El Lobezno más influyente del presente siglo
«Pagareis el doble el mes que viene. O todo el mundo morirá»
Cuatro años después desde que se publicara por primera vez la reedición en formato Must Have de esta obra, Panini Cómics reedita de nuevo y en este mismo formato que tan buenos resultados le ha dado, El Viejo Logan, la obra de Mark Millar y Steve McNiven que en el año 2008 presentara al público a un nuevo y atrayente Lobezno.
La reedición de esta obra en este momento tiene sentido, y es que, la misma tiene lugar dos meses antes de que se estrene en cines Deadpool y Lobezno, la película que hace las veces de tercera parte de la trilogía del Mercenario Bocazas en el cine y en la que, como su propio nombre indica Hugh Jackman retomará su papel de Lobezno pero en una versión de éste vieja y cansada.
Quien esto esté leyendo, pensará que esto mismo ya lo hizo James Mangold para su Logan, pero es que es ahí precisamente donde está la grandeza de El Viejo Logan, en el que a pesar de su simpleza, se clavara tanto en la retina del lector que admita hasta dos versiones cinematográficas distintas del concepto que en ella se presenta, dado el poder de su concepto narrativo.
Y es que, en un mundo como el del cómic superheroico en el que sus personajes existen durante décadas pero siempre fieles a un concepto de los mismos más o menos inmutable, es casi inevitable que su envejecimiento resulte atractivo a la mayor parte de los lectores, entre lo que lógicamente, también sen encuentran los productores de Hollywood.
En el caso del El Viejo Logan, como ya hemos comentado en otras reseñas de la obra que podéis consultar aquí y aquí, Mark Millar y Steve McNiven nos presentan un Universo Marvel postapocalíptico en el que los villanos… ya han ganado.
No estamos ni ante la última batalla de los Vengadores o de la Patrulla-X, ni ante un momento decisivo en la historia de ningún supergrupo. Los villanos más poderosos del Universo Marvel como Kingping, Doctor Muerte y, curiosamente, El Increíble Hulk, se han repartido Estados Unidos y ya no quedan héroes, puesto que aquellos que una vez portaron coloridas mallas y lucharon por la justicia hace tiempo que o han muerto o han decidido pasar a segundo plano y llevar una vida tranquila lejos del poder y la responsabilidad.
Este el caso de Logan, antes conocido como Lobezno, que lleva décadas sin sacar sus garras y que lleva una vida más o menos tranquila con su mujer y con sus dos hijos en un rancho que pertenece, precisamente al clan criminal formado por la familia de Bruce Banner, Hulk.
Estos vástagos Gamma son retratados por Millar y McNiven como unos auténticos paletos sureños de bandera confederada que en lo que a esta historia respecta son dueños de un vasto territorio, lo que les permite campar a sus anchas por él con total crueldad, cobrando rentas astronómicas por terrenos que no valen ni una décima parte.
Precisamente, aquí es donde comienza nuestra historia, con un Logan que no puede pagar la renta a los Hulk y que, muy a regañadientes, se verá obligado a aceptar la mano que le tiende Clint Barton (antes conocido como Ojo de Halcón) para ganar dinero rápido en un peligroso trabajo, lo que le permitirá seguir haciéndose cargo de su familia y retornar a esa vida tranquila que Logan tanto ama tras haber llegado a ella por un trágico suceso del que se niega a hablar.
Tomando como referencia la magnífica película Sin Perdón, Mark Millar comienza así un Western Crepuscular a la Marvel protagonizado por Lobezno, en el que Logan y Clint viajarán por los lugares más recónditos del Universo Marvel, mostrando al lector qué es lo que ha pasado con los distintos héroes y villanos del mismo, y poco a poco, devolviendo a Lobezno a su antiguo ser.
No estamos ante un cómic que tenga un magnífico guion, pero si ante un Mark Millar que como suele ser habitual en el actor, sabe plagar su escritura de momentos de gran impacto y golpes de efecto, lo que hace que nos quedemos atrapados a cada grapa hasta terminar el tomo de una sentada sin apenas habernos dado cuenta de ello.
Todo esto, como es lógico, se consigue gracias al dibujo de un enorme Steve McNiven que aquí campa a sus anchas no solo para mostrarnos gráficamente como han envejecido tanto el Universo Marvel como sus personajes, sino que diseña dinosaurios afectados por simbionte, baldías tierras que son una mezcla entre el género western y Mad Max y en definitiva un sinfín de enclaves y conceptos que convierten este cómic en auténtica dinamita visual.
Tal fue el éxito de esta obra, que no solo la misma ha tenido su reflejo cinematográfico hasta en dos películas distintas y desde dos puntos de vista radicalmente distintos, sino que durante unos cuantos años ésta fue la versión de Lobezno oficial, una vez que Charles Soule se atrevió a poner fin a la vida del Logan clásico.
De hecho, la existencia de esta obra llevó a crear otras series limitadas (y muy olvidables) como El Viejo Ojo de Halcón, El Viejo Star-Lord o incluso Vengadores de los Baldíos, la obra que reúne a todas estas versiones envejecidas de personajes Marvel para que estos traten de recuperar el mundo que una vez les perteneció.
Un experimento que Millar y McNiven llevaron a cabo hace ya dieciséis años, pero que sin duda ha quedado grabado en nuestra retina como una de las versiones más atractivas del mutante de las garras de adamantium.
Lo mejor
• Un concepto que casi dos décadas después de su creación sigue influyendo en el personaje.
• El impactante dibujo de Steve McNiven.
Lo peor
• Que tras el impacto de su planteamiento inicial, la obra va perdiendo fuelle a medida que avanza.
Guión - 7
Dibujo - 8.5
Interés - 7
7.5
Impactante
Revisitamos El Viejo Logan, la obra con la que Mark Millar y Steve McNiven presentaron a una de las versiones más populares de Lobezno.
Este fue el primer comic que le regale a mi mujer (de una de las coles de Salvat) porqué andaba reenganchada con los mutantes, y como vos decis, nos gustó a los dos, entra x los ojos. No lo volvi a leer, recuerdo la atmosfera general inicial clinteastwoodiana y esos dibujos que se me hacen como Simon Bisley lavado. Me pasa como casi todo lo que he leido (y visto) X mezclado con el resto de Marvel: mejor solos. Para mi quedaba mejor en vez de Ojo de Halcón, un Ciclope con los ojos arrancados (o bueno, Charles como en Logan). Pero bueno, pochoclo. El que no lo leyo no esperen un TDKR lobezniano…
Mira que era evidente más siendo ambas obras del mismo autor, pero hasta que no leí hace poco Big Game y releí wanted no recordaba que parte de la premisa es calcada.