“Sabed, oh príncipe que entre los años en que los océanos anegaron Atlantis (…) y los años de aparición de los hijos de Aryas, hubo una edad no soñada en la que brillantes reinos ocuparon la tierra como el manto azul entre las estrellas (…) Y allí llegó Conan, el cimmerio, cabello negro, adustos ojos, espada en mano, ladrón, asaltante, asesino, de grandes tristezas y grandes alegrías, preparado para pisotear con sus pies calzados con sandalias los enjoyados tronos de la tierra”.
Robert Ervin Howard creó el personaje de Conan el bárbaro para los pulps norteamericanos a principios del siglo XX. En la década de los setenta, Roy Thomas se encargó de la adaptación a la historieta de este personaje para el comic book de la editorial Marvel Comics titulado Conan the Barbarian. El artista escogido para plasmar gráficamente las primeras historias del cimmerio fue Barry Windsor-Smith, conocido en aquella época como Barry Smith, un dibujante inglés, casi novato que según confesaba el propio Thomas era mucho más barato que otros profesionales más reconocidos y consolidados como Gil Kane o el mismo John Buscema. La decisión de contratar a un dibujante novel – con un caché más bajo – fue la exigencia que el propietario de la editorial le hizo al editor y guionista de la serie para que finalmente pudiera salir a la luz.
Tras unos números de adaptación el principiante británico demostró que la elección había sido mucho más acertada de lo que nunca podían haber llegado a imaginarse los mandamases de la editorial. A la admiración que Smith sentía por Jack Kirby, le añadió un gran talento narrativo – más elaborado que el del americano – y una asombrosa capacidad para crear paisajes naturales únicos y ambientes urbanos sofisticados, casi reales. Un universo imaginario único y apasionante.
Ciudades y pueblos
Ya en el segundo episodio de la colección, Barry Smith nos obsequia con una viñeta en plano general muy amplio con una detallada descripción de la ciudad de Brutheim en Asgard. Es una arquitectura futurista de raíz orientalizante que presagia las ciudades hyrkanias de episodios posteriores. Hay que recordar que a pesar de la enorme coherencia arquitectónica y paisajística de la Edad Hiboria que podemos ver en los comics de Conan, ésta es una era imaginaria que se sitúa en una época intermedia entre el hipotético cataclismo de la Atlántida y la prehistoria real. Por lo tanto, la descripción de los paisajes es completamente imaginaria. Howard le dedica al asunto muy poco espacio en sus relatos y sus seguidores fueron un poco más prolijos. Barry Smith tiene ante sí un inmenso reto; un nuevo mundo por crear.
A partir del cuarto comic book y coincidiendo con la llegada del cimmerio a los reinos hiborios (traslación a la Edad Hiboria de una época más o menos parecida a la baja Edad Media que fue la más contemporánea) Barry Windsor-Smith empieza a idear el aspecto de la primera ciudad del reino de Zamora que veremos en los tebeos; Arenjun. Esta ciudad es descrita con una meticulosidad y un acierto absolutamente inauditos para la época. La primera página empieza con una secuencia de tres viñetas, entre textos, con un picado de las calles del barrio popular de Maul, de una taberna típica de esta ciudad conocida como la Ciudad de los Ladrones y un último cuadro con un plano general de la Torre del Elefante presidiendo de manera desafiante los barrios populares. Todo un tratado de urbanismo en tres viñetas.
Otra ciudad-estado que es descrita con exquisito detalle es la que podemos visitar en los números 10 y 11 de la colección Conan The Barbarian. Aunque desconocemos el nombre, la morfología de esta urbe está perfectamente dibujada por el artista inglés. El barrio popular llamado El Laberinto nos recuerda a los de Arenjun o Shadizar. Sin embargo, el barrio noble, mucho más lujoso, es una creación absolutamente diferente de Barry Smith con un cruce de estilos entre el clásico grecorromano y el modernismo catalano-francés.
Fuera de las ciudades, en territorio rural, Barry Smith también domina con mano de maestro las calles de los pueblos zamorios. En el episodio publicado en el número cinco de la revista Conan el Bárbaro titulado La hija de Zukala, el protagonista visita un poblado subyugado por un brujo y su bella hija. El mercado, las casas y el castillo del brujo están perfectamente delineados.
Más ejemplos de metrópolis; abajo podemos ver la ciudad de Yezud en Zamora.
Y también la ciudad de Melniboné con sus cúpulas doradas en forma de seno.
Shadizar la perversa que es la urbe más exótica, corrupta y excitante de todas.
Con su skyline completamente abarrotado de cúpulas de oro.
Y finalmente la más extraña, innovadora e inquietante; Xucthol en los Reinos Negros, al sur de Estigia. Una población claustrofóbica y completamente encerrada en sí misma.
En general Barry Smith adopta tres estilos principales en su empeño por describir la arquitectura y el urbanismo de la Edad Hiboria. Para las ciudades hyrkanias se basa en una mezcla entre los templos característicos de la ciudad de Constantinopla con las mezquitas más lujosas de la cultura árabe. Para las ciudades-estado de Zamora y también las de los países hiborios, el artista inglés adopta un compromiso estético entre la Alta Edad Media de los barrios más populares con los decorados más neoclásicos y toques de modernismo catalán y francés de las zonas más opulentas. Finalmente Smith no duda en crear entornos más fantásticos como pueden ser la ciudad de Melniboné, la Torre del Elefante, la del Jardín del Miedo o la ciudad-palacio de Xucthol.
Palacios y templos
El trabajo de Barry Windsor-Smith no se limita a la trama urbana, sino que también se esmera con los edificios singulares de cada urbe inventándose estilos y características propios a cada cultura. Nemedia, segundo imperio en importancia de los reinos hiborios presenta en su capital Numalia edificios tan singulares como La Casa de las Reliquias, templo museo dedicado al dios Mitra. Arriba y abajo podemos ver su imponente morfología y el pórtico de entrada.
La casa del Sacerdote Rojo, en una ciudad sin nombre de Corinthia, es otro de los ejemplos más impactantes con una maravillosa verja modernista que recuerda los trabajos que hizo Josep Mª Jujol para el arquitecto modernista Antoni Gaudí y con su torre coronada por una cúpula de base cuadrada.
Y sin embargo el templo más singular es quizás el Templo de Tarim en la ciudad asediada de Makkalet, un ejemplo característico de arquitectura hyrkania que recuerda poderosamente a los templos de Constantinopla.
Torres
Las torres son otros de los edificios predominantes en la arquitectura hiboria. Las hay de todas las formas y tamaños. La más famosa es sin duda la Torre del Elefante en Arenjun. Un cilindro imponente rodeado de frondosos jardines y completamente forrada de adornos hechos de joyas y pedrería.
Uno de los más innovadores diseños de Smith es la torre del Dios Alado en Shadizar rematada con una cúpula oriental hueca para que acceda el monstruoso animal adorado por sus sectarios seguidores.
Destaca también la torre sin nombre del Jardín del Miedo con su diseño extraterrestre.
Y como no la fálica Torre del Tesoro del Palacio Real de Makkalet que tanto Red Sonja como Conan asaltarán en el famoso #24 de la colección Conan el Bárbaro.
Interiores
Otra de las características del arte de Smith es el excelso trabajo en la decoración interior como por ejemplo el salón del Palacio del Sacerdote Rojo donde podemos apreciar el trabajo del artista en suelos, azulejos, cortinajes y el mobiliario, sin olvidar las numerosas estatuas que pueblan las diferentes habitaciones.
Diametralmente opuesta en estilo, pero igualmente atractiva, es la sala de los espejos del Dios Viviente Tarim en el Palacio Real de la Ciudad Makkalet.
También podemos destacar las estancias de estilo extraterrestre de la inquietante Torre del Elefante en la ciudad de Arenjun; como su sala del tesoro.
O los aposentos donde está prisionero el malogrado Yag-Kosha.
Y finalmente el colmo de la innovación: las calles exteriores-interiores de la ciudad maldita de Xucthol. Con su diseño encerrada en sí misma, esta ciudad está llena de balcones, callejuelas y pórticos que aumentan la sensación de claustrofóbica paranoia de un relato tan hermoso como terrible que se titula Clavos rojos. La versión original en blanco y negro la podemos leer en las revistas Savage Tales #2 y 3.
No me gustaría terminar este limitado repaso a la arquitectura imaginada por Barry Smith para la serie Conan el Bárbaro, sin acordarme de los entintadores de esta etapa de la colección. Son artistas como: Sal Buscema, Dan Adkins, Frank Giacoia, Chic Stone o el mismo Smith. Son los auténticos aparejadores de los edificios hiborios.
Toda época histórica – real o imaginaria – tiene a su artista característico que configura el estilo imperante, que la identifica para la posteridad.
El canon arqutectónico de la Edad Hiboria lo concibió el talento y la imaginación de un artista inglés llamado Barry Windsor-Smith que modeló la estética, el urbanismo y las diferentes corrientes decorativas que sirvieron de ejemplo a todos los artistas posteriores que pasaron por la serie. BWS no sólo fue el primer dibujante de Conan, si no que se convirtió en el creador de un universo imaginario que se antoja casi más real que algunas épocas pasadas de nuestra era. Barry Smith es el verdadero arquitecto de la Edad Hiboria.
Salut!