Old Woman Natasha
«¿Estás bien, Natasha?» «Estoy cansada. Cansada y harta de todo»
Entre finales de los 90 y comienzos de los 2000, la Viuda Negra era un extraño personaje comodín en Marvel. La época en la que era miembro e incluso brevemente presidenta de los Vengadores (costa este) había quedado atrás y Natasha Romanova se percibía como el vehículo ideal para contar historias adultas con otro tipo de sensibilidad más allá de las clásicas aventuras de superhéroes. Así pues, tanto Devin Grayson como Greg Rucka escribieron miniseries dedicadas a la Viuda -no solo Natasha sino también en algún caso protagonizadas por Yelena, la “otra” Viuda Negra- para los sello Marvel Knights y MAX. Esta “nueva” versión de Natasha se había integrado sin problemas en el Universo Marvel tradicional gracias a la inclusión del personaje en el Daredevil de Brian Michael Bendis (#61-64 del vol. 2 publicados en 2004).
El siguiente en ser llamado a filas sería el escritor de ciencia-ficción Richard K. Morgan, quien se encargaría de guionizar los 6 números del vol.3, también en Marvel Knights (Panini, en la primera edición en España de esta miniserie en 2009, la incluyó en el sello MAX imaginamos que únicamente como reclamo para lectores adultos ¿?). Y es precisamente el equipo creativo de aquella historia quien mayormente repite en este 100% Marvel HC. Viuda Negra: Las cosas que dicen de ella. Acompañando a Morgan tenemos el trabajo a cuatro manos de Sean Phillips y Bill Sienkiewicz. De nuevo 6 números en una historia que no termina de cerrarse. Pero no nos adelantemos.
Este tomo tiene dos handicaps importantes con respecto a su trama. En primer lugar hablamos de una continuación directa del 100% Marvel HC. Viuda Negra: Hogar, Dulce Hogar. En la edición española no hay recapitulación como aunque sí se resume en el artículo a modo de introducción que aparece antes de los cómics propiamente dichos. Y este resumen es fundamental porque sin él o sin haber leído la anterior miniserie, el lector se va a encontrar muy perdido, sin entender muchas de las cosas que pasan y de las relaciones entre los personajes. Del segundo handicap hablaremos en el último párrafo de la reseña.
La trama, pues, sigue a la protagonista, Natasha a Cuba y a una misión encargada por su antigua-enemiga-ahora-compañera Yelena Velova. Esta misión es tan solo una excusa para que la Viuda retome la búsqueda de la joven Sally Anne Carter, secuestrada por la organización/empresa Gynacon, embarcada ésta en la búsqueda de una droga capaz de controlar la voluntad de las personas. Durante la búsqueda y posterior rescate, la Viuda recibirá la ayuda o colaboración de personajes conocidos como Nick Furia o Daredevil y tendrá como antagonistas a los supervivientes de la anterior miniserie: Agentes renegados de una agencia gubernamental clandestina además de un psicópata que quiere cortar a Natasha en pedacitos.
El estilo de Morgan es muy directo, con diálogos la mayoría de las veces muy concisos e incluso cortantes. Le cuesta planificar escenas de acción y a veces es un poco tramposo con las elipsis como la que enlaza los #4 y 5. La historia es un tanto enrevesada y los villanos están mucho menos desarrollados que en Hogar, Dulce Hogar lo que hace que la resolución no tenga el impacto pretendido. El guionista vuelve a incidir en varios de los temas ya incluidos en su primer trabajo con la Viuda: la sororidad, la objetivización-sexualización de la mujer o la misoginia de un mundo como el del espionaje eminentemente masculino. Morgan escribe a una Natasha a la que confirma más cerca de los 40 que de los 30, muy cansada de todo y de todos y que no está dispuesta a seguir las reglas de los “chicos buenos” siendo sus choques dialécticos con Daredevil de lo más disfrutable del tomo.
En cuanto al dibujo, Phillips es el acreditado como dibujante y Sienkiewicz como entintador pero insisto en que parece claramente un trabajo a cuatro manos, con escenas claramente distinguibles á la Sienkiewicz como las alucinaciones que Natasha sufre estando drogada. Tanto el tono como sobre todo el color de Dan Brown le dan a la historia un aire no solo oscuro sino tétrico y por momentos terroso y excesivamente sucio.
La historia no esconde su naturaleza de episodio intermedio en una narración mayor. El final, abierto, deja a Natasha (y a Matt Murdock) en una posición delicada como enemigo público #1 de al menos dos países y con carteles por las calles y en la televisión que incluyen su cara y llaman a su arresto; Nick Furia prisionero en Guantanamo y varias personas con ansias de venganza hacia la Viuda Negra. Desgraciadamente, llegamos al handicap número 2. La última miniserie de también 6 números que debía cerrar la trilogía nunca llegó a realizarse. Según Morgan, la carga política crítica con el gobierno estadounidense era tal, que nadie en Marvel quiso mojarse y dejar que acabara su historia. El guionista planeaba que Natasha asesinara al corrupto Presidente de los EE.UU. derribando por el camino a una agencia gubernamental encubierta que bien podríamos denominar como el “Estado Profundo”. Dos años después de la publicación de Las Cosas que Dicen de Ella, Ed Brubaker retomaría al personaje -casi recién salido de la primera miniserie de Devin Grayson– en su etapa en Capitán América. Aún habrían de pasar unos años para que en 2010, Marvel volviera a darle una oportunidad editorial a Natasha en solitario, el volumen 4 de la Viuda Negra con Marjorie Liu y Daniel Acuña que apenas dejó poso en los lectores.
Lo mejor
• Las conversaciones entre Natasha con Yelena por un lado y con Daredevil por otro
Lo peor
• Se nota demasiado que es la segunda parte de una (abortada) trilogía
De ella digo que tiene la portada más extrañamente forzada de la historia del cómic.
Y se la agarraban con Manara…
Sinegia de pensamiento. A mi tambien me llamo la atención, Supongo que al final la agarraron con Manara por el historial que tenia, pero no recuerdo que esa portada generara alguna polemica.
Y la pose de Daredevil es tremenda…manito izquierda que no se ve que agarra y derecha firme sobre el palito loco…
Ostras, es verdad. Me parto. xD
Este cómic lo he leído recientemente en la colección Marvel Dark, en un tomo de 3 €. Lo comento por si alguien tiene interés y no quiere gastarse muchos cuartos.
Je, todavía recuerdo cuando Marvel se llenaba la boca de lo liberales que eran y en un instante arman flr de escandalo por unas portadas de Manara, de no creer.
Hola. Vengo a lo mismo. Como soy boomer me sorprende la volatilidad de la cancelación. Es que ni a Panini se le debería haber pasado poner esa portada en portada. Ah, espera que es del 2020. Entonces la gente estaba a otras cosas. Vale.
Aquellos degenerados comienzos de década. Lo que hemos progresado!
😀