Harbinger vol. 4: Día perfecto

 

Edición original: Harbinger # 15 al 19 USA (Valiant entertainment).
Edición nacional/ España: Aleta ediciones.
Guión: Joshua Dysart.
Dibujo: Barry Kitson, Clayton Henry, Riley Rossmo.
Entintado:.
Color:.
Formato: Libro rústica, 128 páginas.
Precio: 12 Euros.

 

Peter Stanchek y sus Renegados, los protagonistas de Harbinger (puntualicemos: más bien los héroes de la serie. Toyo Harada tendría mucho que cuestionar sobre la primera afirmación) se encuentran de vacaciones. Tras la brutal batalla en Las Vegas acaecida durante las Guerras Harbinger el grupo necesitaba un merecido relax, y han decidido tomárselo en Los Angeles, disfrutando de playa y fiesta como sólo ellos saben. Sin embargo no podía ser que todo les marchase bien y tuviesen unos días libres perfectos o por lo menos tranquilos. Kris empieza a tener unas extrañas visiones sobre el mar que le llevarán a comportarse de una forma insólita. Para colmo, a raíz de las acciones de ésta, el grupo se verá arrastrado al interior de la mente de nada menos que el inefable Torque, donde sus amigos tendrán que soportar las fantasías sin ninguna lógica, cargadas de testosterona y de esas zafias visiones del Heavy Metal excesivo y mal entendido que siempre acompañan los pensamientos del joven John Torkelson.

Pero ¿es eso todo lo que realmente está pasando? Zephyr sospecha que incluso dentro de la psicodélica y demencial fantasía que sus amigos y ella están viviendo hay algo que no es consistente. Y quedan por explicar los extraños actos de Kris. ¿Qué sucedió realmente tras las Guerras Harbinger?

El cuarto tomo de la colección anteriormente publicada en España por Panini y ya en manos de Aleta ediciones se abre con dos capítulos cuya sinopsis podría ser la de las líneas anteriores. Y son esas páginas que ocupan casi la mitad del libro con diferencia las más flojas. A pesar de un interesante planteamiento, Joshua Dysart parece haber perdido el rumbo de la colección y andar dando tumbos. Tampoco acompaña para nada un Barry Kitson que parece afrontar el trabajo como algo rutinario, y a cuyos lápices la ayuda de Riley Rossmo, Mark Pennington y Brian Level para colmo no sientan nada bien. El aspecto final es tosco, feista y pierde la oportunidad de haber hecho un juego gráfico con el mundo onírico del Torquehalla en el que se desarrolla parte de la historia, pudiendo haberse aproximado a estilos gráficos temáticamente más afines.

Afortunadamente, todo mejora cuando se revelan las respuestas a las preguntas que se plantean en ese primer acto. Sin resultar sorprendentes revelaciones, pero tampoco queriendo estropear aquí la algo previsible sorpresa, a partir de ese punto Dysart le vuelve a coger firmemente el pulso a esta serie a la que tan acertadamente él mismo había definido el tono. Resultan además bienvenidas y refrescantes las páginas que firma Clayton Henry, que nos hace mucho mas pasable el rutinario apartado gráfico que hemos presenciado. Incluso los artífices de éste parecen ponerse las pilas en la segunda mitad del libro, dando la impresión de que en la primera todos los creadores implicados han sufrido un extraño lapsus.

De nuevo centrada donde debe, la trama avanza orgánicamente y dentro de los parámetros que debe esperarse. Todo progresa en un crescendo mientras asistimos a importantes hechos y se nos encamina hacia actos que serán de aun mayor importancia para la colección, a los que asistiremos ya en el siguiente volumen. Incluso podríamos decir que estamos ante números a la altura de algunos de los mejores que hemos visto hasta ahora en la serie, como si se nos quisiese compensar por esos de apertura tan flojos.

Un irregular tomo que combina en su primera mitad un extraño bajón de calidad con un segundo tramo en el que encontramos ya lo que podíamos esperar de esta interesante serie de Valiant.