Fuga de Prisión
Casi desde que fuera presentado en el número 14 de Puño de Hierro de Chris Claremont y John Byrne que data de Agosto de 1977, Victor Creed (Dientes de Sable) ha tenido cierta tendencia a permanecer encerrado en las plantas bajas de los distintos y lúgubres lugares en los que ha vivido.
Y es que, tan pronto como manifestó sus poderes mutantes, el que poco después sería conocido como Dientes de Sable, fue encerrado por su padre en el sótano de su casa, lo que terminó cuando un Víctor más crecidito consiguió escapar y vengarse de su padre con la consiguiente dosis de sangre y vísceras que siempre acompaña a este personaje.
Pues bien, muy recientemente, y al comienzo de la etapa de Jonathan Hickman al frente de los mutantes, Dientes de Sable era expulsado de Krakoa, encerrado en el vacío que se encuentra bajo la isla y ello por sus crímenes cometidos contra la raza mutante, los cuales, violaban las pocas pero férreas normas del nuevo paraíso mutante.
Esta condena, mucho peor que la muerte, tiene a Víctor Creed a solas con sus torturados pensamientos, y es precisamente, en esta serie en la que conocemos que comparte celda junto a otros mutantes: Tercer Ojo, Oya, Fundidor, Madison Jeffries y Nekra, quienes se unirán a Creed en su Gran Evasión de la prisión krakoana.
Víctor Lavalle, conocido novelista estadounidense, es el guionista de esta obra en la que en tan solo cinco números, además de construir el futuro del personaje, ahonda lo suficiente en su pasado como para demostrarnos que conoce a Creed y a los hechos relevantes de su historia.
Ello resulta muy útil, y es que, cuando hablamos de personajes de Marvel que podemos considerar secundarios o “menores” es muy difícil para el lector novel conocer el a b c de los mismos, y este tipo de obras que sirven de soft reboot para personajes como Víctor Creed suelen ser muy bienvenidas por lectores no tan acostumbrados a Marvel como el lector habitual.
Por lo demás, estamos ante la típica obra de fuga de la prisión, compuesta por un grupo de personajes disfuncional que está todo el tiempo pensando en cómo llevar a cabo su misión mientras traiciona a los supuestos aliados que tiene al lado, lo que siempre otorga la dosis justa y perfecta de salseo para el lector.
En lo relativo al dibujo, Leonard Kirk dibuja los cinco números de los que se compone esta obra, con un estilo muy similar a lo que ya hizo en Lobezna, y parejo a lo que otros autores están realizando en esta era mutante, en la que los globos de texto y los distintos esquemas o tablas que encontramos en el interior de cada número juegan de elemento cohesionador de la etapa entera.
No estamos ni ante el más popular de los personajes Marvel (que aún así cuenta con no pocos adeptos) ni ante el cómic imprescindible de este último tercio del año 2022, pero sí ante una obra entretenida que puede ser el regalo perfecto para fans de Dientes de Sable o para aquellos lectores intrigados por los mutantes de la Casa de las Ideas que quieran leer algo nuevo más allá de Lobezno, Cíclope, Xavier, Magneto y ese lago etcétera de personajes sempiternos.
Lo mejor
• Una buena forma de conocer a Dientes de Sable.
Lo peor
• La obra no destaca por nada en especial.
Guión - 5.5
Dibujo - 5.5
Interés - 5.5
5.5
Entretenido
Víctor Lavalle y Leonard Kirk nos cuentan el siguiente paso en la azarosa vida Dientes de Sable.
