Los muchos fantasmas de Joe Hill
Joe Hill es uno de esos autores que, sin tener un gran recorrido en el mundo del cómic, ha dejado una marca enorme en él. Esa marca, por supuesto, tiene un nombre y un apellido muy concretos: Locke & Key. La maravillosa serie actualmente adaptada por Netflix fue suficiente para que el novelista se instalara en el panteón de los grandes nombres de la industria, pero no es lo único que el hijo del señor King ha dado a las viñetas. En IDW Publishing, editorial que se ha encargado de publicar su trabajo hasta su reciente contratación en DC, saben perfectamente que el de Maine es uno de sus activos más valiosos, y como tal se han cuidado de reeditar sus trabajos en un formato digno de coleccionistas.
Así es como nace en 2017 la Joe Hill: The Graphic Novel Collection, un enorme recopilatorio de casi medio millar de páginas que recoge todos los trabajos del autor publicados hasta el momento dentro de IDW, todo ello creado junto a la colaboración de Jason Ciaramella, guionista encargado de adaptar su prosa a las viñetas y encabezado por una de sus historias más populares, La Capa. Un recopilatorio que cuatro años después Planeta Cómic se ha lanzado a editar en nuestro país, a sabiendas del gancho que posee el autor. Cada uno de estos trabajos integrantes nació de manera independiente (de hecho, en esta misma casa se han reseñado algunos de ellos aquí y aquí), por lo que para repasar todo el volumen haremos lo propio e iremos por partes. Cojan aire, porque vamos a sumergirnos en la turbulenta mente de un escritor criado entre historias de fantasmas.
Joe Hill: de tal palo, tal astilla
La vida de Joseph Hillstrom King estaba ya en parte condicionada por su familia de nacimiento. No solo es hijo de escritores, sino que su padre es probablemente el nombre más importante de la literatura de terror de todos los tiempos, el maravilloso Stephen King. Ese detalle concreto solo podía conducir a dos cosas. Una, que su hijo se vería enormemente atraído por el arte de contar historias, a ser posible algo oscuras. Otra, que tendría que vivir bajo la inmensa sombra de su padre. O quizás no tanto.
Porque el joven autor, con ganas de buscar su hueco en la escritura valiéndose por sí mismo, se enfundó el pseudónimo de Joe Hill y comenzó a publicar poco a poco relatos en distintas revistas y antologías. Sería en 2005 cuando por fin el autor de Maine lograría publicar su primera obra, 20th Century Ghosts, una antología de relatos cortos de terror con la que lograría un British Award y un premio Bram Stoker. Gracias a su éxito, Hill descubriría su identidad un par de años después y comenzaría a publicar éxitos como El traje del muerto, Cuernos o NOS4A2, novelas de gran éxito que compaginaría con su monumental asalto a las viñetas, la sensacional Locke & Key, creada junto al artista chileno Gabriel Rodríguez y ganadora del Eisner.
El desempeño dentro del mundo del cómic de Hill ha sido limitado pero constante, con la publicación de pequeñas historias cada cierto tiempo. Este desempeño, sin embargo, se agrandó en 2019, con el anuncio de Hill House Comics, la reciente línea editorial de DC Comics capitaneada por él mismo y centrada en publicar miniseries de terror, incluyendo algunas escritas por Hill.
La presente edición recopila esas pequeñas historias publicadas anteriormente al citado fichaje por DC, una serie de trabajos en su mayoría adaptaciones de los relatos del escritor. En todos ellos, el autor colabora con Jason Ciaramella, un guionista poco conocido que debutaría gracias a estos encargos y al que hemos podido ver también en TMNT o en Magic The Gathering. Juntos se unirían a diversos artistas para desarrollar un buen puñado de historias que hoy pasamos a repasar.
La Capa y otras historias
El volumen que nos ocupa abre sus páginas, como no podría ser de otra forma, con el que probablemente sea el cómic más popular de la lista, La Capa. Dibujada por Zach Howard y coloreada por Nelson Dániel, la obra nace originalmente de uno de los relatos cortos de Hill que conforman 20th Century Ghosts, y cuyo guion adaptaría Ciaramella, para ser publicado por IDW en 2010.
La Capa narra la historia de Eric, un joven complicado con una vida en caída libre que, en uno de sus peores momentos, se topa con una vieja capa con la que jugaba cuando era pequeño. Para sorpresa suya, al ponérsela Eric descubre que le confiere la capacidad de volar. Extasiado con su nuevo superpoder, Eric encuentra la motivación suficiente para hacer lo que cualquiera haría: emprender un camino de odio y venganza contra todos aquellos a los que guarda rencor.
Así se nos plantea una de la historias más atractivas de Hill, una impactante deconstrucción no del mito del superhéroe, sino más bien de los superpoderes y hacia dónde nos empujarían en un mundo realista, lleno de almas rotas y vidas insatisfactorias. Hill coge el clásico sueño infantil de conseguir poderes y lo retuerce de manera siniestra, al hacerlo cumplirse cuando el niño inocente ya se ha convertido en un adulto avinagrado y frustrado. Dividida en cinco números, la miniserie cuenta con un notable dibujo de Howard, que va cogiendo más fuerza según avanza la obra y transmitiendo con mucha potencia la sensación de terror de los protagonistas al verse amenazados por la sangre de su sangre aupada por un poder inexplicable.
A continuación nos encontramos con La Capa 1969, una precuela de 2012 creada por Hill y Ciaramella en el guion y con Nelson Dániel esta vez en el dibujo, acompañado de nuevo por Howard en algunos números. Los autores se sumergen en esta ocasión en la experiencia del padre de Eric en la Guerra de Vietnam para explicarnos el origen de los poderes de la susodicha capa que muchos años después usaría su hijo con nefastos fines. Es en esencia ese tipo de precuela con poca razón de ser, pues darle explicación a las cualidades sobrenaturales de la capa de Eric en ningún momento es un elemento que necesitemos para que la serie original funcione. Sin embargo, cabe decir en su favor que, cargando con esa imagen de historia innecesaria, sus autores logran una ejecución interesante, enfocándose una vez más en la rapidez con la que se propaga el odio cuando permitimos que nos invada, algo especialmente fácil en un contexto como el de una guerra. Con un dibujo de Dániel que se mimetiza a la perfección con el estilo de la serie original, La Capa 1969 funciona, sin ser verdaderamente necesaria, como un bocado menos relevante pero disfrutable.
Se nos queda en el tintero, eso sí, The Cape: Fallen, una tercera serie que expande las sanguinarias andanzas del protagonista de la serie original, publicada en 2018 y que por el momento continúa inédita en nuestro país. Es evidente que Planeta se ha limitado a trabajar con el recopilatorio sacado por IDW en 2017, pero habría sido interesante que hubieran aprovechado para incluir esta historia posterior y hacer así su edición más completa si cabe.
Huella es nuestra siguiente historia en aparecer, una obra inédita hasta ahora en España. Titulada originalmente Thumbprint, Ciaramella vuelve a adaptar aquí otro relato corto de Hill en el que seguimos a Mallory Grennan, una exmilitar a la que le persigue la culpa por las cosas que hizo durante la Guerra de Irak en el campo de prisioneros en el que estaba destinada, Abu Ghraib. Sin embargo, la soldado descubrirá que la culpa no es lo único que la persigue por su antiguos pecados. Hill se viste aquí de una especie de pseudo-noir que entre sus misterios aprovecha para explorar el sentimiento de culpa de aquellos que cometieron actos terribles por seguir órdenes. Con tan solo tres números, Huella podría ser una historia fresca e interesante de no ser por su dibujo. Vic Malhotra, el encargado de la serie, realiza un trabajo muy deficiente, con un trazo grueso y tosco que adolece de mucha falta de fluidez en las posturas y en los movimientos de los personajes, dejando una sensación estática imperante en toda la obra.
Seguidamente nos encontramos con Kodiak, la más corta de todas las historias que nos encontramos en el volumen, y también la primera de todas en publicarse, en 2010. Con apenas 20 páginas, Kodiak es otra adaptación más por Ciaramella de un relato corto de Hill y el mayor alejamiento del terror que el autor realiza dentro de todas las historias integrantes. Kodiak, que es también el nombre que designa a una clase de oso, narra a modo de cuento la historia de Dominico, un artista circense de tiempos renacentistas que se ve envuelto a una indeseable refriega debido a su romance con una joven de alta familia. En su brevedad, Hill y Ciaramella se limitan a tratar de capturar ese espíritu de cuento, con cierto halo de fantasía y una rápida sucesión de eventos que, sin ser especialmente memorable, funciona gracias a la habilidad de Hill como narrador. Nat Jones es el encargado de hacer frente al apartado artístico de esta breve historia, junto a los colores de Jay Fotos, realizando un trabajo aceptable aunque poco inspirado, si bien su estilo se adapta bien al espíritu fabulesco de la narración de los guionistas.
Por último lugar, el volumen cierra con Wraith (Espectro en España), la miniserie de 7 números con la que Joe Hill presentaba los orígenes de Chalie Manx, el macabro villano de su célebre novela NOS4A2. Con C.P. Wilson III en el dibujo y Jay Fotos de nuevo en el color, en Wraith Hill realiza una obra que se divide en tres partes. En primer lugar, su introducción nos acerca a la infancia y desventura del villano, narrándonos su vida hasta convertirse en el tenebroso personaje que llega a ser. A continuación, el grueso de la obra nos relata la desafortunada aventura que un casual grupo formado por presos fugados y los alguaciles a los que han apresado se ven atrapados en Christmasland, el demoniaco mundo gobernado por Manx en el que recluye a los niños que secuestra. Por último, el séptimo número concluye con un epílogo que narra la vida de un inesperado personaje al que hemos conocido previamente.
En Wraith Joe Hill se vuelca en realizar una historia de terror puro, explotando el clásico elemento de los personajes atrapados en el territorio de la bestia (siendo en este caso la bestia un macabro chófer). Sin conocer la novela a la que sirve de precuela, la historia cumple una función de entretenimiento aceptable que, sin embargo, queda lastrada por el dibujo de Wilson. El estilo del artista, tremendamente feísta y oscuro, con un entintado irregular e incómodo, puede que cumpla su cometido de trasladarnos a la tenebrosa historia que cuenta, pero su detalle tosco y sus fisonomías poco cuidadas terminan por sacarme de la historia más por densidad que por terror. Solo salvaría el último número de epílogo, en el que las viñetas son sustituidas por la prosa de Hill acompañada por pequeñas ilustraciones del artista. Si bien el dibujo sigue sin ser de mi gusto, la maravillosa prosa de Hill aquí sí que lleva en volandas la historia y deja un resultado notable, con un final que encoge el corazón.
En definitiva, este volumen recopilatorio nos da un poco de cal y un poco de arena. Mientras que la labor de Joe Hill y Jason Ciaramella va desde lo entretenido a lo notable, los trabajos de los dibujantes que acompañan a las historias son francamente mejorables, a excepción del de Zach Howard y Nelson Dániel en La Capa, y desgraciadamente lastran el resultado final, que podría ser mejor. A pesar de todo, es una oportunidad magnífica para poder disfrutar de una gran cantidad de los trabajos de una figura tan importante como Joe Hill.
Lo mejor
• En términos generales, Joe Hill es un magnífico narrador.
• La Capa, el mejor de los relatos del volumen sin duda.
• Nota especial al excelente epílogo de Wraith.
Lo peor
• A excepción de La Capa, en general el dibujo de la obra va desde lo aceptable a lo deficiente.
• Habría sido una buena ocasión para que Planeta incluyera The Cape: Fallen, inédito en España.
Guion - 7.8
Dibujo - 5.7
Interés - 7
6.8
Irregular
Planeta nos trae un recopilatorio de historias de Joe Hill que, si bien no siempre van acompañadas de un dibujo a la altura, es una gran oportunidad para hacerse con el trabajo del autor.
