanny X-Force y poco a poco Esad Ribic está subiendo su nivel en Ultimates, conjugando una paleta de colores con un empleo de las onomatopeyas de lo más efectivo, por no hablar de Chris Bachalo en Wolverine & The X-Men (aunque este entiendo que es una decisión mas personal y siempre polémica, pero que a los dos aqui firmantes nos fascina y entretiene a partes iguales). Pero si este mes ha habido una viñeta que me haya dejado boqui-abierto y que por sí sola merezca una posición en este WTF mensual, esta ha sido la siguiente…

Excelsior!. Marcos Martin, te echaremos de menos en Daredevil. Ahora, si alguien tiene a bien sacarme de dudas, por favor… ¿El que está ahi es un miembro de la Guardia Real personal del Imperio de Star Wars o la Encapuchada Escarlata de DC Comics?

Con toda esa ingente candtidad de noticias surgidas en torno al revuelo mediático del reboot de DC, confundiendo rumores con noticias de primera mano y contradicciones que llegaban tanto desde los despachos como las webs de información, es fácil entender la montaña de humo organizado en torno al mismo donde muchos de los aficionados (y una parte importante de los responsables) no parecen tener todavía muy claro cuales son las reglas por las que se rige este nuevo universo. Lo mismo te dicen que John Constantine ronda los treinta años que en La Cosa del Pantano aseguran que u historia sigue intacta como en la editorial te dicen que la actual es la única encarnación de los Titanes que ha existido la misma semana que en sus comics afirman que ha habido otras sin ningún genero de dudas. Entre tanto jaleo uno tiene que moverse mediante intuición dejándose llevar por ideas preconcevidas a las que en muchas ocasiones tiene que acabar descartando conforme se van sumando números. Series que parecía iban a ser gloriosas y al final se convierten en tediosas (Morrison, no miro a nadie) otras que parecía que no tenían nada que ofrecer y al final resultan gratas sorpresas… Rectificar es de sabios y aunque aquí todavía no lo somos nos gustaría serlo, por lo que -tomando como referencia el post en el que señalamos algunos de los detalles más destacados del reebot- ya tenemos un par con los que desdecirnos. ¿Recordáis cuando afirmábamos que las acusaciones de machismo contra Scott Lobdell eran exageradas dado a que «normalizó» a uno de los exponentes eróticos de los 90 y que el Aquaman de Johns era una gris nenaza? Pues nos lo hemos pensado mejor:

Aviso de Spoiler «¿Quién puñetas está al cargo aquí? Una pista: Yo» Eso es un Aquaman farruco (o badass que dirían los americanos) como dios manda y lo demás es tontería. Cierto es que Jim Lee la caga en lo más fácil y aunque atina con las pintas de lobo de mar y el ese tridente que al fin deja de parecer un candelabro le colocá un collar que más que pintas de chungo a lo B.A. Barracus parece que se lo acaba de robar a la abuela Carlota durante el bautizo de su primo Rogelio. Aun así, el espíritu de la escena es el adecuado y hace pensar que detrás de todo lo ni mata ni engorda que esta siendo la etapa de Johns en Aquaman lo mismo nos sorprende y todo. Respecto a Caitlin Fairchild, en apenas una página ha pasado de ser un buen ejemplo de que no todas las chicas de DC están ahí para lucir cacha para quedarse medio en porretas agarrando a Superboy por el pescuezo. En beneficio de Lobdell podemos decir que reclamo sexual en la acepción clásica del término tampoco es que se la pueda denominar a no ser que te parezcan más sugerentes las aspirantes a Ms Olympia que las que se presentan a Miss Universo. Eso sí, con esas gafas y la melena color zanahoria de la muchacha y el flequillo a lo Lobdell de Superboy, me pregunto si la escena representa algún tipo de alegoría de la discusión sobre el uso de los personajes femeninos que mantuvieron Gail Simone y el autor hace un par de meses…

Por lo demás, concluyo con lo que parece ser la consagración de esa impresión que muchos tuvimos con el primer número de la serie. Si tenéis que seguir un solo título escrito por Lobdell en este nuevo universo DC, que sea Red Hood & The Outlaws. Y no lo digo porque sea el menos malo, sino porque sin ser otra cosa que una serie discreta sin más ambición que entretener, está siendo una imaginativa diversión con cierto tufillo serie B. La serie no solo está dibujada como dios, sino que el último número nos ofrece uno de los momentos más tiernos y entrañables que haya dado todo el reboot.

Este mes no tenemos ninguna entrada de nuestro sospechoso habitual Garth Ennis (por algo el mes pasado coló dos en nuestro 10 en ranking), pero para sustituirle hemos traido a otro de los rondadores del WTF. El unico, el genuino, el provocador profesional Mark Millar. Y es que el señorito Millar sigue dandonos diversión a raudales mezclada con momentos brutalmente gores en un intento de llamar al atención de los aficionados y los señores con maletin de Hollywood a partes iguales. La temperatura está subiendo en su Kick-Ass (a tres números de la finalización del primer arco argumental). En capítulos anteriores, Dave pudo escapar a duras penas de los esfuerzos de Red Mist por acabar con él. Desafortunadamente, la policia entró en su casa y registó sus pertenencias, deteniendo a su padre pensando que él era el personajillo que se dedicaba a emular a Torrente apatrullando la ciudaaaad. Vamos, que directo al trullo. Y allí se cuecen habas. Teniendo en cuenta el resultado final de su corta estancia en la carcel, estoy seguro que lo hubiera cambiado por una pastilla de jabon sin dudarlo un solo momento. Es decir, el padre de Dave es asesinado dentro de la carcel, cosa de la que se entera el propio Dave via sms. Cosas del mundo 2.0 en el que vivimos. Pero hasta aquí era para poneros en situación, nada fuera de lo normal, o todo lo normal que pueda ser un comic de Mark Millar (y os lo dicen dos personas que acaban de releerse Unfunnies). La escena que se ha currado MM deja en ridiculo a la del mes pasada en la que emulaba al 11 de Septiembre, pero sustituyendo un par de aviones con un trasatlantico. Supongo que cuando estaba escribiendo la escena del funeral del padre de Dave, Mark Millar tuvo una despedida de solteros, con tarta y regalito dentro de la tarta, porque sino no me explico como se le ha ocurrido tal burrada. Absetense los sensibileros (¿existe esa palabra?) y los demás, pinchad en el botoncillo de spoiler para ver como se las gastan los enemigos de Kick-Ass.

Teniendo a medio Universo Marvel en vilos (o no) durante más de medio año, una de las consecuencias más inesperadas de Fear Itself ha sido el que en los últimos estertores del evento Thor muriese viéndose sustituido por un nuevo dios del trueno: Tanarus. De hecho fue tan inesperado, que ateniéndonos al brusco cambio que sufrio el teaser de Battle Scars durante la Convención de Comics en la que fue presentado, casi diría que se les ocurrió sobre la marcha. El caso es que durante las últimas semanas hemos hablado bastante del tema, desde el post en el que analizábamos la interesante propuesta de Fraction (según la cual, nadie en el Universo Marvel, salvo Loki, recuerdan que hubo otro Dios del trueno antes que él) hasta los comentarios que lo comparaban con Bill Rayos Beta o el llorado (bueno, alguien supongo que lo echará de menos) Red Norvell. Presentándose como un argumento con gancho con potencial para habermos mantenido debatiendo en la red durante los próximos meses, Fraction nos ha vuelto a pillar desprevenidos marcándose la trolleada del siglo en el último número de la colección:

Si es que lo hacen para provocar. Y no, no hablo de las otakus que me encontré el otro día (que todos sabemos que la culpa de eso la tienen los padres… Si me hubiera comprado una katana a tiempo, seguro que el juez lo hubiera considerado atenuante por tratarse de un favor a la sociedad) sino que hablo de DC Comics. Nos leen y saben lo que nos gusta. Lo hacen por nosotros. Y por si no habiamos tenido poco que hablar en lo que respecta a Catwoman (que a mi me sigue pareciendo un excelente comic y muy entretenido, aunque esté mal visto decirlo), Voodoo (dos y dos son cuatro y dos son seis, etc etc) o Starfire, ahora nos crean a un pesonaje nuevo de lo más fascinante. Como recordareis (si habeis podido olvidarlo, ya estoy yo aquí para haceros recordaroslo amablemente), el responsable/culpable del relanzamiento de los Teen Titans es Scott Lobdell. De su prodigiosa mente (hasta que no se demuestre lo contrario) ha salido la creación de un nuevo personaje, que dada su condición de gay ha sido usado por la editorial para promocionar esta serie antes de la publicación del número uno (aunque no ha aparecido por primera vez hasta ahora, la terecra entrega). Los poderes del chico en cuestion, muy similares a los de cualquier Lantern que se precien (ya sabeis que andan flojos de sidecicks en ese apartado), le hacen tener muchas papeletas para convertirse en el próximo Gay Lantern de DC. Pero a lo que hemos venido aqui a hablar es de mi libro su personalidad. La maestria a la hora de definir la personalidad de este chaval es absolutamente abrumadora. Con pocos detalles aquí y allá, y con frases precisas, conseguimos saber su forma de comportarse y sus pensamientos. Veamos algunos ejemplos.

Ejemplo 1: La vestimenta y el peinado. Como diria Matias Prats, «¡¿Pero esto que es?! Camiseta morada de manga larga. Encima, camisa hawaiana azul de lo más hortera. Y por encima chaleco gris de rayas (o cuadros, depende de la viñeta que mires). Con una corbata de lo más casual. ¿Y qué me decis del peinado? Ante tal tesitura, uno llega a pensar en que se ha podido «inspirar» el dibujante para tal look.

Ejemplo 2: Para el siguiente ejemplo, vamos a practicar el noble arte de sacar las cosas de contexto (descontextualizar para los devotos de Jotace).

Di que si, hijo mio, di que si. Tu a lo tuyo…

Ejemplo 3: Pero sin duda, la mejor de todas, y por la que no pude parar de reir durante quince minutos tras haberlo leido fue la siguiente. Y es que a ese maestro del noveno arte (y todos los que se le pongan por delante) a Scott Lobdell el nombre que se le ha ocurrido para este nuevo super-heroe latino es …

No se si habéis estado últimamente por Cybertron, pero se está liando la de San Quintín en el planeta de los Transformers. Haciendo un rápido resumen, este mundo artificial se encuentra bajo asedio tras la llegada de las tropas de Galvatron, quien parece decidido a llegar hasta su núcleo en busca de un poder tan antiguo como el mismo Cybertron. Vagueando en la Tierra como de costumbre, a Optimus Prime y su gente les llegaría la noticia de la invasión justo cuando se disponían a embarcar a su planeta natal para que Megatron fuera sometido a juicio por sus crímenes contra los Transformers, la humanidad y todo aquel que se haya interpuesto en su camino.

Disfrutando del tiempo suficiente para llegar a la conclusión de que sus diferencias son irreconciliables, Optimus y Megatron aterrizan junto al resto de los Transformes en su planeta de origen para encontrarla a punto de sucumbir bajo las tropas de Decepticons muertos de Galvatron. Con la estación Kimia en modo Estrella de la Muerte, el villano les ofrecería unirse a él para hacer frente a una terrible crisis indefinida (estos villanos y sus misterios…). Como pactar con un robot con perilla no esta bien visto entre los suyos, Optimus le diría que nones iniciando una guerra de guerrillas en la que mientras él y otros valiosos miembros de su pelotón como Wheelie (¿Qué? Debes estar de coña…) hacían frente a las tropas de tierra, Rodimus lideraba a un segundo frente que debían retomar el control de Kimia. Claro que como Optimus está rodeado de una panda de inútiles de cuidado, no solo no pudieron evitar que la estación espacial abriera un boquete del tamaño del esfínter anal de Ego en la superficie del planeta, sino que además se les escaparía de las manos un Megatron más trastornado y poderoso que nunca.

Por suerte para ellos, el antaño líder de los Decepticons entraría en escena con ganas de marcha, y como nadie puede reclamar Cybertron más que él, demostraría que no hay robot convertible que los tenga mejor puestos que el bueno de Megatron. Con sus partidarios entrando en escena y las tropas de «robots zombies» de Galvatron unificándose en una gigantesca criatura que riete tú del padre de Warlock, sobre la superficie de Cybertron se produce una cruenta batalla en la que los miembros de cada uno de los bandos comienzan a caer como moscas y Megatron se convierte en la única esperanza para detener a la criatura mientras Optimus y Rodimus tratan de llegar al núcleo del planeta antes de que Galvatron lo fusione con El Corazón de las Tinieblas (una suerte de objeto chungo que se trajo consigo de su viaje al Universo Muerto). Creyendo que lo está haciendo para salvar el mundo -cuando en realidad esta controlado por el objeto- Galvatron fusiona el Corazón de las Tinieblas con el núcleo de Cybertron desdencadenando un cataclísmico pandemonium a lo largo de todo el planeta. Siendo los únicos que quedan para detener la hecatombe antes de que se lleve a todo el planeta por delante, Rodimus le propone a Optimus que encaje la Matriz con el núcleo y el Corazón a ver si con suerte contacta el A con el B y con suerte consiguen salvar el día y todo. Aunque Optimus no le hace demasiada gracia la idea, al final acaba haciendo caso al joven Autobot. A fin de cuentas, de situaciones más jodidas han escapado ¿qué es lo peor que puede suceder?

Hoygan, ¿cuantos números de una serie hay que esperar para poder afirmar que es la «mejor serie del mercado»? El histrionico Lobezno y los X-Men de Jason Aaron y Chris Bachalo va camino de convertirse en una sucesión de momentos WTF de lo más desternillante y entretenida. Al reparto titular de Lobezno, Kitty, Hombre de Hielo, Bestia y Rachel Grey, Jason Aaron ha unido un nuevo reparto de alumnos de lo más rarito. A Kid-Gladiator, sobrino del sh´iar de mismo nombre, y su guardaespaldas, Warbird, se les suman el apéndice del Nido, Broo, el recuperado Quentin Quire o la inocente y bipolar Idie, del equipo juvenil de Hope. Este segundo número contiene por si solo no uno ni dos, sino suficientes momentos en 22 páginas como para copar por sí solo esta edición de ¿Qué está pasando en el cómic americano?. Así que como si de un anuncio de Mastercard esto se tratase, vamos alla…

 Mini-Rondadores Nocturnos a tutiplen rondado por todos los lados … check!

 Oficiales del Departamento de Educación convertidos en un Sauron con corbata y un Wendigo con gafas … check!

 La niña del Nuevo Club del Fuego Infernal comentando que ha comprado un zoo solo para aporrear a pinguinos con un martillo como hobby … check!

 Una legión de Monstruos Frankensteins auto-duplicantes con lanzallamas … check! Desde los gorillas con cucharas gigantes de Paul Cornell yo no había visto nada igual

 El fascinante amor a primera vista entre la cortita Idie y el reciente fichaje Broo … check! Frases tan legendarias como Dime, Idie. ¿Cuanto tiempo es lo habitual que pase desde conocerse para poder pedir matrimonio? ¿Sería ahora considerado demasiado pronto? van de cabeza al Top Ten de Frases Molonas del año… Y no es la única.

 El Hombre de Hielo (con bermudas) rompiendo la pana y creando multiples versiones de si mismo, muñeco de nieve incluido, para salvar el día … check! Mola que casualmente solo un mes después de haber visto en Uncanny X-Force el potencial de el Hombre de Hielo (versión AoA), Jason Aaron haya demostrado que nuestro querido Bobby Drake tiene un buen futuro por delante…

 Beso por sopresa de uno de esas versiones sesenteras de Bobby Drake a Kitty Pryde para volver locos a todos los fans de ella en Internet, además de a un celoso Lockheed … check!

 Descubrir que Hank McCoy ha construido la Nueva Mansion de Estudios Superiores Jean Grey encima de Krakoa … eso, señores, no tiene precio!

Con el paisajístico trazo de Stefano Casselli sustituyendo al frenético Humberto Ramos, el epílogo de Spider Island nos deja un puñado de consecuencias interesantes para el futuro de nuestro amistosos vecino Spider-Man. La macrosaga arácnida de este otoño en la que Dan Slott ha recuperado argumentos que van desde las tramas totémicas de J.M. DeMatteis o Joseph Michael Straczynski pasando por la Saga Clon, el Espectacular Spider-Man de Paul Jenkins o argumentos que el mismo ha puesto en juego desde su llegada con el Brand New Day. Con la ciudad de Nueva York salvándose en extremis de transformarse en un ejambre de arañas antropomórficas monstruosas, la muerte de La Reina y la vuelta a la normalidad de los ciudadanos tras serles administrada la correspondiente cura, ahora nos encontramos en un panorama en el que los superhéroes, el ejército y los servicios de emergencia tratan de reinstaurar el orden y evitar nuevos brotes.

Despojándose de esa ley de la ficción según la cual cuando uno se transforma en un monstruo gigantesco y regresa a su estado normal lo hace con jirones de sus antiguas ropas cubriendo estratégicamente sus zonas más pudendas, nos encontramos con un festival nudista expontáneo en el que la mayoría de ciudadanos corrientes se ve presa de su vergüenza mientras que los supertipos afectados parecen sobrellevarlo con bastante naturalidad (y si no que se lo digan a Hércules, quien no puede evitar acordarse de sus bacanales en la antigua Grecia). En medio de semejante algarabía con el clásico continuará suministrado por el Chacal y uno de los clones del Doctor Miles Warren nos encontramos con varias consecuencias sobre los más ilustres héroes arácnidos de la isla tal como nos anunciara Madame Web (aka Julia Carpenter) al comienzo del evento.

Sacrificando su nuevo simbionte para salvar a los ciudadanos, Eddie Brock se ha convertido en el inesperado héroe de la crisis mientras que Steve Rogers se muestra interesando en reclutar al actual Veneno como parte de sus Vengadores y Kaine se lanza a la américa profunda para iniciar una nueva carrera como justiciero enmascarado itinerante como Araña Escarlata. Por tener incluso podemos disfrutar de una deliciosa Mary Jane con poderes arácnidos (¿se los puede quedar, pleaaasee?) y a Spider-Man recuperando su sentido arácnido. Pero la más importante consecuencia llega cuando el bueno de Peter se introduce en su apartamento abordando a su novia Carlie Cooper con una de sus clásicas excusas aludiendo que ya estaba allí pero que no lo había visto porque estaba durmiendo en cualquier rincón:

Y si con este importante nuevo paso en la vida de Spider-Man el evento no os parece suficientemente meritorio, Caselli nos deja su personal reivindicación de Estrella de Fuego después de que hace unos meses rompiera definitivamente (todavía más) su relación con Justicia descubriéndonos que en sus años de noviazgo jamás tuvieron relaciones íntimas dado el empeño de Vance de reservarse para el matrimonio. Recien superado su cáncer y viendo que el mutante telequinético no está teniendo el mismo miramiento con su actual novia, la fogosa Angélica Jones parece dispuesta a dejarse ver e intentar recuperar el tiempo perdido.

Como has podido comprobar, astuto lector, la mismísima Encapuchada Escarlata (¿por qué cuando escribo esto me sale con el acento de Loqueelvientosellevo?) que apareció en los 52 números uno del Nuevo Universo DC de Septiembre ha tenido a bien a pasarse por esta sección, dejandose ver entre algunas de las reseñas del Top Ten WTF. El otro día recibimos una llamada con número oculto y nos dijo que quería negociar un posado para nuestra página. Concertamos una reunión y quedamos con Carmen Sandiego la Señorita Escarlaaaaata en una undisclosed location. Al final no llegamos a ningún acuerdo monetario (está la cosa muy mala) ni sexual (ahí no hablamos, que hay que tener cuidado por si luego hay truco). Pero claro, ya que la teníamos delante no podíamos dejarla marchar así que lazo maravilla en mano…

Así que ya sabeis, si no podeis aguantar a que Geoff Johns, Dan Didio y Jim Lee nos desvelen y asombren a todos con la identidad de Scarlet Woman, podeis pinchar en el spoiler. Atentos, que vienen curvas…