Guión: Geoff Johns y Tony Bedard
Dibujo: Doug Mahnke, Tyler Kirkham y Tomás Giorello
Edición España: ECC Ediciones
Contiene: Green Lantern Núm. 1-11 USA y Green Lantern: New Guardians Núm. 1-11 USA
Formato: Grapa de 48 páginas
Precio: 3,55€/u
Valoración:
La herencia dejada por Geoff Johns en Green Lantern aún no se ha podido valorar realmente en toda su importancia pero podemos estar seguros que el universo expandido de los guerreros esmeraldas no volverá a ser el mismo después que el guionista estadounidense abandone la serie. En ella, durante casi una década, Geoff Jonhs ha tocado todos los recovecos y aspectos posibles de la mitología de este personaje. En el camino ha dejado su sello, lo reconocemos en sus relatos caracterizados por su sentido de la épica y la aventura y, como hemos visto también en sus etapas en Flash o la más reciente Aquaman, por su capacidad para revitalizar y reinterpretar personajes con una asombrosa naturalidad. Su labor en Green Lantern ha sido tan inapelable que ni siquiera el relanzamiento del nuevo Universo DC ha influido en ella lo más mínimo, siendo una de las pocas series que continuaron su andadura exactamente en el mismo punto y lugar dónde se habían quedado sus historias previas al crossover de Flashpoint. No obstante, en este punto de inflexión editorial, la serie de Green Lantern también comenzaría con un cambio importante cuando Sinestro era requerido de nuevo por los Green Lantern Corps en detrimento de un Hal Jordan que sería expulsado de la formación. La situación no quedaría forzada porque Sinestro siempre ha ocupado un lugar predominante en las tramas de Geoff Johns, haciéndolo evolucionar, más que a los propios héroes, a través de eventos como La Guerra de los Sinestro Corps, La Noche Más Oscura o La Guerra de los Green Lantern Corps.
El nivel de las historias de Geoff Johns se ha manteniendo en el mismo nivel durante todo este tiempo aportando constantemente ideas y conceptos, lo cual no ha dado al seguidor habitual tiempo para aburrirse, y más cuando las historias se han visto beneficiadas por el trabajo de artistas como Ivan Reis o su actual compañero de correrías Doug Mahnke. En los últimos números de Green Lantern publicados en nuestro país, previos a lo que será el crossover final de su etapa, El Alzamiento del Tercer Ejército, Geoff Johns ha intentado revelar y explicar algunos secretos relacionados con la Tribu Índigo, recuperando de paso al villano Mano Negra, aunque el resultado ha generado más preguntas que respuestas. Este es uno de los grandes puntos débiles de Geoff Johns, el hecho de que a su profusión de ideas y sus aportaciones a la mitología de Green Lantern, con todo lo que espectro de colores ha supuesto a ello, no se haya visto acompañado con un desarrollo y profundidad equitativo de estas cuestiones. De hecho, apenas ahora se ha empezado aa sacar provecho del legado de Geoff Johns en Green Lantern en spin-offs como Red Lanterns o Green Lantern: Nuevos Guardianes. De la primera hablaremos en algún otro momento, la segunda, incorporada a la edición en grapa de ECC de Green Lantern, se trata de una serie protagonizada por Kyle Rayner y personajes como la red lantern Bleez o el blue lantern Saint Walker. Esta se encuentra guionizada por Tony Bedard y en ella hemos podido ver a artistas como Tyler Kirkham o Tomás Giorello. De nuevo, el esquema de Geoff Johns intenta ser replicado pero, si precisamente algo deja claro esta serie, es lo sencillo que consigue hacerlo este autor y la gran papeleta con la que tendrá que lidiar su sustituto en Green Lantern ante tamaña herencia.
Guión: Alan Moore
Dibujo: Kevin O´Neill
Edición España: Planeta DeAgostini
Contiene: The League of Extraordinary Gentlemen Century 2009 TPB USA
Formato: Prestigio de 80 páginas
Precio: 4,95€
Valoración:
En el año 1999 Alan Moore comenzó a publicar The League of Extraordinary Gentlemen en Wildstorm, posteriormente absorbida por DC Comics con el correspondiente cabreo del famoso guionista, y esta ha sido la única, o una de las pocas colaboraciones más o menos regulares, ligadas al mundo del cómic, en la que ha continuado participando el conocido Mago de Northampton. Las primeras entregas de The League of Extraordinary Gentlemen eran un planteamiento no excesivamente original pero en manos de Alan Moore, con su habitual diarrea referencial, se convertirían en un más que entretenido espectáculo de corte victoriano en el que vimos desfilar personajes ascendidos hasta la categoría de auténticos iconos literarios como Mina Murray, Allan Quatermain, el Dr. Jekyll y Mr. Hyde o el Capitán Nemo. Todo ello como base de una propuesta en la que el simple pastiche adquiría un nuevo nivel gracias al trabajo de Alan Moore y también a los geniales e imaginativos lápices de un inspirado Kevin O´Neill. Luego tendríamos un punto y aparte con The Black Dossier, obra inédita en nuestro país por cuestiones legales, concebida como un volumen aparte de la serie regular, el mismo Alan Moore lo ha calificado como «una especie de ingenioso libro de consulta». Un proyecto realmente inclasificable en el que aparte de multitud de referencias, guiños y homenajes de todo tipo también se incluyen Biblias de Tijuana, pasajes para leer con gafas 3D y otro tipo de originalidades. Incluso en su momento Alan Moore se grabó a sí mismo en un disco de vinilo interpretando una de las canciones aparecidas en la historia.
Después de todo esto vendría el tercer volumen de la serie, llamado Century, una historia apocalíptica enmarcada ya en el siglo XX, en la que sólo Mina Murray y Allan Quatermain permanecerían como protagonistas, y en la que el tono de aventura decimonónica de las anteriores entregas parecía transformarse aquí en un farragoso y, por momentos, ininteligible experimento personal de su creador. La historia del tercer volumen de The League of Extraordinary Gentlemen se sucede en tres intervalos temporales diferentes, enmarcados entre el siglo XX y el XXI, el primero de ellos en el año 1910 incorporando personajes como Orlando, el ladrón Arthur J. Raffles y el detective Thomas Carnacki; el segundo en 1969, en un psicodélico viaje al Londres de la época de The Beatles; y el último peaje se sitúa en 2009, nuestro pasado más cercano. En esta última entrega encontramos lo que Alan Moore ya anunció que sería «un clímax tremendamente sangriento», una obra llena de puyas, o referencias, según se mire, al Harry Potter de J.K. Rowling, sirviéndose de alguno de los aspectos de la mitología de esta para retratar la sociedad actual y poner su conclusión, definitiva o no, a la epopeya de esta The League of Extraordinary Gentlemen. Este capítulo final, posiblemente por su condición, resulta más entretenido que los pasajes previos pero aún así uno no puede dejar de pensar que el Mago de Northampton nos ha estado contado un chiste del que solo él, y posiblemente su amigo Kevin O´Neill, hayan pillado totalmente la gracia. No obstante, quién tuvo retuvo, Alan Moore no ha perdido su capacidad para contar historias, simplemente su evolución le ha llevado a su propio camino sin retorno.
Guión: Moebius, Dan O´Bannon y Philippe Druillet
Dibujo: Moebius
Edición España: Norma Editorial
Contiene: The long tomorrow FRA
Formato: Tomo cartoné de 56 páginas
Precio: 14,00€
Valoración:
Es difícil encontrar en la historia del cómic un nombre tan influyente como Moebius, con él todo acabó por explotar en 1974 en la revista francesa Métal Hurlant, nacida de su asociación con Jean-Pierre Dionnet y Philippe Druillet y en la que colaborarían autores hoy consagrados como Alejandro Jodorowsky, Richard Corben, Paul Gillon o Charles Burns. Entre mediados de los años setenta y hasta casi finales de los ochenta, Métal Hurlant se convertiría en una referencia para el cómic de ciencia ficción, recogiendo también la herencia de las antiguas cabeceras de EC Comics de los años cuarenta y cincuenta, y llegando a publicarse en países como Italia, Inglaterra, Alemania, Estados Unidos o España. Desde las páginas de esta revista los trabajos e historias de Moebius alumbrarían a toda una nueva generación de autores. En la actualidad, la importancia de este genio, capaz de inventar mundos imposibles y ofrecérnoslos para nuestra degustación, ya no sólo hay que buscarla en el cómic sino también en el cine, o en la literatura, y casi en cualquier medio versado en lo artístico. Por ello, no deja ser una buena noticia volver a tener a nuestra disposición algunos de sus mejores trabajos, y eso mismo es lo que tenemos en el actual recopilatorio de Norma Editorial dedicado a Métal Hurlant y Moebius, una colección que contará finalmente con nueve tomos en los que conocer, descubrir o releer clásicos como The Long Tomorrow, El Hombre de Ciguri o El Garaje Hermético.
En Moebius hallamos un autor con la innata capacidad para conseguir abstraernos, perdernos irremediablemente, en los rasgos propios de su arte. En el primer recopilatorio de Métal Hurlant de esta colección la historia estrella es The Long Tomorrow, un relato realizado en 1975 en el cual nuestro protagonista colaboró con Dan O´Bannon, el encargado de los efectos especiales de la película de Dune de David Lynch, producción en la que también participaron Alejandro Jodorowsky y el mismo Moebius. Este relato breve, como todos los recopilados en estos tomos, presenta una evidente influencia de la novela ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? de Philip K. Dick aunque con una visión más enfocada a trasgredir los fundamentos de la novela negra, como posteriormente veríamos tangencialmente en el Blade Runner de Ridley Scott, y con un planteamiento más «orgánico». Luego hallamos historias como Rock City, El Universo es muy pequeño, Barbarroja y el cerebro pirata o El Artefacto en las que podemos comprobar la capacidad de adaptación y mutación de este artista según las necesidades de la historia que aborda así como su predilección por relatos con tendencia al humor negro.
En Rock City tenemos un relato completamente mudo en el que Moebius pone en escena una narrativa marcada por viñetas más pequeñas, con colores más vivos e intensos, más premeditadamente pop-art y psicodélico. Mientras, en El Universo es muy pequeño podemos observar perfectamente como el espacio profundo, terriblemente vacío y abismal en sus lápices, queda definido por un dibujo con líneas claras y perfectas mientras lo terrestre, lo humano, acostumbra a ser caótico, anguloso y sucio. Estas sutilezas son parte de lo que hace grande a Moebius, algo que podemos comprobar también en las citadas Barbarroja y el cerebro pirata y El Artefacto, así como en Descenso a Centauri, con guión de su compañero Philippe Druillet, con la que el autor no quedó muy satisfecho, y Variación nº 4027, una fábula moral sobre la guerra nuclear. Ciertamente, como dice Moebius en la introducción de esta obra, «para muchos, el cómic no será nunca otra cosa que una simple distracción», pero con autores como él uno tiene esperanza en que este tipo de pensamiento realmente se haya quedado obsoleto.
The League of Extraordinary Gentlemen Century ha sido una decepción para mi. Las dos primeras mini-series me parecen geniales en su forma de aprovechar elementos de la literatura de aventuras y ciencia ficción clásica y crear un divertimento muy disfrutable. En cambio este último volumen todo se vuelve más críptico y confuso y en algunos pasajes incluso aburrido. En 2009 aun es fácil pillar las referencias a Harry Potter pero aun así este final de serie me ha dejado un regusto amargo
The League of Extraordinary Gentrelman ha sido para Alan Moore lo que The Invisibles fue para Grant Morrison, un lugar donde aglutinar todas sus ideas, todo a lo que es devoto, y resulta curioso que el supuesto aprendiz se adelantara al supuesto maestro. En cualquier caso, el final puede resultar ligeramente decepcionante por sus excesos así como se hace difícil simpatizar con esa mirada cínica de la sociedad actual, que si bien no está carente de razón no deja de ser un trago amargo junto a otros tantos que se suceden en esta historia. Lo cierto es que al cerrar el cómic a uno le queda una sensación extraña, en absoluto agradable, una desazón que puede confundirse con la calidad de la obra cuando no es mas que el mensaje que, creo, Alan Moore pretende transmitir
Se nota mucho la influencia de la Nueva Carne en el Metal Hurlant, por cierto
Aunque soy un cuasi-incondicional de Alan Moore,creo que hay bastante unanimidad en que The League of Extraordinary Gentlemen es una de las obras más flojas del maestro. Es verdad que puede ser aburrida para los que no conozcan las referencias literarias en las que se basan, pero es que incluso para los que las conocemos la gracia va poco más allá de captar estas en las dos primeras mini-series, y de disfrutar de alguna bizarrada como la de Hyde sodomizando al Hombre Invisible. Después están esos relatos cargadísimos de más referencias (a mí me emocionó la que se hace al Quijote) pero que se hacen largos y tediosos, muy distintos a los geniales complementos de Watchmen que, además de ser parte integrante de la historia revelando cosas que en esta no aparecían (la relación homosexual entre dos de los miembros de los Minutemen) eran entretenidísmos), resultan entretenidísimos y de un estilo muy ligero.
De hecho creo que, y con esto me voy a llevar muchos palos, la única vez que he disfrutado y me he entretenido más con una adaptación al cine de una obra de Moore que con el comic original es con The League of Extraordinary Gentleman. Sé que no es la mejor adaptación, en lo que a fidelidad al original se refiere, es una historia distinta , que incluso añade personajes que no aparecían en el original, (pero que provienen d la misma fuente: la literatura anglosajona decimonónica), pero, y quizás precisamente por eso, me entretuvo mucho más que el original: escenas de acción trepidantes, Mina Murray usando con poderes de vampiresa, traiciones, luchas entre los miembros del grupo,……a mí me encantó.
Aún a riesgo de resultar pesado, insisto (como otras tantas veces) en subrayar algo que considero importante: debe resultar muy difícil poder disfrutar de la lectura de Century sin haber leído antes The Black Dossier, pieza imprescindible para entender cómo pasamos de A (primeras dos miniseries) a C (Century).
El cambio de enfoque en este cómic, así como el desarrollo de la historia y sus personajes, no resulta tan chocante si uno lo lee todo y no se salta ninguna entrega (aunque entiendo que la no publicación de The Black Dossier en este país lo dificulta bastante).
¡Están criticando al todopoderoso Moore! ¡Que alguien active la Javié-señal! xDDD
¿ Sabemos cuales son exactamente los problemas legales que impiden la publicación de Black Dossier en nuestro país?….
Gracias por los comentarios 😉
Sobre los problemas legales de The Black Dossier, por lo que recuerdo haber leído, es un de derechos de autor de algunos personajes que utiliza Alan Moore y que hacen que, no sólo en España, sino también en otros países, no se haya podido publicar la obra. No sé ahora mismo como esta el tema, a lo mejor alguien puede aportar algún dato más fresco.
Mi dato fresco es que me pidieron en el Forbidden Planet de N.Y. 150 dólares por él. Así que no creo que esté el tema muy optimista. Encima estaba roto por todos lados.
De todas formas este último número de La Liga decepciona bastante. Y eso que yo fui de los que defendió Century: 1910.
En cualquier caso los dos primeros arcos son geniales.
Ah, pues no sabía que existiera ese problema para pillarse The Black Dossier actualmente. Yo lo compré en mycomicshop.com (web USA) hace cosa de tres o cuatro años, y no me pusieron ningún problema para enviármelo entonces, pero sí, acabo de comprobarlo y es cierto que ahora lo tienen vetado.
Qué putada…
No todos tienen la capacidad de «entender» la League de Moore y por ello el aburrimiento, coincido que los dos primeros volumenes son extraordinarios, el Dossier es sublime, desde como esta diseñado hasta el contenido duro, Century probablemente le pega que no sea regular pero sigue siendo una lectura rica e intelectuelmente hablando desafiante, cada que Moore publica algun titulo, eso es precisamente lo que espero de el, que lleve a los limites mas extremos el genero, lo hizo con Watchmen, lo hizo con From Hell y lo hace con la League, Nemo tiene un par de semanas que salio y no se debe leer como cualquier comic de Batman o xmen, poco a poco para disfrutar cada palabra y cada viñeta, eso es Moore
Es un pena que no se pueda editar el Black Dossier en España ya que es bastante mejor y mas divertido que todo Century, aunque creo que este 2009 es mejor que los dos anteriores con un estilo similar al de las primeras miniseries o al menos me dio esa impresión.
Lo de Moebius me apetece mucho, pille el primero reseñado en el articulo y me encantaron las historias aunque alguna ya tenía en alguna recopilación anterior, no se puede dejar pasar aunque sea solo por lo que ha supuesto para el cine de Ciencia Ficción como ya se indica en el articulo, seguramente me haré con el resto ya que me encanta el estilo del dibujante desde que descubrí el Incal.
Por último diré que la seríe de Green Lantern me parece a estas alturas muy repetitiva prácticamente el guionista sigue utilizando los mismo elementos desde que inició su etapa, y pienso que debería empezar a plantearse contar algo nuevo.
Una lástima que en la edición española del volumen 3 de la League no hayan incluido apéndices para poder entender todos esos personajes y detalles que por mucho que nos creamos expertos se nos escapan; algo así como los apéndices de From Hell, algo así como esto:
http://www.enjolrasworld.com/Jess%20Nevins/Black%20Dossier/dossier.html
quien sabe… igual en una futura edición completa en tapa dura por 40€…
he indicado el link del Black Dossier…
para el 1910 del Vol.3 sería:
http://www.enjolrasworld.com/Jess%20Nevins/League%20of%20Extraordinary%20Gentlemen%203/Notes%20on%20League%20of%20Extraordinary%20Gentlemen%20V3%201.html
A mí me encantaron los dos primeros volúmenes de la League. Century no me lo pillé; me dije bah, si eso más adelante… Así que que sepais que las malas críticas no me ayudan nada a darme prisa en ir a por él. ¿Tan mal está? Por otra parte; no comparto para nada esa idea de que no todo el mundo está preparado para «entender» esta obra. Vale que es mucho mejor para el que la lee si conoce todas las referencias, pero aunque no sea así se puede disfrutar igualmente. Que a fin de cuentas Moore usa personajes y obras que en mayor o menor medida forman parte de nuestra cultura e incluso de nuestra educación; a quien más, quien menos le suenan Drácula, Las Minas del Rey Salomón, La Guerra de los Mundos, La Isla del Doctor Moureau, etc… tampoco nos pongamos exquisitos, que no creo que esta sea una obra precisamente elitista.
A lo que le tengo ganas es a la colección dedicada a Moebius. De siempre me gustó su dibujo pero… a la hora de leer los cómics, siempre preferí a Giraud antes que a Moebius. Ahora ya no tengo esa tara. Cosa de la edad, supongo. Pero entre que son 14 euros cada uno y está siendo mensual (¿no?), pues iré poco a poco.
Muchas gracias por lo comentarios 😉
Muy interesantes esos links Goto Dengo 🙂
«Mi dato fresco es que me pidieron en el Forbidden Planet de N.Y. 150
dólares por él. Así que no creo que esté el tema muy optimista. Encima
estaba roto por todos lados.»
Pues yo lo encargé a mi librero hace un par de semanas, una edición rústica bastante asequible, no me ha dicho nada de momento sobre si llegará o no…
«Por último diré que la seríe de Green Lantern me parece a estas
alturas muy repetitiva prácticamente el guionista sigue utilizando los
mismo elementos desde que inició su etapa, y pienso que debería empezar a
plantearse contar algo nuevo.»
Dejando ya Green Lantern poco nuevo podrá contar ya. En general, la etapa de Geoff Johns, es muy buena, el único pero, para mí, es precisamente el haber aportado muchas ideas que no ha desarrollado y tirar más de épica y de la repetición de batallas y macroeventos. Muy entretenido pero, sobre todo, deja la duda de lo que, al faltar él, pueda derivar la franquicia al no dejar todo bien atado…
«Vale que es mucho mejor para el que la lee si conoce todas las
referencias, pero aunque no sea así se puede disfrutar igualmente»
Ah, pero ahí está la cuestión, los dos primeros volumenes son muy diferentes al de Century, los primeros los referentes utilizados son mucho más accesibles pero sino, como dices, es igualmente disfrutable, pero en Century, no es que sean personajes desconocidos, pero sí de menos repercusión y, el gran problema, el sentido referencial y de homenaje en estos casi es el centro del discurso de la historia y eso va en detrimento de esta misma quedando algo farragoso y pesado.
yo tengo pendiente de lectura este tercer numero,pero debo decir q si el primer numero de century me parecio un sinsentido,en el segundo empece a pillarle el punto a la historia,referente a the black dossier,solo dire q me parece una putada como un piano q no lo editen aqui,eso si,el q lo haga los tiene cuadrados,ya q traducir ese tomo con todas las referencias q tiene es un trabajo herculeo,yo guardo el mio como oro en paño,20 euros me cobraron por el en la libreria gigamesh de barcelona,el ultimo q les quedaba.por una vez mi viaje a barcelona para el salon tuvo buenos resultados.
Aghnar, por alusiones, porque creo que tu comentario puede estar referido al mío, te respondo : yo SI HE ENTENDIDO THE LEAGUE OF EXTRAORDINARY GENTLEMAN, conozco las referencias literarias de dicha obra a la perfección, creo que tenía 7 años, o menos, cuando me leí La Vuelta Al Mundo en 80 Dias, a lo cual me llevó lo mucho que me gustaba la serie deWilly Fogg, y por la misma época me leí también Los Tres Mosqueteros, llevado por lo mucho que me gustaban Los Mosqueperros, ( y abro una reflexión: ¿pueden llevar las series de dibujos animados actuales a los niños a sentirse atraidos por la literatura?) , es decir entiendo esta serie de Moore, lo que no hace esta serie, a pesar de entenderla, es entretenerme, y mi aburrimiento no es entonces, como tu dices, consecuencia de mi desconocimiento. En los relatos que acompañan a los comics si tengo que confesar que no capto todas las referencias, pero a pesar de ello, si fueran relatos entretenidos, no importaría no pillar alguna referencia (muy pocas) aquí o allá, cuando leí Watchmen por primera vez era también muy joven, y no sabia quién era Nixon, ni falta que me hacía, disfruté de su lectura, como he disfrutado de sus múltiples relecturas, aportándome todas ellas algo nuevo, lo mismo que me ha sucedido con From Hell, (dos obras mucho más complejas que la que aquí estamos comentando), pero no me ha sucedido lo mismo con las muchas relecturas que he hecho de los extraordinarios caballeros, y me parece injusto que digas que si alguien no le gusta algo es porque no lo comprende.
¡A ver si va a ser Liefeld un incomprendido del comic!