The Cull: El Sacrificio 1, de Kelly Thompson y Mattia de Iulis

Edición original: The Cull 1-5 USA (Image Comics)
Edición nacional/España: The Cull: El Sacrificio 1 (Norma Editorial, 2024)
Guion: Kelly Thompson
Dibujo: Mattia de Iulis
Color: Mattia de Iulis
Traducción: Albert Agut
Realización técnica: Joan Moreno
Formato: Cartoné. 152 páginas. 28€

Monstruos, poderes y arena

«¿Qué es Dios?»

Jóvenes investigando lo desconocido. ¿Qué tienen estas historias que tanto nos atraen independientemente de la edad? Puede que porque todos fuimos (o sois) jóvenes e investigamos lo desconocido, o lo que en aquel momento lo parecía. No es un símil difícil de establecer realmente, pero si la fantasía es buena y los personajes están bien definidos no importa cuántas historias de estas nos cuenten, al final entran bien. Desde las aventuras de Los Cinco, hasta Paper Girls, pasando por Harry Potter o la mismísima Patrulla-X. Y ahí entra The Cull.

Y ahí entra también su guionista. La escritora y co-creadora de esta colección, que fue nominada a los premios Eisner en la categoría a “mejor serie limitada”, es Kelly Thompson, una artista muy ligada a los cómics de corte juvenil y los cómics de superhéroes. Marvel fue su casa durante muchos años con una lista interminable de obras, ahora está en DC haciendo trabajos interesantes en Wonder Woman o Birds of Prey. Jem and the Holograms, Scarlett, Descorazonada o la reciente Black Cloak en las independientes, como creadora de las dos últimas. Sin duda la hemos leído mucho por aquí y de diferentes formas, así que no es difícil ver los intereses que tiene por algunos temas, la forma de definir a sus personajes, algo en lo que siempre ha destacado, por ejemplo, es muy característico de sus obras, o su gusto por cierto tipo de romance. The Cull es muy de su estilo, tiene todo eso que vemos en sus cómic, con un corte aventuresco y fantástico, muy marcado y con la libertad que ofrece crear tus propios personajes en Image Comics.

The Cull nos cuenta la historia de cinco jóvenes que salen de casa por la noche bajo la excusa de grabar un corto, pero en realidad van a explorar una zona rocosa donde tiempo atrás el hermano pequeño de una de ellos desapareció. Una zona en la que parece haber visto algo raro, en la que entrarán y descubrirán un nuevo mundo. Dejémoslo así, porque es una obra que tira mucho de sorpresas en su argumento, de tal forma que con ello atraen a los lectores para seguir con el cómic, pero lo que realmente importa son los personajes, sus vivencias y sus pensamientos. Todo muy al estilo de Kelly Thompson.

Los personajes se trabajan en dos líneas, presente y pasado. No es que haya flashbacks, o no muchos, sino que son personajes con traumas pasados que vamos descubriendo en sus conversaciones con sus compañeros y que también determinan su personalidad. Muy bien marcados y muy distinguibles, es decir, muy reales, a los que les afecta de forma diferente lo que les va pasando. Thompson puede gustar más o menos, pero sabe lo que hace y aquí no defrauda.

Utiliza para ello muchas dinámicas de grupo, pero los perfila muy pues, aún con sus diferencias, están unidos como solo las tragedias pueden hacerlo. Así, The Cull es una obra que tiene algo de drama, personal y social, con un tono de aventura, algo de romance, un poco de terror y un gran despliegue de imaginación, que trata temas que bien se podrían leer en cómics de superhéroes, como los que Thompson suele hacer, pero aquí se hace desde una perspectiva muy diferente. Y aunque he centrado estos párrafos en la guionista, por su fama y su trayectoria, nada de esto sería lo que es sin el dibujo de Mattia de Iulis.

The Cull es un cómic de personas perdidas, física y mentalmente tratando de encontrar su lugar. Una historia así necesita una buena definición de los personajes no solo a nivel emocional, sino a nivel estético. Mattia de Iulis crea cinco personas diferentes cuya forma de pensar y de ser se refleja muy bien en su forma de vestir, de peinarse, de maquillarse… es decir, va de la mano con Thompson consiguiendo crear esa diversidad real. A nivel de diseño está en consecuencia con su mente, con lo que su trabajo es de diez.

Personalmente he de decir que no soy un gran fan de los dibujos hiperrealistas en el interior de los cómics. Espero que no me maten los seguidores de Alex Ross, pero es un estilo tan estático que me saca continuamente de la narración. No sé qué tiene Mattia de Iulis pero, a pesar de que su fuerte realismo sí que puede resultar estático, su diseño de páginas consigue un movimiento que atrapa. Puede que no al primer número, pero a la mitad del tomo ya me tenía en el bolsillo.

El realismo que utiliza no va a la belleza, va a, valga la redundancia, la realidad y, paradójicamente, logra la belleza. El hecho de que los personajes no sean físicamente perfectos, no sean el canon de belleza de nuestra época, consigue que resulten aún más atractivos, precisamente por esa comunión entre cuerpo y mente con lo propuesto por Thompson. En definitiva, es un dibujo que gana cuando se le da la oportunidad.

La edición de Norma incluye el proceso creativo de algunas páginas, desde los bocetos hasta la aplicación final del color, lo que hace ver que Mattia de Iulis hace un trabajo con el color, y con la iluminación, impresionante a todos los niveles. La estaticidad es innegable, pero no me imagino The Cull con otro dibujo que no sea este.

Lo mejor

• El desarrollo y la personalidad de los protagonistas, así como su distinguible diseño.
• La historia y cómo avanza.
• La belleza del dibujo y la aplicación del color.

Lo peor

• Aún con todas sus bondades, lo estático del dibujo, en general, es algo a tener en cuenta.