Hace unas semanas el veterano dibujante Matt Wagner se encontraba trabajando en el Batman #54 por encargo (es un dibujante actualmente independiente, sin contrato de exclusividad con ninguna editorial), junto a su hijo Brennan Wagner, colorista y colaborador habitual. Un mal día recibió la noticia desde DC, que enseguida informó a través de sus redes sociales, que en la editorial habían decidido rechazar el trabajo de Brennan al encontrar el color demasiado diferente a la línea de la serie. Así, buscarían a un trabajador interino para colorear nuevamente el número. La decisión, obviamente, enfureció a Matt Wagner al encontrarla una falta de respeto hacia su persona, habiendo trabajado desde hace mucho tiempo con DC, así como por el trato otorgado hacia su hijo.
Este hecho, que podría haberse zanjado en los despachos de la editorial, con una reunión formal y una discusión puramente artística y creativa, ha trascendido por la pobre decisión de prescindir del trabajo de Brennan Wagner, que ya tenía el número prácticamente terminado, sin previo aviso y sin una clásica llamada de atención desde los editores. Así ha expresado sus sentimientos Wagner, quien no hecha la culpa al editor de la serie ni al propio Tom King, sino a «los poderes fácticos de DC». «Jamie S. Rich es un editor agudo y solidario, y pensé que el guión de Tom King para este número era ingenioso y humano. Disfruté mucho dibujando y a Brennan le encantaba colorearlo. Lo que lamento es aceptar un acuerdo que sometería nuestros esfuerzos creativos a una intervención corporativa tan arbitraria y torpe. No soy ajeno al negocio de la publicación convencional … Sé cómo funcionan las cosas. Pero pensé que nos tratarían a los dos con más respeto … y desafortunadamente, estaba equipovado».
Para mayor indignación del dibujante, se le ofreció a su hijo volver a colorear el número si se ceñía al estilo del colorista habitual, Tomeu Morey. «Nada en contra de Tomeu, pero Brennan no puede simplemente cambiar su estilo para que sea algo que él no es, así como yo no podría de ninguna manera cambiar mi estilo de dibujo para que se pareciera al trabajo de Lee Weeks o Tony Daniels, quienes han venido siendo dibujantes regulares de la serie y son unos increíblemente talentosos artistas. Además, este intento sordo de reconciliación básicamente viene demasiado tarde. A Brennan se le dijo que dejara de colorear Batman #54 y lo hizo. Además tuvo que cambiar su planificación de trabajo de inmediato y ahora está ocupado haciendo los colores para el próximo número de una serie llamada Mage: The Hero Denied (el proyecto que ambos relizan para Image)».
Todo este asunto es una total falta de respeto hacia el trabajo de los artistas. Y un mal manejo de DC de la situación. Por supuesto que una editorial está en su derecho de aceptar o rechazar el trabajo de sus empleados, ya sean trabajadores en plantilla o independientes contratados para un objetivo en concreto, como es el caso. Pero lo que no puede hacer es rechazar el trabajo de un artista al que ya conocen (no obstante, ha trabajado en 19 números de la actual cabecera, aunque trabajando en portadas alternativas) diciendo que su trabajo, el color en este caso, es demasiado diferente. Hay ciertos aspectos que podrían haberse fijado en el acuerdo inicial, asunto al que Matt Wagner aludía. La falta de libertad creativa en la producción de un cómic no tiene porqué ser negativa, (obviamente, la total libertad es, casi siempre, mejor) siempre y cuando las dos partes estén de acuerdo en qué caminos seguir y la forma de hacer las cosas. La situación que nos ocupa es que la decisión fue tajante. Al igual que en controversias editoriales anteriores, esto envía un mensaje pobre a otros creadores que pueden estar considerando llevar sus talentos a DC. Con Wagner tan clara y públicamente descontento con su más reciente proyecto para DC, ¿cuántos otros creadores independientes podrían estar planteándose si DC es la opción adecuada para ellos?
La consistencia con el resto de la serie puede entenderse prioritaria cuando hay muchos cambios de dibujante y salen dos números al mes, pero no puede despreciarse a un colorista sin explicación alguna cuando lleva una gran parte del trabajo realizado. Ni mucho menos forzarle a que cambie su manera de trabajar y su estilo para parecerse más al de otros. De todas formas, el error que comete DC al informar del rechazo del trabajo lo comete al hacerlo cuando Brennan ya llevaba casi todo el número coloreado. ¿Por qué no lo informó antes? ¿Acaso no presentaron una muestra del resultado al inicio del trabajo? Es fácil ponerse de parte de los artistas en un caso como este, pero hay que tener en cuenta la idea de que a lo mejor DC ha hecho lo correcto desde el punto de vista empresarial. Si el coloreado no se encuadraba en los cánones artísticos de la compañía, ésta habría obrado bien y en consecuencia al rechazar el trabajo de Brennan. Aunque, obviamente, el enfado de Matt Wagner es entendible, puesto que el acuerdo que firmó incluía a su hijo como colorista, también lo es la reacción de DC, si el trabajo que se encontraron no era lo que se esperaba. No ha habido una comunicación oficial de la editorial dando su opinión, entendiéndose que se debe a que es mejor callar para no entrar en una guerra abierta con un dibujante tan conocido. Pero a lo mejor la opinión editorial es que estaban descontentos con el nivel de lo presentado.
Parte también de la molestia de Wagner viene porque Batman #54 tratará sobre la relación paternofilial entre Batman y Robin/Nightwing. Entre Bruce y Dick. Sobre cómo el primero ayudó al niño a superar el trauma de la pérdida de sus padres. Ésta será, además, la primera vez que se reúnan los dos personajes desde que Batman le pidió matrimonio a Catwoman y será un número con una importante carga emocional, un ámbito en el que Tom King se mueve con soltura, pues nos viene acostumbrando a jugar con los sentimientos de los lectores en sus historias. «El guión de Tom es una mirada sincera a una relación de padre e hijo y, en lugar de capitalizar el hecho de que tenían un equipo artístico formado por un padre y su hijo para este número, DC eligió despedir al colorista para producir un trabajo distinto», escribió Matt Wagner. «No hace falta decir que pensé que Brennan estaba haciendo un trabajo fantástico y creo que esta es una manera terriblemente mala de tratar, no solo con él, pues este sería su primer trabajo de larga duración, sino también conmigo, uno de sus viejos y supuestamente respetados creadores. Lamentablemente, ahora siento haber aceptado este acuerdo en primer lugar … porque esto es solo una puta mierda».
Lógicamente, Matt Wagner podría no volver a DC, al menos, a corto plazo. Lo cual sería una pena, porque es un artista que ha dado buenos trabajos a la compañía, como su etapa al frente de la serie de Vertigo Sandman Mystery Theatre, que dio unas grandes historias al Sandman original, el de la Edad de Oro y la primera JSA (Wesley Dodds), entre 1993 y 1998; la mini serie Batman/Superman/Wonder Woman: Trinity, en 2003; así como algunos proyectos con Batman muy interesantes: Batman/Grendel, Batman: Legends of the Dark Knight #28–30, Batman and the Mad Monk y Batman and the Monster Men. La buena noticia, que el propio Wagner ha hecho pública, es que Brennan y el colorista final del número van a cobrar por su trabajo. Algo es algo.
Fuentes: CBR, Bleeding Cool e IGN.
Siempre me pongo del lado del debil , pero en este caso no veo el problema una vez se ha pagado por el trabajo. Vas a un taller a arreglar el coche , el mecanico te pide las piezas y empieza a arreglartelo ,cuando practicamente lo tiene listo ,le dices que no ,que has encontrado uno de ocasion y vas a comprarlo pero que le pagaras por su trabajo. El mecanico tan pancho. No es el mismo trabajo y seguramente no se pone el mismo «alma» en una cosa que en otra por lo que te jode mas , pero no hay que olvidar que es mas duro desatornillar un tornillo del radiador que sacarle punta al lapiz. Que ha Wagner padre le hubiese gustado hacer un batman y robin con su hijo es entendible y tambien su enfado ,al no conseguirlo pero vamos la unica pega que tiene dc con esto es la posible reticencia de otros autores a trabajar con ella (que no es poco) aunque no le veo la mala praxis por ningun lado.
Yo no veo mucho debate ¿No? O sea, no se trata así a ningún trabajador y punto
Hmmm No se de qué ni como trabajareis alguno, pero si trabajas para alguien y no le gusta lo que haces, o la deriva que está tomando un proyecto, te lo tiran abajo y a repetir. Vamos. Y no digo ya para los que se mueven en el campo de las multinacionales, con mil jefes, socios y coordinadores por encima. Espero que tengais 15 años para sentenciar de esa manera.
La cuestión es que cosas asi pasan, ya que los poderes facticos: o sea ciertos tipos de marketing, analistas y otra gente que no PRODUCE realmente nada artístico debe de dejarse notar para justificar las habas que se ganan. Si mal no recuerdo a otro autor el dibujante de JL Odyssey aun se la han hecho mas gorda haciéndole redibujar los dos primeros números. Eso es lo que pasa al poner a gente que ni se conoce en persona a coordinar un proyecto.
La magia esa de Marvel o DC hasta los 80 en las cuales escritores, editores y dibujantes se conocían con lo cual no pasaban estas cosas sobretodo si ya estaban apalabradas. Ahora unos jóvenes con carreras para trabajar en el mundo editorial se las trae al pairo los autores y fans de los comics. Son un producto y como tal si creen que pueden subir X ventas al colorear una portada de cierta manera pues lo harán. Es el mundo frio y corporativo que no se casa con nadie. Acordaos pues de la infinidad de problemas al principio de New52 cuando Didio y cia mangoneaban a los autores menos prestigiosos o noveles y la cantidad de deserciones y malas caras que hubo
Sobre lo de Sejic en JL Odyssey, este ha comentado por Twitter de buen humor que «shit happens», que descoordinación entre autores/editores y/o editores/editores suele ocurrir, aunque rara vez cuando ya está tan avanzado el desarrollo de un cómic como en esta ocasión. A fin de cuentas, para él es más tiempo cobrando para hacer «lo mismo», y además tiene más material descartado para ir mostrando por Twitter. Es otra filosofía de vida.
Pagar si que le pagan se publique el material o no. Excepto por lo que tengo entendido en la época del New52 si que les hacían a lis dibujante rehacer sus paginas sin ver un céntimo. Pero por lo normal siempre se ha pagado el material se descarte o no. Lo que pasa es que a Wagner le han tocado la fibra sensible ya que el perjudicado es su hijo y la sangre tira. Pero ya podían los editores hacer su papel y dar las indicaciones o guias para no haber esa descoordinacion u atajarla antes
Estoy de acuerdo con los reclamos de Wagner y su manera de reaccionar me pareció bastante apropiada. Creo que es la primera vez que se ponen críticos con DC en esta pagina. Si tan solo lo hicieran cada vez que una editorial trata mal a los artistas…
Bueno …es lo que pasa hoy en día en este mundo, el dinerito es lo más importante, está por encima de todo , y si tanto le molesta a Wagner padre pues q se vaya de DC, además quiso enchufar al hijo por dinerito y por dinerito lo mandaron a freír espárragos.
El listón del dinero ahí está , puede estar más alto o más bajo , si la salud o el amor fuera lo más importante nadie dejaría morir a los emigrantes en el mar.