Las Fábulas no escritas de The Unwritten

 

Guión: Mike Carey y Bill Willingham
Dibujo: Peter Gross y Mark Buckingham
Edición España: ECC Ediciones (2014)
Contiene: The Unwritten Nº 50-54 USA (Vertigo / DC Comics, 2014)
Formato: Tomo rústica de 136 páginas
Precio: 12,95€

 

El gran éxito de la línea Vertigo en la última década, aparte de limitarse a sobrevivir a su penosa situación, ha sido Fábulas, la serie fantástica de Bill Willingham y Mark Buckingham protagonizada por los personajes de cuentos de hadas de la tradición y el folclore popular occidental (y galaxias paralelas). La cabecera ganadora de hasta catorce premios Eisner, incluyendo los de Mejor Serie Nueva y Mejor Guionista, ha logrado hacerse un hueco entre los grandes títulos de la historia del sello de DC Comics dando lugar a cientos de historias, spin-offs y especiales como los de Jack de las Fábulas o la precuela 1001 Noches de Nieve que incluso han inspirado la adaptación de alguna serie de televisión descaradamente apócrifa como Once Upon a Time. Posteriormente, el tándem formado por Mike Carey y Peter Gross comenzaría a publicar, también en el sello Vertigo y a partir de 2009, The Unwritten, una historia que partía de una premisa similar a Fábulas pero en relación al mundo de la literatura y frecuentando lugares y tonalidades con los que ya había coqueteado su guionista en Crossing Midnight, Lucifer y otros trabajos relacionados con el universo de The Sandman. Pero pese a las posibles similitudes de ambas series pocos lectores habrían esperado que sus responsables concibiesen un crossover en el que acabarían colisionando sus respectivos personajes e historias.

Pero eso mismo fue lo que ocurrió, sus equipos creativos decidieron hacer converger ambas realidades en un evento que serviría a Mike Carey y Peter Gross para cerrar etapa en The Unwritten mientras para las Fábulas de Bill Willingham y Marc Buckingham sería una oportunidad de contarnos una historia alternativa y desprendida de la continuidad oficial de la serie. El anuncio de esta iniciativa, no muy habitual en la línea Vertigo de la editora Karen Berger, sembró la desconfianza y las dudas de los aficionados que ya se apresuraron a poner los últimos clavos en el ataúd del sello de DC Comics. Pero, una vez catado el resultado, aunque no podamos decir que su simiente sea especialmente original, sí podemos decir que acaba siendo una maniobra bastante inteligente y una buena manera de cruzar las realidades de dichas cabeceras. Habían sido Bill Willingham y Peter Gross los que en un primer momento se percataron de las semejanzas de sus criaturas y como el contexto de Fábulas permitía espacio a la filosofía de The Unwritten que en andadura había evitado deliberadamente en sus arcos argumentales los cuentos de hadas. En segunda instancia, Mike Carey y Marc Buckingham llegarían a conclusiones parecidas despertando el germen que haría coincidir los camino de Tom Taylor y las fábulas.

La historia que recopila Las Fábulas no escritas de The Unwritten vuelve sobre el conflicto de la comunidad de Villa Fábula con el Señor Oscuro que ha conquistado y corrompiendo a su imagen y semejanza el mundo de las fábulas. Nos presenta a un pequeño grupo de rebeldes liderados por la maquiavélica Frau Totenkinder que intentando buscar una solución a todos su males reúne un cónclave de magos, brujas e hechiceros para invocar un campeón que les pueda ayudar a derrotar al Señor Oscuro. El invocado no será otro que el mismo Tom Taylor que desconcertado después de haber sobrevivido a los acontecimientos de sus anteriores aventuras narradas en La guerra de las palabras, La herida y Orfeo en el Inframundo llega a este nuevo universo para intentar ayudar a sus habitantes a vencer el mal que ha convertido su reino en un lugar oscuro y lleno de pesadillas. Estos sucesos, como comentábamos antes, nunca han ocurrido en la continuidad de Fábulas pero, por el contrario, conforman un arco argumental de vital importancia para The Unwritten cerrando los dos primeros actos de la epopeya de Mike Carey y Peter Gross que después de este crossover interrumpiría su andadura durante tres meses para abrazar una nueva numeración y comenzar su último acto ligado a las profecías: The Unwritten: Apocalypse.

El veredicto final: pocos crossovers mejor justificados y planteados podemos encontrar hoy en el mercado del cómic estadounidense. Porque los cuentos de hadas son una parte muy importante de la historia de la literatura, son casi le esencia seminal de la misma, en la misma línea de los mitos y leyendas clásicos, al haberse transmitido originalmente de forma oral hasta ser plasmadas siglos después en papel y, por tanto, debían tener su correspondiente espacio en The Unwritten. Pero, como explicó el mismo Mike Carey, eso habría supuesto reinventar y encajar su propia visión sobre los cuentos de hadas en la serie, lo que habría desatado inevitablemente las comparaciones odiosas con Fábulas, corriendo a su vez el riesgo de caer en caminos ya transitados por sus compañeros Bill Willingham y Marc Buckingham. La solución última no deja de ser ingeniosa, aprovechar un universo ajeno ya creado por Fábulas, como ya había hecho Mike Carey con las creaciones de escritores como Herman Melville, Charles Dickens o Mary Shelley. En este cruce The Unwritten juega a romper la cuarta pared más que nunca, acabando por afianzar, mediante la destrucción, los recovecos de su filosofía entorno a los mundos de ficción y su sentido de la fantasía como una parte más de su relato que habla de cambiar el destino de la humanidad mediante la manipulación de las tendencias literarias.

Las piezas del puzzle encajan y los diferentes ritmos narrativos de las dos cabeceras parecen decantarse por el tono más ligero de Fábulas, cosa bastante lógica siendo el armazón principal del relato, con unos personajes con una caracterización ya muy marcada que el dúo de guionistas Bill Willingham y Mike Carey no alteran a grandes rasgos respecto a lo que ya conocíamos. Por otro lado, el universo de Fábulas parece verse beneficiado por la buena simbiosis desarrollada por sus autores, tanto a nivel de planteamientos y de guión, como a nivel gráfico con unos Peter Gross y Mark Buckingham que conectan de manera espectacular encontrándose a medio camino de sus respectivos estilos para darle una solidez al dibujo muy apropiada y agradable. La historia no teme en asumir riesgos, la excepcionalidad de la situación le permite a Bill Willingham ser generoso con Mike Carey para llevar a su terreno la aventura, dejando en sus manos sus mejores juguetes y ayudándole a adentrarse en la mentalidad de sus fábulas que en ningún momento pierden su corazón. En definitiva, Las Fábulas no escritas de The Unwritten nos ofrece un cuidado homenaje a la gran creación de Bill Willingham y Mark Buckingham mientras supone un entretenido punto y aparte en la andadura de The Unwritten.