Queda usted invitado a la inauguración de Asgardia

Una de las normas intrinsecas no escritas dentro de la historia de los superheroes es que todo heroe o grupo de heroes debe ver destruido alguna vez sus cuarteles generales o sus aposentos. Nos quedaríamos sin páginas y desgastaríamos la pintura de las letras del teclados si tuvieramos que hablar de las veces que han destruido y derruido (y por consiguiente reconstruido) la Escuela Mutante de Enseñanzas Superiores de Charles Xavier. Pero el resto de los heroes no se quedan lejos. Tras la conclusión de Asedio, el escenario no podía ser más desolador para los asgardianos: acababan de volver a su casa por navidad y el Vigia les barrió el porche de entrada con tal fuerza que la doble página de su destrucción se expandió de tal forma que lo vimos simultaneamente en no dos ni tres sino cuatro o más comics en un alarde de (no-) originalidad y desperdicio de páginas dobles por parte de los guionistas Marvel. En cualquier caso, Tony Stark pronunció aquello de «puedo prometer y prometo» y comenzaron a planificar la reconstrucción de Asgard de arriba a abajo, más grande, mejor y más ecologica que nunca, incorporando la tecnología Stark. Lamentablemente, el evento anual de turno se cruzó en su camino y como toda buena obra se retrasó mas de lo previsto. Pero que no cunda el pánico, que los arquitectos han hecho su trabajo y los obreros han cumplido con el suyo, y todo está requete-peraprado para la inauguración oficial de la nueva capital asgardiana.

En el número #11 de la colección regular del Dios del Trueno, que se pondrá a la venta el próximo mes de Febrero, Matt Fraction y Paqual Ferry, guionista y dibujante respectivamente de la serie, y responsables de la organización de este evento, correrán la cortinilla tradicional de toda inauguración y podremos disfrutar de la nueva y recien bautizada Asgardia. Sci-fi, fantasia, tecnologia y ciencia ficción cruzan sus caminos y donde antes no podían coexistir, a partir de ahora los repulsores y los trolls asgardianos compartirán hogar en armonía. Bajo la vigilancia de la todavía-perturbadora Madre de Todos (mientas el querido Odin sigue en su auto-impuesto exilio), todos los ciudadanos del mundo y de cualquiera de las nueve realidades, sean o no dioses, podrán instaurar sus aposentos en Asgardia. Sin más dilación, os dejamos con el aspecto final de Asgardia, surgido de las tecnólogicas manos y mente del siempre fantástico Pasqual Ferry, además de la paleta de colores de Frank D’Armata