De como los pizzlys gobernarán el mundo
«Yo creo en el cambio y en la metamorfosis»
Jérémie Moreau es un autor inquieto, que le cuesta acomodarse en un universo concreto y que cuando lo hace – como con Penss y los pliegues del mundo – le suele salir regular. Sin embargo con su última obra publicada en castellano, titulada Los Pizzlys, vuelve al riesgo, a la aventura creativa, al vértigo de lo desconocido.
Con Los Pizzlys estamos ante una odisea familiar, la de tres hermanos huérfanos que deciden cambiar radicalmente de vida puesto que sus esperanzas de prosperar, incluso de sobrevivir juntos en la gran urbe de París son prácticamente inexistentes.
Nathan es un joven postadolescente que trabaja de conductor de Uber para mantenerse y mantener a sus dos hermanos menores Zoé y Éttiene. El joven tiene frecuentes ataques de ansiedad que le transportan hacía unos extraños viajes extracorporales. Tras una serie de desgracias, el trío protagonista se enfrenta a las amenazas de desahucio y de separación por lo que aceptan la temeraria propuesta de Annie, una cliente de Nathan que acaba de enviudar, de acompañarla a vivir a una región remota Alaska, en una desesperada huida hacia adelante. Allí deberán adaptarse a unas condiciones de vida completamente diferentes a las que tenían en la gran ciudad y también a un entorno cambiante que sorprende incluso a los lugareños, debido al cambio climático… Tanto es así que los recién llegados, especialmente los más jóvenes, demuestran una capacidad mayor de aclimatación a los nuevos desafíos naturales que los autóctonos.
El autor de Max Winson compone una fábula que nos sumerge de lleno en los desafíos de la crisis climática y que especula con sus posibles soluciones, en este caso de carácter individual, frente a unos retos colectivos que no solo atañen a la humanidad, sino que también afectan a la fauna, a la flora y a la configuración física del planeta.
Los Pizzlys, toma el nombre de una nueva raza de osos norteños que son un cruce entre los grizzlys y los polares. Una unión que ha sido posible debido al deshielo de las zonas árticas y a la posibilidad de encuentro entre estas dos especies. Nuestros protagonistas seguramente acabarán siendo como los pizzlys, mejor preparados para los nuevos cambios que se avecinan, más resistentes en su lucha por sobrevivir.
La principal debilidad del argumento la encontramos en la resolución del conflicto, demasiado similar a algunos pasajes de La saga de Grimr.
Gráficamente hablando, la carrera de Jérémie Moreau se caracteriza por su constante evolución y en esta ocasión nos ofrece un tratamiento del color extremo, radical, que busca el máximo contraste entre varios colores saturados como son el rosa – dominante en la portada – el verde, el marrón, el ocre o el violeta.
La narrativa es ágil y concisa. Más mesurada y tradicional en las escenas cotidianas, más audaz y espectacular en las numerosas escenas oníricas o alucinatorias. En el trascurso de la narración nos encontramos con un gran número de viñetas a doble página absolutamente espectaculares y necesarias, además de varias páginas mudas donde casi conseguimos percibir de manera plena el misterio de la naturaleza.
La definición de los personajes es sintética, pero lo suficientemente clara para no crear confusión y su tratamiento de las expresiones faciales y de la gestualidad corporal está a caballo entre el expresionismo y el cartoon.
El tratamiento del entorno y la ambientación es otro de los puntos fuertes de una obra que en su aspecto artístico es absolutamente hermosa, arriesgada y espectacular.
En sus casi 15 años de carrera Moreau ha publicado poco más de 9 obras, todas ellas de gran calado, originalidad y profundidad.
Jérémie Moreau nació en 1987 en la región de Île-de-France. Desde joven se siente atraído por el dibujo y el mundo del cómic. Tras sus estudios primarios, se matricula en la École de l’Image de Gobelins donde estudia cine de animación. Su primer trabajo en la historieta data de 2011 y se titula Le suicidaire altruiste. El año 2012 recibe el premio de Jóvenes Talentos del Festival de Angoulême con el que empieza a ser conocido en el mundo de la BD. También este año publica Le Singe de Hartlepool, con guion de Wilfrid Lupano y que publica Delcourt. Con esta misma editorial publica su obra en solitario Max Winson (2014), compuesta por dos tomos. En 2016 publica la adaptación de la novela Tempête au Haras un trabajo que realiza junto a su autor Christophe Donner y que publica Rue de Sèvres. El espaldarazo definitivo le llega con la obra La saga de Grimr (2017) también publicada por Delcourt con la que obtiene el Fauve d’or del Festival de Angoulême del 2018. Su trabajo siguiente titulado Penss et les plis du monde lo publicó Delcourt en septiembre de 2019 y fue escogido para la Selección Oficial del Festival de Angoulême del año siguiente.
Sus siguientes obra se titulan Le discours de la panthère (2020), publicada por el sello 2024 y Les Pizzlys (2022) que edita Delcourt.
Este año 2024 ha publicado su novena obra bajo el título de Alyte, publicada por la editorial 2024 y que ha sido seleccionada para el premio Éco-Fauve del Festival de Angoulême del próximo enero.
Moreau compatibiliza su carrera en la historieta con trabajos en el mundo de la animación donde es un character dessigner de reconocido prestigio y ha participado en películas como Moi, moche et méchant 2 o Le Lorax. El autor reconoce una amalgama de influencias nada sorprendente. Entre sus autores preferidos encontramos al escritor teatral Eugène Ionesco; los cineastas Frank Capra, Luis Buñuel o Stanley Kubrick; pintores e ilustradores como Quentin Blake, James Ensor, Ralph Steadman o Ronald Searle e historietistas como Winsor McCay, Osamu Tezuka y André Franquin.
La edición de esta obra a cargo de Norma Editorial es excelente. El tomo es en cartoné, tiene un tamaño adecuado, está bien impreso y cuenta con un buen papel. No contiene material adicional, ni escrito ni gráfico, y su precio es algo elevado. Existe también una edición en catalán publicada, como no, por el sello editorial Finestres, en este caso concreto unos 5€ más barata.
Jérémie Moreau compone un bello relato iniciático en el que unos seres perdidos, unos hermanos castigados por la desgracia recuperan la iniciativa y las ganas de vivir adaptándose en un entorno diferente, salvaje y hostil. Al mismo tiempo Los Pizzlys es una odisea visionaria sobre las condiciones de vida que les esperan a las nuevas generaciones de habitantes de este planeta. Ya no podemos prevenir o revertir la catástrofe climática, hemos de adaptarnos a ella para sobrevivir.
Salut!
Lo mejor
• Un mensaje visionario, lúcido y realista.
• Un tratamiento del color espectacular.
• Que nos reencontramos con el mejor Moreau.
Lo peor
• Una conclusión algo débil.
Guion - 8.5
Dibujo - 8.5
Interés - 9
8.7
Visionaria
Una obra lúcida y realista que asume lo inevitable y que explora caminos de supervivencia
