Un crossover más para terminar
«Tal vez hay cosas que deberían cambiar.»
Batman es el personaje en el que actualmente se asienta gran parte de la producción actual de DC. Black Label, otros Elseworlds, cómics de grupo, o numerosas apariciones en distintas series lo colocan como el héroe más expuesto. Por no hablar de la batfamilia que requiere de títulos donde establecer un elenco gothamita tan largo que ni las cabeceras dedicadas a los Robins con más adeptos son suficientes para integrarlos a todos. En la ingente y desmedida producción no puede faltar la icónica Detective Comics y por supuesto, Batman. Si existen tantas series dedicadas al murciélago (y su cosmos) es por una razón más que evidente, venden. En demasiadas ocasiones no depende de la calidad del producto, la atracción del personaje hace el resto. La serie regular es un buen ejemplo, el aficionado tiende a leerla por inercia y acumularla por coleccionismo.
Tynion inicia su etapa tras la controvertida de King, amada por tantos, defenestrada por otros. El guionista de Omega Men demuestra torpeza tratando aquello que no le interesa contar y presta singular atención en lo que le motiva escribir. Guste más o guste menos, King tiene un próposito y la intención de contar su historia, ostensiblemente diferente. Como se ha comentado en las distintas reseñas, Tynion no ha demostrado interés escribiendo la principal del cruzado de la capa. No parece tener nada que contar, tan solo aventuras dirigidas por la editorial. Es una opción, pudiendo ser muy divertida, siempre y cuando tengas atención a los detalles y un mínimo mimo por la trama, pero el hastío que desprende el ganador reciente de un Eisner es inmenso. Meramente superheroico, entrega un cómic sacado del más convencional de los moldes, con la única obsesión de renovar el entorno del murciélago creando numerosos personajes que no avivan el interés, al igual que la trama. Toda la trayectoria sigue este marcado esquema, presentación de nuevos jugadores y acción por bandera, siempre primando situaciones paulatinamente más grandes que desencadenan en crossover. Costumbre que no abandona en esta conclusión, sumergiéndose en el evento Estado de miedo, heredero de Future State, la iniciativa donde nacen multitud de personajes de nueva generación (con vestigios de relevo) en un futuro próximo y probable, de acogida tibia por parte del público. La poca transcendencia y el distinto entorno presentado, pero al mismo tiempo tan poco significativo, no trasciende lo suficiente, construyendo un escenario sin perspectiva. Si decides mostrar a modo de spoiler el futuro del universo, este debe tener interés, de lo contrario condenas las tramas referentes a la desgana e inatención del lector. Batman resulta poco apetecible, Future State apático, la consecuencia es un Estado de Miedo tedioso.
El Magistrado domina Gotham dispuesto a imponer su visión del orden con ayuda del Espantapájaros y del Pacificador 01. Un trío de villanos (aparecerá alguno más) desleal, con planes ocultos. La batfamilia toma lugar en el cruce, con Oráculo y Nightwing en el papel más destacado, pero no se dejan notar en esta serie de grapas, reservada para Batman, los nuevos personajes y Harley Quinn. Jiménez sigue salvando los muebles de la colección. El dibujo resulta trabajado, entregado a escenas de acción e imágenes potentes, atendiendo a los fondos y a las expresiones, aunque estas en ocasiones no estén al nivel del resto de elementos. Tomeu Morey imprime fuerza al trazo, su vibrante color entrega una Gotham más colorida que de costumbre.
Los complementos son numerosos. Un recurso habitual, suele ocurrir con el cambio de autores de una colección, estamos acostumbrados, pero no significa que no moleste.
El guionista de La Liga de la Justicia Oscura utiliza Estado de Miedo Omega para colocar a los personajes en la posición adecuada de cara al futuro, con el trabajo de multitud de artistas incluidos. Riccardo Federici es el dibujante principal con Guillem March entre los implicados. Sigue la historia dedicada a Pacificador 01, con Ed Brisson y Joshua Hickson ¿Es Pacificador 01 un intento de Azrael del siglo XXI? Ricardo Lopez- Ortiz dibuja y participa en el argumento de Ghostmaker. Una maliciosa invitación a admirar la grandeza del mito de capa blanca y hombreras luminosas. Tal para cual, escrita por Christos Gage, es una historia corta sobre Batman y Catwoman dibujada por Xermánico. Una nueva oportunidad para disfrutar de su trazo, lo hacemos a menudo en los cómics de la editorial, pero nos gustaría verlo más. Sí que resulta una grata lectura el dedicado a Miracle Molly, el personaje de nueva creación que probablemente resulte más interesante. Tynion narra inspirado, la artista griega Dani Strips, hipnotiza con su personal estilo, el colorista Lee Loughride fomenta el amarillo en una paleta psicodélica para las escenas del presente, con Miracle Molly emergida, y utiliza elegantes tonos pastel para el pasado triste de una mujer que vive desencantada con su vida personal, también de la sociedad, caminando hacia su renacimiento cibernético. Y aún queda sitio para un par de páginas protagonizadas por Clownhunter.
Tynion finaliza su recorrido en la colección colocando convenientemente a sus personajes, a golpe de necesidad editorial, como mandan los cánones, tan ceñidos en este cómic. Una etapa que podría calificarse como decepcionante, había muchas esperanzas puestas en el guionista del Detective Comics de Renacimiento (aquella serie coral suponía un disfrute mes a mes), pero aquí no ha demostrado el mismo interés. Desganado, ha entregado el cómic que probablemente le han pedido, estrictamente, sin ninguna intención de malgastar un mínimo de inventiva. Le sustituye en el puesto Williamson (podremos leerlo en la próxima grapa) autor en el que la editorial ha depositado la confianza durante este periplo, siendo el encargado del nuevo megaevento, Dark Crisis. Su estancia en Batman no será muy larga, pronto llegará Zdarsky.
Lo mejor
• El dibujo.
Lo peor
• Los complementos.
Guion - 4
Dibujo - 8.3
Interés - 3
5.1
Anodino
Un final de etapa en la misma línea que todo el run, se esperaba más de un Tynion que a duras penas logra ser entretenido. Jiménez resalta impactante y efectista, elevando la nota del cómic. La serie de grapas integra desaliñados complementos, desluciendo un grado más estos últimos números.
Y ahora, una vez pasado el desastre y paseando una mirada perdida entre las ruinas humeantes, echamos a volar pensamientos:
Alguien ha disfrutado con esto?
Ha arreglado la etapa King? Ha vuelto Batman a su camino?
Que tal el nuevo status quo del personaje, sin mansion, sin empresas…?
Cual es vuestro nuevo personaje favorito? Clownhunter, Ghostmaker, Jardinera, Miracle Molly, Pacificador 01, otro?
Que dura fue esta etapa, y peor aun saber que todavia nos estamos recuperando de ella, pero con Zdarsky al menos hay esperanza de que salga algo como minimo mejor.