Batman Converge en Crisis en Tierras Infinitas

 

Edición original: Convergence: Batman and The Outsiders núms. 1 y 2 USA, Convergence: Detective Comics núms. 1 y 2 USA
Edición nacional/ España: ECC Ediciones
Guión: Len Wein, Marc Andreyko
Dibujo: Bill Sienkiewicz, Carlos D’Anda, Denys Cowan
Entintado: Carlos D’Anda
Color: Gabe Eltaeb
Formato: Rústica, 104 págs. A color.
Precio: 9,95 euros

 

Hay ocasiones en la que uno debe encontrar su sitio en el mundo. No estamos hablando de Batman o Superman, personajes que por mérito propio no solo está claro cuál es su sitio, sino que alrededor de ellos pivotan siempre innumerables series que clonan su esencia, con mayor o menor fortuna, con el fin de sobrevivir a la sombra de estos dos grandes iconos culturales.
Pero en los años ochenta alguien en DC pensó que era bueno buscar nuevos aires para Batman. Aires que curiosamente no iban a venir en su propia serie, ni en la de la Liga, sino en una nueva colección donde Batman se iba a rodear de otros héroes, mucho menos relevantes pero muy interesantes. Personajes como Metamorfo, Halo, Katana, Rayo Negro, Looker y GeoForce conformaban un equipo donde sus propios orígenes y sus vidas como héroes, apartados de los grandes focos mediáticos, les conferían un exotismo muy particular. Dibujantes como Jim Aparo y Alan Davis, se encargaron de dar forma a esta mítica colección, mientras que la pluma de Mike W. Barr puso las palabras necesarias. Ahora vuelven gracias a Convergencia.

En este tomo también nos encontramos con un título que junto con Action Comics, forma parte de las grandes leyendas del cómic. Estamos hablando de Detective Comics, la serie en la que Batman vio la luz por primera vez en 1929 de mano de Bill Finger y Bob Kane. El momento al que se retrae Convergencia dentro de Detective Comics es uno de los más curiosos ya que Bruce está muerto y son Dick Grayson y su hija Helena Wayne quienes se encargan de continuar con su legado. Todo esto en Tierra 2, claro está.

Lo mejor de este tie in son las consecuencias de unos Outsiders sin poderes. Marc Adreyko, un viejo conocido en DC por su excelente trabajo en la serie de Manhunter, acompañado del increíble dibujante Jesús Saiz, es el encargado de contarnos esos momentos en los que estos héroes han de pasar todo un año bajo la cúpula de Tellos.

Adreyko nos narra las diferentes maneras de enfocar un mismo problema. Para cada uno de sus miembros la situación es diferente y en este caso, en la parte más emocional de la historia, lo que hace grandes a estos personajes, es donde podemos ver a Adreyko muy en forma. Lástima que enseguida llega el momento de meter lo narrado en la dinámica del crossover Convergencia y todo se viene abajo como un castillo de naipes. La batalla se torna sosa, sin vida, sin tensión, sin drama y eso desencadena que no haya vínculo alguno con la segunda parte de la historia y por tanto un abandono emocional total del lector hacia este añorado grupo.

Guion: 6
Dibujo: 7
Interés: 6

Len Wein vuelve a la carga y lo hace de la mano de dos dibujantes descomunales por sus particulares estilos de dibujo. Por un lado tenemos a Denys Cowan y Bill Sienkiewicz, dibujantes de trazo sucio, recto y roto, capaces de componer páginas de la forma más pictórica posible. Su estilo tal vez hubiera quedado más armoniosos en otros tie in, pero su fuerza narrativa es innegable, por mucho que a primera vista sus viñetas y páginas puedan parecer un caos de líneas sin sentido.

Pero es Wein el que mejor sabe hacer su trabajo. Aprovecha lo mejor de cada personaje, de cada universo y lo desarrolla para complementarlo todo. Para Wein lo importante es la coherencia y la honestidad con el personaje y demuestra un enorme talento al ser capaz de hacerlo de manera armoniosa. Juega con el legado de Batman, reflexiona sobre como el Superman soviético se enfrenta a todo un año sin poderes y se molesta en mostrar el vacío que ha dejado Bruce Wayne tras su muerte.

Wein es un buen contador de historias, conocedor del Universo DC y un gran profesional que sabe sacar petróleo en las adversidades. Un tie in equilibrado que destaca y hace que este tomo merezca la pena ser leído. Aunque no todo son aciertos, ya que los diálogos entre Dick y Helena no son de lo mejor de Wein y la actitud de esta última llega a ser en algunos momentos insufrible. Tal vez sea algo premeditado, nunca lo sabremos, pero al cerrar la última página de esta miniserie se agradece por fin desprenderse de estos dos puntos.

Guion: 7
Dibujo: 8
Interés: 7

Un tomo que al solo encartar dos miniseries queda equilibrado por estadística. Uno falla, otro acierta. Hacer una valoración por tanto de conjunto es tan sencilla, y a la vez tan difícil, como decir que entretiene pero no para ser recordado.