¡Bienvenidos a una nueva entrega de Mundo independiente! La semana pasada nos tomamos un respiro para recuperar reseñas que ya hacía tiempo que teníamos guardadas en un cajón y también porque el lunes 4 de noviembre, Zona Negativa dio un paso de gigante en su aventura editorial con la publicación de Zona Negativa, la revista: Especial Superman (y los encargados de la zona independiente elegimos un perfil bajo para el martes siguiente para que los lectores pudieseis descargar y leeros la revista con tranquilidad). Si sois de los despistados que aún no os habéis enterado de esta iniciativa os recomiendo que echéis un vistazo al link que os acabo de poner porque la revista digital de Zona Negativa se estrenó con un especial sobre el Hombre de Acero que recogía reseñas y artículos previamente publicados en la web y que merecen muy mucho la pena. Además, entre ellos se incluía el mega artículo El hombre de Acero y los cómic que os ofrecimos Javier Agrafojo, Jordi T. Pardo y un servidor; y justamente en ese especial os hablamos largo y tendido sobre las etapas de John Byrne en los tebeos del kryptoniano….
En el anterior especial de John Byrne al detalle vimos cómo éste desarrolló una longeva y prolífica etapa en la Casa de las Ideas, pero un buen día saltó una noticia que dejó con la boca abierta a todo el mundo: ¡John Byrne abandonaba Marvel! Tal como dijeron en el núm. 43 de Comics Feature (abril, 1986): «en una jugada que pilló al fandom completamente por sorpresa, John Byrne ha abandonado Marvel y se ofrece como freelance. (…) Hubo indicaciones de algunos conflictos entre bambalinas cuando Byrne no renovó su contrato con Marvel y se convirtió en un freelance residente. El primer efecto de esto ocurrió cuando Byrne dejó su muy popular versión de The Hulk después de unos pocos números mientras DC anunciaba simultáneamente que Byrne tomaría el mando de Superman en el verano de 1986 con un completo relanzamiento (…) El anuncio de DC del ‘nuevo Superman’ incluso se trató en los noticieros televisivos, con entrevistas en pantalla con Byrne en su estudio«.
¿Qué sucedió entre Marvel y Byrne para que éste abandonase la editorial que lo había llevado al estrellato? Hay muchas versiones de esa historia, pero nosotros nos quedaremos con dos, la versión de Jim Shooter y la de John Byrne. Vayamos primero con la más polémica de las dos, la del antiguo editor en jefe de Marvel Comics, que nos explicó lo sucedido con todo lujo de detalles en esta entrevista de CBR:
«A las personas creativas no les gusta que les digan ‘no’. Y si un chico tiene talento y está haciendo cómics que no están a su nivel, lo sabes y se lo dices, y a él no le gusta. Hay un montón de chicos que me han llamado hijo de puta. Si lo piensas bien, ellos estaban haciendo un mal trabajo y yo me estaba quejando. Puedo pensar en unos cuantos nombres que llegaron a ser grandes y exitosos y que frustraron a mucha gente… Yo tenía los mismos estándares ya fueses John Byrne o alguien nuevo. No voy a permitir que se haga escritura barata.
Y ellos decían, ‘pero soy John Byrne‘. Vale, muy bien, haz un buen trabajo. Para mí todo era sobre los tebeos. No creo que lo pillasen. Un montón de gente no lo entendía, pensaban que tenía que ir sobre otra cosa. Que yo era un megalómano. Tenía que ser que yo tenía un plan oculto. Mi meta era hacer un buen trabajo, mejor que el de cualquier otro anteriormente.
También te encuentras esas cosas. Chris Claremont y John Byrne. Chris fue el que realmente metió a John allí. Chris era grande. Luchábamos como perros y gatos, y estoy seguro que me odiaba. Pero le doy el crédito que se merece. Él es el que fundó la franquicia de la Patrulla-X. Él contrató artistas cuando era necesario. Para mantener los mejores coloristas y rotulistas, pagó a gente de su propio bolsillo. Realmente metió su corazón en eso.
Si editabas algo, no tocabas su copia. Hacías una nota en el margen, y él arreglaba el problema con sus propias palabras. Él no quería tus palabras, quería las suyas. Y yo lo respetaba. Pero no tenía problemas en decirle lo que yo creía que estaba mal.
Y él tenía buenos editoras, Ann Nocenti y Louise Simonson. Le pegaban de manera regular. Tienes que respetar la integridad. Así que nos peleábamos todo el rato.
Él trajo a John Byrne allí. Tuvieron una pelea. Así que John Byrne marchó a hacer Alpha Flight y otras cosas. Chris consigue otros artistas y sigue con X-Men. En algunos de los otros tebeos que estaba haciendo, Fantastic Four, Alpha Flight, lo que sea, John hacía aquellas historias… como si Chris estaba usando a Doctor Doom en una historia de X-Men, entonces John hacía una historia que demostraba que el Doctor Doom que Chris había usado era un robot. Y tenía comentarios arrogantes, como crees que habría dicho algo tan estúpido como lo que dijo el robot. Eso sucedía un montón.
Entonces Chris quiso contraatacar. Pero Chris tenía mejores editoras que estaban más por la labor. John, creo que intentaba buscar editores con los que podía salirse con la suya con este tipo de cosas. Weezi o Ann dirían algo como, no, Chris, no puedes hacerlo. Así que él se frustaba y me gritaba a mí y me decía ‘ese hijo de puta hizo esto y tu no me dejas contratacar’. Yo decía, ¡Chris, piensa que estos son los tebeos de cualquier otro. No son tuyos y no puedes contraatacar’.
Entonces me iba a gritar a John, y él se volvía loco. Y aquí me estaba metiendo entre esos chicos que estaban cortándose las gargantas el uno al otro en los cómics de los que yo era responsable. Vamos, chicos, Jesús.
Esos sucedía todo el tiempo.
Entonces Bill Mantlo entra en mi oficina y está teniendo una guerra grandiosa con quien quiera que fuese su editor en aquellos momentos. Me insiste en que quiere hacer una historia en la que Spider-man es el padre de un hijo ilegítimo y yo le digo que no. Sabes qué, haz la misma historia, llámalo Hombre Arácnido, y hazla para Epic. Y todo el mundo sabrá que es realmente Spider-Man. Él dijo ‘¿por qué no?’ Yo dije, ‘mira, hemos licenciado Spider-Man para Underroos. Tenemos cosas en el contrato que dicen que no haremos cosas como esta’ Le dije, ‘¿Puedes imaginar, en un día sin noticias, que el presidente de Union underwear se despierta y allí en CNN están hablando de Spider-man siendo el padre de un bastardo? Todos desde Bible Belt a Underroos se marcharán… La gente que posee esta compañía me han contratado para evitar que tú hagas cosas como estas. Hazlo en la línea adulta de Epic. Estos no son nuestros personajes y no podemos fastidiarlos así. Tenemos obligaciones. Yo no las he puesto, pero están ahí’.
Estaba fuera de sí y se hizo el digno. Hizo una entrevista sobre cómo le negaba su libertad creativa. ¿Sabes qué? Sí. Lo hice. Y lo haría otra vez… Siempre intenté tomar las mejores decisiones cuando tenía que hacerlo. Jamás hice ninguna en mi pripio interés. Si la gente cree que tenía un plan, ¿Qué conseguí? No encontrarás ningún incidente en el que haya hecho algo a John Byrne y me haya aprovechado de eso.
No había recompensa, solo gritos. No hay ejemplos. El único beneficio, el único fruto que alguna vez tomé, fueron las Secret Wars. ¿Sabes por qué? Tenía a todos los personajes allí y pensé en que lo escribiese algún otro. Pero no importaba quién eligiese, me habrían gritado. Porque me habrían dicho ‘¿Vas a dejar que John Byrne o Chris Claremont escriban mis personajes? ¡Bla, bla, bla!’
Básicamente necesitaba a alguien neutral o alguien a quien ya odiasen. Así que dije, lo haré yo. Soy el único que tiene la autoridad para hacerlo. ‘Chris, crees que los X-Men son tus niños, pero la verdad es que los propietarios de la compañía me los han dado a mí. Te respeto y haré lo mejor que pueda con ellos. Por definición, lo que voy a hacer es correcto y ayúdame si quieres o grítame si quieres, pero al menos de esta manera, no tendré otra guerra entre tu y Michelinie o tú y Byrne. Al menos, hará las decisiones quién debe tomar decisiones’ «…
Quizás me he excedido un poco con las declaraciones de Jim Shooter, pero a pesar de su extraña elección de tiempos verbales, me parece que su forma de explicar las cosas es muy ilustrativa de cómo funcionan las compañías y nos responde una de las grandes preguntas de la marcha de Byrne: sí, hubo tiranteces. Pero tampoco exageremos, que a Shooter le pagaban para que todo el mundo lo odiase.
Veamos ahora las palabras de John Byrne, extraídas del Vol. 7 de Modern Masters: «Tenía ese contrato en exclusiva con Marvel y se terminó… no sé por qué. Creo que sentía que era el momento de dar el salto«.
«Se rumorea» que hace unos años, John Byrne dejó bien claro que no quería que se diese eco a los presuntos problemas con Jim Shooter e incluso entró en una batalla con Wikipedia para eliminar todas las controversias de su entrada sin tener en cuenta que todo lo que allí se decía había sido cuidadosamente documentado. El gran jefe detrás de la enciclopedia virtual tuvo que reescribir él mismo la entrada de Byrne según los gustos de éste. O sea que… Digamos que Byrne jamás se peleó con nadie y marchó de Marvel sin ningún motivo aparente…
Así que pasemos de tema y vayamos a la entrada de John Byrne en DC Comics. ¿Cómo consiguió que le contratasen para escribir el Hombre de Acero? Pues según él mismo confiesa en el Vol. 7 de Modern Masters, llevaba años criticando a DC por no hacer lo correcto con el kryptoniano, así que un buen día, prácticamente el mismo en el que finalizó su contrato con Marvel, Dick Giordano lo llamó y le dijo «Muy bien, chico listo. Demuestra lo que vale tu boca. Vamos a comenzar de cero con Superman. Dinos qué quieres hacer«. Byrne hizo su lista de 20 peticiones irrazonables y se ve que les gustaron 19 cosas. Lo único que rechazaron fue que Byrne quería que la madre de Superman sobreviviese con su hijo, que llegase a la Tierra y muriese envenenada por la kryptonita, única y exclusivamente para que justificar el poder letal de la kryptonita.
A continuación desgranaremos los trabajos de esta era al estilo Al Detalle. Solo un apunte rápido. Aunque se rumoreó en su día que Byrne marchaba a DC por el dinero, lo cierto es que por aquel entonces no se sabía que Byrne iba a relanzar a Superman de una manera tan exitosa. Los tebeos DC de por aquel entonces – Superman inclusive – vendían menos que los de Marvel, de manera que los beneficios que iba a conseguir el artista iban a ser menores, menos aún si tenemos en cuenta que Byrne no iba a entintar Superman, por lo que no cobraría por ese trabajo extra. Por lo tanto, es fácil decir que Byrne marchó a DC para hacerse rico ahora que sabemos que su miniserie vendió millones. Pero no es así. En este caso sí le doy el beneficio de la duda.
Antes del famoso relanzamiento de Superman, John Byrne fue calentando motores en estos otros títulos:
Deadman #4 (junio, 1986) (DC Comics)
Título original: Circle of Fire
Escrito por: Andrew Helfer
Dibujado por: José Luis García-López.
John Byrne firma la portada junto a José Luis García-López. No es un trabajo nada importante, pero lo nombro por ser el primero de esta etapa.
The New Teen Titans Annual #2 (agosto, 1986) (DC Comics)
Título original: Revenge of the Rusting Reptiles from Outer Space!
Escrito por: John Byrne, Marv Wolfman.
Dibujado por: John Byrne.
Además de esta historia, el anual se complementaba con otra escrita por Wolfman y dibujada por Jim Baikie.
The Outsiders #11 (septiembre, 1986) (DC Comics)
Título original: All About Halo’s Auras
Escrito por: Mike W. Barr.
Dibujado por: John Byrne.
A la historia principal de Barr y Jim Aparo venía acompañada de dos historias cortas. La primera, de Byrne, ocupó 4 páginas y estuvo protagonizada por Halo. La segunda, de Trevor Howard von Eeden fue algo más larga y se centraba en Katana.
Who’s Who: The Definitive Directory of the DC Universe #19 (septiembre, 1986) (DC Comics)
Título original: Robotman
Dibujado por: John Byrne.
En la colección de fichas de DC, Byrne se ocupó de la de Robotman.
Batman #400 (octubre, 1986) (DC Comics)
Título original: Resurrection Night!
Escrito por: John Byrne y otros.
Dibujado por: John Byrne y otros.
Byrne participó en este especial aniversario escrito por Stephen King y Doug Moench, y dibujado por Arthur ‘Art’ Adams, Brian Bolland, Paris Cullins, Joe Kubert, Steve Leialoha, Rick Leonardi, Steve Lightle, George Pérez, Bill Sienkiewicz, Ken Steacy y Tom F. Sutton.
Además, Byrne hizo la portada del siguiente ejemplar de Batman y la del núm. 35 de Vigilante.
The Man of Steel #1 a #6 (octubre, 1986 a diciembre, 1986) (DC Comics)
Títulos originales: From Out of the Green Dawn (#1)
The Story of the Century! (#2),
One Night in Gotham City… (#3),
Enemy Mine… (#4),
The Mirror, Crack’d (#5),
The Haunting (#6).
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: John Byrne
Action Comics #584 a #597 (enero, 1987 a febrero, 1988) (DC Comics)
Títulos originales: Squatter! (#584)
And Graves Give Up Their Dead… (#585),
The Champion! (#586),
Cityscape! (#587),
All Wars Must End Part Two (#588),
Green on Green (#589),
Better Dying Through Chemistry (#590),
Past Imperfect (#591),
…A Walk On The Darkside! (#592),
The Suicide Snare (#593),
All That Glisters (#594),
The Ghost of Superman (#595),
Hell is Where The Heart Is… (#596),
Visitor (#597).
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: John Byrne
Action Comics #598 (marzo, 1988) (DC Comics)
Título original: Checkmate!
Escrito por: John Byrne, Paul Kupperberg
Dibujado por: John Byrne
Action Comics #599 (abril, 1988) (DC Comics)
Título original: Element 126
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: Ross Andru
Action Comics #600 (mayo, 1988) (DC Comics)
Título original: Different Worlds
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: John Byrne
Action Comics #600 (mayo, 1988) (DC Comics)
Título original: Games People Play
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: Dick Giordano
Action Comics #600 (mayo, 1988) (DC Comics)
Título original: A Friend In Need
Escrito por: John Byrne, Roger L. Stern
Dibujado por: Curt Douglas Swan
Action Comics #600 (mayo, 1988) (DC Comics)
Título original: The Dark Where Madness Lies
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: Mike Mignola
Action Comics #600 (mayo, 1988) (DC Comics)
Escrito por: John Byrne, Roger L. Stern
Dibujado por: Kurt Schaffenberger
Action Comics Annual #1 (1987) (DC Comics)
Título original: Skeeter
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: Arthur ‘Art’ Adams
Superman #1 a #17 (enero, 1987 a mayo, 1988) (DC Comics)
Títulos originales: Heart of Stone (#1)
The Secret Revealed! (#2),
Legends from the Darkside (#3),
BLOODSPORT! (#4),
The Mummy Strikes (#5),
The Last Five Hundred (#6),
RAMPAGE! (#7),
Future Shock (#8),
To Laugh and Die in Metropolis (#9),
Metropolis 900 Mi (#9),
The Super Menace of Metropolis (#10),
The Name Game (#11),
Lost Love (#12),
Toys In the Attic (#13),
Last Stand (#14),
Wings (#15),
He Only Laughs When I Hurt! (#16),
Cries in the Night (#17).
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: John Byrne
Superman #18 (junio, 1988) (DC Comics)
Título original: Return to Krypton
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: Mike Mignola
Superman #19 a #22 (julio, 1988 a octubre, 1988) (DC Comics)
Títulos originales: The Power that Failed (#19)
Doom in the Heartland! (#20),
You Can’t Go Home Again (#21),
The Price (#22).
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: John Byrne
Superman Annual #1 (1987) (DC Comics)
Título original: Tears for Titano!
Escrito por: John Byrne, Ronald ‘Ron’ Frenz
Dibujado por: Ronald ‘Ron’ Frenz
Superman Annual #2 (1988) (DC Comics)
Título original: Love’s Labors…
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: John Byrne
Adventures of Superman #426 (marzo, 1987) (DC Comics)
Título original: From the Dregs
Escrito por: John Byrne, Jerry Ordway, Marv Wolfman
Dibujado por: Jerry Ordway
Adventures of Superman #436 y #437 (enero, 1988 y febrero, 1988) (DC Comics)
Títulos originales: Junk (#436),
Point of View (#437).
Escrito por: John Byrne, Jerry Ordway
Dibujado por: Jerry Ordway
Adventures of Superman #438 (marzo, 1988) (DC Comics)
Título original: The Amazing Brainiac
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: Jerry Ordway
Adventures of Superman #439 a #442 (abril, 1988 a julio, 1988); y #444 (septiembre, 1988) (DC Comics)
Títulos originales: Tin Soldiers (#439),
The Hurrieder I Go (#440),
The Tiny Terror of Tinseltown (#441),
Power Play (#442),
Parallel Lives Meet at Infinity… (#444).
Escrito por: John Byrne, Jerry Ordway
Dibujado por: Jerry Ordway
Superman: The Earth Stealers OGN (1988) (DC Comics)
Título original: The Earth Stealers
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: Curt Douglas Swan
World of Krypton #1 a #4 (diciembre, 1987 a marzo, 1988) (DC Comics)
Títulos originales: Pieces (#1),
After The Fall (#2),
History Lesson (#3),
Family History (#4).
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: Mike Mignola
World of Smallville #1 a #4 (abril, 1988 a julio, 1988) (DC Comics)
Títulos originales: Secrets (#1),
Stolen Moments (#2),
Stolen Souls (#3),
Return To Smallville (#4).
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: Kurt Schaffenberger
World of Metropolis #1 a #4 (agosto, 1988 a noviembre, 1988) (DC Comics)
Títulos originales: A Reporter’s Story (#1),
«How I Spent My Summer Vacation (#2),
Mr. Kent Goes To Metropolis! (#3),
Friends in Need (#4).
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: James Winslow Mortimer
Para ilustrar esta etapa citaremos parte del texto de Javier Agrafojo del Especial Superman 75º Aniversario – El Hombre de Acero y los cómics : «Byrne salió airoso del reto. Entregó una notable reinvención del personaje (y su mundo), con abundantes aciertos que perduraron durante años. La potencia de su versión enmascaró también ciertos deslices, a veces no tan insignificantes como parecieron en un primer momento. Pero el saldo fue indiscutiblemente positivo. A día de hoy sigue siendo uno de los mejores trabajos del autor. (…) A lo largo de sus casi cinco décadas de existencia no había una visión unívoca del Hombre de Acero; algunas eran incluso antitéticas.
Byrne tiró por la más unánimemente alabada en esas fechas (y aún hoy): el Superman interpretado por Christopher Reeve. El autor creía que ‘el error que DC ha cometido frecuentemente es hacer que personajes únicos dejen de serlo. En Superman, estoy luchando con uñas y dientes para que él siga siendo único. A veces parecía que los miembros del Consejo Científico habían sido los únicos que murieron en Krypton, y que todos los demás sobrevivieron y llegaron a la Tierra: Supergirl, Krypto, los criminales de la Zona Fantasma, los habitantes de Kandor… ‘. En efecto, a fines de los 60 casi parecía que sólo habían muerto Jor-El y Lara, y aún a estos los visitaba con frecuencia en sueños, viajes en el tiempo o historias imaginarias. Así que Byrne dice: fuera todo eso. Empecemos de cero, recuperemos el personaje original. (…)
La etapa Byrne, al incluir los números de Action Comics (…), se hace variada y amena, aunque leída en su conjunto tampoco parece que progrese en una dirección definida. Consta, en su mayoría, de episodios autoconclusivos o en dos partes. Hizo algún remake, como la historia de Lori Lemaris (basada en Superman #129), escribió un prestigio (Los ladrones de la Tierra, con Curt Swan) y también miniseries (como Mundo de Krypton, Mundo de Smalville, etc.). De vez en cuando se suelta con alguna de las suyas, como el capítulo del vídeo erótico con Big Barda con la excusa de una manipulación mental, pero le queda bastante impostado. Más gracia hace que ‘un beso que parecía que’ se daba con Wonder Woman en un sueño hiciera correr ríos de tinta y fundamentara un cruce con la colección de la amazona, entonces en las capaces manos de George Perez«.
Tal como indica mi compañero, la etapa de Byrne asentó las bases del personaje para los años venideros y supuso un punto de inflexión para el hombre de acero. El debut de la primera miniserie de Byrne vendió la friolera de dos millones de ejemplares, con lo que el kryptoniano pasó a gozar de más salud que nunca. El canadiense se dedicó a ilustrar y guionizar todas las series de Superman del momento, con bastantes proyectos especiales… Y cualquiera diría que en DC Comics estaban contentos, pero no fue así. Tal como explica el mismo Byrne en el Vol. 7 de Modern Masters: «hice todo lo que quise pero en general fue una experiencia negativa, principalmente porque DC se puso como loca al primer signo de prensa negativa. Algo que, por supuesto, empezó seis meses antes de que saliese a la luz el primer número, y nadie había visto nada de él. Pero se enteraron de que lo iba a hacer. De que lo íbamos a hacer. ‘Íbamos a cambiar a Superman’ (…) Los fans se volvieron locos. Los fans se pusieron furiosos. Y DC dio marcha atrás. Me di cuenta de que estaba en problemas cuando Dick Giordano me dijo ‘Bien, estamos haciendo dos superhombres ahora mismo, ¿no? El que está en tus tebeos y el que está en el tercer cómic. Y yo dije ‘bueno, no, se supone que es el mismo’ Marv solo duró un año. pero sí, estaba siendo atacado constantemente por los fans, y DC no me defendía. Me dijeron que apoyaban todo lo que hacía, todo se aprobaba, todo tenía luz verde. Absolutamente nada pasó sin el escrutinio editorial (…) «.
Y ahora citaremos dos reseñas de la edición de ECC que recopila todos estos tebeos, ambas de Alejandro Ugartondo. La primera corresponde al Vol. 3 y dice «Los números de la colección de Superman son los más destacados tanto a nivel de argumento como de dibujo. En ellos Byrne nos presenta aventuras autoconclusivas de uno o dos episodios donde el artista continúa explorando los poderes y el entorno de Superman tras las Crisis. De esta forma intenta dejar claro que Superman ya no es el ser casi omnipotente en que se había convertido a lo largo de los años a base de acumular poder sino que es un ser muy poderoso pero con sus limitaciones. Prueba de esto son las dificultades que tiene pare derrotar por la fuerza a sus rivales de las dos primeras historias y que tenga que recurrir a artimañas para conseguirlo. Más evidente se hace este punto en los números correspondientes al cruce con la Legión de los Superheroes donde queda patente que la gama de poderes se Superman ya no es la que tenía antes de la Crisis.
Los números correspondientes a Action Comics siguen funcionando como una especie de colección de team ups, donde en cada número Superman debe hacer pareja con algún otro superheroe para enfrentarse a la amenaza de turno. (…)
Una cosa que me llama la atención de los guiones de John Byrne en estas series es su estilo clásico, entendiendo clásico por antiguo en el sentido de que las historias son bastante simples y de un desarrollo prácticamente lineal. Casi todas las historias están cortadas por el mismo patrón: Superman se cruza por casualidad con alguna amenaza, que normalmente está relacionada de algún modo con Lois Lane, y resuelve el problema a base de tortazos o de alguna treta conseguida gracias a alguno de sus superpoderes. Es un tipo de historia demasiado esquemático que no permite crear una trama que articule la serie. Además el desarrollo de personajes que hace Byrne no es muy elaborado y no aprovecha bien el reparto de secundarios de la serie para explorar a fondo las relaciones entre ellos. Es por este motivo, que 25 años después de su publicación estas historias hayan envejecido un poco mal y que puedan resultar demasiado simples al lector de hoy en día.
(…)
Lo que Byrne sí domina, y lo demuestra con creces en este tomo, es el apartado del dibujo. Ya tiene mérito que el canadiense sea capaz de mantener el ritmo de dibujar dos series mensuales de forma simultánea, pero es que el nivel mostrado en ambas series es para quitarse el sombrero. En Superman, las tintas de Karl Kesel dan un acabado muy limpio y definido al lápiz de Byrne lo que hace que luzca mucho mejor que el entintado más clásico de Dick Giordano en Action Comics. Aunque se nota que la serie donde Byrne dedicaba más esfuerzos era Superman y de ahí que el resultado de esta última sea más satisfactorio«.
La segunda corresponde al Vol. 5 y dice cosas como «Los guiones de Byrne en todas estas historias siguen la misma tónica que tomó desde el inicio de su etapa con historias cortas y sencillas, de carácter bastante aventurero y ligero en contraposición con las historias más complejas y oscuras que estaban realizando otras estrellas de la época como Frank Miller o Alan Moore. Quizás este enfoque haya hecho que estos números no hayan envejecido tan bien como otros de la misma época pero continúan siendo cómics bien hechos y entretenidos que se disfrutan con facilidad»
Legends #1 a #6 (noviembre, 1986 a abril, 1987) (DC Comics)
Títulos originales: Once Upon A Time…! (#1)
Breach of Faith! (#2),
Send For… The Suicide Squad! (#3),
Cry Havoc…! (#4),
Let Slip The Dogs Of War! (#5),
Finale! (#6).
Escrito por: John Ostrander, Len Wein
Dibujado por: John Byrne
A mediados de los años ochenta, DC Comics revolucionó el mundo con la publicación de Crisis en tierras infinitas, la maxisaga que destruyó el multiverso DC y marcó un nuevo punto de partida para los tebeos de aquella casa. El éxito fue tan grande que obviamente se iba a hacer todo lo posible por repetir la experiencia, así que solo un año después salió a la venta Legends, el evento de 1987. Para hablaros sobre la serie en general citamos parte del texto de Sergio Pradera que se publicó en la edición española de Ediciones Zinco…
«Como casi todos los proyectos editoriales en DC, todo empezó con una llamada telefónica de Dick Giordano, vice-presidente y editor ejecutivo de la compañía. (…) La propuesta de Giordano era simple, directa y sugerente. Pero todo un desafío: crear una miniserie espectáculo al estilo de Crisis, con la intervención de los más populares héroes DC, cuyo objetivo sería abrir nuevos caminos, redefinir el carácter de algunos personajes y servir de plataforma a nuevas colecciones. Giordano sugirió que trabajaran en su creación dos guionistas, uno con suficiente experiencia profesional a la hora de escribir diálogos y otro con savia nueva para el plot (argumento global), que diera a los personajes un enfoque fresco y vitalmente distinto. Los elegidos fueron Len Wein y John Ostrander.
En las sesiones creativas que siguieron, surgieron algunas ideas que más tarde germinarían en la concepción de Legends. Por ejemplo, se acordó emplear un número limitado de personajes, en especial aquellos que tuvieran cierto status de ‘leyendas’ en el universo DC. (…)
Una vez solventados los problemas (…) se empezó a buscar al dibujante que la realizaría. En un principio se pensó en Jerry Ordway, que ya había intervenido en Crisis, pero en aquelo momento estaba muy ocupado con unos episodios de Los 4 Fantásticos para Marvel. Gold Consultó a Dick Giordano, jugó fuerte y se puso en contacto con John Byrne que entonces se encargaba de Action y Superman. John pidió leer el plot y aceptó, pero a condición de que fueran máximo 6 números y no sobrecargarse así de trabajo. Gold habló con Ostrander y estuvieron de acuerdo. Afortunadamente, Legends se había pensado para que fuera distinta a Crisis, dando cabida a paneles mayores, así que no hubo dificultad en condensar la acción, conservando íntegra la historia«.
Legends se convirtió en la segunda maxiserie de la era post-crisis de DC Comics y conectó varias colecciones, siendo los cruces más relevantes los de la Liga de la justicia de América, pues Legends marcó el fin de la denostada etapa Detroit. También sirvió de presentación a nuevos y/o remozados personajes. Tras la publicación de la saga, Flash, el Escuadrón Suicida y la Liga vivieron nuevas y aplaudidas etapas.
Por lo que respecta a Byrne, Legends es importante en su carrera ya que le permitió dibujar de una sentada a los personajes más relevantes de DC Comics.
Y estas son las dos obras más grandes de Byrne en DC Comics. No son muchas, ¡¡¡pero es que son muy importantes!!! Como Byrne no firmó un contrato en exclusiva, sino que continuó trabajando de freelance, alternó estos trabajos con varios otros.
Dibujó (solo o en compañía) las portadas de G.I. Joe: A Real American Hero #51, Hawkman #10, Legion of Super-Heroes #36, The Last of the Viking Heroes #3, Booster Gold #23, G.I. Joe Comics Magazine #7, Batman Annual #11, The Amazing Spider-Man #296 y Christmas with the Super-heroes #1.
Y participó en:
Marvel Fanfare #29 (noviembre, 1986) (Marvel Comics)
Título original: A Terrible Thing To Waste…
Escrito por: John Byrne.
Dibujado por: John Byrne.
Una historia de la Masa.
Who’s Who: The Definitive Directory of the DC Universe #22 (diciembre, 1986) (DC Comics)
Título original: Superman
Dibujado por: Curt Douglas Swan.
Además de la portada, Byrne se ocupó de la tinta de la ficha de Superman.
Who’s Who: The Definitive Directory of the DC Universe #24 (febrero, 1987) (DC Comics)
Título original: Titano
Dibujado por: John Byrne.
Era lógico que Byrne se ocupase de un simio que él usó en un anual.
Who’s Who in Star Trek #1 y #2 (marzo, 1987 y abril, 1987) (DC Comics)
Escrito por: Allan Asherman.
Dibujado por: John Byrne.
En esta ocasión, Byrne se encargó de los lápices de bastantes personajes. En el #1 dibujó a David Bailey, Hortas, Iotians y Khan Nooniah Singh. En el #2, Harry Mudd y Sarek.
Who’s Who Update #1, #3 a #5 (agosto, 1987, octubre, 1987 a diciembre, 1987) (DC Comics)
Dibujado por: John Byrne.
En esta ocasión, Byrne se encargó de los lápices de bastantes personajes. En el #1 dibujó a Amazing Grace, Bizarro y Bloodsport. En el #3, Host, Krypton & kryptonite y Lex Luthor. En el #4, Lois Lane, Magpie, Metallo y Rampage!. En el #5 dibujó a Superboy y entintó a Titano.
Green Lantern Annual #3 (1987) (DC Comics)
Título original: Many are Called…
Escrito por: John Byrne.
Dibujado por: John Byrne.
Byrne fue el autor completo de una historia de complemento en un anual cuyo plato fuerte era una narración de Alan Moore dibujada por Bill Willingham.
Secret Origins Annual #1 (1987) (DC Comics)
Título original: The Secret Origin of the Doom Patrol!
Escrito por: Paul Kupperberg.
Dibujado por: John Byrne.
Además de la portada, Byrne dibujó el origen de la Patrulla Condenada, algo bastante importante teniendo en cuenta el relanzamiento del grupo de aquellos años que, curiosamente, acabó en el cruce con Invasión y dio inicio a la etapa Morrison.
Star Brand #11 a #19 (enero, 1988 a mayo, 1989) (Marvel Comics)
Título original: Celebrity (#11),
Farewell, Pittsburgh (#12),
Ghosts (#13),
Sins of the Father… (#14),
Let There Be Life… (#15),
Death – Where is Thy Sting? (#16),
The Big Fix (#17),
We, the People (#18),
Finale (#19).
Escrito por: John Byrne.
Dibujado por: John Byrne.
Star Brand fue una cabecera de un experimento fallido por parte de Marvel Comics de crear un nuevo universo superheroico. Byrne llegó en el núm. 11 dispuesto a relanzar la serie, pero no lo consiguió. La cabecera se despidió en el #19. En esta ocasión hablamos de un título de cadencia bimestral. Por cierto, todos los números están escritos y dibujados por Byrne, pero del #14 al #18, la historia principal de Byrne venía acompañada de complementos firmados por otros. En el #17 y #18, además, Tom Morgan ayudó a Byrne en los lápices.
Marvel Graphic Novel: The Pitt OGN (marzo, 1988) (Marvel Comics)
Título original: The Pitt
Escrito por: John Byrne, Mark Gruenwald.
Dibujado por: Sal Buscema.
What The–? #2 (septiembre, 1988) (Marvel Comics)
Título original: Superbman vs. the Fantastical Four
Escrito por: John Byrne.
Dibujado por: John Byrne.
Esta era una publicación humorística de Marvel en formato antología. Además de Byrne, en este cuaderno participaron gente como Al Milgrom, Mike Mignola y Terry Austin, entre otros.
Who’s Who Update ’88 #2 (septiembre, 1988) (DC Comics)
Dibujado por: John Byrne.
Volvemos a las fichas. Ahora Lori Lemaris y Mr. Mxyzptlk.
Power of the Atom #6 (invierno, 1988) (DC Comics)
Título original: Time, Time, Time, – – See What’s Become Of Me
Escrito por: Roger L. Stern.
Dibujado por: John Byrne.
X-Factor Annual #3 (1988) (Marvel Comics)
Título original: X-Factor: A Marvelous Mini-Gallery
Dibujado por: John Byrne.
Como el título indica, Byrne solo hace un dibujo para una galería. Le acompañan ilustraciones de David Mazzucchelli, Jerry Ordway y Walter Simonson.
Christmas with the Super-heroes #2 (1989) (DC Comics)
Título original: Silent Night
Escrito por: John Byrne.
Dibujado por: John Byrne.
En este especial navideño lleno de historias cortas también participaron Eric Shanower, Dave Gibbons, Paul Chadwick y Colleen Doran, entre otros.
Ya hemos visto que John Byrne triunfó a nivel ventas en DC Comics, pero la experiencia no fue todo lo placentera que habría deseado porque los chicos de la Distinguida Competencia no lo defendieron ante las hordas de fans que se quejaban por su tratamiento hacia el Hombre de Acero. Los años DC no fueron lo esperado, de manera que Byrne volvió a Marvel con la cola entre las piernas. Y empezó con una obra pequeña antes de encargarse de su primer gran encargo post DC:
Captain America #350 (fenbrero, 1989) (Marvel Comics)
Título original: Resurrection
Escrito por: Mark Gruenwald.
Dibujado por: John Byrne.
Byrne sólo se encargó del dibujo de una de las historias de complemento de este especial.
West Coast Avengers #42 a #57 (marzo, 1989 a abril, 1990) (Marvel Comics)
Títulos originales: VisionQuest, Part One: One of Our Androids is Missing! (#42)
VisionQuest, Part Two: Vision Quest (#43),
VisionQuest, Part Three: Better a Widow… (#44),
VisionQuest, Part Four: New Faces (#45),
Franchise (#46),
With Friends Like These! (#47),
This Ancient Evil (#48),
Baptism of Fire! (#49),
Return of the Hero (#50),
I Sing of Arms and Heroes… (#51),
Fragments of a Greater Darkness (#52),
The Plan Proceeds! (#53),
The Troubled Earth (#54),
The Breaking Strain (#55),
Darker Than Scarlet (#56)
Family Reunion (#57).
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: John Byrne
West Coast Avengers Annual #4 (1989) (Marvel Comics)
Título original: Gather Now Ye 7 Brides!
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: John Byrne
Nota: además de la historia principal, el anual incluía 4 historias complementarias. Byrne solo se ocupó de la principal.
The Avengers #305 a #310 (julio, 1989 a noviembre, 1989) (Marvel Comics)
Títulos originales: Avengers Assemble! (#42)
There is a Fire Down Below (#43),
Metamorphosis (#44),
Journey (#45),
To Find Olympia! (#46),
Death in Olympia! (#47).
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: Paul Ryan
The Avengers #311 (diciembre, 1989) (Marvel Comics)
Título original: The Weakest Point
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: Paul Ryan, Tom Palmer.
The Avengers #312 a #316 (diciembre, 1989 a abril, 1990) (Marvel Comics)
Títulos originales: Has the Whole World Gone Mad?!? (#312)
Thieves Honor (#313),
Along Came a Spider… (#314),
Doomsday Plus One! (#315),
Spiders and Stars (#316).
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: Paul Ryan
The Avengers #317 (mayo, 1990) (Marvel Comics)
Título original: Business as Usual
Escrito por: John Byrne, Fabian Nicieza.
Dibujado por: Paul Ryan.
The Avengers Annual #18 (1989) (Marvel Comics)
Nota: de este anual, Byrne solo firma la portada.
La primera gran colección de John Byrne en su retorno a Marvel fue Avengers West Coast, pero podría haber sido X-Men Hidden Years. En realidad debería haber sido esa, pero Tom DeFalco pensaba que otro título de la Patrulla-X sería demasiado confuso y mató la serie antes siquiera de tomar forma. Así que después de haber escrito y/o dibujado a los héroes más grandes tanto de Marvel como de DC Comics, Byrne se vio relegado a un título ciertamente menor, aunque lo hizo a lo grande. Steve Englehart y Al Migron fueron los autores encargados de los primeros 39 números de esta cabecera, en unos episodios de un tono clásico, por no decir aburrido. Mark Gruenwald se encargó del #40 y Tom DeFalco y Ralph Macchio del #41. Todos estos guionistas se dedicaron a cerrar hilos argumentales para dejar el campo libre a Byrne, quién modificó el grupo a su antojo, incorporando personajes sin siquiera explicar el por qué. Alteró el comportamiento de los héroes a su gusto y, sobre todo, le dio a la serie un toque de culebrón que haría las delicias de sus seguidores. El amor y el desamor empezaron a campar a sus anchas en las páginas de West Coast Avengers… hasta tal punto que no solo se reconciliaron el Dr. Pym y la Avispa… También hizo que la Visión y la Bruja Escarlata tuvieran sus problemas sentimentales. Más o menos. La Visión y la Bruja Escarlata eran un matrimonio feliz, pero Byrne se las hizo pasar canutas y convirtió a la Visión en un androide sin sentimientos. Por si esto no fuera suficiente, jugó con un triángulo amoroso incorporando a Wonder Man y finalmente nos descubrió que los hijos de la Bruja Escarlata no eran tales sino partes de un demonio llamado Pandemonion. Y La Bruja Escarlata no se lo tomó demasiado bien, pero como es de reacción lenta necesitó años antes de destruir a sus compañeros en Avengers Disassembled y de diezmar los mutantes en House of M.
Lo «raro» de esta andadura es que Byrne marchó antes de finalizarla. ¿Por qué? Según sus propias palabras «la marcha fue prematura y lo fue por una razón simple: un idiota editor en jede no prestó atención. Algunos meses antes de que se iniciase la historia de Immortus, tanto los escritores como los editores fueron llamados a la oficina del editor en jefe con el propósito de urdir el último…. temblad… cruce veraniego. Como tenía un arco argumental en Avengers West Coast que era muy cósmico y llegaba lejos, lo ofrecí como base para el cruce. El editor en jefe dijo no, no quería hacer eso en el cruce. Así que Howard Mackie (su editor) y yo volvimos a nuestro trabajo en la serie, y seguimos adelante con la historia tal como lo planeamos. Un mes antes fuimos a la Gran Revelación, como si existiese, y el editor en jefe se dio cuenta de repente que estábamos haciendo la historia que él ‘rechazó’. Nos ordenó modificarla, inmediatamente. Howard protestó — el editor en jefe no nos hacía dicho que no podíamos hacer la historia, solo que no la quería para el cruce. Finalmente el editor en jefe abusó de su autoridad — tuvimos que cambiar nuestra historia, porque no teníamos ‘permiso’ para hacerla. (El permiso solo se necesitaba si las historias causaban grandes cambios a personajes o a la continuidad. Este no era el caso). Como no había nada que pudiese hacer con todo lo que había planeado para los siguientes meses, nada más que fuera la historia que planeé, abandoné en protesta, con el apoyo de Howard«.
Por supuesto, lo que he dicho antes de «Byrne se vio relegado a un título ciertamente menor» es una exageración porque el autor pasó a encargarse de los guiones de la serie principal de los Vengadores poco después de iniciar su andadura en West Coast Avengers. Incluso enlazó ambas series… Aunque la polémica la tuvimos con West Coast y no con el título madre…
Como Byrne es un artista prolífico, no hay muchas historietas entre los West Coast Avengers y la siguiente gran obra… Solo podemos citar la portada del #75 de The New Mutants y una historia de Batman que quizás no debería considerarse obra menor:
Batman #433 a #435 (mayo, 1989 a julio, 1989) (DC Comics)
Título original: The Many Deaths of the Batman, Part One, Chapter One: Period of Mourning (#433),
The Many Deaths of the Batman, Part Two, Chapter Two: How Many Times Can a Batman Die? (#434),
The Many Deaths of the Batman, Part Three, Chapter Three: The Last Death of the Batman (#435).
Escrito por: Roger L. Stern.
Dibujado por: Jim Aparo.
Además de los guiones, Byrne se encargó de las portadas.
The Sensational She-Hulk #1 a #8 (mayo, 1989 a noviembre, 1989) (Marvel Comics)
Títulos originales: Second Chance (#1)
Attack of the Terrible Toad Men (#2),
My Guest Star, My Enemy (#3),
Tall Disorder (#4),
The Doctor is In! (#5),
Star Truck (#6),
I Have No Mouth and I Am Mean (#7),
The World’s Greatest Detective (#8).
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: John Byrne
The Sensational She-Hulk #31 a #46, #48 (septiembre, 1991 a diciembre, 1992; febrero, 1993 a abril, 1993) (Marvel Comics)
Títulos originales: Interrupted Melody (#31)
The Hills Have Eyes, and Mouths and Ears (And Maybe Noses…) (#32),
Mole and Wife (#33),
Who Was That Zombie I Saw You With? (#34),
Hail, Hail the Gang’s All Dead (#35),
Plastic Snow and Mistletoe (#36),
The Big Rub Out (#37),
Love in Bloom (#38),
Date Worse Than Death (#39),
Rock & Ruin (#41),
Battle? Why? (#43),
Cognito (#44),
Change of Mine… (#45),
Oops! (#46),
Uh-Oh (#48),
Who Is The New She-Hulk (#49),
«He’s Dead?! (#50).
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: John Byrne
Hulka es una vieja conocida de Byrne. La había utilizado en su etapa de los 4 Fantásticos y, además, escribió y dibujó una novela gráfica protagonizada por la gigante esmeralda que fue publicada en noviembre de 1985. Con esta cabecera, Byrne rompió los esquemas de todos sus seguidores al utilizar un registro cómico que sí había estado latente a lo largo de su anterior obra pero que jamás había desarrollado plenamente… hasta ahora. ¿Por qué lo hizo? Según sus declaraciones en Modern Masters, «todo empezó con Mark Gruenwald – era el segundo en comando por aquel entonces. Me preguntó si estaría interesado en hacer un nuevo tebeo de Hulka, pero me pidió que hiciese algo que no se hubiese hecho antes con este personaje – algo nuevo y diferente. Pensé un rato sobre eso y entonces se me ocurrió ‘bueno, ¿y si ella sabe que está en un tebeo? Romperemos la cuarta barrera». Y a Mark le encantó. Mark era uno de esos tipos que, primero, le gustaba tomar riesgos y, segundo, era muy divertido, así que vio el potencial de manera inmediata. Así que no fue muy difícil de vender«.
Curiosamente, Byrne no pensaba que fuese un tebeo humorístico. Él no buscaba hacer bromas sino potenciar el lado extraño de la serie, y fue eso lo que, según Byrne, desencadenó el tono humorístico. Y por eso «no me fue muy difícil de escribir, y ahora la gente me dice que no era tan divertido«.
Lástima que Byrne solo durase 8 números en esta serie (más o menos… seguid atentos al relato), ¿por qué? Larga historia. Bobbie Chase era la editora de la serie, pero Dwayne McDuffie y Robin D. Chaplik estaban preparando una miniserie en formato prestigio. Y ésta era anterior al encargo de Byrne. Al canadiense le dejaron leer el cómic por si entraba en conflicto con sus planes. Byrne hizo modificaciones y todas se aceptaron excepto una: Hulka afeitándose las piernas… Y Byrne explicó lo sucedido: «Y por encima de todo estaba esa escena de Hulka afeitándose las piernas. Ahora, deja que te diga que tengo un prejuicio instantáneo contra este tipo de de escenas. Simplemente no me gustan. No sé por qué, simplemente no creo que sean necesarias para desarrollar los personajes. De todas manera, en el contexto de esa particular escena, el ‘desarrollo» era para mostrar que Jen era una idiota. Sentándose en la bañera, depilándose, ella rompe inmediatamente la cuchilla. Así que toma otra y la rompe a la primera. Y otra. Y otra. El ‘remate’ es ver un montón de cuchillas alrededor de la bañera. Mi objeción, por supuesto, era que Jen no haría eso (aunque necesitase depilarse, que se puede argumentar que no lo necesitaba). La primera vez que lo intentara, la primera vez que la cuchilla se rompiera, llamaría por teléfono a su amigo Reed Richards y le diría ‘tengo este problema…’ Reed haría un Aparato Depilapiernas Atómico (que, conociendo a Reed, sería tan grande como un Volkswagen) y se lo entregaría en su apartamento en una hora. Problema solucionado«.
Pues bien, ese cambio no se hizo. Chase sí hizo el resto de cambios. Cuando se inició la serie, Chanse instó a Byrne a hacer modificaciones para que estuviese en sintonía con la otra serie. Empezaron a discutir y llegó un punto en el que era o Byrne o Chase. Ganó la editora. Así que Byrne se fue porque no quería que criticasen su trabajo, como él sí hacía – con razón o no – con el de los demás.
Y esto es lo que pasó la primera vez que Byrne abandonó la cabecera, pero el tiempo – y las ventas – dieron la razón a este autor y el canadiense tuvo que volver a ocuparse de Jen… Y permaneció como autor completo. a excepción de un fill-in, del #31 al #50. Justamente este último fue un número especial que estuvo firmado por Byrne y Michael Eury, Terry Austin, Todd Britton, Howard Chaykin, Dave Gibbons, Adam Hughes, Howard Mackie, Frank Miller, Wendy Pini y Walter Simonson.
Entre The Avengers, West Coast Avengers y The Sensational She-Hulk, Byrne hacía tres series a la vez (dos de ellas como autor completo), y aún así le dio tiempo de hacer todo esto antes de saltar a su siguiente gran obra:
Realizó (solo o en compañía) las portadas de Marvel Age #76, #81, #84, #86, Marvel Fanfare #45, The Incredible Hulk #359, G.I. Joe Comics Magazine #13, The Amazing Spider-Man Annual 23, X-Factor Annual 04, Alpha Flight #81, #82, Iron Man #253, Vox #1.
Avengers Spotlight #311 (octubre, 1989) (Marvel Comics)
Título original: Second Debut
Escrito por: John Byrne, Kieron Dwyer.
Dibujado por: Kieron Dwyer.
Byrne solo coescribió la historia de complemento de la enésima cabecera de los Vengadores.
The Official Handbook of the Marvel Universe: Update ’89 #2 y #5 a #8 (agosto, 1989 y noviembre, 1989 a diciembre, 1989) (Marvel Comics)
Dibujado por: John Byrne.
Algunas de las fichas incluían ilustraciones de Byrne.
Wolverine #17 a # (noviembre, 1989 a ) (Marvel Comics)
Títulos originales: Basics! (#17),
All at Sea (#18),
Heroes & Villains (#19),
Miracles (#20),
Battleground (#21),
Outburst! (#22),
Endings (#23). Goodwin.
Dibujado por: John Byrne.
Como viene siendo habitual en la sección, no considero como obra mayor aquellos trabajos en los que Byrne figure solo como dibujante. Por lo tanto, no hablaré de Lobezno.
Iron Man Anual #10 (1989) (Marvel Comics)
Título original: Can You Top This?
Escrito por: David Wohl.
Dibujado por: Mark D. Bright, John Byrne, Gene Colan, Jackson ‘Butch’ Guice, Bob Layton Sr. y Keith Pollard.
Se trata de una historia de complemento.
Batman 3-D OGN (1990) (DC Comics)
Título original: Ego Trip
Escrito por: John Byrne.
Dibujado por: John Byrne.
Tal como su nombre indica, se trata de una novela gráfica en 3 dimensiones, de aquellas en las que necesitas unas gafas con plásticos de colores para conseguir el efecto 3D. Además de la historia principal de Byrne, incluía reimpresiones de otras historias clásicas en 3D.
What The–? #6 (enero, 1990) (Marvel Comics)
Título original: Smacks of Vengeance
Escrito por: John Byrne.
Dibujado por: John Byrne.
Byrne repitió en la antología de humor de Marvel…
Namor, The Sub-Mariner #1 a #8 (abril, 1990 a abril, 1992) (Marvel Comics)
Títulos originales: Purpose (#1),
Eagle’s Wing And Lion’s Claw (#2),
Meeting of the Board (#3),
Black Water (#4),
All the Rivers Burning! (#5),
Out of Sight Out of Mind (#6),
That I Be Shunned by All — (#7),
Never Bet the Devil Your Head (#8),
Skull Orchard (#9),
Dark Nativity (#10),
Reunion (#11),
The Invaders Fight Again (#12),
Reap the Whirlwind (#13),
A Child Is Waiting… (#14),
Into the Savage Land (#15),
Fist Of Iron (#16),
Fire and Stone (#17),
Double Cross (#18),
9 Wives (#19),
My Mother… Myself (#20),
Call My Land K’un-L’un (#21),
Root of Evil (#22),
You Are Iron Fist… And You Are Not Dead… (#23),
Greenwich Village, New York. A House Which Few In This Vast City Have Ever Seen . . . (#24).
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: John Byrne
Namor, The Sub-Mariner #26 a #8 (mayo, 1992 a abril, 1992) (Marvel Comics)
Títulos originales: Where Is Namor? (#26),
Double Dealings (#27),
Still Alive and Well (#28),
Retribution (#29),
Black Harvest (#30),
Plunder (#31),
Blood Of The Warrior (#32)
Escrito por: John Byrne, Joey Cavalieri (solo #27 y #28).
Dibujado por: Jae Lee.
Teniendo en cuenta que Namor es un personaje muy relacionado con Los 4 Fantásticos, al igual que Hulka, empezamos a ver cierto encasillamiento en Byrne. Sea como fuere, hay que reconocer que cuando Byrne toma un personaje, se mantiene fiel a éste (a no ser que surja una disputa que lo aleje de la cabecera en cuestión). Por lo que respecta a Namor, The Sub-Mariner, Byrne volvió a mostrar su ingenio ofreciendo una visión inédita del personaje. La premisa de la serie era tan simple como interesante: dada la incalculable riqueza de los mares, Namor decide convertirse en un hombre de negocios para conseguir financiar al mantenimiento y limpieza de su mundo. Por supuesto, Byrne creó todo un elenco de enemigos y secundarios que acompañaron a Namor en esta más que acertada etapa.
Otro punto a favor de Byrne fue el arte. En estos momentos Byrne estaba en una etapa «experimental» y, a pesar de tener un estilo tan definido, empezó a hacer mejoras, sobre todo en lo que respecta al entintado. El culmen de ese experimento llegaría más tarde (y en una obra de DC), pero en Namor vimos cómo mejoraron sus secuencias de acción.
Y como es habitual, Byrne alternó este trabajo con otros. Además de lo que sigue, realizó las portadas de What The–? #7, #8, #9, Justice Machine Summer Spectacular #1, The Avengers #325, Marvel Age #92 Adventures of Superman Annual #2, Fantastic Four Annual 23, Mickey Mouse Adventures #8, #9.
Iron Man #258 a #266 (julio, 1990 a abril, 1991) (Marvel Comics)
Títulos originales: Lo, A Spectral Enemy Rises (#258),
… Like All Secrets, Easily Revealed (#259),
Put Them All Together And They Spell Laser! (#260),
Armor Wars II Part 4 (#261),
The Enemy Within (#262),
Stone Walls Do Not A Prison Make (#263),
Where is Iron Man? (#264),
This Mortal Coil (#265),
Retribution (#266).
Escrito por: John Byrne.
Dibujado por: John Romita Jr.
Iron Man #258 a #277 (mayo, 1991 a febrero, 1992) (Marvel Comics)
The Persistence of Memory (#267),
First Blood (#268),
The Hollow Man (#269),
The Price (#270),
Dragon Flame (#271),
Dragon Seed (#272),
Here There be Dragons (#273),
Dragon Lord (#274),
Dragon DOOM! (#275),
With Friends Like These… (#276),
War Games (#277).
Escrito por: John Byrne.
Dibujado por: Paul Ryan, excepto el #274, por Mark D. Bright.
Byrne se encargó de los guiones de Iron Man durante bastante tiempo…
The Flash TV Special #1 (enero, 1991) (DC Comics)
Título original: The Quick and the Dead
Escrito por: John Byrne.
Dibujado por: Javier Saltares.
Tal como su nombre indica, estamos ante un especial relacionado con la serie de televisión de Flash de los 90.
OMAC: One Man Army Corps #1 a #4 (enero, 1991 a abril, 1991) (DC Comics)
Títulos originales: Past Imperfect (#1),
Brother, Can You Spare an Eye? (#2),
Mein Kampf (#3),
The Man Who Made Tomorrow (#4).
Escrito por: John Byrne
Dibujado por: John Byrne
Posiblemente a algunos os sorprenda que OMAC reciba el tratamiento de obra mayor, pero es que es mucho más importante de lo que parece a primera vista… Y os enumero los motivos:
1. Esta miniserie prestigio nos narra, con mucha libertad creativa, la historia de una personaje creado por Jack Kirby, cerrando los hilos argumentales que Kirby dejó abiertos tras la cancelación de la primera serie de OMAC.
2. OMAC es el primer acercamiento serio de Byrne a los trabajos de Kirby en DC (no, Legends no cuenta). Tras OMAC vinieron muchos otros acercamientos que ya os explicaremos en futuras entregas…
3. El experimento gráfico que insinuaba en Namor llegó a su punto culminante aquí. Byrne nos ofreció sus mejores lápices en esta serie pero, además, dado que iba a ser en blanco y negro y no tendría la misma expresividad que el color, el autor probó con una técnica de dibujo llamada Duo Tone. ¿En qué consiste? Según palabras del propio Byrne «Es una técnica de tratamiento. Una línea o una trama de puntos se imprimen en papel en azul no de reprografía. Cuando se pinta encima de éste con un compuesto químico especial, el azul se vuelve rojo/marrón, que se reproduce como negro. Hay dos tramas diferentes («duo»), que producen dos grados de gris diferentes«. Yo no lo he acabado de entender, pero reconozco que detecté algo raro (pero bueno) en las tramas de esta miniserie cuando me la leí por primera vez (por allá en… bueno, cuando sea que la publicó Zinco) y al menos con la afirmación de Byrne sé que no tengo problemas de vista.
Y tras esta gran obra, volvemos a las menores, empezando por las portadas: Marvel Comics Presents #71, #79, What The–?! #11, #12, #13
Web of Spider-Man #73 (febrero, 1991) (Marvel Comics)
Título original: Head Quest
Escrito por: John Byrne.
Dibujado por: Alex Saviuk.
Una colaboración puntual.
Y hasta aquí llegamos en la entrega de hoy. Lo he dejado a punto de caramelo para la aventura independiente de John Byrne… Así que ya sabéis qué toca el mes qué viene: Next Ment y más allá….
Mundo independiente: John Byrne al detalle, parte 1 (1971-1986)
Reseña de The High Ways #1-4
Reseña de Trio #1-4
Mundo independiente: Grant Morrison al detalle, parte 1 (1978-1992)
Mundo independiente: Grant Morrison al detalle, parte 2 (1993-2012)
Reseña de Happy!
Reseña de Barry Sonnenfeld’s Dinosaurs vs. Aliens
Mundo independiente: Alan Moore al detalle parte 1 (1980-1989)
Mundo independiente: Alan Moore al detalle parte 2 (1990-1999)
Mundo independiente: Alan Moore al detalle parte 3 (1999-2013)
Reseña de Lost Girls
Reseña de Nemo: Heart of Ice
Reseña de Fashion Beast #1-10
Muchas gracias por este gran trabajo, Enrique. Para mí John Byrne siempre fue el más grande y creo que jamás he vuelto a disfrutar tanto de un equipo creativo como del Byrne-Austin.
A sus pies, señor Ríos. No he podido leerlo todo, pero pedazo de artículo y de trabajo que te has pegado.
Y Byrne era (es) muy grande, en efecto.
byrne bueeenooo,shooter maaalooo.
pues si y no.a mi jim shooter me recuerda a una figura clave en la epoca dorada de las publicaciones infantiles de bruguera:rafael gonzalez.ambos tenian fama de ser tipos adustos y agrios,de no ser la alegria de la huerta, vamos,pero reconozcamos tambien que en ambos casos,los dos autores fueron el pegamento que cohesionaba un universo editorial de tamaño superlativo.que esas dotes de mando se impartian desde el autoritarismo,pues si,en ambos casos no juega a favor de obra,pero al casar lo que es del cesar.dos grandes editores para dos epocas gloriosas.
y,hombre.que byrne es un broncas…no estoy descubriendo la polvora ¿no?
y el articulo de enrique,cojonudo,como siempre.
«La noche que llegué a la ciudad, [Chris Claremont] quedó conmigo y pude escuchar la primeras cien historias de «Cómo me jodió Jim Shooter». «Jim Shooter me ha jodido de esta forma, Jim Shooter me ha jodido de esta otra forma, luego cogió mi serie, pero bueno, no quise pelearme con él, pero entonces me volvió a joder otra vez…» Y yo le decía, «Bueno, Chris, creo que será mejor que dejes los cómics.» Y él contestaba, «Bueno, si, pero es que realmente me gustan mucho.» Steve Eglehart.
que bueno,m.r.x¡¡
Gracias a todos por los comentarios!!!
Se me olvidó decir en el artículo (en la polémica Shooter) que ya habíamos hablado de este editor en el primer especial Valiant y no está mal echarle una ojeada para conocer más al personaje. Aquí tenéis el enlace por si acaso le interesa a alguien: https://www.zonanegativa.com/?p=58399
John Byrne os pide amablemente que leáis este artículo.
Podéis hacer click para agrandar.
Nop. Esa imagen NO PUEDE SER MÁS GRANDE 😀
(y gran juego metatextual, incluir al Byrne «shooter» para hablar de lo que habla el artículo).
¡1000 puntos para Enrique!
Gran artículo. Viene a confirmar que John es un ‘polémicas’ pero con mucho talento, desde luego sus Nuevos Vengadores es de lo mejorcito que he leído en esto de los superheroes, apoyo un Nuevos Vengadores Forever para ver como hubiera terminado si hubiera seguido él en la colección.
Por lo que cuenta el artículo, Shotter parecía más una profesora de guardería que un editor.
Gran artículo para un gran artista. Polémicas a parte hay que reconocer que Byrne es un currante de cuidado porque hay que ver la cantidad de cómics que hizo en 5 años.
Y revindico sus números de Iron Man como una gran etapa del personaje. Aunque sólo fueron dos arcos argumentales, fueron muy entretenidos.
Muy bueno el artículo, pero….eso de que Tom De Falco se cargó la serie de La Patrulla X: Los años perdidos antes de que cobrara forma es harto discutible. El tomo que yo tengo son casi 600 páginas. Si se necesitan más de 600 páginas para que una serie tome forma, apaga y vámonos.
Muy buen artículo pero con algún error de traducción garrafal. Eso de traducir «agenda» por «agenda» así tal cual. Por favor, que «agenda» de traduce por «plan». ¿Es que no veis que la frase si no carece de sentido?
Gracias por los comentarios!
@Tronak: me parece que no lo has entendido. Esa idea se recuperó posteriormente y Hidden Years vio la luz, pero eso no quita que en su día Tom DeFalco la desechara y la enviase directa a la papelera. Fíjate que se propuso en 1989 y se publicó 10 años más tarde. Para que lo que yo digo fuese falso, Byrne tendría que haber publicado Hidden Years cuando lo presentó, justo antes de West Coast Avengers. Y lo de que Tom DeFalco la mató sale de la boca de Byrne, así que si quieres discutir con él, ya sabes… Yo no me atrevo a llevarle la contraria.
Cómo me gustaba el Namor de Byrne! Nunca la he visto considerada entre sus mejores obras, pero para mí está entre mis favoritas del canadiense. Consiguió que un personaje que me era profundamente antipático me interesara mucho gracias a un enfoque original y muy bien definido.
Y cuanta más mierda oigo sobre Shooter mejor me cae el tío.
Debía tener un ego del carajo, pero creo que su férreo control dio cosas más buenas que malas.
Precisamente, hecho en falta hoy día alguien así en Marvel. Alguien que coharte la liberta de los guionistas y diga que un personaje no puede estar en todos los grupos o que no se puede hacer tal cosa porque te va a reportar ventas hoy pero va a joder al personaje mañana.
Hay que encontrar el punto intermedio entre la libertad creativa y el control editorial. Los autores no siempre saben lo que es mejor para el personaje.
> Los autores no siempre saben lo que es mejor para el personaje. (Khonshu)
Alucino. Esto explica muchas cosas. Y si lo llevamos a otros terrenos (parafraseando: «Los ciudadanos no siempre saben lo que es mejor para el Estado») resulta aún más revelador.
¿En serio preferimos que un tipo que sólo piensa en el dinero dirija las creaciones de otro? ¿Aún no hemos aprendido que eso, precisamente, es lo que está mal en la cultura contemporánea? ¿Qué por eso, precisamente, los grandes creadores se alejan de los personajes franquiciados?
Además que el ejemplo es falso. Shooter no era quien coartaba la libertad de los guionistas para que el personaje no pudiera estar en todos lados sino justamente lo contrario: los guionistas querían que no se usasen los personajes sin su consentimiento y él dijo que «ni hablar», que los personajes había que usarlos cuánto más mejor para que dieran beneficios. ¿No hemos aprendido nada de las Secret Wars?
En fin, Khonshu, no es nada personal, pero estoy en radical desacuerdo con tu comentario.
¡Ahhhhhh! Aclarado Enrique, entendí mal y me bailaron las fechas. Me reitero, magnífico artículo.
Y qué te hace pensar que los editores son ogros que solo miran por la pela y que no les importan también las historias, Javier? Lo son Tom Breevort, Ann Nocenti o Stephen Wacker?
Seguramente ignoramos que muchas de las cosas que han hecho tan geniales cómics que nos encantan son tanto mérito del editor (o el dibujante) como del guionista. Los cómics mainstream son un trabajo colectivo y, como tal, a veces la labor de un supervisor es necesaria.
Yo me pegué años leyendo lo malo que había sido Shooter, pero con el tiempo me he venido dando cuenta de que algunos de los mejores cómics de la marvel se produjeron bajo el mandato de este señor, de que tenía un gran talento para detectar y explotar el talento de los autores y de que el universo Marvel estaba muy bien coordinado (no como ahora, donde todo vale).
Marvel no es una editorial de novelas independientes. Es una universo compartido donde hay varios escritores trabajando a la vez y hace falta personal que coordine las distintas visiones de esos autores para que no choquen unas con otras. Y también hace falta un director por encima de todos y, en la mayoría de las ocasiones, a éste le va a tocar hacer el trabajo sucio y ganarse los odios, aunque sea algo necesario.
El cine, la literatura, la música… hay muchos ejemplos de creadores geniales que alcanzaron sus mejores obras cuando fueron forzados más allá de su propia complacencia por un Shooter de turno. A veces un autor no tiene todas las respuestas o no se arriesga si no lo motivas. Hay quienes saben hacerlo con suavidad y hay quienes lo hacen granjeándose odios, pero eso no quiere decir que no tuvieran razón.
«¿Qué por eso, precisamente, los grandes creadores se alejan de los personajes franquiciados?»
No se alejan. Los usan de trampolín para hacerse un nombre y luego se guardan las mejores ideas para sus obras de producción propia, con la esperanza de que venga un tipo «que solo piensa en el dinero» y les forre de pasta adaptando su obra al cine.
«¿No hemos aprendido nada de las Secret Wars?»
Sí, que fueron cojonudas.
«Alucino. Esto explica muchas cosas. Y si lo llevamos a otros terrenos (parafraseando: “Los ciudadanos no siempre saben lo que es mejor para el Estado”) resulta aún más revelador.»
Ya me explicarás qué has querido decir con esto, porque no me gusta un pelo lo que me da que quieres dar a entender. Has cogido la mitad de un párrafo en la que precisamente abogo por un entendimiento entre libertad creativa y control editorial y lo has trasladado a un marco político atribuyéndome ideas con las que no sabes si comulgo o no.
Chicos chicos… Haya paz!!! Ambos argumentos son igual de válidos pero no saquéis las garras si no hay cámaras de por medio, que sino no podemos difundir las imágenes por Youtube 😉
La verdad es que yo estoy del lado de Khonshu y Shooter. Tenemos la idea utópica de que los tebeos son trabajos de autor, porque desde nuestra perspectiva española ciertamente lo serán; pero la mentalidad estadounidense no funciona así. Allí hay un trabajo en equipo, sobre todo en este tipo de editoriales, donde cada cual tiene su función; y la del editor y la del editor en jefe es coartar la libertad de los guionistas y dibujantes ante cosas que no deben hacerse. Y un buen editor hará exactamente eso. No todas las ideas de los grandes son buenas… Y lo que es peor… ¿cuántos grandes han caído hasta lo más bajo porque nadie es capaz de decirles «pero cómo se te ocurre hacer esto» a la que tienen suficiente fama como para salirse con la suya en todo? Tenemos centenares de ejemplos de quién te ha visto y quién te ve… O sea que mientras el editor se dedique a hacer su faena, adelante con él. El problema viene cuando se exceden.
A mi me cae bien Shooter, hace poco me entere de una historia en la que el y creo Paul Levitz practicamente estafaron a la compañia de seguros para que Jack Abel recibiera tratamiento medico despues del infarto que sufrio y despues le dio trabajo aunque el hombre ya practicamente no podia coger un lapiz. que luego era un cabron por que no «me deja hacer esto» pues bien, mucho piel fina hay suelto por el mundo.
He encontrado el enlace, sobre todo quedaros con lo que dice el hijo de Jack Abel en el funeral de su padre.
http://www.jimshooter.com/2011/05/paul-levitzs-finest-scam.html
A ver, no quiero entrar a fondo en el debate para no desviar la atención de lo que debería ser el hilo: la obra de Byrne. Pero un par de cosas: los editores no son ogros. Ni lo he dicho ni lo creo. No estoy diciendo que sean «malvados». Estoy diciendo que lo lógico es que el autor tenga autonomía sobre su propio trabajo. No que no le puedan espolear, sugerir, recomendar, etc. como dices. Pero eso no es lo que hacía Shooter, que es lo que sostienes. Si lees un poco su proceder, verás que es exactamente lo contrario de lo que tú sugieres que hace un editor. No había, cómo tú dices, un entendimiento. Se hacía lo que él decía por imperativo categórico y, sino, ya sabías donde estaba la puerta. Y por eso la gente se fue. En serio: no mires las obras que se hacían. No las hacía Shooter. Las hacían sus escritores y dibujantes. Siempre se cita la Patrulla-X, pero la Patrulla-X es lo que es PORQUE SHOOTER NO SE LA LEÍA (reconocido por él mismo). Un día le dio por ojearla y fue cuando dijo: «hay que matar a Fenix» porque no sabía nada de lo que se estaba haciendo (le echó la bronca a Stern, por cierto, por haberla dirigido tan mal). Y luego fue el responsable de resucitarla (una de las grandes cagadas de la historia, que ha traído la situación actual). Y cuando Claremont le dijo que eso era un cachondeo, que se cargaba la credibilidad de su trabajo, ese Shooter tan majo le dijo que la culpa era suya por hacer personajes inolvidables. Dar el crédito a Shooter por lo que hicieron otros es como agradecer a los espoliadores alemanes de arte judío haber salvado las obras de Hitler. Un despropósito.
Respecto a lo último, no sugiero que pienses nada. Pido disculpas si se ha entendido así. Venía a decir que pensar que otro va a saber mejor que tú lo que te conviene es un error. Como estoy seguro de que todos, en mayor o menor medida, estamos de acuerdo en este punto, hice la metáfora política… con tan mala fortuna, como se ve, que en vez de entenderlo así has pensado que me refería a tu forma de pensar cuando no es el caso. Porque aclaro (por si hubiera dudas): aunque estemos en el más radical de los desacuerdos no sólo estás en tu perfecto derecho de pensar como te parezca si no que me tendrás a tu lado ante cualquier ataque contra tu derecho a pensar como te parezca. Sé que estoy parafraseando a Voltaire, pero es así como lo siento.
Molon, échale un vistazo al enlace y verás lo majo» que era Shooter:
http://frog2000.blogspot.com.es/2013/11/jim-shooter-nuestro-nixon-por-gary.html
> ¿cuántos grandes han caído hasta lo más bajo porque nadie es capaz de decirles “pero cómo se te ocurre hacer esto” a la que tienen suficiente fama como para salirse con la suya en todo?
Bastantes menos, Enrique, que los que han hecho un trabajo inferior a sus capacidades por seguir los dictados de editores y productores. A ver si crees que las pelis de Cronenberg, Lynch, Tarkovski, Renoir, Lang, Bergman son tan buenas por «plegarse a los deseos de Hollywood». Que ojo, no estoy hablando de «consejos». Estoy hablando de aquí se hace lo que yo digo y sino carretera, que era la técnica Shooter.
Y perdón si he sido «vehemente de más». Ya debería estar acostumbrado pero siempre me sorprende la defensa del trabajo de alguien citando los logros de otros. Los logros de otros… pues son de otros, claro.
«Alucino. Esto explica muchas cosas. Y si lo llevamos a otros terrenos (parafraseando: “Los ciudadanos no siempre saben lo que es mejor para el Estado”) resulta aún más revelador».
Alucino con tu alucine Javier. El ejemplo que pones no es para nada extrapolable a lo de Shooter-Byrne; más equivalente sería decir justo lo contrario: «Lo que gestionan algo QUE NO ES SUYO (como Byrne y los personajes que dibujaba y escribía por encargo) no siempre saben lo que es mejor para el gestionado, ya sea un gestor comercial que «vea muy claro» que lo que más te interesa es invertir en preferentes; o un alcalde que decida gastarse tus impuestos en estatua decorativas, porque lo ve imprescindible. Para eso tiene que haber alguien por encima o en paralelo que controle al gestor, por muy artista genial que se crea.
Tampoco es cierto para el caso que «lo lógico [sea] que «el autor (Byrne) tenga autonomía sobre su propio trabajo. No que no le puedan espolear, sugerir, recomendar, etc. como dices. Pero eso no es lo que hacía Shooter».
Como muy bien queda claro en el artículo era Byrne el que quería no sólo tener libertad total sobre la serie que le habían encargado temporalmente, sino meterse en la series de los demás, y dictar si ellos podían usar al Dr. Muerte o no; si se podía hacer determinado crossover con «sus» personajes o no; si otros (más adelante) podían sacar a Hulka intentando afeitarse en vano las piernas o no…
Nadie se ha metido tanto con los personajes creados por otros, y la continuidad establecida antes por otros autores, que Byrne. Que Shooter lo frenase, o intentase frenar su ego, no es que sea entendible, es que era imprescindible.
Lo malo de estas discusiones es que se basan en chascarrillos que los autores sueltan en caliente… Habría que haber estado allí y ver ambos lados para poder opinar…
Los ejemplos que citas, Javier, son cinematográficos todos… Me extraña no ver el Holy Terror por ahí, o algunas cosas recientes de Johns, o los trabajos de Byrne de hace unos años… 🙂
Y bueno… Ya que sale el tema X-Men, citemos al Byrne del primer especial cuando hablaba sobre el tema: «Y justo al final – incluso después del final, realmente, por lo que nos conscierne a Chris y a mí – tuvo que venir Shooter y, para decirlo discretamente, cagarla y hacerla suya. Allí estábamos, con aquella cosa en la que habíamos trabajado y que ya había sido detallada, él sabía de esto, todo había estado definido. Y de repente tenía que ser una historia diferente. Y lo peor de todo, y esto es lo que me deja más helado, lo que surgió fue una historia mejor. Chris nunca pudo aceptar que, sí, la muerte de Fénix, todo eso, era mejor que lo que habíamos planeado inicialmente. Cuando las emociones se calmaron y se publicó, y lo leí dije ‘sí,es mejor’“. » O sea que si Byrne acabó dando la razón a Shooter al cabo de los años…
Sobre la polémica entre Shooter y Byrne se puede uno poner de parte de cualquiera o de ninguno, pero esas comparaciones políticas son muy desafortunadas, Javier. Y lo digo sin ganas de jaleo, que conste.
Yo tenía entendido que otra de las razones por las que Byrne dio el portazo en Marvel fue porque se encapichó, cuando tenía encargada la serie de ‘The Increíble Hulk’ en sacar un número en que las 22 páginas enteras eran ‘splash Pages’ (no recuerdo si este caso se comentó en la anterior entrega) que más bien contaban poca cosa. Y Shooter le dijo que cómo le iban a cobrar a los lectores los 60 o 75 centavos que me parece que costaba entonces un tebeo por 22 viñetas grandes. ¿De parte de quién se puso entonces Shooter, de la empresa y sus inversiones o del lector? ¿De coherencia artística era la que estaba defendiendo entonces Byrne?
Simplemente, el canadiense estaba acostumbrado a salirse con todos sus caprichos.
Dibujar a los editores como los malos que matan la creatividad es un discurso que puede ser popular ante un grupo de lectores, pero que no se sostiene. ¿Quién mataba la creatividad? ¿Un tal Stan Lee, cuando ejercía como editor? ¿Roy Thomas? La mayoría de editores de esos años y anteriores era gente del gremio, tan artistas o más como Byrne, pero con menos ego o menos ansias de ‘prima donna’.
Con Shooter supervisando un tal Frank Miller se convirtió en artista, y revolucionó bastante más el personaje de Daredevil y la narrativa grafíca que lo que ha hecho Byrne en toda su vida. Y todo eso se publícó con Shooter.
> El ejemplo que pones no es para nada extrapolable a lo de Shooter-Byrne; más equivalente sería decir justo lo contrario: “Lo que gestionan algo QUE NO ES SUYO (como Byrne y los personajes que dibujaba y escribía por encargo) no siempre saben lo que es mejor para el gestionado
¿Lo contrario? ¿Los personajes eran de Shooter? Pues no. La prueba es que Shooter ya no está en Marvel y no se ha llevado los personajes. Shooter era un asalariado exactamente igual que esos escritores y dibujantes que, parece, no sabían lo que hacían (pero sí lo sabía Shooter). Es decir, tu argumento es buenísimo, Carlos… pero a mi favor. Porque, en efecto, Shooter gestionaba personajes que no eran suyos. Esto, por abundar en ello, es consecuencia de que los autores no sean los propietarios de sus obras. El porqué algunos pensáis que alguien que expropie el trabajo de Kirby va a hacerlo mejor que el propio Kirby es un misterio para mí… y me temo que seguirá siéndolo durante mucho tiempo.
De otro lado, no me refería al affaire Shooter-Byrne, que no me interesa especialmente. Pero si te fijas, lo que pedía Byrne es algo que se reconoce en CUALQUIER MEDIO. Por eso cuando Marvel vendió los derechos a la Fox de determinados personajes no los puede usar si no es bajo acuerdo con la Fox. Es que es de sentido común. Lo contrario trae justo lo que estáis criticando. Que los universos Marvel y DC sean un sindios. Cuando los creadores eran los responsables de sus series (o, si lo preferís: tenían voz y voto sobre lo que se hacía con ellos) no pasaban estas cosas. Fue Shooter, precisamente, quien dijo «eso se acabó». Y el ejemplo, desgraciadamente, ha cundido.
Lo primero, enhorabuena por el artículo, que es de esos que hacen afición y que espero y deseo sea recopilado en formato revista de esas tan chulas que os habéis marcado, ya que lo merece.
Lo segundo, yo soy de los que admiran a Byrne y su trabajo en DC, incluso los «menores» (legends o este omac, que sigue estando a un buen nivel). Sin embargo, pienso que la cagó en su final de etapa con SUPERMAN. Para quien no lo sepa, SUPERMAN MATA A LOS 3 HABITANTES DE LA ZONA FANTASMA, lo cual es contrario a la esencia del personaje y a mí en su momento me chocó que un autor que había tratado y entendido tan bien al personaje cometiese semejante sacrilegio.
Aprovecho para decir que su guion de WORD OF KRIPTON me parece de lo mejor que ha escrito en su vida, que ya es decir.
Y al hilo de esto aprovecho para defender a Jim Schooter. Puede que fuese un hijoputa o que tuviese sus sombras como hombre de empresa, pero hasta ahora todas las decisiones que le he leído me parecen correctas; es más, yo en su lugar hubiera hecho lo mismo. ¿Jean Grey mata a todo un planeta y no hay consecuencias? ¿Spiderman con un hijo ilegítimo? Pero vamos…estoy seguro que de haber sido él el editor de SUPERMAN no hubiera dejado matar a nadie porque sabe que la esencia de los personajes es primordial y hay que ser coherentes.
¿Limitó la libertad de los autores? Pues yo creo que MILLER hizo lo que quiso en DD, SIMONSON otro tanto en THOR, Byrne lo mismo en los 4f y CLAREMONT llevó a los x-men bastante lejos…O sea; que más editores con dos cojones que sepan lo que quieren y menos comparsas-palmeros de la mega star de turno…
> Con Shooter supervisando un tal Frank Miller se convirtió en artista
Con Carlos III gobernando un tan Francisco de Goya se convirtió en artista. Creo que ambos convendremos en que eso no valida la monarquía. Los logros de Frank Miller son de Frank Miller, evidentemente. Y fíjate que ni menciono siquiera la opinión de Miller sobre el ex editor jefe de Marvel, porque entonces lo que he escrito aquí de Shooter parecerían elogios.
> hasta ahora todas las decisiones que le he leído me parecen correctas
Espero que no te refieras a lo que hizo con Ms Marvel… O a la resurrección de Jean Grey… O a que las historias solo podían durar -como mucho- dos episodios (la consecuencia de que Stern y Byrne abandonaran Capitán América)… O que todas las colecciones tenían que parar sus tramas para coordinarse con «su» evento (¡qué cosas! lo que ahora encarnizadamente se critica de Didio).. ¡En fin!, para escribir un libro. En serio, buscad lo que decía la gente (incluido el propio Shooter) en la época y veréis que no es así cómo lo pintáis.
Javier, los personajes no eran de Shooter, pero de Byrne tampoco, menos aun, porque Shooter era el que «repartía los encargos» y Byrne el que tenía «encargado algo», cobraba por ello, y luego hacía lo que le daba la gana.
Has dicho más abajo: «(Yo) venía a decir que pensar que otro va a saber mejor que tú lo que te conviene es un error» (pues no sé, ¿a lo mejor lo sabe el médico que te dice que no sigas fumando?)
Pues bien, es que la cosa no va de «lo que te convenga más a ti, autor», sino «lo que le convenga más a los personajes». Y cuidar eso, vigilar eso, según su criterio, era exactamente el encargo que tenía Shooter de Marvel. Se puede discutir con la perspectiva del tiempo si lo hacía con más o menos talento, pero pasarse sus indicaciones a la torera no era algo que le correspondiera a Byrne. Y en cuanto a la coherencia de cada uno de ellos, bueno, para eso están las hemerotecas.
Temas «tan serios» como lo de la rabieta por el afeitado de piernas de Hulka describen bien el criterio objetivo de Byrne.
Insisto, Carlos. No estoy hablando del affaire Byrne. Ni lo había mencionado hasta que lo habéis citado vosotros. Estoy argumentando en contra de que «el modelo Shooter» sea o no conveniente. Estoy seguro que Shooter tuvo decisiones acertadas. Hasta un reloj parado acierta la hora dos veces al día. Pero eso no significa -como entiendo que muchos sostenéis- que lo hiciera bien, que esa es la forma de hacer las cosas o «el ole ole mano dura con los creadores».
Si hablamos de Byrne en concreto, como bien decís, es el que menos tenía que quejarse porque era la niña bonita y perjudicaban a otros para darle a él los caprichos. Pero eso se debe a que los creadores de los personajes no eran los propietarios de los personajes y entonces gente como Shooter hacía y deshacía a su antojo. Defender que eso es «lo que tiene que ser» me parece inmoral y creo que he dado bastantes argumentos a favor de mi postura. Si no estáis de acuerdo, si pensáis que tiene que haber un tío con el látigo detrás de los autores para que no se nos desmanden… pues bueno, es vuestra postura (de quien sea, que no estoy prejuzgando) pero no es, en absoluto, la mía.
Y, bueno, decir que las grandes obras artísticas (de cualquier medio) nacieron dando libertad a sus creadores es una obviedad que tampoco necesita mayor explicación.
Si fuera por las sugerencias de los productores, Los Beatles estarían haciendo versiones de otros artistas en vez de publicar su propio material. Que no es que me creáis a mí: que lo dice George Martin, que algo sabría de eso.
Teniendo en cuenta que los Beatles se hicieron un nombre con las versiones que hacían, creo que fue un buen consejo. 🙂
Eh… no, Deke. Conocieron a George Martin para grabar el primer álbum. Las versiones las hacían antes (y siguieron haciéndolas). No tiene nada que ver.
Y yo, sinceramente, no cambio A day in the life por la versión que no hicieron de Chuck Berry (un poner).
Espero que no te refieras a lo que hizo con Ms Marvel…
Pues no sé lo que hizo, la verdad, pero…Ms Marvel? A quién le importa?
O a la resurrección de Jean Grey…
Que tuvo a uno de los autores apoyándole y que luego el otro utilizó…aparte de que yo soy de los que consideran que la muerte de FENIX no fue tan mítica ni tan redonda…
O a que las historias solo podían durar -como mucho- dos episodios (la consecuencia de que Stern y Byrne abandonaran Capitán América)…
Esta decisión sí que la apoyo cien por cien, si se mantuviese en la actualidad nos libraríamos de escritores vagos que rellenan en doce números lo que se puede contar en tres…Lamento sólo que fuese tan intransigente de no ceder en un número más en el caso de Stern/ Byrne, pero claro, tampoco sabemos las entretelas…
O que todas las colecciones tenían que parar sus tramas para coordinarse con “su” evento (¡qué cosas! lo que ahora encarnizadamente se critica de Didio)..
Bueno, siempre se ha dicho que durante la era Schooter sí que había la sensación de universo unificado. Q
¡En fin!, para escribir un libro. En serio, buscad lo que decía la gente (incluido el propio Shooter) en la época y veréis que no es así cómo lo pintáis.
(Se me ha editado antes de lo que quería, contínuo)
O que todas las colecciones tenían que parar sus tramas para coordinarse con “su” evento (¡qué cosas! lo que ahora encarnizadamente se critica de Didio)..
Bueno, siempre se ha dicho que durante la era Schooter sí que había la sensación de universo unificado. Que si en tal colección pasaba algo se reflejaba en las otras. A veces incidía, otras no. Por ejemplo, en SECRET WARS II sí que se pararon las tramas para incluir al todopoderoso. Pero unos autores hicieron buenas historias con ello y otros no. En cambio, lo de Didio es al cuadrado…No creo que estemos hablando del mismo nivel de incidencia.
¡En fin!, para escribir un libro. En serio, buscad lo que decía la gente (incluido el propio Shooter) en la época y veréis que no es así cómo lo pintáis.
No voy a decir que toda la era Shooter fuera una maravilla y que el tipo fuera el mejor en todo. Pero con la distancia que da el tiempo, es obvio que en los años 80 había una cohesión y una calidad que no se dieron con el amigo Shooter fuera del cargo.
Yo sigo insistiendo; prefiero un editor con mano de hierro que sepa lo que debe de hacer que un autor diva que haga lo que le de la gana sin control. Estamos hablando de cómics de supers y las reglas son las que son.
Javier, me parece que no estás convenciendo en general porque estás adoptando una postura muy radical y no estás entendiendo lo que decimos los demás. Aquí nadie defiende que un editor torture y maltrate a sus autores (que me parece que es lo que crees por cómo entiendes el trabajo de Shooter). Aquí se defiende que en un trabajo en equipo, la función del editor que frena y en ocasiones coarta la libertad del creador, es buena y necesaria. Y en este mismo artículo hay varios ejemplos que dan la razón a Shooter en ese aspecto. Si no es así, no entiendo cómo se puede defender a ultranza que un artista contratado para hacer un trabajo no tenga que asumir lo que sus contratadores le piden. A ver si ahora ya no puedo quejarme ante el fontanero por no poner los grifos donde los he pedido porque coarto su creatividad…
«decir que las grandes obras artísticas (de cualquier medio) nacieron dando libertad a sus creadores es una obviedad que tampoco necesita mayor explicación». Y lo mismo se puede decir de los peores bodrios que hemos visto o leído. La libertad creativa no es siempre sinónimo de calidad, más bien, al contrario. Y por cada ejemplo que pongas de gran obra hecha con absoluta libertad creativa, podemos citar veinte más que no lo son.
Yo, como deceíta confeso, creo que la posteridad ha sido muy dura con Jim Shooter. Ese hombre tendría que tener una estatua de bronce en la entrada de las oficinas centrales de… DC. Gracias a sus métodos, ejem, «laborales», la plana mayor del cómic norteamericano, Frank Miller, John Byrne, Frank Miller, Gene Colan, Marv Wolfman… se mudaron a los verdes pastos deceítas. Las grandes obras de DC de esa época existen gracias al gran Jim. ¡Si hasta se fue Roy Thomas, que llevaba allí desde los tiempos de Stan, XD!
Y no solo eso… cuando empezaron a llegar todos esos guionistas cerebritos británicos, con el barbudo a la cabeza, ni se les pasó por la cabeza ir a Marvel, para ser instruidos en la disciplina shooteriana… nada de eso, a DC, del primero al último. DC se lo debe todo al bueno de Jim, de DKR a Watchmen.
En fin, todavía salen peña marvelita defendiéndole. No sé, lo veo un poco raro, pero… lo mismo dentro de unas décadas hay una quien sale defendiendo a Didio y que bajo su mandato si que se hacían las cosas bien en el Universo DC, XC.
En la entrevista que hizo Paul Jenkins al abandonar DC y Marvel, mucha gente sólo se quedó con el estúpido editor que decía que Batman no se sentaba.
Pero cuando ponía ejemplos de historias que en DC no le dejaron escribir, sinceramente, di gracias a que los editores no dieran esa utópica libertad total para los artistas.
¿Alguien de verdad hubiera disfrutado leyendo como Lex Luthor le volase la tapa de los sesos a Ma y Pa Kent delante de los impotentes ojos de Superman? ¿De ver como The Flash, que su principal poder es la velocidad, perder una pierna por una mina?
Ciertamente a veces los editores se pasan de sobre-protectores con los status quo de los personajes, y peor aún, hay algunos que a lo único que van es a joder el personal con tal de ser los únicos que se apunten tantos delante de sus jefes.
Pero estoy con Khonshu, no todos los artistas entienden los personajes y debe ser tarea de los editores de evitar errores que lastren el personaje mucho más allá que cuando ese autor abandone el personaje/serie.
Ha de haber un equilibrio, al menos, cuando estás escribiendo un personaje que no es de tu creación y no estás en un marco de libertad absoluta (como podría ser un Elseworlds). Eso, o aceptar mi idea que la continuidad es un lastre, y que cada autor escriba lo que quiera sin más consecuencias que futuras obras relacionadas con obras anteriores del propio autor y/o en tributo a este.
Creo que todos estamos de acuerdo con eso, Sr Molinari. Ahora bien, supongo que de eso también se encargaban Jenette Kahn o Roy Thomas y nadie habla de ellos como los que estuvieron a sus órdenes se refieren a Shooter. Pensar que él tenía razón y que todos, pero todos, los demás estaban equivocados…
Tienes razón, Enrique. Esto no va a ninguna parte, así que lo dejo aquí. Como decía antes, no quiero monopolizar el hilo. Si os gusta Shooter, perfecto. Va a parecer que me lo tomo por lo personal y no es verdad. Si os interesa, buscad lo que dijo -e hizo- en esa época y no lo que dice -y hace- ahora y os asombraréis. Insisto: no me creáis a mí. Creed a Wolfman, Miller, Englehart, Claremont, Byrne, Moore, etc. A los autores que admiramos.
> La libertad creativa no es siempre sinónimo de calidad, más bien, al contrario. Y por cada ejemplo que pongas de gran obra hecha con absoluta libertad creativa, podemos citar veinte más que no lo son.
Jamás he dicho nada de «absoluta libertad creativa»; ni siquiera estoy seguro de saber qué significa. Una obra de encargo puede hacerse con libertad creativa, digamos, lo que no significa que no esté sujeta a condicionantes, desde externos (censura, presupuesto) a internos (aceptación de determinados códigos). Pero eso nada tiene que ver, me parece, con lo que estoy diciendo. Estoy hablando de injerencias y de métodos tiránicos, no de sugerencias, colaboraciones, etc. El padrino, por ejemplo, es una obra de encargo y es personal. Con Shooter no habría podido hacerse. ¿Y sabéis por qué? Porque Shooter no habría permitido que un asesino como Michael se saliera con la suya y le habría obligado a cambiar el final. Pero he dicho que no voy a volver sobre ello. Explicaba que no es lo mismo que Dino DeLaurentis contrate a Lynch para Dune, se meta en la película y salga ese bodrio, que darle 5 millones para hacer la película que le dé la gana y salga Terciopelo azul. En ambas hay productor, claro. Incluso es el mismo. Pero las grandes obras, salvo excepción, se hacen con libertad creativa. Y eso, Enrique, de verdad, podemos discutirlo todo lo que quieras pero es así, al menos, en el 95% de los casos. Todos lo sabemos y por eso, cuando contratan a alguno de nuestros favoritos en Marvel o DC, lo primero que se lee por aquí es «esperemos que le dejen escribir sus historias» y no «a ver si el editor le pone en cintura». Otra cosa es que por defender a Shooter digáis cosas que, si se aplicasen (p.ej: lo que dice Spirit de los dos números. Adios a V de Vendetta, Watchmen, La Cosa del Pantano, la trilogía de Galactus, la saga de Fénix, la del Nido, Planetary, Sandman… vamos, las obras que nos gustan a todos), nos pondrían en pie de guerra. A mí el primero, que conste.
Pero bueno, al final se trata de disfrutar de los tebeos y tan amigos. 😉
P.D.: Gracias, Mr.X, pero ya ves que estamos en franca minoría.
Sobre lo que comenta Jordi no puedo más que darle la razón hay guionistas que necesitan que un editor lo ponga en su sitio, como Jenkins y los casos de historias que comenta.
Byrne tendría un punto de divismo, pero nadie pude dudar de su amor a los personajes, como tampoco se puede dudar del de Shooter. Muchas veces chocaban y unas veces tendría la razón uno y otras otro, habeis puesto ejemplos de ambos casos. Shooter era el jefe y la mayoría de veces se salió con las suya. En otras se pusieron de acuerdo para hacer alguna barrabasada (resurrección de Fenix).
Pero en los autores de hoy, parece que solo quieren hacer historias para epatar al personal, como la del Lex Luthor matando a los padres de Superman para que se hable de ti y luego hacer tu propia serie, venderla al cine y forrarte. Es en esos momentos donde echo de menos un Jim Shooter que ponga estos tipejos en su sitio. Lo peor es que muchas veces los propios editores, que son los que deberían mirar por el respeto y tener amor por los personajes de la empresa a la que representan son lo que tienen esas ideas horribles que su curritos tienen que poner en palabras y dibujos.
samanosuke ha comentado: Coño, que ahora se produce el trasvase al contrario y no veo a nadie defender a Didio…
Que Shooter era un cabrón no lo duda nadie, pero lo cierto es que su método funcionanba, su Marvel fue de las mejores de la historia (con luces y sombreas por supuesto) sin embargo la DC de Didio… como que no.
> ¿Alguien de verdad hubiera disfrutado leyendo como Lex Luthor le volase la tapa de los sesos a Ma y Pa Kent delante de los impotentes ojos de Superman? ¿De ver como The Flash, que su principal poder es la velocidad, perder una pierna por una mina? (Jordi Molinari)
¡Uf! Es peliagudo el tema que planteas. Por desgracia, es extremadamente difícil juzgar una «idea», como dirá cualquiera del mundillo. De ahí que se pidan «plots» o «desarrollos» y aún así… La idea sola no basta. Algunos ejemplos:
Eres el editor de Hulk. Todo el mundo sabe que cuando Bruce Banner se enfada se convierte en una descerebrada masa de músculos. Es «la esencia» del personaje. Ahora llega un chaval del departamento de ventas y te dice: Oye, voy a volverlo inteligente. No parece la mejor idea del mundo, ¿verdad?
Eres el editor de la Cosa del Pantano. Todo el mundo sabe que esta criatura es un ser desdichado porque ha perdido su humanidad. Es «la esencia» del personaje. Ahora llega un chaval barbudo y te dice: Oye, voy a matarlo y descubrir que en realidad es una planta. No parece la mejor idea del mundo, ¿verdad?
La lista es larga. A veces las cosas parecen estúpidas… y no lo son tanto. Y a veces, como decía Peter David, «en ese momento parecía una buena idea»… pero no lo era. O no se supo desarrollar.
Dicho lo cual no estoy defendiendo a Jenkins. Creo que lo único que me gustó de él fue la serie de Los inhumanos. Probablemente, saliendo de él esas ocurrencias (o cualesquiera otras) habrían fracasado. Pero el tema tiene más enjundia de la que parece a simple vista.
A ver no tiene que ver con lo que se discute, pero vamos no se donde ponerlo, y como transversalmente tiene que ver con Byrne lo pregunto aqui.
Me pille el año pasado el segundo Omni de la patrulla X, y esta semana me ha dado por leerlo y me he dado cuenta que a partir del anual de Arkon hasta mas o menos la muerte de Fenix la impresion del tomo es en muchas paginas como con sombra, como si se les hubiese ido un poquito el negro, pensando que era mi tomo, me baje al Fnac y me revise 6 tomos y estaban igual, me sorprende que nadie lo haya comentado, yo me he llevado una sorpresa. O eso o en Zaragoza nos han tocado todos los defectuosos que tambien puede ser. ¿Alguno le ocurre lo mismo?.
Que lastima que NUNCA he conectado con los comics de John Byrne. Lo he intentado, pero no… no puedo con este dibujante.
Y menos aún con su faceta de «guionista»… es que me parece muy malo. No pude ni con sus Next Men, Superman, ni Alpha Flight, ni Hulka, etc…
Pero felicidades para todos aquellos que lo disfrutáis porque teneís muchos cómics que revisionar de este autor. 🙂
tio,john byrne es la coca-cola en el mundo de los dibujantes de superheroes.de hecho,recuerdo a un señor que se acerco a la libreria que frecuento por malaga(en portada comics)buscando un comic para regalar por cumpleaños a un crio que se iniciaba a la lectura(segun contaba este señor al que no conocia,por cierto)y el librero suplente(pedro y juan pablo estaban de vacaciones)y yo coincidimos en sugerir al tipo el primer tomo de ecc del superman de john byrne.y salio tan pancho de la tienda,oye.
narrativa clara y un dibujo limpio y super accesible.si yo fuese ese crio que se inicia en la lectura,sin duda elegiria algo de este autor de su epoca dorada en los años 80.
pero,vamos,lo que le has dicho a isabel lopez en otro post.para gustos,colores.
Por supuesto, pero mira que he leído cosas de este hombre, pero no hay manera… su estilo no me gusta.
Y ojo, entiendo que es cosa mía porque alguien que ha vendido tanto y que tiene un reconocimiento general de crítica y público seguramente es por algo, pero en mi caso soy yo que no conecto con su obra.
Y lo mismo puedo extrapolar a Chris Claremont.
De verdad, lo intenté con estos 2 autores en su momento, y es superior a mí… no los soporto.
Pero me alegro por aquellos que sí, tienen mucho cómics que releer de ambos autores 🙂
Javier, me extrañó el «ataque» viniendo de ti y sin roces anteriores, pero reconoce que si alguien te cita y acto seguido añade tu párrafo de «Alucino. Esto explica muchas cosas…» da a entender que estás juzgándome a nivel personal por este comentario y otros anteriores. Cosa que me extraña porque no recuerdo que hayamos discutido ni creo haber tenido actitudes pro-dictatoriales con anterioridad.
Me cuadra más contigo lo de la disculpa y que sea todo un malentendido, así que pelillos a la mar.
Lo de que Shooter era un cabronazo creo que nadie lo discute, pero eso a nosotros no tiene por qué importarnos mientras hiciera su trabajo bien. Leyendo declaraciones de Shooter uno se da cuenta de que era un tirano, muy duro en sus formas y un hombre que miraba mucho por la empresa. Probablemente trabajar con él fue un infierno.
Pero de ese infierno surgieron los X-Men de Claremont, El Daredevil de Miller, El Iron Man de Layton/Michelinie, Los 4F y Alpha Flight de Byrne, el Thor de Walter Simonson, Los Spiderman, Dr Extraño y Vengadores de Stern, el Hulk de Bill Mantlo, El Capitán América de Dematteis…
Algunas de las consideradas como etapas definitorias de los personajes más importantes de la compañía.
Estoy de acuerdo en que el mérito en su mayor parte es de los autores, pero si surgieron tantas series buenas sería porque hubo un buen equipo editorial. ¿Que Shooter no se leía todas las series? Es que ese no era su trabajo, probablemente no disponía de tiempo para hacerlo siquiera. Para eso tenía editores subalternos que tenían que ocuparse de esa labor.
Este hombre llegó al puesto en un momento en que Marvel era tal caos que se había merendado cinco editores jefe en muy corto espacio de tiempo, algunos de ellos abandonando por la presión. En la editorial había mucho talento (a mí me encanta la explosión de creatividad de la marvel setentera), pero hacía falta que alguien pusiera orden y tomara medidas duras. Para bien o para mal, hacía falta un Jim Shooter.
A mí fundamentalmente, lo que me gusta de este hombre es que siempre ha tenido un dogma tanto en Marvel, como en Valiant, como en donde fuera: Hacer buenos cómics. Es algo que solía afirmar y es de lo poco en lo que le creo firmemente(porque reconozco que Shooter es muy dado al revisionismo histórico). Esto era muy duro para los creativos porque, si no entrabas en lo que Shooter consideraba un buen cómic te iba a obligar a cambiarlo, pero tan insostenible no debió ser la situación si, como vemos, surgieron algunas de las etapas con mayor libertada creativa de la época.
Shooter defendía que cada cómic debía ser bueno por sí mismo, que cada cómic podía ser la oportunidad de ganar un nuevo lector y por tanto debías darlo todo tanto en el nº 1 como en el 223.
En palabras del propio Shooter:
«While Marvel editor-in-chief in 1982, Shooter detailed what he considered the necessary qualities for a good comic book story:
-The characters must be introduced.
-Their situation must be established.
-The conflict must be introduced.
-Suspense must be built.
-A climax must be reached.
-A resolution must be achieved.
. . . When I evaluate a story, should one of the essential elements listed above be missing — say, the characters are not introduced properly when they are brought onstage — I immediately suspect that the author of the «story» knoweth not what he ith [sic] doing.
Second, I look for how well the story is told. Is the conflict worthwhile? Is the climax exciting? Is the resolution satisfying? Is the plot good? Are there interesting twists and turns? Is there a theme? Is there character development? Is it dramatic? Is it entertaining? This is the really important stuff. It should go without saying that a writer or a prospective writer should know enough to meet the fundamental requirements of a story. It’s the power and the passion and drama and characterization that I really look for»
Que muchas veces se equivocaría? sin duda. Cargándose la etapa de Stern y Byrne en el Capi, por ejemplo. Pero no me parece que sus ideas de base fueran erróneas, su fallo fue no ser más flexible y, probablemente pensar que su criterio siempre era el correcto (y en ocasiones lo sería).
Obviamente, los criterios de Shooter son aplicables a los 80. Hoy día con el decompressive storytelling y gente como Bendis o Hickman a este hombre le daría un shock intentando manejar Marvel, pero no me importaría ver un poco de consistencia y firmeza para manejar la coherencia interna del universo y que se fuera más exigente con la calidad de muchos números mensuales.
Curiosamente, mis dos etapas editoriales favoritas de Marvel son la estricta de Shooter y la liberal de Quesada. A,mbas propuestas pueden ser la respuesta para conseguir buenos resultados en situaciones y momentos distintos.
Tienes razón, Khonshu. Estuve desafortunado y te pido perdón. Como dices, no tengo nada contra ti (más bien al contrario). Ha sido, en efecto, un desgraciado malentendido del que, me temo, no puedo echar la culpa a nadie más que a mí mismo. Y, aunque como supondrás, no coincido con tu defensa de Shooter, te agradezco tu moderación y buen tono, mucho más acertado que el mío.
Como ya mencioné, prefiero no volver sobre el tema. Pero por dejar clara mi postura, nunca he negado que hubiera buenas series bajo su mandato. Lo que digo es que, en muchas de ellas, no tuvo nada que ver y otras salieron bien a pesar de él. Que le atribuis méritos que, en realidad, no tuvo. La Patrulla-X, por ejemplo, ya llevaba tres años más o menos siendo escrita por Claremont cuando Marvel contrató a Shooter. Y el mismo Shooter admitió que no la seguía (dijo que si lo hubiera hecho no habría permitido tener en el grupo a un asesino como Lobezno). No recuerdo cuál dijo que fue el primero que leyó si el de los hombres espárrago o el anterior. Entonces ¿cómo es posible atribuirle mérito alguno, por ejemplo, en la saga de Proteo? Máxime cuando luego añade que, en efecto, fue un error dejar manga ancha a Stern porque «los héroes no matan». ¿Es esa la esencia de Lobezno? ¿Que no mata? Si queréis darle el mérito a un editor dádselo a Roger Stern, porque -además- su marcha fue la que propició la escapada de Byrne. Shooter acertó en lo de Fénix, vale (habría que hablar sobre eso, también, pero dejémoslo así), pero un acierto en 10 años (o casi) no es para estar orgulloso. Si lo ponemos en la balanza, es una minucia comparado con echar a Frank Miller para que revitalice Batman en la competencia.
Curiosamente, no habéis citado algo que sí hizo bien (para mí, lo único realmente importante de verdad) que fue la introducción del pago de royalties a los autores una vez superado un límite de copias vendidas (que ahora no recuerdo) y que explica por qué muchos aceptaban vejaciones constantes a cambio de ganarse la vida escribiendo o dibujando cómics.
Respecto a Marvel, para mí va en interés decreciente. Mi época favorita son los ’60, sin duda ninguna, seguida de los ’70, luego la 1ª mitad de los ’80 y, desde entonces, muy poquitas cosas: lo mismo 10 o 12 series de entonces acá me gustan de veras.
En fin, hablemos de Byrne que será más fácil que nos pongamos de acuerdo, porque -aunque estoy lejos de considerarlo un «Dios»- sus trabajos con Claremont y Stern son muy buenos, y su Superman, muy entretenido. 😉
Ya no defiendo más a Shooter, pero he dado con un artículo que trata de limpiar su reputación que me ha interesado bastante. Cuenta muchas anecdotas sobre su estancia en Marvel que desconocía y qe me han dado a pensar que igual el hombre era tan hijo de… despúes de todo:
http://www.hoodedutilitarian.com/2013/01/jim-shooter-a-second-opinion-part-one-the-best-job-he-can/
Y Javier, si nosotros no usamos lo de los royalties para defender a Shooter tú no usaste la que podría haber sido tu gran arma para convencernos de que Shooter era un pirado peligroso: «La Teoría del Big Bang del Universo Marvel de Jim Shooter». Una leyenda urbana que cuando la oí hace unos años me dejó ojiplático y que aún hoy no termino de dar por cierta por lo surrealista que suena.
oygan,¿no se parece miyazaki a john byrne como si le hubiesen dibujado en el post de aqui al lado?misma barba,las gafas,la cara redonda…
aunque en realidad,el john byrne actual tiene un notable parecido con el capitan nemo de la liga de alan moore.
cosillas en la que te fijas cuando tienes una tarde especialmente aburrida.
me voy a papear y luego vuelvo .
«O eso o en Zaragoza nos han tocado todos los defectuosos que tambien puede ser. ¿Alguno le ocurre lo mismo?.»
Molón, en mi tomo no aprecio esa impresión defectuosa que comentas.
El mío de Días del Futuro Pasado lo tuve que cambiar porque venía directamente con varias páginas defectuosas con los negros muy corridos (nada de chistes). Sólo ocurría en páginas del annual de Rondador Nocturno en el Infierno de Dante.
Pero el primero de spidey de Romita sí que tenía como una sombra muy muy leve. No lo cambié por no ponerme pejiguero, pero hubo momentos en los que me emparanoié con la lectura.
Me da qur el papel poroso de los omnigold les está dado problemas con los negros. En el primero de la patrulla están un pelín demasiado suaves.
«Molón, en mi tomo no aprecio esa impresión defectuosa que comentas.»
En si no lo llamaria defectuosa, mi mujer cuando se lo mostre no lo distinguia, es una sombra muy leve en el perfilado del negro, y ya te digo es curioso porque es 2 paginas si, dos paginas no, del anual de Arkon hasta la muerte de Fenix, putada de tener el «ojofino» XD. Ayer me mire otros dos en una tienda y estaba tambien la puta sombra.
«Pero el primero de spidey de Romita sí que tenía como una sombra muy muy leve. No lo cambié por no ponerme pejiguero, pero hubo momentos en los que me emparanoié con la lectura.»
Sasto, muy leve, pero que te jode la lectura mogollon porque no haces mas que dar la vuelta a las paginas y estar pendiente de la puta sombra. Alguien tiene que inventar unas gafas correctoras de sombras y doble impresion para los comics. Yo pasaria por caja.
«mi mujer cuando se lo mostre no lo distinguia,»
Es que los fans tenemos el ojo adaptado a detectar la más mínima imperfección en una página impresa. Somos como Karnak para los cómics.
Cuando salió el tomo de Superman del Lidl tuve la increible «suerte» de que, después de estar 20 minutos evaluando la enorme pila de tomos para ver cuál estaba en mejor estado en las esquinitas y tal, debí coger el único defectuoso en su interior.
Tenía unas 4 o 6 páginas con el negro duplicado y desplazado, creando un pequeño efecto «3d sin gafas» en líneas y bocadillos de texto. No era algo muy descarado, pero sabía que si no iba a cambiarlo me iba a mortificar el saber que ese defecto estaba ahí cada vez que viera el tomo en la estantería.
Tendríais que ver cómo me miraba la cajera del Lidl cuando trataba de explicarle la tara para que me lo cambiara. Para mí era evidente, pero ella era incapaz de percibirla. Debió pensar que estaba loco! Por cosas como esas pienso que el mejor punto de venta para la mayoría de los cómics son las librerías especializadas; los compradores tenemos tal conocimiento del producto que requerimos un trato parejo por parte del vendedor.
Creo q por lo general los fans se ponian de parte de Byrne por ser la estrella y a shooter lo ponian como el malo simplemente por que Byrne lo decia. Como muchos empeze a descubrir a Byrne gracias a tomos recopilatorios de la saga de Dark Phoenix (aca solo se consiguen en ingles) y desde ahi fui buscando todo lo q tuviera a Byrne firmando en la portada. Es un vicio.
Pero con el tiempo me he dado cuenta que sea donde haya estado este señor, llevaba polemica detras de si, osea no todo el mundo podria estar contra el, verdad? Creo que es muy conocido que el señor Byrne es alguien muy dificil de tratar o de llevar.
Ahora lo que era un puto genio en los comics, nadie se lo quita. Es todavia mi dibujante favorito, y mira como pasa el tiempo, ya casi no dibuja nada profesionalmente (en su pagina web hay millones de comisiones que estan muy geniales)
Como sea, muchas gracias Enrique Rios por esta continuacion del articulo, demoro un poco (pense q lo habian dejado) pero vale la pena esperar.
Esto es como comida para los fanaticos de Byrne.
«Tenía unas 4 o 6 páginas con el negro duplicado y desplazado, creando un pequeño efecto “3d sin gafas” en líneas y bocadillos de texto. No era algo muy descarado, pero sabía que si no iba a cambiarlo me iba a mortificar el saber que ese defecto estaba ahí cada vez que viera el tomo en la estantería».
Caray, cómo me identifico con todas esas neuras que estáis contando.
Pero para mí, pero aún que los defectos en el color, o en los pliegos de páginas mal cortados, es el mal rollo que me da cuando un tomo plastificado tiene cualquier pequeño corte en el lomo y se ve por adelantado que por ahí va a empezar a mondarse, cada vez más y más… Igual que las esquinas que ‘se comban’ de las portadas (algo que les pasa, por ejemplo, a todos los tomillos que están sacando de Superior Spiderman).
Es como tener un padastro y sentir tentaciones de tirar de él.
65. redarrow884.
«ahora lo que era un puto genio de los comics,nadie se lo quita.es todavia mi dibujante favorito,y mira como pasa el tiempo.
YA CASI NO DIBUJA NADA PROFESIONALMENTE(en su pagina web hay millones de comisiones que estan muy geniales).
¡comooorrr….¡
Bueno, ya quisieran muchos dibujantes en activo hacer la cantidad de cómics que sigue haciendo Byrne.
Aun dibuja igual o mejor…
http://www.artofjohnbyrne.com/gallery/commissions/commissions-standard/commissions-standard2012/Funeral.jpg.php
redarrow884,ya conocia byrnerobotics,y no tienes que convencerme de que el tipo cuando se pone sigue siendo un crack.yo soy de los que lloran por ver algo del barbudo por aqui(y ultimamente hay buenas noticias en ese sentido).
lo que me ha chocado es que digas que el tipo ya casi no dibuja.
¡si no para de encadenar miniseries¡
y yasta.desde el buen rollo,¿eh?.
Pues dejando al margen la polémica Byrne/Shooter, ha sido gracias a esta frase: «Él contrató artistas cuando era necesario. Para mantener los mejores coloristas y rotulistas, pagó a gente de su propio bolsillo.» que, como suele decirse, Claremont ha crecido a mis ojos.
Respecto a lo que comentáis de los fallos de impresión; fui a devolver un ejemplar del Batman: Victoria Oscura porque tenía ese defecto en la línea negra en unas pocas páginas que, además hacía de lo más incómodo leer los bocadillos de dichas páginas. Pues bien; había un par de clientes allí y me dice uno de ellos «Pero no lo cambies, que luego ese vale más pasta.». Joder, me mordí la lengua. Sólo le dije que yo los tebeos los quiero para leer. Que a veces (y yo el primero) somos muy pejigueros, y ese tipo de fallo puedo pasarlo por alto en un tebeo de dos euros, pero si pago veinte euros o más quiero un producto que esté perfecto.
Para mí, la mejor historia de Byrne en Superman fue cuando hizo una historia de pocas páginas sobre Lex Luthor. Este entraba a una cafetería y le decía a la mesera que se fuera con él y le hacía dudar sobre su vida.
Realmente había mucho trasfondo en esa historia. Byrne es un grande 🙂
Magnífico artículo, muchas gracias!!! Que sirva mi agradecimiento por todos esos grandes recopilatorios de mundo independiente que he estado leyendo hasta ahora sin comentar.
Sois unos monstruos!!!