Comenzamos con una conversación entre Alan Scott y la mujer de Animal Man, con Linterna comunicándole que su marido no ha vuelta del espacio. Ella le contesta que mientras se le considere perdido y no muerto, aún alberga esperanzas. Y escuchamos (y escuchan todos los protagonistas de 52) un comunicado de Lex Luthor, que en un acto para recuperar la fe de la humanidad después de que, según sus palabras, un Luthor de otra dimensión tomara su lugar y destruyera su imagen, afirma haber aislado el gen que da a los héroes sus poderes, ofreciendo a la humanidad una nueva era donde todo el que lo desee pueda tener habilidades superhumanas (y así dejar de depender de los superhéroes, de paso)
Seremos testigos de cómo, tras el extraño suceso del número anterior, John Irons vuelve a enfundarse la armadura de Steel, y acude a la llamada del Dr. Midnite para que acuda al St. Camillus, un hospital habilitado para curar superhéroes, donde se encontrará entre otras desagradables sorpresas (y me refiero al cuerpo fundido de Firestorm y Cyborg) a Mal Duncan, Vox de los Teen Titans, en estado de shock y con un componente de Red tornado incrustado en sus pulmones. Allí se encontrará a Green Lantern, que narrará lo ocurrido a los héroes espaciales.
Por lo que Alan recuerda, la explosión que sucedió a la derrota de Alex no creó una onda expansiva normal, sino que provocó una onda de disrupción temporal, que alcanzó al Rayo Zeta que intentaba sacar a los héroes de allí. Durante la disrupción, Firestorm y Cyborg se fusionaron, Bumblebee y Hawkgirl sufrieron las alteraciones de tamaño que ya vimos en el número anterior, y Red Tornado explotó junto a Mal Duncan. Además, nadie sabe qué ocurrió con Starfire, Animal man y el propio Adam Strange, que no llegaron a la tierra.
Después de una advertencia sobre sus actividades ilegales de vigilancia y el barullo del número anterior (del que no se pudo demostrar nada porque no quedó rastro alguno), a Renee Montoya se la ve muy cómoda con el arma extraterrestre que consiguió…
En ese momento, Vox empeora y tras la intervención de Steel se despierta gritando “!Ya viene!! ¡52 ! ¡52!”, que sabemos que fueron las últimas palabras de Red Tornado.
Y muchos, muchos años luz más lejos, nos encontramos a los héroes perdidos: en un planeta paradisíaco Animal Man no puede dejar de sentirse incómodo, cosa que no le preocupa a una más que adaptada al a nueva situación Starfire, que tranquilamente se toma un baño mientras Adam Strange intenta arreglar una nave para devolverlos a la Tierra, cosa considerablemente complicada si no tienes ojos. Además, es más que probable que Buddy tenga razón en cuánto al planeta. Al fin y al cabo, “todo Edén tiene su serpiente…”
Ella le contesta que mientras se le considere perdido y no muerto, aún alberga esperanzas.
La cosa es que, mientras sea un superhéroe, aún albergan esperanzas. Scott Summers diría de Jean: «Mientras se la considere muerta, aún albergo esperanzas». Flojito lo que sucede en este número, ¿no?
Hombre, yo creo que tiene buena pinta, aunque quizá si algo menos que los otros.
Pero bueno… es dificil mantener un mismo nivel.
Si, Miralles, esa es más o menos la idea. Yo también creo que el número es algo más flojillo que los anteriores, pero es de suponer que algunas tramas despiertan más interés que otras.
A mi me gusto bastante el número, aunque debo reconocer que es atractivo solo porque se centra en lo sucedido con los heroes del espacio… COOL