Seguro que conoces a alguien que fuma. Quizás tú mismo eres fumador. Si es así, seguramente no tienes ganas de leer una introducción donde te digan lo que ya sabes: no deberías fumar. A nadie le gusta que le digan que lo que está haciendo está mal, por eso una de las virtudes de El cáncer de mamá es que no es una lectura culpabilizadora.
Brian Fies es un dibujante norte americano autor de varios cómics como A Fire Story, Whatever Happened to the World of Tomorrow y la presente El cáncer de mamá, todas ellas editadas originalmente por Abrams Books. En España, es la editorial Salud Arte especializada en medicina gráfica, como ya comentamos en la reseña de Un mal médico de Ian Williams, la encargada de editar este cómic apaisado de casi 200 páginas.
A principios de los dos mil, la madre de Brian Fies fue diagnosticada de cáncer de pulmón metastásico. Empezaba un duro proceso de hospitales, medicación y desconocidos que pondría a toda la familia contra las cuerdas. El diagnóstico de cáncer de pulmón llegó tarde y los síntomas que motivaron la primera consulta médica fueron los causados por una metástasis cerebral. Esto implicaba que el cáncer estaba en un estadio muy avanzado y que las probabilidad de supervivencia de Mamá eran muy bajas.
Con esta sinopsis autobiográfica, Brian Fies construye un cómic introspectivo donde nos explica el proceso de diagnóstico y tratamiento del cáncer desde los sentimientos y sensaciones tanto de su madre como de él y sus hermanas. Para ello, se apoya en multitud de recursos gráficos y metáforas visuales que nos permiten empatizar brutalmente con los protagonistas. Probablemente, otro de los elementos que fomentan la empatía en este cómic son los nombres de los personajes. Mamá, Yo, Mi Hermana enfermera y Mi Hermana Menor no necesitan mucha presentación, ni mucha imaginación para convertirse en facetas de nuestros padres, hermanos, primos, amigos… Nombres genéricos y arquetípicos que nos remiten a nuestros seres queridos.
Siguiendo con los personajes, es interesante mencionar que Brian Fies no se limita a crear unos personajes planos que acompañan a la protagonista en su viaje, si no que crea construcciones psicológicas complejas. Yo, el protagonista, nos explica que es un hombre de ciencia que, aunque en un principio no está muy preocupado, termina ahogándose en datos, artículos y libros sobre cáncer, tratamientos, medicación… Pero, finalmente, entiende que lo único que puede hacer por su madre es estar ahí, ayudarla a ir y volver en coche del hospital, por ejemplo. Algo parecido sucede con la Hermana Enfermera, cuyo papel se limita a encararse contra el personal administrativo y sanitario para asegurar un buen trato hacia su madre, pese a su formación. Finalmente, los tres hermanos se enzarzarán en un malestar general por el cuidado de su madre cuya realidad diaria vivirá y entenderá la Hermana Menor, la única que realmente convive con ella. Los que hemos visto enfermar a algún familiar, incluso morir, sabemos que este tipo de tensiones son muy reales y Brian Fies consigue plasmar ese malestar de forma natural e incluso divertida gracias a sus pintorescos recursos narrativos.
De hecho, considerar que El cáncer de Mamá es una historia dramática seria un error. El cáncer de Mamá tampoco es una historia lineal, mas bien estamos frente a una narración saltatoria. En cada salto vamos a ver una parte del recorrido que Mamá hace para tratar su enfermedad. Empezaremos viendo cómo descubre que tiene un tumor en el cerebro, para después descubrir que el foco original del cáncer está en el pulmón y de aquí pasaremos a la maratón de tratamientos que empieza con la radioterapia y sigue con varios ciclos de quimioterapia. Por el camino, Brian Fies nos enseñará las complicaciones y efectos adversos que pueden aparecer. Pero todo ello de una forma muy original e introspectiva, como comentábamos anteriormente. Ahora bien, sí es importante destacar que todo lo que tiene que ver con la medicina es muy riguroso y está excelentemente explicado. Brian Fies consigue con El cáncer de mamá crear un cómic inteligente, emotivo y constructivo donde los conocimientos médicos y los sentimientos del enfermo están perfectamente equilibrados.
Todos sabemos que el hábito tabáquico está estrechamente relacionado con el cáncer de pulmón. Pero también está relacionado con multitud de otras patologías, síndromes y dolencias. El mejor consejo que puede darte una persona que te quiere y se preocupa por ti es decirte que no fumes. Y, aunque la decisión es únicamente tuya, debes saber que en la gran mayoría de centros de atención primaria de España hay profesionales que te ayudarán a dejar de fumar. No estás solo.
Guión - 7
Dibujo - 8
Interés - 9
8
Familiar
Brian Fies consigue con El cáncer de mamá crear un cómic inteligente, emotivo y constructivo donde los conocimientos médicos y los sentimientos del enfermo están perfectamente equilibrados.
