Hace ya un tiempo que en las tiendas se puede comprar el segundo número de los Titanes. Tiempo en el que tras un más que prometedor arranque del grupo con la llegada de Renacimiento, toca encarar que nos ofrece esta serie en la que podemos leer de nuevo las aventuras de una de las encarnaciones, aunque no estén todos, de los Titanes más representativas de su historia.
Con Dan Abnett a los mandos y de nuevo con Brett Booth a los lápices, toca dejar atrás la historia del primer tomo, centrada en Wally West, para dar entrada a otras tramas que si hubiera que definirlas de alguna forma, podrían describirse como más convencionales.
Sin embargo, en este tomo hay un motivo para alegrarse, el primer número con el que se abre la historia, Wally y Clark se ven de nuevo las caras en una carrera que es un digno homenaje a la tradición que existe entre ambos personajes de enfrentarse, cada cierto tiempo, a ver quién es más rápido. ¡Y además no la dibuja Brett Booth!
El número en cuestión abre el tomo y resulta una gratificante sorpresa en la que Abnett se suelta y nos regala un número de sencilla factura que funciona a la perfección por la enorme carga nostálgica que acarrea a sus espaldas. Lee Weeks dibuja esta entrega y le da un aspecto serio e imponente, lo que añade más intensidad a la conversación que Wally y Clark mantienen mientras corren.
Superado el primer número del tomo (Titans #07 USA) los siguientes se sumergen de lleno en el convencionalismo ya mencionado. Un convencionalismo que no estaba presente en el anterior número y cuya ausencia lograba que pudiéramos ignorar a Brett Booth. Aquí el dibujante asume todo el protagonismo y ensombrece el ya de por si débil trabajo de Abnett, que se limita a contarnos una historia con la que introducir nuevos miembros al grupo. Booth agota a cada página, su estilo ya es lo de menos, pero su narrativa y puesta en escena, nerviosa, tensa, desorganizada, no favorece para nada a la serie que se ve arrastrada a una estética noventera.
En este número tenemos de vuelta a los 5 Temibles, uno de los grupos de villanos más recurrentes del grupo, que regresan para poner en jaque al equipo comandado por Nightwing. Y es que de eso va todo el número, del descubrimiento de los villanos y como ocurre lo obvio, sin que Abnett intente siquiera sorprender mínimamente al lector. Una trama lineal que sirve de excusa para generar el conflicto que genera la acción. No hay nada más a lo que poder sustentarse y la lectura acaba por ser un mero trámite donde uno se entretiene y poco más.
Los Titanes merecen más que arcos argumentales superficiales en los que sus protagonistas tienen poco más que un par de frases que los definan un poco. Los Titanes deberían ser uno de los ejes centrales sobre los que debería estar pivotando Renacimiento, no en vano tienen a Wally en sus filas, la pieza clave que puso en marcha una serie de acontecimientos que hasta el momento solo se han dejado sentir en otras series.
Si en el primer tomo pudimos sentir crecer la esperanza de poder volver a leer una serie de este grupo digna, solvente y llena de sorpresas… con este segundo número caemos en la depresión de ver cómo, al menos en este número, la serie sufre un severo bajón argumental en todos los sentidos. Abnett mantiene medianamente bien el pulso a los miembros del equipo que interaccionan de forma natural entre ellos, pero al hacerlo en un trasfondo tan artificial todo queda desdibujado y carente de cohesión global. Y sin cohesión el lector entra en barrena y pierde el interés por lo que pueda o no sucederles a los personajes.
No hay épica, no hay intensidad, no hay tensión en lo que se nos quiere contar, por lo que el resultado final es el de un segundo número carente de personalidad en el que se han rellenado páginas de cara a llegar al Contrato Lázaro, la gran esperanza a la hora de relanzar el interés por la colección. Un cruce a tres bandas que ya fue analizado en su día y que podéis leer aquí.
En resumen, Titanes parece sufrir de la maldición de otras series como Supergirl, en la que sus autores no acaban de dar con el tono adecuado y si lo hacen, son incapaces de mantener el nivel de forma más o menos estable a lo largo de cada número. Una pena que grupos tan importantes para el Universo DC queden relegados a este tipo de historias sin mas trascendencia que la de hacer pasar el rato.
Perdiendo fuelle.
Guion - 5.5
Dibujo - 5.5
Interés - 6.5
5.8
Una lástima que tras el prometedor primer tomo, la serie de los Titanes entre en barrena de forma clara y concisa. Los Titanes merecen más y merecen como mínimo historias con más calado y mucha más iteracción entre los personajes.
Que le den los titanes a tomasi y a Phil Jiménez
Donde hay que firmar ? Yo me los compraba ya mismo.
Aunque por otro lado me gustaría guionistas más rompedores de los que se puede esperar etapas memorables pero también transgresoras al estilo Morrison en los X-Men.
Así no solo contaríamos con las etapa de wolfman- Pérez, Geoff Johns como referentes de calidad de la franquicia. Hay que arriesgar para volver a traer de nuevo a la relevancia a los Titanes…
Dan Abnett está resultando ser toda una decepción en está colección. Y del dibujante ya ni hablemos, uno de los peores de toda la industria del comic
El contrato lázaro sigue siendo una historia aburrida, mal llevada y en la que meten a un montón de personajes que no aportan nada a la trama
Hombre, un poco pesimista, ¿no? Vale que no és como el primer tomo, el cual tiene más números y és como una continuación directa de Rebirth/presentación de Wally West, muy nostálgico, con un concepto interesante de la fuerza de la velocidad y demás. Pero no sé, este tomo són cuatro números, y en realidad el primero és un guiño más a esas carreras entre Flash y Superman y és en los otros tres dónde se empieza a desarrollar la típica trama de personajes grupales, pero con tres números no siempre se puede impresionar al lector. Si me dijeses que llevan ya tres tomos en rústica en plena decadéncia pues todavía. Pasa un poco lo mismo con los jóvenes titanes, que el primero de no se cuantos números (és algo tochillo) mola bastante, el segundo de sólo tres números no és más que una aventurilla cualquiera de cierto personaje que nos quieren presentar poco a poco (me ahorro los spoilers). És rápido de leer, entretenido, pero convencional… tres simples números. Yo la verdad es que, entre Deathstroke, Titanes y jóvenes titanes tengo esperanzas, creo que van a salir cosillas interesantes. En otras series de DC ya no tengo tanta fe.
Pues precisamente acabo de ver los nuevos equipos de los titanes y otras ligas de la justicia…de las nuevas ligas de la justicia ( además de la de Snyder), me parece interesante la jl dark, la otra me parece curiosa.
Pero lo que no me gusta para nada son los equipos de los titanes y nuevos titanes…
Sigue Abnnett, muy segunda fila vaya
https://www.newsarama.com/39196-dc-launching-justice-league-line-under-new-justice-banner.html