¡Los mutantes se echan a la mar!
«Si eres mutante y no puedes llegar a Krakoa… ¡los Merodeadores te llevarán a casa!»
Después de los hechos ocurridos en Dinastía de X y Potencias de X, Jonathan Hickman sabía muy bien que la nueva nación mutante de Krakoa tendría muchos rincones por explorar. Debido a ello, surgieron numerosas colecciones con el tiempo que hablaban de los detalles que no se contaba en Patrulla-X, naciendo así X-Force, Excalibur, Factor-X y, cómo no, Merodeadores, entre otras. Para este plan, y ciñéndonos a los cómics que vamos a reseñar, Jonathan Hickman y Marvel confiarían el guion a las manos de Gerry Duggan, autor de sobra conocido por sus historias en Spiderman/Masacre, Masacre, Imposibles Vengadores, entre otras colecciones; mientras que los dibujantes irían cambiando, aunque se intentaría que Matteo Lolli fuera el dibujante principal, autor que ya participó en Asgardianos de la Galaxia y Masacre.
Ahora bien, ¿de qué trata Merodeadores? Principalmente, Gerry Duggan nos cuenta que Kitty Pryde no puede usar los portales krakoanos y que Emma Frost la selecciona para ser la Reina Roja, aunque Kitty se echaría a la mar con la Sociedad Fuego Infernal para rescatar a mutantes que se han quedado atrás y no han podido pasar por los portales, ya sea debido a que los amenazan, los tienen en prisiones u otras razones. Sin embargo, el enérgico guionista no se quedaría aquí, puesto que durante una saga de no menos de nueve números españoles -12 números USA-, se encargaría se realizar una serie de tramas y subtramas que nos llevarían a ver la región más oscura de Krakoa, puesto que el Rey Negro, Sebastian Shaw, no estaría contento con ganar lo justo y querría también más liderazgo en el Consejo Silencioso. Con ello en mente, y casi sin darnos cuenta, los Merodeadores harían frente a una serie de «enemigos» de Krakoa, a los Homines Verendi -extremistas que reforman el Club Fuego Infernal bajo un nuevo nombre-, y a un Sebastian Shaw muy escondido en la sombra con el objetivo de eliminar a Kitty Pryde de su ecuación. Con todo ello, y gracias a la sutil mano de Gerry Duggan, tenemos acceso a unos rincones sobre el dinero en Krakoa y el rescate de mutantes bastante interesante que lleva a la conspiración, traición, acción y drama, lo cual está bastante bien ejecutado. Sin embargo, pese a que la trama que cuenta es importante, vital para entender un punto más de Krakoa, y casi necesaria, a veces puede tornarse algo pesada si el lector no está interesado en los aspectos más socioeconómicos, las traiciones, y las conspiraciones.
En cuanto a los personajes, Kitty Pryde actúa como la protagonista absoluta de la obra, con un carisma rebosante de energía y que, prácticamente, devora el cómic ella sola casi sin la necesidad de otros personajes secundarios. Bishop es reticente a ser alfil rojo, pero siempre está dispuesto a ayudar a la protagonista y es algo que tenemos bastante presente en los nueve números, ya que, aunque sea de personalidad dura, al final tiene un corazón noble y bondadoso con el que acude presto a cualquier misión de los Merodeadores o cualquier otra que requiera su atención. Piros y el Hombre de Hielo son personajes bastante secundarios en estos números y realmente no llegan a destacar demasiado, aunque sí que llegan a tener un momento puntual donde se hacen de notar. Por el mismo camino está Tormenta, aunque Ororo coge más relevancia en la recta final de estos nueve números, ya que suele ser una guerrera que no duda en atacar a los enemigos cuando se lo merecen y en consolar a sus amigos en cualquier momento. Por otro lado, Emma Frost se nos representa como una hábil lideresa que no duda en poner a los demás miembros del Consejo Silencioso en su sitio correspondiente. Además, procesa un gran cariño hacia Kitty y busca siempre que ésta saque su máximo potencial. Sebastian Shaw busca lo mejor para Krakoa, indudablemente, pero también quiere satisfacer sus propios intereses y es por ello que lo tenemos aquí no como un villano en sí, sino como un antagonista que manipula y teje todo para que le beneficie en un porcentaje. Cabe destacar el rol de los Homines Verendi, un grupo de jóvenes extremistas antimutantes que cambian de nombre el Club Fuego Infernal y buscan acabar con los Merodeadores y sacar todo el beneficio posible al mercado negro, además de la información jugosa que puedan vender de Krakoa a otros países, los cuales ya desarrollan armaduras y armas anuladoras de poderes mutantes.
Sobre el ritmo, Gerry Duggan opta por unos tiempos equilibrados por norma general, en los que trata de aportar acción, drama y tensión política a toda la historia de Merodeadores. Sin embargo, en la ejecución, su storytelling puede sentirse algo cojo en ocasiones y no llegar a sentir la emoción que trata de transmitir.
A nivel artístico, Matteo Lolli es el principal dibujante de estos nueve números, demostrando, en los que participa, un buen trazo, unos diseños de personajes y fondos genialmente tratados y un nivel de detalles bastante aceptable. No obstante, también tendríamos otros dibujantes de gran calidad, como Michele Bandini con un estilo algo más elaborado y con unos fondos notables y Lucas Werneck sigue la línea de Lolli, aunque su punto fuerte recae en el intento de generar dinamismo -lo consigue a veces- y en dibujar páginas llamativas. Por último, Stefano Caselli es elegido para varios números clave en los que aporta un dibujo con toques más realistas con los que consigue transmitir una gran cantidad de emociones por parte de los personajes, lo cual es clave en esos momentos y consigue llegarnos al corazón varias páginas.
En definitiva, considero que estamos ante unos nueve números muy positivos y con un argumento relevante, pero que tal vez no sea del gusto de algunos lectores al entrar en temas más complejos y que pueden resultar «aburridos» a ciertos sectores. Sin embargo, consideramos que tanto el guionista como los dibujantes hacen una notable labor y que habrá que seguir más de cerca a Merodeadores para saber si realmente puede llegar a tener futuro y calar a los lectores, ahora que la trama, en su noveno número, nos deja con un cliffhanger llamativo y que nos incita a querer saber más.
Lo mejor
• Kitty Pryde y su dinámica con todos los personajes.
• Emma Frost, demostrando no solo que es una lideresa inteligente, sino también una persona amable al proteger y querer a los desfavorecidos y minorías, por todo lo que sufren.
• Tormenta derrocha un gran carisma en la recta final de los nueve números, teniendo un gran momento junto a Emma Frost.
Lo peor
• El baile de dibujantes.
• Su trama socioeconómica puede resultar pesada.
¡Muy bueno!
Guión - 6.5
Dibujo - 6.5
Interés - 7.5
6.8
Un extenso y notable arco argumental con varias subtramas interesantes, pero que, en su conjunto, cojea un poco en ciertos momentos por lo pesado que puede ser el factor socioeconómico y sus conflictos.
