Este mes finalizamos el tercer año del Magazindie, 36 meses repasando las novedades mensuales en España y los estrenos en USA, así como un buen puñado de extras donde analizamos series inéditas, clásicas, personajes o artistas destacados. Pero hoy vamos con lo de todos los años por estas fechas, a saber, el repaso anual a la cantidad de cómics que hemos visto por aquí este mes. Pero antes siempre me gusta hacer un recordatorio, estas cifras que vamos a poner aquí son las del Magazindie, como digo todos los años, puede que se nos colase alguna por ser un anuncio editorial tardío (que solemos meter en el Magazindie del mes siguiente) o simplemente por despiste. No se pueden tomar estas cifras como absolutas, pero lo cierto es que el margen de error es bastante bajo. Apenas encontramos tres a añadir que salieron un poco por sorpresa y que dejamos bien apuntadas para esta pequeña entrada, pero no hay que tomarlo al pie de la letra sino más bien como una aproximación para hacernos una idea del año. ¿Habrá más que los anteriores o menos? Veamos.
En los últimos años habíamos visto un incremento en la cantidad de cómic independiente norteamericano en España. De cerca de 200 en 2019, pasamos a los 258 de 2021, mientras que el año pasado subimos a 323. Por desgracia este año hemos vuelto a bajar y nos situamos en los 291, viendo una bajada importante en la cantidad de publicaciones por parte de Planeta y algunos meses de Norma, aunque también es cierto que otras editoriales que en ocasiones aparecía por el Magazindie este año no han dado señales de vida o solo han sacado uno o dos tomos en todo 2023. Tampoco está nada mal, hablamos de 32 cómics menos que el año pasado, pero una subida de precios considerable, una vez más por desgracia como el resto de productos que nos rodean.
El formato favorito sigue siendo el tomo. Ni más ni menos que 267 tomos salieron en nuestro país. De ellos 184 pertenecen a series, concretamente a 115 colecciones diferentes que estamos siguiendo cada ciertos meses. Por tanto, 83 son tomos autoconclusivos. Pero este no es el único formato puesto que ECC y Planeta sacan grapas del mercado indie, concretamente 24 grapas totales de un conjunto de 5 series diferentes. Es el único formato que sube con respecto al año pasado.
Pero hay más, nos quedan los integrales, ediciones de lujo, omnibuses varios o como quiera la editorial en cuestión llamarlos, es decir: los tochales. Frente a los 50 de 2022 este año solo hemos visto 41 tomos de gran tamaño, exactamente los mismos que en 2021. Ahora bien, Norma parece dispuesta a recuperar el formato, que lo tenía algo abandonado por temas varios como la subida de costes, pero este fin de año parece que quieren volver a ellos, habrá que ver si mantienen el ritmo.
Para dar un dato que nos muestra bien la comparación entre estos últimos años, en 2023 hemos tenido una media de 24,35 cómics del indie norteamericano al mes, frente a los 26,9 del año pasado pero por encima de los 21,5 del 2021. No se puede decir que haya estado mal, este tipo de cómic siempre es variado, heterogéneo y presenta historias para cualquier tipo de público, es un buen síntoma de la buena salud cultural que se publique tal cantidad en nuestro país.
Ahora acabemos con el último dato, los principios y los finales. En 2023 han salido a la venta 41 series nuevas, mientras que hemos visto 31 finales, con lo que se siguen estrenando más series de las que se terminan, aunque hay una diferencia sustancial con el año pasado, donde se habían comenzado 47 y acabado 22.
Por nuestra parte seguiremos recopilando las novedades en España, los estrenos en USA y esas otras pequeñas secciones que destacan alguna parte del cómic independiente norteamericano. Solo nos queda desearos un feliz fin de año. Nos vemos en Enero. Muchas gracias por leernos.
Igor Álvarez Muñiz
En un mes en el que ECC apuesta sobre todo por las Tortugas Ninja tenemos un par de gratas sorpresas. La primera de ellas es la edición en un solo tomo de Bodycount, clásica miniserie en la que Eastman hacía equipo con Bisley allá por los noventa para una historia brutal de Raphael y Casey Jones, además tendremos el número dieciocho de la serie principal y la segunda grapa del cruce con Street Fighter. Por otro lado llega el volumen dos de Clementine, la historia ambientada en el mundo de The Walking Dead hecha por Tillie Walden, acompañado de la décima grapa de Amor Eterno para cerrar su dosis de Image Comics.
– Las Tortugas Ninja: Bodycount de Kevin Eastman y Simon Bisley, 19,50€, Image Comics
– Las Tortugas Ninja 18 de Kevin Eastman y Varios artistas, 18€, IDW
– Las Tortugas Ninja vs. Street Fighter núm. 2 de Paul Allor y Ariel Medel, 3€, IDW/UDON
– Amor Eterno num.10 de Tom King y Elsa Charretier, 3€, Image Comics
– The Walking Dead: Clementine vol. 2 de Tillie Walden, 30€, Skybound/Image Comics
Pasamos a Norma Editorial que aparece con un nuevo y esperado integral de AIDP, el noveno de once de la gran serie de Mike Mignola y sus muchos colaboradores. También esperado el estreno de la serie de Declan Shalvey como autor completo, Old Dog, así como una nueva adaptación de un relato de de de Andrzej Sapkowski con su famoso brujo en The Witcher y, por si fuera poco, el final de la laureada El Sexto Revólver, uno de los mejores trabajos de Cullen Bunn.
–Old Dog (Perro Viejo) 1, de Declan Shalvey, 21 €, Image Comics
–El Sexto Revólver 6, de Cullen Bunn y Brian Hurtt, 39,95 €, Oni Press
–AIDP Integral 9, de Mike Mignola y Varios Artistas, 39,50 €, Dark Horse
–The Witcher: El mal menor, de de Andrzej Sapkowski y Varios artistas, 16,50 €, Dark Horse
Ahora es el turno del sello juvenil Astronave, pues este mes nos trae la continuación de una serie de ciencia-ficción que gustó mucho por aquí, tanto por su temática como por sus personajes. Hablamos del segundo volumen de Cosmoknights, de Hannah Templer.
– Cosmoknights 2, de Hannah Templer, 22 €, Top Shelf Productions
En Panini Comics el mes se basa en dos tomos habituales en su catálogo. Primero está un nuevo estreno del Millarworld, que lleva una temporada viendo un tomo al mes, su nombre es The Ambassadors y viene con una plantilla de dibujantes muy interesante. Segundo un nuevo viaje al futuro con otra historia basada en el videojuego de CD Projekt Red, Cyberpunk 2077.
–The Ambassadors, de Mark Millar y Varios Artistas, 26 €, Millarworld/Image Comics
–Cyberpunk 2077: Your voice, de Aleksandra Motyka y Marcin Blacha, 20 €, Dark Horse
Diábolo sigue adelante con los clásicos de EC, ahora es el turno de una nueva cabecera, Impact, que se recoge al completo en un solo volumen.
– Impact: Volumen único, de Varios autores, 34’95 €, Dark Horse
Vamos a por las novedades de Moztros que se quedan en dos tomos USA. Regresamos a Valiant con un nuevo volumen de Bloodshot, por Deniz Camp y Jon Davis-Hunt, una nueva historia que hará las delicias de sus seguidores. Por otra parte volvemos con los Power Rangers, tras cerrar su primera etapa nace una nueva colección, Mighty Morphin.
– Bloodshot Desatado, de Deniz Camp y Jon Davis-Hunt, 18,90€ Valiant Entertainment
– Mighty Morphin 1, de Ryan Parrot y Marco Renna, 20,90€ BOOM! Studios
Ho, ho, ho. Llegan las Navidades y con ellas, un mes bastante flojete, la verdad. Ya se sabe que las editoriales cuentan con dar sus últimos bocados al año con los estrenos del penúltimo mes. Pero aun así, siempre hay alguna cosilla que remarcar. El universo de Something is killing the children sigue creciendo con otra serie más, Book of Butcher, de la mano de sus autores originales, así como el Energon Universe de Skybound suma a su catálogo Duke, una mini centrada en el icónico personaje de G.I. Joe. Jesús Hervás repite con Cullen Bunn para traernos, jamás lo adivinaríais, ¡más terror!, y la autora de moda Zoe Thorogood se adentra en el mundo de Life is Strange. Completan el plantel lo nuevo de los Lapham y Charred Remains, una serie negra con la peculiaridad de contar con un ex-policía de criminalística en el guion, y por supuesto, la vieja pareja confiable, Brubaker y Phillips, que no bajan el pedal ni a tiros. Y con esto y un bizcocho, nos despedimos del año en las novedades USA, ¡felices fiestas!
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David se encuentra metido en un pozo más que complicado. Su adicción al juego tiene su vida completamente patas arriba, y solo un golpe de suerte puede ayudarle a hacer borrón y cuenta nueva, saldar sus deudas y dejar atrás sus vicios. Y ese golpe de suerte es, precisamente, un golpe: un ambicioso robo en el que es imprescindible contar con alguien que conozca en profundidad los túneles del metro de la ciudad. Alguien como un conductor veterano del servicio. Alguien como él. La cosa es que la suerte no parece ser el territorio de David, porque el golpe se complica de la manera más inesperada.
Así se nos presenta Underheist, la nueva historia creada por David y Maria Lapham, el prestigioso equipo creativo que nos trajo la excelente Balas Perdidas. BOOM! Studios se apunta el tanto haciéndose con una dupla de categoría, que promete traernos una nueva historia hardboiled, de esas que tanto les gustan, pero con un girito sobrenatural para ponerle los dientes largos a los fans del terror.
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Tampoco es que tuviéramos dudas, pero se confirma: Robert Kirkman es el mejor generando expectación. Desde que Skybound Entertainment se hizo con los derechos de Transformers y G.I. Joe, nos tuvo pendientes de ver qué era capaz de hacer la compañía del guionista de Invencible con dos franquicias tan golosas. Y la respuesta no defraudó. Por sorpresa, la reciente Void Rivals dio el pistoletazo de salida el Energon Universe, un cosmos compartido entre ambas franquicias, además de la serie de Kirkman y Lorenzo de Felici. Un universo en el que los robots cuentan con el gigante Daniel Warren Johnson para crearles una nueva historia y los héroes de acción de Hasbro continúan su numeración original con el mismísimo Larry Hama.
Pero aún queda más. La siguiente incorporación al universo es Duke, una serie protagonizada por el icónico personaje del Equipo G.I. Joe, en el que se verá las caras con un jet que se transforma en robot… Je. Duke viene firmada por Joshua Williamson, guionista de confianza en Skybound, así como por el artista Tom Reilly. ¿Volverá a sorprendernos el nostálgico universo de Skybound?
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Que no, que no vamos a dejar de destacar lo nuevo que saquen Ed Brubaker y Sean Phillips. Porque sí, es cierto que a un equipo creativo con la solera y el prestigio de este dúo no le hace falta más promoción, pero es que cómo no hablar de ellos cuando esta gente solo conoce la excelencia y estreno tras estreno siguen sin fallar. Este mes le toca el turno a Where the body was, una nueva obra publicada como novela gráfica, que como ya sabéis hace tiempo que es el formato que el tándem de Criminal ha abrazado por completo por la libertad que les concede para crear nuevas historias.
El argumento arranca con un asesinato que tiene lugar en los suburbios, un caso que conoceremos desde más de una docena de puntos de vista. Un piso de drogadictos, un ama de casa abandonada, un policía que quiere estar solo, una joven que cree ser una heroína… Todo un crisol de historias que convergen alrededor de ese cadáver que pondrá sus vidas patas arriba, más si cabe. Un cómic que sus autores definen como un podcast de true-crime mezclado con un antiguo diario extraviado, otro ejemplo de Bru y Phillips haciendo lo de siempre con un toque distinto.
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Cowboy Ninja Viking
En los años previos de la Image del 20º aniversario que le dio nueva vida a la editorial, había comenzado una expansión creativa para sentar las bases de lo que sería su renovación. Entre los muchos nuevos títulos y nuevos autores que comenzaron a publicar en los diferentes sellos de la I, estaba Riley Rossmo como dibujante de un puñado de ellas.
El mismo Rossmo que hoy es habitual artista de DC Comics, por aquellos años era como una joven estrella para el mundillo independiente. Una de las series que llevó adelante entonces fue Cowboy Ninja Viking, junto al guionista A. J. Lieberman (quien realizó el camino inverso, de DC a Image), cómic que es muestra de la libertad creativa que ejercían con impunidad por entonces.
La premisa combina los trastornos de múltiples personalidades, con elementos fantásticos y de acción, con una buena dosis de comedia y humor incorrecto. El título hace referencia precisamente a tres personas que habitan en el protagonista llamado Duncan (de un vaquero, un ninja y un vikingo) que fue transformado en agente de inteligencia por un experimento psiquiátrico. Él es el primero y principal para la historia pero no el único, con un grupo de “trillizos” (como los denominan coloquialmente) que se han convertido en asesinos a sueldo, y Duncan es convocado para contrarrestarlos a todos ellos.
Esta materia prima artística es la base para dar rienda suelta, por un lado, a la creación de un gran grupo de personajes con sus respectivas tres personalidades junto a un reparto que los rodea de manera igualmente atractiva. Con ello juega el escritor para divertirse plantando frases ocurrentes en cada página, así como también le permite al dibujante maniobrar con lo visual: los globos de diálogo tienen elementos gráficos para determinar qué personalidad es la que habla, por momentos, y en otras ocasiones caracteriza a estas identidades múltiples de la manera en que se verían en un plano físico por fuera de lo mental. En el apartado del dibujo Rossmo se permite mucho más que eso, comenzando en los primeros números con un coloreado monocromático que va expandiendo en el curso de la publicación bordeando siempre con lo experimental, forjando el artista que es hoy por hoy trabajando para el mainstream pero sin dejar de lado sus raíces.
Lo que ofreció en ese momento Cowboy Ninja Viking fue una lectura curiosa, distinta y llamativa que atrajo la atención no solamente de lectores sino también de los estudios cinematográficos que coquetearon durante varios años con la producción de un filme basado en estas páginas, incluso fichando a Chris Pratt para protagonizarla y a Marc Foster para dirigirla. El desarrollo de esta quedó en el olvido, pero no el cómic que tuvo sucesivas ediciones recopilatorias en 2013 y 2018 de parte de Image Comics, incluyendo los 10 números publicados en un mismo libro.
Seguramente, si la película se hubiera materializado tendríamos más tomos y también su edición castellana, así como probablemente nuevos capítulos para la historia que seguía teniendo tela para cortar. No obstante esto, es una obra que con quince años de edad mantiene su vigencia en tanto cómic experimental, divertido, entretenido y artísticamente interesante.
Joe Casey
Demasiado convencional para ser parte del mundillo undergound y demasiado atípico para ser considerado parte del mainstream americano. Además de deslenguado, Joe Casey es todo un autor de culto, un escritor tan influenciado por Robert Crumb como por Frank Miller.
Tras escribir varias series indie para editoriales minúsculas, cómics que apenas vendían, su gran oportunidad llegó en 1998 de la mano de su amigo James Robinson, que estaba buscando a alguien que le sustituyese como guionista de Cable, la serie del popular mutante de Marvel Comics. De la noche a la mañana, Casey pasó de ser un desconocido a un guionista habitual en los cómics de Marvel. Además de escribir las aventuras de Cable, se encargó de continuar The Incredible Hulk después del final de la etapa de Peter David; relanzó a Deathlok; y ayudó a Alan Davis en su etapa al frente de X-Men. Nada mal para un guionista primerizo.
Solo un año después de su debut como guionista profesional, Wildstorm le ofreció continuar el relanzamiento de Wildcats, la famosa serie creada por Jim Lee y Brandon Choi. En sus manos y las del dibujante Sean Phillips, la serie se convierte en un inteligente y audaz thriller de acción. Por primera vez, el guionista pudo realizar su trabajo con mucha libertad creativa y demostrar su pasión por jugar con ideas atrevidas e innovadoras en géneros comerciales. A comienzos de la década de los 2000, el guionista compaginó esa faceta de autor rompedor con la del escritor tradicional de superhéroes. Acometió proyectos nostálgicos para Marvel y DC (a destacar sus miniseries sobre los Vengadores clásicos), pero también otros que causaron conmoción entre los lectores por su atrevimiento, como por ejemplo su breve etapa en Uncanny X-Men y The Automatic Kafka.
Sin embargo, Marvel y DC no eran lugar para un guionista con tanto carácter e ideas propias como Casey. Recordemos que DC Comics le declaró persona non grata en 2010 porque criticó publicamente la estrategia editorial de la empresa. Cansado de las políticas editoriales de Marvel y DC y la deriva de Wildstorm desde que fue comprada por DC, a medidados de los 2000 Casey empezó a centrar sus esfuerzos en el cómic indie y en la animación. En el terreno de la animación ha participado en la creación y producción de series como Ben 10 y adptaciones de Marvel.
Nunca ha dejado de escribir cómics para Marvel, pero Casey es hoy ante todo un autor indie. No para de publicar series en Image, todas ellas únicas y personales. Es difícil definir un cómic suyo, dado que él es un guionista que intenta adaptarse al género de sus series y al dibujo de sus colaboradores. Un cómic suyo puede ser un homenaje a Jack Kirby, con diálogos grandilocuentes y énfasis en la ciencia-ficción alocada, o algo inclasificable como Sex, muy fría e inquietante.
Quizás la mayor seña de identidad de un cómic de Casey es su actitud. Todos sus cómics intentan ser un soplo de aire fresco en sus géneros, una avalancha de creatividad y destreza, una dosis de adrenalina que nos haga querer leer más cómics de ese género. Sus influencias son siempre otros cómics, desde Love & Rockets hasta los Vengadores de Steve Englehart y John Buscema; nunca películas o series de televisión cuya formula pueda imitar para hacer más comercial sus cómics. Si está escribiendo una serie de superhéroes, siempre intentará ofrecer algo que sea imposible de ver en Marvel y DC. Y si es un relanzamiento de Corrupción en Miami, bueno…. no hay más que ver el resultado, impensable en manos de otro autor. No siempre funcionan sus propuestas, pero jamás se le podrá acusar de no darlo todo.
Tampoco se le puede acusar a Casey de tener malos colaboradores. Siempre está buscando a dibujantes, ya sean novatos o veteranos de la industria, que sean compatibles con sus historias o que le inspiren a encontrar las mejores ideas, y siempre acierta con sus fichajes. Sea malo o bueno el cómic, nunca tendrán un dibujante fuera de lugar o un dibujo deficiente. Si algún día se aburre de su trabajo como guionista, podría probar suerte como editor.
A día de hoy, Casey tiene dos series en publicación. Una de ellas es Junior Baker The Righteous Baker, una secuela de su demencial serie de superhéroes Butch Baker ilustrada por Ryan Quackenbush, un dibujante al que ha dado su primera oportunidad en la industria en esta serie. La otra serie en publicación es Dutch, un relanzamiento del personaje creado por Chap Yaep en el que Casey, Nathan Fox y Simon Gane se toman muy en serio su misión de crear el cómic de acción más alocado de Image. ¿Llegará alguna de estas series a territorios hispanohablantes? Sospecho que no. Como casi todo el catálogo indie de Casey, habrá que importar la edición americana, y es que la obra de este autor no es para todos, pero muy, muy disfrutabla para quienes comulgamos con su visión de lo que debería ser un cómic comercial de calidad.
El equipo recomienda…
– Igor Álvarez Muñiz: Bloodshot: Desatado, de Deniz Camp y Jon Davis-Hunt, Moztros.
– Edu Sesé: The Walking Dead: Clementine Vol. 2, de Tillie Walden, ECC.
– Mariano Abrach: Old Dog 01, de Declan Shalvey, Norma Editorial.
– Sergio Fernández: AIDP Integral vol. 9, de Mike Mignola y Varios artistas, Norma Editorial.
– Juan Luís Daza: Las Tortugas Ninja vs. Street Fighter 02, de Paul Allor y Ariel Medel, ECC.
– Alfonso del Pino: Cosmoknights 02, de Hannah Templer, Astronave.
– José María Vicente: Old Dog 01, de Declan Shalvey, Norma Editorial.
Muy identificado con «con lo que se siguen estrenando más series de las que se terminan» jaja
¡Un saludo, gente del indi y muchas gracias por vuestro curro durante todo el año!
Jajaja
Gracias a ti por leernos.
Un saludo!!!
Muchas gracias por la info, de verdad que un gran trabajo hacen con esta sección.
En cuanto a Joe Casey tiene sus más y menos como todo autor que se precie, me gusto bastante varios de sus trabajos en las dos grandes editoriales, ahora me viene a la mente sus Vengadores Año Uno que si mal no recuerdo coincide con la época de Bendis a cargo de la serie principal y fue como un oasis en medio del desierto.
Algo muy interesante que mencionan es la cantidad de series que se estrenan y que yo diria que no es que no terminan, sino que en muchas ocasiones no tienen ni siquiera continuación y muchas son de gran calidad.
El tema de las grapas y tomos es un debate que se vuelve cada vez más complicado con el correr de los años, será tal vez por la edad pero aprendí a cultivar la paciencia y esperar en muchas ocasiones con resignación al momento que reediten ese material en tomo, se que es un valor ostenciblemente mayor pero prefiero eso.
Ahora que se volvió a poner en vigencia series como las de G.I. Joe y Transformers, ojala se de la oportunidad de que en algún momento reediten material de estas franquicias o de Thundercats como cuando lo editaba Wildstorm.