Portada El rey de la torre de Alan Hebden y José Ortiz

Edición original: New Eagle 1-25 (Fleetway Publications, 1982)
Edición nacional/España: El rey de la torre (Isla de Nabumbu, 2024)
Guion: Alan Hebden
Dibujo: José Ortiz
Traducción:: Javier Alcázar y Antonio Moreno
Diseño, maqueta, restauración y rotulación: Antonio Moreno
Formato: Cartoné. 92 páginas. 25€

El rey del dibujo realista de aventuras.

«Tras el desastre de un satélite de energía solar era imposible generar electricidad en la superficie de la tierra, mientras la civilización se desmoronaba, algunos hombres luchaban para restaurar el orden en mitad del caos… Hombres como Mick Tempest.»

Cuando hablamos de dibujantes de cómics de estilo realista pocos llegan al excelso nivel que alcanzo durante su carrera el murciano José Ortiz (1932-2013) como hemos podido ver en sus trabajos para el mercado estadounidense, español o europeo. A lo largo de su prolongada carrera firmo el dibujo de obras tan recordadas como sus colaboraciones con el guionista Antonio Segura con el que formo una de las mejores parejas creativas de la década de los ochenta. Unas colaboraciones que son bastante reconocidas en la actualidad si bien algunas de ellas no han sido reeditadas desde hace años la excepción de Hombre (ECC) y Las mil caras de Jack el Destripador (Isla de Nabumbu). Aunque parecía que había un proyecto editorial por parte de ECC para que pudiéramos disfrutar de buenas ediciones de otras obras de la pareja como Burton y Cyb, Morgan, Ozono o Juan el Largo, la complicada situación de la editorial llena de incertidumbre el futuro de esas reediciones. Pero, por suerte para los admiradores del dibujo de Ortiz, otras editoriales como Dolmen con sus tres tomos de La tercera planta o Isla de Nabumbu con La casa del diablo nos han permitido disfrutar de algunos de sus trabajos más conocidos para el mercado británico. Unos tomos a los que se acaba de unir gracias de nuevo al buen hacer de Isla de Nabumbu El rey de la Torre, la serie con guiones de Alan Hebden (1950) que dibujo para los números del uno al veinticinco de la nueva etapa de la revista Eagle aparecidos entre el 27 de marzo de 1982 hasta el 4 de septiembre de ese mismo año que pudimos leer en España en los números del 7 al 13 de la revista Kirk. El tomo se complementa con cuatro historias que Ortiz dibujo para la sección The Amstor Computer de Eagle que nunca se habían publicado en nuestro país.

La serie nos traslada a un mundo del futuro en el que el malfuncionamiento de un satélite destinado a conseguir energía solar provocó que la desaparición de la electricidad y las ondas de radio en la Tierra. Algo que hizo que la civilización colapsara por todo el mundo descendiendo a la barbarie. Entre las ruinas de la capital de Inglaterra diferentes bandas luchan con violencia y crueldad por la supervivencia, pero hay un grupo de hombres que tratan de restablecer el orden desde su sede en la Torre de Londres. Están liderados por el indómito Mick Tempest conocido como el rey de la torre.

Estamos ante una historia de ciencia-ficción postapocalíptica heredera de las que se pusieron de moda en aquellos años a rebufo del enorme éxito de la película Mad Max dirigida por George Miller en 1979 y sus continuaciones. La serie se publicaba por capítulos de cuatro páginas como era tradición en las revistas de la época algo que tenía un enorme peso en los guiones ya que su breve extensión imposibilitaba hacer que los personajes tuviesen un mínimo de desarrollo, pero por contra provocaba que las aventuras tuvieran un ritmo frenético ya que los capítulos se enlazan formando una historia rio repleta de continuaras que se mantienen durante toda la serie hasta llegar a un abrupto final marcado por las exigencias editoriales. No estamos ante un guion brillante o novedoso, además somo testigos de algunos momentos no muy bien resueltos y casi todos los personajes resultan demasiado arquetípicos y planos, pero la historia funciona bastante correctamente como serial de aventuras sin demasiadas pretensiones. En la parte literaria hay que destacar algunos de los antagonistas con los que se tiene que enfrentar el protagonista como el frente de liberación de hospitales o los adoradores de la electricidad, aunque le guion no saca del todo el potencial que tienen.

La premisa de un mundo postapocalíptico hace que los admiradores de José Ortiz pensemos de forma inmediata en su serie Hombre que vio la luz en 1979 y que apareció hasta 1984 de forma que compatibilizo el dibujo de ambas durante un tiempo, aunque en la serie guionizada por Hebden tenemos una estética medieval en lugar de western de la de Segura. En la que también nos encontrábamos con historias que tenían algunas páginas más y era independientes lo que posibilitaba un ritmo menos endiablado y un mayor desarrollo de las tramas y personajes que otorgaba al resultado una mayor calidad.

El principal motivo para comprar El rey de la torre es el extraordinario dibujo de Ortiz que a principios de los años ochenta estaba en el mejor momento de su carrera firmado páginas en las que sabe combinar como pocos la espectacularidad y el preciosismo con la claridad narrativa. El uso que hace de las agudas para los grises de esta obra es absolutamente espectacular, al igual que sucede con las abundantes escenas de acción que siempre resuelve con acierto y con un gran sentido del ritmo, vital en historias tan breves como las que componen cada uno de los capítulos. Además de su ya conocida capacidad para crear personajes muy expresivos con apenas unos trazos, en esta serie llama mucho la atención la composición de las páginas que se alejan de los esquemas rígidos de otras obras de la época para ofrecernos otros que varias casi en cada ocasión sin que se conviertan en un lastre para la claridad narrativa. En ese sentido brilla sobre todo la primera viñeta de cada página en la que hay un texto con un breve resumen de lo sucedido en el capítulo anterior.

Además de la serie El rey de la torre el volumen incluye las cuatro historias que Ortiz dibujo de la serie de Eagle The Amstor Computer. Se trataba de una serie de historias autoconclusivas con equipos diferentes de muy pocas páginas que formaban parte de un concurso con los lectores. Ortiz dibujo la primera con guiones de B.J. Tomlinson y otras tres más escritas por tres guionistas diferentes (Alan Hebden, A. Stone y K. Armstrong) en las que se abordan diferentes géneros, pero siempre con un giro de guion final. Las cuatro están muy bien resueltas con momentos brillantes y resultan un refrescante contraste con la serie principal del volumen. Nuevamente no encontramos con unos dibujos soberbios en los que vemos la versatilidad del dibujante murciano ya que algunas se desarrollan en la actualidad. Si bien no hay rastro de los magníficos grises del serial guionizado por Hebden.

Isla de Nabumbu hace una edición espectacular con un estupendo trabajo de restauración de las páginas a cargo de Antonio Moreno que nos permite disfrutar del enorme dibujo de Ortiz. Además, tanto el diseño como los extras entre los que se encuentran un texto de Javier Alcázar sobre la serie y una entrevista con el guionista nos dejan ver el mimo y cariño que han puesto en cada página. Ojalá que en el futuro se pueden encargar de traernos más obras del dibujante murciano.

El rey de la torre es un perfecto ejemplo de brutal talento que José Ortiz desplego durante toda su carrera, capaz de hacer interesantes unos guiones que no pasan de correctos, pero que se leen con mucho interés deleitándose con cada trazo del maestro.

Lo mejor

• El soberbio dibujo de Ortiz.
• La edición.
• Algunas de las ideas del guion.

Lo peor

• El guion no está a la altura del dibujo.

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Diego García Rouco
Nacido en Barakaldo en 1977 donde sigo viviendo. Descubrí los cómics en una librería de barrio con Tintin, Asterix, SuperLopez y los personajes de Ibáñez. En 1989 descubrí los superheroes de la mano de Stern y Buscema con el numero 73 de la edición de Forum de Los Vengadores. A estas lecturas se fueron incorporando la novela gráfica y el manga, de los cuales, a diferencia de los superheroes, nunca me cansé. Todavía sueño con ser agente Espacio-Temporal y de Planetary, con visitar mundos de fantasía con el señor T., Philemon, Lord Morfeo, Arale y Thor. Viajar con Reed, Ben, Susan y Johnny al futuro y pasear por el cuartel de la Legión. Recorrer la antigua Roma con Alix y una cantimplora de poción mágica. Buscar Mú, perderme en un viaje al corazón de la tormenta, contemplar el Olmo del Cáucaso mientras paseo por un Barrio Lejano leyendo El almanaque de mi padre. Conseguir beber la sangre del Fénix. Leer, al fin, algún articulo de Tintín y de Fantasio sin que me molesten los absurdos inventos de Gastón. Perderme por las murallas de Samaris, mientras de la pirámide flotante de los inmortales cae John Difool. Enamorado de la chica de los ojos rojos y de Adele. Y cabalgar hacia el amanecer con Buddy Longway, Red Dust y el teniente Blueberry. Con un poco de humo azul en los labios...