«Yo me llamo Bond, James Bond».
Algunos personajes no necesitan presentación. Con el paso del tiempo quedan incrustados en el imaginario colectivo, ya sea por el impacto en su soporte original o porque su legado se haya visto ampliado en otros medios. Es el caso de
Casino Royale es un libro corto, ligero y muy entretenido. El punto más flojo es su inicio, que de primeras tiene descolocado al lector. A partir de ahí, Ian Fleming mantiene una tensión continua, como si un cuchillo pendiera encima del protagonista en todo momento. De cualquier situación puede sacar un peligro, y su creación nunca encuentra verdadera paz. La partida de bacará que es el núcleo del libro es intensa y directa. Ser agente secreto y luchar contra la organización rival no es fácil y no tiene tanto glamour como cabría esperar. Donde las películas nos presentan un entorno elegante aquí tenemos un mundo más terrenal. Más sucio, sin ser deprimente. Áspero.
Es cuando James Bond define a
En su retrato del espionaje, Casino Royale va contra la fantasía de los servicios secretos tomada como habitual. No hay muchos disparos siquiera, pues con una bala encuentras la muerte. James Bond no tiende a ninguna clase de ironía, y es directo en lo que dice y en lo que hace. Es el agente cero cero más eficaz, pero dentro de ese esqueleto de eficacia es falible. No es débil, pero es humano. Se rompe y tiene dudas. Su éxito surge del control que realiza de todo a su alrededor y que mejora sus capacidades. Es también realista, y es al final del relato que quedará totalmente formado, si bien esta no es una historia de orígenes.
En resumidas cuentas, Casino Royale es una novela entretenida. La sensación de peligro te atrapa durante todas sus páginas. Ian Fleming ofrece un relato breve, intenso e hijo de su época (presencia del tabaco, tratamiento de la mujer, etc). Recomendable tanto para aquellos que gusten del personaje como para aquellos que simplemente busquen un buen libro de espías. Por su parte,
«No es difícil que te concedan un número cero cero si estás preparado para matar. Ese es su único significado. No es nada de lo que sentirse orgulloso»
James Bond.
JAMES BOND 1: CASINO ROYALE
Valoración - 8
8
Nota final
La primera novela de James Bond es una tensión constante. La sensación de peligro te mantiene atrapado incluso en medio de una partida de cartas.
Como fan de James Bond, los libros están mi biblioteca hace ya más de 2 décadas. Por esa razón esta novela en particular es muy recomendable para quién desea ver la relación de un ex-espía británico (Ian Fleming) con la literatura de ficción.
Un espía según las palabras de Fleming, muy rara vez se mete en acción o se enfrenta a enemigos de forma directa, el espía busca, observa, recopila y hace análisis de esa información.
Por eso cuando salió Casino Royal al mercado en 1953, fue una visión más realista del espía que las novelas de posguerra de la época, porque tal como dice el artículo el peligro acecha en cada página y a cada instante.
Es más el éxito de este libro llevó a Fleming a cambiar en sus siguientes trabajos al ya avejentado y casi retirado 007 de esta historia, por un joven alto, fornido y de cabellos rubios y por consiguiente las escenas de acción se hicieron más recurrentes.
La saga del agente 007 en novelas es mucho más entretenida y dinámica que muchas de las películas. Vive y Deja Morir que para mi es la mejor novela es muy superior al film. Dr, No, Desde Rusia con Amor, Goldfinger y Al Servicio de Su Majestad son casi idénticas a las novelas, mientras que Sólo para tus ojos, Los Diamantes son Eternos, Sólo se Vive dos Veces, y el Hombre del Revolver de Oro se quedan en deuda.
En Cambio Thunderbolts la película es soberbia porque a diferencia del film mezcla escenas de acción de otros libros.
Mi recomendación es que ningún fan de las películas de James Bond puede dejar de leer sus aventuras escritas, porque se estará perdiendo una parte esencial de la saga Bond.
¡Muchas gracias por la información! No lo sabía y explica muy bien la decisión del estilo.
Las películas me las he tragado incontables veces con mi padre, de ahí que tuviera ganas de leer los libros y me emocionase que ECC los haya empezado a publicar.
No sé cuándo podré leer el segundo o si lo reseñaré, pero desde luego ‘Casino Royale’ me ha dejado con ganas de más.
Sin lugar a dudas las novelas de James Bond son geniales. Ian Fleming es un escritor con una habilidad narrativa incomparable. Si bien las novelas comienzan con cierta lentitud, una vez que empieza la acción todo va sin frenos.
Y una aclaración: James Bond no es rubio, en los libros hay varias descripciones. Tiene el cabello negro y es un tipo delgado. La descripción la hace Ian Fleming en varias novelas. En mi opinión, físicamente el más acercado al personajes es Pierce Brosnan, aunque también es mi James Bond favorito porque al igual que el de las novelas se nota más vulnerable. Eso sí, en estas pelis los gadgets llegan al límite, lo que en realidad me encanta.
Para mí la peor elección de Bond es Daniel Craig, demasiado rubio, musculoso, indestructible. Creo que debió haber participado en algún Royal Rumble.
En un momento de ‘Casino Royale’, Vesper asegura que James Bond le recuerda a Hoagy Carmichael. El propio agente comenta después que no cree parecerse en nada a él:
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