Batman del Futuro: Un Nuevo Mundo

 

Edición original: Batman Beyond núms. 1 a 6 USA, Convergence Batman and the Outsiders núm. 2 USA.
Edición nacional/ España:ECC Ediciones.
Guión: Dan Jurgens.
Dibujo: Bernard Chang.
Entintado:. Bernard Chang
Color: Marcelo Maiolo
Formato:Rústica, 144 págs. A color.
Precio: 13,95 euros

 

En los años noventa, cuando aún vivía con mis padres, los sábados por la mañana, muy temprano, ponían la serie de Batman Beyond en Canal Plus. Recuerdo levantarme para grabar los dos capítulos e ir acumulándolos en la cinta hasta tener al menos seis. Una vez llegaba a esa cantidad quedaba con un amigo, de esos con los que se comparten aficiones comunes, para verlos todos de golpe o en su casa o en la mía. Era un momento especial para los dos porque estábamos terriblemente enganchados a esta serie donde se rompía con todo el statu quo de Batman y se le lanzaba, como un rompehielos, a abrir nuevos caminos donde poder explorar conceptos realmente interesantes. Si pensamos por un momento la dificultad que entrañaba esta serie, donde Bruce Wayne pasaba a ser un secundario y el protagonismo estaba en manos un de personaje nuevo, no un Tim Drake o un Dick Grayson, no, un personaje de nuevo cuño llamado Terry McGinnis, encargado de portar el pesado manto del murciélago por las calles de Gotham y lo que podría verse como un hándicap lastrando la serie se convierte en su mejor baza al conseguir, desde el primer momento, que la vida de Terry nos resulte abrumadoramente interesante.

Hoy con serie propia, heredera de los acontecimientos sucedidos en El Fin del Mañana, nos encontramos con una cabecera que ha de enfrentarse a un reto similar al que tuvo que superar la serie de los noventa, con el añadido de hacerlo en el papel, un medio mucho más complicado a la hora de destacar entre las cientos y cientos de publicaciones mensuales que inundan las tiendas especializadas.

Al timón de la serie tenemos al todoterreno Dan Jurgens. Un guionista y dibujante con larga experiencia en ambas facetas, cumplidor como pocos, sin destacar en exceso, pero solvente a la hora de realizar tramas estables, con un innegable regusto por lo clásico, persiguiendo más entretener que sentar cátedra. Un autor que nunca ha tenido el favor del público en general pero que a sus espaldas descansan obras de innegable calado, tales como la Muerte de Superman, su particular visión de los Titanes o el trabajo realizado con su creación más querida, Booster Gold. Sea como sea, estamos ante un trabajo correcto, cuyo lastre está en la incapacidad de Jurgens para profundizar más en los personajes, quedando su trabajo algo deslucido en el conjunto global de la trama.

Jurgens es de la vieja escuela. Sus mejores años han pasado, sin que ello signifique que no pueda hacer un buen trabajo, pero su manera de ver y entender el cómic hoy difiere mucho del que tiene el lector actual. Su forma de plantear el arranque de la nueva serie, con el fin de poder captar la atención de ese público tan despistado que pulula por convenciones y tiendas especializadas, no es para nada eficaz o contundente. Es como si todo fuera en piloto automático, con una historia poco novedosa, con personajes que no acaban de perfilarse y pequeños destellos que permiten lograr hacer amena la lectura. Amena que no memorable, logrando que este Batman del Futuro pierda todo el interés una vez concluido este primer arco argumental.

Puede que ahora tengamos más asentado el concepto de legado que antes, cuando Terry nada había tenido que ver con el murciélago hasta enfundarse el traje, pero ni aun así se logra empatizar con la figura de Tim Drake como Batman, en gran medida por el enorme desequilibrio que existe al no estar presente la figura de Bruce Wayne como mentor-maestro-entrenador. Claro está que con Tim esa figura paterna, dura, implacable y obsesionada carece de sentido cuando el propio Tim arrastra tras de sí una larga estela de oscuridad lo cual ya es suficiente carga. Jurgens está más pendiente de contarnos una historia sobre Hermano Ojo que en asentar bien a los personajes, dejando que el objetivo de la trama sea el principal motor de todo cuanto ocurre en la historia. No hay un orgánico fluir de los acontecimientos para que todo el conjunto se pueda sentir vivo e interesante. Se añora un punto más atrevido y menos conservador a la hora de abordar esta serie, en la que hay que reconocer que va de menos a más, siendo el último número de este arco el que resulta más interesante por como mejora el tratamiento de Tim Drake en su particular camino del héroe.

En cuanto al apartado gráfico estamos frente a un dibujante, Bernard Chang, de trazo nervioso, con una narrativa algo áspera, capaz de producirnos alguna que otra escocedura visual, pero con puntos favorables que ayudan a desarrollar de forma más amena lo que Jurgens quiere contarnos. Su puesta en escena es intensa, con planos arriesgados y páginas donde las viñetas se adaptan a las escenas que en ellas se muestran. Un conjunto visual atractivo para un dibujante cuyos lápices han pasado por series como Green Lantern y Superman, ganando en este trabajo un punto extra de experimentalidad que es de agradecer dado el acomodamiento que sufre Jurgens con la historia.

Un primer arco correcto, con una apuesta en escena inicial muy conservadora, no ya por lo que se nos cuenta, sino como se nos cuenta y sobre todo por no ser capaz de romper ese planteamiento inicial con un giro que no nos lleve de lleno a un final predecible, anodino y sin garra.