Imposibles Vengadores Nº02

Prometedora, entretenida, con dibujo mejorable

 

Contiene: Uncanny Avengers #02
Guión: Rick Remender
Dibujo: John Cassaday
Formato: Comic-book, 24 páginas
Precio: 1,95€

 

Los peros son pocos, pero en seguida hacen aparición. Remender quizá dedica demasiado tiempo a algo que ya hemos leído en muchas otras ocasiones. Cierto, eso mismo puede decirse de cualquier cómic, pero en este caso lo que estamos leyendo es la versión extendida de lo que nos describe la sinopsis, lo que sabemos que va a ocurrir, la idea troncal de la colección, que además parte de un concepto tan antiguo como los mutantes con una vuelta de tuerca que no sorprende. No nos está dando detalles interesantes ni adelantando por dónde podemos esperar un giro argumental: está desarrollando la premisa de la serie, pero muy lentamente. Con un estilo impecable, eso sí, pero muy lentamente. Los diálogos son buenos, aunque las líneas de Thor quizá cojeen un poco. La actitud de Logan está muy bien retratada y ver al Capitán América como una mente estratégica algo más distanciada y analítica de lo habitual es un soplo de aire fresco que funciona bien sin cambiar la esencia del personaje.

Pese a que la premisa avanza tomándose su tiempo, el resto del cómic está lleno de contenido, así que no os preocupéis por encontrar el temido y odiado estilo decompressive, porque no lo hay. Hay peleas, a puñetazos y con ingenio, diálogos chispeantes, un villano explicando su plan diabólico, sorpresas y momentos de pura angustia. Todo ello sin resultar apresurado, dedicando a cada escena el tiempo que necesita para funcionar, para causar el mayor impacto en el lector. De lectura ágil, cargado de acción y momentos muy conseguidos, este segundo número de Imposibles Vengadores consigue con creces enganchar al lector a la colección con la promesa de grandes aventuras, personajes bien caracterizados, un guion sólido y una narración entretenida.

Cráneo Rojo encaja muy bien como villano manipulador y taimado, sobre todo si atendemos a sus explicaciones de porqué ha escogido el nuevo modus operandi. Por una parte puede resultar predecible –sus intenciones son transparentes desde su primera aparición– y pecar de villano genérico, pero en su simplicidad está su grandeza: encarna un concepto claro que le permite posicionarse como antagonista de aquel que abanderan los héroes –una sociedad en armonía frente a una sumida en el miedo–; sus acciones lo dibujan como alguien truculento, sin escrúpulos; sus líneas de diálogo son amenazadoras sin caer demasiado en la grandilocuencia y por último, la sorpresa final es una salvajada. Una salvajada impactante, demoledora, que abraza sin tapujos ese elemento de ciencia ficción llevada al límite de los cómics de superhéroes. Realmente te deja sin aliento. Cuando parecía que Cráneo Rojo había llegado a su límite de crueldad, coge Remender y sube la temperatura. Genial.

No tan genial es el dibujo. Vale, es Cassaday, pero es Cassaday con el piloto automático. Se nota que la periodicidad mensual le pasa factura en un trazo más rápido, descuidado, unas proporciones que a veces no terminan de convencer, ojos demasiado grandes en caras demasiado pequeñas. Tiene las mismas buenas ideas en cuanto a planos y narrativa que siempre: se nota que la concepción de cada viñeta es excelente, que está pensada para lograr el máximo efecto, para fortalecer la narración, para trabajar codo con codo junto a la historia… Pero el acabado podría ser mejor. No es feo ni mucho menos, pero Cassaday da para mucho más.