La guerra del Joker

Edición original: Nightwing 70 a 73, Detective Comics 1023 a 1026, Batgirl 47 a 50, Red Hood: Outlaw 48, Catwoman 25
Edición nacional/España: ECC Ediciones
Guion: Dan Jurgens, Peter J. Tomasi, Cecil Castelucci, Scott Lobdell, Ram V
Dibujo: Ryan Benjamin, Ronan Cliquet, Brad Walker, Kenneth Rocanfort, Robbi Rodríguez, Brett Booth, Fernando Blanco, Aneke, Emanuela Lupacchino, Marguerite Sauvage
Entintado:Scott Hanna, Andrew Hennesy, Norm Rapmund, Richard Friend, Danny Miki, Wade Von Grawbadger, Mick Gray
Color: Rain Beredo, Nick Filardi, Brad Anderson, Daniel Brown, Arif Prianto, Francisco Plasencia, Trish Mulvihill
Traducción: Felip Tobar Pastor, Bárbara Azagra Rueda
Formato: Grapa, 48, 64 págs. A color.
Precio: 4,95 € por grapa de 64 págs, 3,50 por grapa de 48 págs

Un complemento al nivel de la serie principal.

«¿Cómo sé de Ric-Dick-Richard-Robin-Nightwing?»

La guerra del Joker es el complemento de las series de la Batfamilia a la colección principal. Cualquiera que haya leído las grapas de Batman continentes de la saga del payaso de pelo verde habrá notado las constantes referencias que se hacen a esta serie de grapas, con Nightwing y Batgirl como principales protagonistas y la aparición de Capucha Roja, Catwoman, Batwoman, Batwing o Robin en menor medida. Un suplemento al nivel del evento principal, que no aporta nada más allá de rellenar los huecos argumentales del evento, con una influyente predisposición a que los planes del Joker se lleven a cabo, sin importar si la forma de conseguirlo resulta o no coherente, dejando a los personajes al servicio de la trama ocasionando momentos que no terminan de resultar veraces. Unos números que a menudo se perciben intrascendentes, estirando la historia del cómic principal sin estricta necesidad. Estos complementos son importantes, en mayor o menor medida, por cómo se ha configurado la trama, pero es la propia estructura en sí la que se presenta alargada innecesariamente. Nada nuevo en el mundo del cómic cuando se habla de un crossover. La guerra del Joker presenta los problemas habituales a este tipo de trabajos, si bien es cierto, en ocasiones, a base de buen hacer estos cómics adicionales resultan muy buenas aportaciones. Desgraciadamente la mayoría de autores participantes no han estado excesivamente inspirados. Dejando esto un poco de lado, repasemos por series y personajes que ha dado de sí La guerra del Joker para cada uno de ellos.

Dick Grayson desde que recibiera un tiro en la cabeza (en el run de Tom King con el murciélago) sufre de amnesia. En Nightwing: Segunda temporada pudimos observar como el Tribunal de los búhos estaba detrás de la pérdida de memoria; mediante un objeto mágico redefinió la existencia del joven que desde que despertara se hace llamar Ric. Con una nueva vida (en la que forma parte de un nuevo grupo de Nightwings) llega su participación en La guerra del Joker. El pálido y demente criminal consigue reorganizar la mente del primer Robin exhibiendo unas habilidades físicas que no se le presuponen. La saga vuelve a jugar con lo mismo que se acaba de hacer con el primer pupilo. Si los seguidores del personaje estábamos hartos de su situación, el comienzo de la guerra del Joker fomenta el desaliento. Por suerte es el último disparo antes de la paz. Como diría Harvey Dent en una de sus representaciones más famosas “La noche es más oscura justo antes de amanecer”. Lo mejor de La guerra del Joker es

Sin embargo, ni siquiera es algo que leas en la grapa homónima, lo haces en Batman #54 que incluye el Nightwing #74 USA, siendo el mejor ejemplo de lo complementarias y necesarias que son ambas series.

Bárbara Gordon llega a la guerra del Joker tras vencer a la inteligencia artificial Oráculo, al tiempo que mantiene un tira y afloja en su relación con Jason Bard y tiene renovadas ilusiones de cara a su futuro como heroína de Burnside. Sin olvidar sus aspiraciones políticas con las que espera poder ayudar a las personas más desfavorecidas. Todo ello nos lo cuentan en Batgirl: Segunda temporada. Batgirl #47 enlaza directamente con el final de este tomo. Con la pelirroja el Joker es menos eficiente físicamente que contra Dick Ric y el modo en que consigue su victoria es más propio del personaje. Bárbara demuestra su resiliencia y resulta una de las lecturas más agradables de la serie. Aparece Luke Fox, la heroína se siente a gusto con él. También su padre y hermano se dejan ver teniendo una importante presencia en la investigación de un misterioso cadáver que intriga a la protagonista. La serie del murciélago de Burnside lidia muy bien con el evento, siendo además la cabecera que más se desmarca de la iniciativa editorial, centrándose en tramas propias. Un buen conjunto de números, que curiosamente mejoran los incluidos en el tomo de temporada de la Batichica. Al igual que ocurre con Dick, lo mejor de La guerra del Joker es

, pero, de la misma forma, lo lees en el Batman #55.

Capucha Roja escrito por Lobdell no deja de recordar su pasado ni siquiera cuando se inmiscuye en la guerra del Joker. No solo rememora el incidente de la palanca (siendo algo lógico con el payaso de por medio) también su infancia con Bruce. Un solo número de Red Hood es incluido en esta cabecera, el personaje tiene un papel secundario en este evento. Un Nightwing vs Capucha Roja tiene lugar.

Catwoman es otro de los personajes tangenciales de la saga y tan solo tiene un capítulo incluido en la colección de grapas. La mujer gato tan presente en la anterior etapa del murciélago no tiene peso específico en el nuevo Batman orquestado por James Tynion IV. Ya se notaba una clara intención de desplazar al personaje a un segundo o tercer plano en el primero de los arcos argumentales dedicado al Designador. Catwoman era parte fundamental de la trama, pero el tratamiento del personaje y la relación con su amante dictaba de ser protagónico. En este Catwoman #25, Ram V se muestra muy solvente escribiendo una historia de la Selina ladrona con el Acertijo y el Pingüino como invitados. Fernando Blanco está excelente en su trazo, su composición de página o perspectiva, con el color de Plasencia sentándole fenomal. Un buen número que consigue interesar por la colección de la mejor ladrona de Gotham. En este caso, el tropo editorial de involucrar a series en un evento con el fin de que sean compradas por completismo y a su vez tratar de interesar a los lectores que no la conozcan con el fin de adherirlos a ella, no solo no molesta, sino que gusta, logrando su objetivo.

Hay algo en lo que todos coinciden, tanto Nightwing, como Batgirl, como Red Hood como Catwoman tienen el correspondiente enfrentamiento con Punchline. El nuevo personaje ha llegado para quedarse y el guionista lo explota en cada oportunidad que tiene enfrentándolo a la Batfamilia. Y es que no eres nadie si no te has medido a los murciélagos, no todo va a ser pelear contra Harley Quinn.

En Detective Comics aparecen los villanos redimidos, que están por redimirse, o que de alguna forma van contra el Joker. En esta cabecera se sigue la senda del evento y comprobamos como el Joker recluta a Garra. Como en todo el crossover, el fanservice es patente. Un buen ejemplo es cuando Batman colabora con Dos Caras con el de la cara partida controlando el “Batconejo”, la armadura que llevara Gordon como Batman en el run de Snyder con la serie del murciélago. Un Batman cirujano otorga una posible redención a Harvey Dent. Killer Croc pierde una apuesta con el cruzado de la capa y demuestra ser mucho menos fiero que antaño. Batwoman, tan eficiente como siempre, tiene su aparición siendo uno de los pocos personajes a los que se le permiten discutir la manifiesta superioridad de Batman.

En cuanto al dibujo hay para todos los gustos. Una enorme cantidad de artistas se dan cita en la colección con estilos distintos y nivel desigual. La cohesión en el dibujo en este conjunto de grapas resulta una quimera. Kenneth Rocanfort con los capítulos de Detective Comics, Fernando Blanco en Catwoman o Robbi Rodríguez en Batgirl (una suerte que se incluyan tanto ejemplares de la heroína) son los más inspirados y suben el nivel del arte. Brett Booth colabora con el número de Red Hood siendo una nueva oportunidad para ser admirado o aborrecido por sus seguidores y detractores. Ronan Cliquet (participa con Nightwing) probablemente sea el que peor parado sale de la comparativa de autores. En general el dibujo cumple pero no resulta destacable.

La guerra del Joker es el complemento a un nuevo gran evento de Batman. Centrado en el fanservice y en avanzar la historia por los derroteros apropiados a lo que se quiere contar, no convence por el poco cariño que ponen sus autores en sobreponerse a la premisa, a resultar convincentes o a potenciar detalles que otorguen brillo a la trama, quedando falto de emoción y dinamismo. Las mejores aportaciones vienen de las series de Batgirl y Catwoman que son las que menos interés ponen en el argumento central. Si te ha gustado la serie principal seguramente disfrutes con esta secundaria donde se refleja el paso de la Batfamilia por el evento.

Lo mejor

• Los capítulos de Batgirl.

Lo peor

• Condicionada por la premisa del evento, la serie de Nightwing es la menos inspirada.