Batman: Superheavy (3º parte y final)

Análisis final del arco argumental Superheavy

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Antes de la publicación de Dc Universe:Rebirth#1 de Geoff Johns y del Renacimiento que trajo consigo,llegó a las tiendas USA, el 23 de Marzo de 2016, el cómic más esperado para muchos de los lectores de DC, Batman#50 y lo era por partida triple. Primero, porque era el final del arco Superheavy, en dónde se nos iba a mostrar el nuevo Batman enfrentándose a Mr. Bloom. Segundo, porque con el, prácticamente se despedía el único equipo creativo de DC que se había mantenido desde aquellos inciertos, airados y excitantes inicios de los new 52 en Septiembre de 20011, hasta su pseudo defunción cinco años mas tarde en Mayo de 2016, el tandem constituido por el guionista Scott Snyder y el dibujante Greg Capullo. Y en tercer lugar, porque Batman, sin ninguna duda, había sido la serie new 52 con mayor éxito, siendo las cifras de ventas de sus últimos números los siguientes:

Batman 47—–5º puesto con 127,201
Batman 48—–8º puesto con 100,962
Batman 49—–3º puesto con 102,689
Batman 50—–1º puesto con 163,406
Batman 51—–5º puesto con 101,922

Debiendo añadir que en ninguno de estos cinco meses hubo otra serie regular de DC que sobrepasará en ventas a Batman.

Un dúo perfectamente conjuntado
Un dúo perfectamente conjuntado

En relación a los cuatro números a analizar, indicar que aunque los dos últimos presentan un gran valor por sobradas razones- regreso y final- tanto Batman#47 como Batman#48 ofrecen detalles y apariciones que los hacen muy recordados y muy importantes para el devenir de Superheavy.

Batman#47

Sería entendible que cualquiera esgrimiese que este número de Batman es un mal comic, pues de él, apenas siete páginas son dignas de mencionar, pero son unas páginas excelsas, emocionantes, inesperadas. El resto es pura acción protagonizadas por Gordón en su enfrentamiento contra Mr.Bloom y Duke escapando del cuartel del Pingüino. Ambas situaciones solo merecen la pena por su final, tanto la sorpresa con la que se encuentra Gordon como el encuentro de Duke con Bruce. Y es que en este número empieza a decaer el interés por las aventuras de BatGordon y se muestra que lo importante de la serie está en Bruce, el cual, en apenas siete páginas, convierte un cómic mediocre en uno notable.
Nuevamente Snyder vuelve a utilizar un monólogo, a primera vista cotidiano, que se inicia en la primera página y continua en las tres últimas en donde se descubre su secreto. En esta ocasión, la Carta de Gotham.
Pero antes de analizar esa trama, se ha de comenzar por el encuentro entre Duke y Wayne. Hasta ahora, la postura de Duke era distante cuando no de enfado hacia Bruce y si bien los lectores intuían las razones del Robin callejero, es aquí cuando se lo espeta directamente al amnésico Wayne. “Lo descubriste, lo dedujiste. Averiguaste cómo arreglar el sistema de aire acondicionado del Centro. Diste con el modo de transformar un horror en un parque infantil. Tú solucionas cosas, Bruce ¡Resuelves acertijos! ¡A nadie se le da mejor que a ti, maldición! ¡Eres el mejor del mundo, y aun así te niegas a ver lo que tienes delante! Y tras estas estupendas palabras escritas por Snyder, viene una imaginativa secuencia que finaliza en una viñeta que se puede comparar, en cuanto a significado, con la tantas veces repetida de Year One o la que creó Morrison en Batman: El retorno. En este caso, unas luces en un túnel del metro bajo las palabras de Duke, logran que Bruce Wayne descubra la forma que tiene el espacio negativo.

Impactante y reveladora imagen
Impactante y reveladora imagen

Las tres últimas páginas del cómic son una delicia, pues tienen mucha leña que cortar. Snyder recupera la historia de cartas del inicio, que presenta altas dosis de metalenguaje y se interrelaciona con lo que Capullo dibuja, el cual, por su parte recupera el escenario donde por primera vez se vio a Bruce Wayne en este arco, aquel banco bajo la luz de una farola frente al lago de Gotham. Y si en Batman#41 Plascencia proporcionaba a ese rincón de paz un color rojo y verdoso, en Batman#47 aplica una paleta amarilla y anaranjada. Y es que todo ha cambiado. Es en la penúltima página, donde se percibe lo bien que se conjuntan el actual guionista de After Death Book y el dibujante de Reborn. Capullo divide la página en ocho viñetas rectangulares, en la primera se ve a Bruce dudando mientras las polillas revolotean frente a la luz de la farola, a continuación sujeta una semilla mientras Snyder nos cuenta “Algo que destruya todo aquello que hayáis construido”, en la tercera, Bruce ya no duda, presenta un gesto serio, de confirmación, que continua con el dibujo de las dos polillas, “algo que transforme vuestra noche completa”. Es en la primera viñeta inferior donde aparece Mr. Bloom y luego la pupila de la polilla, a la que sigue el ojo de Bruce que refleja un cuerpo, al tiempo que iba decir las palabras esperadas, pero es interrumpido por… Tremendo cliffhanger el de la última página.

Batman#48

Es un cómic especial, aparentemente es menos importante que los dos siguientes, pero tras varias relecturas, se puede considerar de los más jugosos en la recta final de Superheavy. Como se ha señalado anteriormente, este arco argumental en un principio parecía ser la historia de Jim Gordon como Batman y de un Bruce Wayne amnésico y feliz con su nueva vida, pero en la segunda mitad de este arco se descubre que la trama es el regreso del cruzado enmascarado y las motivaciones del nuevo y genial villano, Mr. Bloom y entremedias la ciudad de Gotham, los ciudadanos de Gotham.
Este número continua con los dos cliffhanger que presentaba el número anterior, pero se centra, no en Gordon ni en Wayne, sino en Mr. Bloom y en el acompañante de banco de Bruce, y mas que en los dibujos de Capullo, el valor se halla en la palabras de Snyder.
En la historia del parque, el hombre pálido de ojos verdes lleva todo el peso de la conversación, con un discurso con referencias, con bromas, pero en todo caso enseñando que es mejor, que es más valida, una vida razonable donde prevalezca la cordura, que una dominada por la locura, aunque esta última suponga un beneficio para todos. En el número anterior, Duke le dice a Bruce, “¡Quieres seguir libre de eso!¡Quieres ser este tipo!¡Pero cualquiera podría ser la persona que eres ahora!¡La que eras antes,aquella, no podía serlo nadie excepto tú!” Y en Batman#48, el hombre con flor en la chaqueta, tienta al dudoso Bruce, señalando que en esta vida llena de maldad no es juzgable el ser egoísta, en pensar primero en uno mismo si con ello se logra ser feliz “O quiza no haya otra cosa. Salvo aprovechar al máximo cuanto tengamos y seguir adelante. Hemos estado aquí. Y eso basta.”

Bruce Wayne y su acompañante en el parque
Bruce Wayne y su acompañante en el parque

En cuanto al sermón de Mr. Bloom, se podría de describir como maniqueo, asemejándole al de Bane en el film El caballero Oscuro Renace de Nolan, pero en todo caso, destapa las vergüenzas del mundo en el que vivimos y es dirigido para todo el mundo y todas las clases, basándose en el juicio de Hobbes en el Leviatan según el cual, El hombre es un lobo para el hombre, “¿Os caen bien vuestros vecino?No, la verdad es que no. Los odiáis. Ellos os odian. Sonreís, asentís, pero…¿Sabéis qué? Por dentro decís: “Malditos sean” Hacedlo. Malditos”.
Las dos historias tratan de lo mismo: individuo vs colectivo. Si en el primer caso es respecto a si Bruce ha de ser feliz con su nueva vida o ha de sacrificarse por los demás, en el segundo, Mr. Bloom enfrenta la necesidad de la lucha individual, de ese darwinismo mal entendido, contra la fuerza del conjunto de la sociedad de Gotham, aquella que se ha puesto siempre de pie a pesar de todo lo que ha tenido que soportar.
Las últimas dos páginas son de una gran fuerza, indicando que Bruce no es que ha de ser Batman, es que debe, es que es. En ellas el trabajo de Capullo nuevamente es impresionante, pero en esta ocasión no por realizar un dibujo espectacular sino de nuevo por su narración: una viñeta horizontal en la parte superior, con Alfred solo, sentado en una oscura habitación donde los muebles están tapados por una sabana, viendo por la televisión el desastre y caos que este ocasionando Mr. Bloom en Gotham, a la vez que escucha un fuerte y repetitivo golpeo en la puerta. Bajo ella, cinco pequeñas viñetas verticales en las que Capullo muestra como Alfred es consciente de lo equivocado que ha estado, de que es inevitable lo que va a pasar y lo logra con un trabajo de similitudes y primeros planos. En la primera, la imagen de Mr. Bloom, la segunda, el picaporte siendo forzado, la tercera, el ojo de un asustado Alfred, la cuarta, un primer plano del picaporte que tiene forma de ojo o de flor o de cara de Mr. Bloom, la quinta, el reflejo de Alfred dentro de la pupila del ojo que es el picaporte. A continuación viene una viñeta horizontal en la zona inferior de la página, en la que la puerta es reventada por la parte posterior del picaporte, lo cual nos retrotrae a la primera página del comic, en donde el colisionador de partículas, con forma de ojo, está fuera de control o bajo control de otro y se está cargando peligrosamente con demasiada intensidad. Con la última página, la dupla de Batman new 52, vuelve a crear por enésima vez una potente imagen final para recordar: un sollozante Pennyworth con manos tapándose las orejas para no escuchar lo inevitable, la exigencia de un enfurecido Bruce Wayne de que le lleve a donde ha de estar, para ser quien ha de ser.

Batman#49

Ante este comic se ha regresar al análisis realizado en Batman: Superheavy (2º parte) por dos razones. La primera, es porque allí se decía que Batman#44 dibujado magistralmente porJock, era un comic sobresaliente y en este tercer análisis, los parabienes y las alabanzas se los merece Batman#49 con un espectacular Yanick Paquette al dibujo. Es un comic singular que funciona a dos niveles; el físico y el mental. El físico es menos llamativo en cuanto a dibujo pero importante para apreciar los cambios acontecidos durante el desarrollo de la historia. Apenas tres números atrás aun se podía ver a un feliz Bruce Wayne duchándose desnudo con una sensual Julie Madison y ahora vemos a un rudo y decidido Bruce señalando a un paternal Alfred “Debo hacerlo. Soy…” y a Madison diciendo ante el sacrificio de Bruce “Lo haré…” Y es que el Bruce Wayne de estás páginas es atrevido, persuasivo, tenaz, decidido, es decir, es casi Batman, solamente le falta el conocimiento perdido.

El arte de Paquette
El arte de Paquette

La parte mental del cómic, donde Paquette aplica su vistoso arte junto al color de Nathan Fairbaian, es la segunda razón para rememorar el anterior análisis. Entonces, cuando en Batman#45 Alfred le mostraba a Clark Kent una máquina en la que había trabajado Batman, se recomendaba para un mayor entendimiento de este concepto la historia corta 27 escrita por Snyder y dibujada por Sean Murphy para el especial Detective Comics 27. Aquí, el guionista de The Wake da un paso más sobre el funcionamiento de la máquina: “No funcionaba. Usted…El viejo Bruce…tuvo un sueño terrible y definitivo. Un linaje interminable de hombres llamados Bruce Wayne, con los recuerdos de Batman implantados, así como sus habilidades, de forma que cada uno sucediera al anterior. Pero jamás llegó a completarse. La clonación no era el problema. El obstáculo estaba en la mente humana.” Esta idea, mas propia de la ciencia ficción, posibilita que Snyder y Paquete se luzcan en la historia referida al plano mental, la que se desarrolla mientras Bruce Wayne sufre en la máquina. Aquí nuevamente existe una confrontación entre el individuo y el colectivo, y si anteriormente reflejábamos la postura egoísta o nihilista en Mr. Bloom o el personaje del parque, en Batman#49, aunque en verdad durante todo el arco, la presenta Alfred. Él quiere que Bruce Wayne tenga una vida tranquila y feliz, pues se la merece tras tanto sufrimiento, lucha y sacrificio por los demás, pero este Bruce Wayne sabe que él es Batman, ya no le vale engaños, amnesias u ocultaciones, si ha de sacrificarse por los ciudadanos de Gotham, lo hará como lo ha hecho siempre.
Respecto a Batman#45 tambien se destacaban las palabras y la viñeta en la que Alfred está delante de un reloj de pie, entonces, aquel Bruce Wayne decía “Basta. Ya he oído suficiente, Alfred.” pero el Bruce Wayne de Batman#49, ante la misma viñeta, aunque Paquette dibuja un reloj de pie distinto, pregunta enérgicamente “¿Qué hay tras el reloj, Alfred?” y ante la mentirosa respuestas del muñido mayordomo, exclama “Ahora ya sé que no hay escapatoria. Sé lo que se esconde tras esa puerta. Tengo que verlo” y en las páginas finales sentencia diciendo “Tengo que hacerlo.”
En definitiva, Batman#49 es el broche perfecto para el final de la verdadera historia de Superheavy, el renacimiento de un Batman nuevo.

Batman#50

Es el número con el que acaba Superheavy, 48 páginas en las que Greg Capullo desprende un dibujo detallista para un guión palomitero y de pura acción donde se produce el enfrentamiento entre Batman y Mr. Bloom, entre Gordon y Mr. Bloom y entre los ciudadanos de Gotham y Mr. Bloom, pero dentro de esta estruendosa traca final, se puede vislumbrar tres momentos de reflexión, de discurso con el que concluir Superheavy.
El primero de estos momentos aparece con el descubrimiento de Duke y la historia de origen del primigenio Mr. Bloom. Ya se ha hablado anteriormente del antagonismo conceptual presente a lo largo y ancho de Superheavy, en este ocasión, Duke responde ante él con las siguientes palabras “…los poderes no son la respuesta! La solución está en nosotros, las personas buenas…”
El segundo se encuentra en pleno enfrentamiento entre Batman y Mr. Bloom. En la explosiva e impactante lucha a puñetazo limpio que dibuja Capullo, Snyder pone en boca del carismático villano de Superheavy “Únete a mí y haremos de Gotham algo asombroso. Cada uno velará por si mismo, como debe ser. Salvaje, pero justo ¿Qué me dices?” La concisa respuesta de Batman es “Convertir la ciudad en una zona de guerra no es salvarla. Es rendirse”, lo que ocasiona que un imponente Mr. Bloom que no nunca muere, indiqué “ Y yo pensando que estábamos del mismo lado. Pero ahora sé que no eres mas que uno de ellos Seguramente alguien rico. Privilegiado.¿Alguién con mucho que perder?¿Algún líder resguardado de los elementos en su torre de marfil? Un héroe del pueblo. Eso es lo que soy. Soy el único lo bastante fuerte para ver esta ciudad como lo que es: una falacia. Una ficción para que la gente se sienta libre, luche, ame y viva en libertad.”

Espectacular trabajo de Capullo
Espectacular trabajo de Capullo

Tras Duke y Batman, no podía faltar el que supuestamente era el personaje principal de Superheavy y por el que de manera superficial será recordado este arco: Jim Gordon y su Batconejo. Es en las páginas finales y en las que posiblemente sean sus últimas palabras como Batman, incluso las que podrían ser sus últimas palabras con vida, cuando realiza un interesante discurso llenó de significado tanto para el personaje como para la historia. Comienza señalando una certeza que se ha repetido en numerosas ocasiones durante estos diez números “Diría que lo de ser Batman…yo, Jim Gordon…ha sido un error. La idea mas estúpida en la historia de Gotham City” A continuación señala que sin Batman su miedo es “¿Y si el sistema no funciona?…¿Y si estuviera en ruinas, fuese algo injusto y además…imposible de reparar?” Para añadir que él ha intentado ser un superhéroe para arreglar las cosas, pero indicando que Batman “no puede arreglar las cosas reales…porque el no es real” sino mas bien “él lucha contra nuestras pesadillas para enseñarnos a luchar contra los auténticos miedos a la luz del día.”

En definitiva, Superheavy habla de los Mr. Bloom, de los Jim Gordon, de los Batman que hay en la vida, pero también de las Gotham y sus ciudadanos que existen, luchan y sobreviven inspirándose en leyendas o mitos. Y si este último aspecto, no se había dejado bien claro en los últimos números, Snyder y Capullo, inciden en ello en la emotiva y sencilla carta de amor a Gotham que supone Batman#51, con el que finalizan su etapa del murciélago new 52.
Para finalizar, indicar que en Batman: Superheavy (1º parte) se señalaba que el objetivo de este análisis era que el lector viese de otra manera Superheavy, entrase en su juego y que le diese otra oportunidad pues no les iba a decepcionar. Espero que lo haya logrado.

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Daniel Gavilán
5 noviembre, 2016 9:12

Junto a End Game y los primeros números de la Corte de los Búhos lo mejor que ha dado Snyder para la franquicia. Muy bien llevada la sustitución de roles y las vacaciones de Bruce, pero -ante todo- genial este Bloom como incorporación a la galería de villanos del murciélago

Ein
Ein
Lector
6 noviembre, 2016 0:34

A mí esta etapa de Snyder/Capullo me ha gustado de principio a fin. Me parece increíble el nivelazo que ha mantenido durante 50 números. Una de las mejores de la historia.