La historia de dos titanes.
«Real strength is getting back up, Clark»
Estamos en plena saga de Warworld, iniciando nuevo arco. Una saga que nos ha llevado hasta los confines del universo para ver a Superman sufrir y sacrificarse con ecos de martirio cristiano. El Annual sirve como bisagra y nos da un respiro y nos permite cierta introspección sobre la saga.
El número trata del origen de Mongul. El número se divide en dos partes que se van alternando. La infancia de Clark Kent y la de Mongul. ¿Por qué son tan diferentes de adultos? La premisa del tebeo está en la educación y más concretamente en la figura materna.
Así como Martha Kent enseñó a Clark a ser compasivo, empático y no abusar de superioridad. Mongul fue educado en el salvajismo de un planeta duro y sin piedad. Desde el primer momento su madre le exigió lo máximo y no le regaló nada.
¿Porque lo hizo? ¿Era un mujer cruel y despiadada o tenía una doble intención?
Se nos explica es que había una intención y es convertir a Mongul en el mejor guerrero posible.
Hay varias cosas interesantes (aunque obvias y poco novedosas). El papel de la educación en las personas que vayamos a ser en un futuro, como la infancia nos marca y la importancia de la figura materna. Además, dado que Superman parece que va a salir victorioso en su paso por WarWorld en la serie regular, los autores se posicionan claramente hacia un estilo de educación y maternidad mucho más bondadoso y empático.
Es cierto que ambos estilos son extremos y tratan de personajes excepcionales (dos extraterrestres superpoderosos), por tanto son situaciones casi caricaturescas pero estamos en un cómic de superhéroes, debemos aceptar el aspecto metafórico y simbólico de los personajes y de lo que se nos plantea si queremos hacer una lectura más profunda y con cierto significado.
Ni siquiera estos cómics de libran de mensajes ideológicos (más o menos evidentes).
El guion de Simon Spurrier y Phillip Kennedy Johnson, por lo explicado anteriormente, cae en algunos tópicos y es bastante predecible una vez se ha realizado el planteamiento inicial (no necesita más que un par de páginas para que sepamos de que va). Kennedy y Spurrier consiguen no caer ni en el ridículo ni en la cursilería de este tipo de historias, y no es fácil el equilibrio, pero tampoco sorprende ni nos aporta ninguna idea revolucionaria. Otro aspecto peliagudo que es un cebo muy tentador para la sensiblería es como se trata la enfermedad de Martha Kent.
Sin embargo, el cómic se lee bien, es ágil, con ritmo, es entretenido y no se hace pesado (algo habitual en historias de origen). Se puede disfrutar sin caer en análisis y sobreanálisis.
Antes de hablar del dibujo del cómic, merece una mención la preciosa portada de Francesco Francavilla, de estilo retro-kyrbiano con un color setentero.
El dibujo del interior (Dale Eaglesham e Ian Churchill) es más convencional y de corte clásico en el sentido de que es funcional, y práctico. Narra perfectamente lo que está ocurriendo. No hay algarabías, ni fuegos artificiales. Un dibujo sencillo, con los detalles necesarios, la parte de Smallville tiene un estilo de Gary Frank. Es un trabajo gráfico que pasa bastante desapercibido. Consigue su objetivo, cumple con lo que se les pide y no hay más. Un ejercicio de profesionalidad. Cada dibujante se encarga de una parte de la historia, se alternan de manera equilibrada.
En definitiva, el cómic aporta información sobre Mongul y nos permite ver como Clark se relacionaba con su madre enferma, como aceptaba y asumía la tragedia del cáncer. Un trabajo hecho con oficio que cumple, entretiene y completa lo que sabíamos sobre los personajes.
Lo mejor
• La portada,
• La información que nos aporta sobre los personajes.
Lo peor
• Algunos de los clichés y tópicos más que sudados.
Aporta bagaje a los personajes
Guion - 6
Dibujo - 6.5
Interés - 7.5
6.7
Interesante historia para completar lo que sabíamos de Mongul... y Martha Kent.
