Black Summer

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Guión: Warren Ellis
Dibujo: Juan José Ryp
Edición España: Ediciones Glénat
Colección: PopCorn
Contiene: Black Summer Collected Edition USA
Formato: Rústica de 208 páginas
Precio: 15,00 €

 

«No me juzguéis.
Aceptad que hago esto por mi amor
hacia vosotros y vuestra libertad»

En el año 2000, el célebre guionista británico Warren Ellis, escribía su conocido Manifiesto del Viejo Bastardo, donde proclamaba bien alto y sin pelos en la lengua lo que opinaba sobre la industria del cómic, la novela gráfica, las «posibilidades desperdiciadas» del medio y, más particularmente, de los cómics de superhéroes a los que calificaba como «un maldito hongo asqueroso» que asfixiaba con su simple presencia las oportunidades de otros géneros e historias que podía ofrecer el mundo del cómic. Fue también Warren Ellis quién, a finales del siglo pasado, planteó en su etapa en The Authority otra manera de entender los cómics de superhéroes tomando prestada una idea «colateral» y deudora del Watchmen de Alan Moore y Dave Gibbons para mostrarnos como sería un universo donde los superhéroes, conscientes finalmente de su condición suprahumana, se alzasen como protectores definitivos de la humanidad gobernándolos, según su estricto y particular código moral, hasta sus últimas consecuencias. Más recientemente, este tipo de «superhéroe tutelar» es otra vez el punto de partida de Black Summer, una nueva y provocativa historia enmarcada dentro del género superheroico concebida por el veterano guionista y plasmada gráficamente por el dibujante español Juan José Ryp para la joven editorial independiente Avatar Press, donde Warren Ellis ya ha publicado otras obras suyas como Doktor Sleepless, No Hero (repitiendo con Juan José Ryp en el dibujo), Supergod, FreakAngels, Anna Mercury o Blackgas. Obras editadas en nuestro país, casi todas ellas, en la línea PopCorn de Ediciones Glénat. Al igual que Garth Ennis, con The Boys o anteriormente en Hitman, Warren Ellis, con trabajos como Black Summer o No Hero, parece querer dinamitar desde dentro un género como el superheroico, que ya ha vivido sus horas más oscuras, «vertiendo todo su odio» hacia él en sus planteamientos e ideas de la forma más brutal posible.

John Horus, superhéroe miembro de los Seven Guns, un grupo formado en sus orígenes por siete jóvenes idealistas y ambiciosos con ganas de cambiar el mundo y de alcanzar la fama, declara en una rueda de prensa, desde la Casa Blanca, haber asesinado al presidente de los Estados Unidos, al vicepresidente y a varios de sus consejeros, debido a la mala gestión impulsada por estos y, sobre todo, por haber embarcado a su país en una guerra ilegal. Pese a las «buenas intenciones» de John Horus se proclama inmediatamente el estado de emergencia en toda la nación, convulsionada por lo que los medios de comunicación atestiguan como un golpe de estado, provocando que todos los integrantes de los Seven Guns, ajenos a la decisión tomada por su antiguo líder, sean acechados y perseguidos por el ejército y las fuerzas de seguridad del estado. Ahora tendrán que enfrentarse a su mayor reto, enfrentados a su propio país, al que habían jurado defender y proteger, viendo como este se revuelve contra ellos como un animal herido. Black Summer es una buena muestra del tipo de historia prototípica en la cual Warren Ellis se ha prodigado en los últimos años, un subgénero que podríamos calificar de «distopía superheroica» y que, en esta ocasión, se presenta muy cercana a nuestro mundo actual y pasado histórico más reciente. De esta manera en Black Summer podemos encontrar referencias y paralelismos directos con la política estadounidense del presidente George W. Bush, antecesor en el cargo de la presidencia que ahora ostenta el demócrata Barack Obama, y con sucesos como la guerra de Irak o el atentado del 11-S como telón de fondo. También parece hacerse eco de ciertas teorías conspiranoicas y de visiones progresistas y críticas con la administración Bush en la línea de la película documental Fahrenheit 9/11 del cineasta Michael Moore. Aunque sólo se pueda observar en algunas portadas especiales, a parte de por el contexto de los temas mencionados que trata el cómic, el presidente de esta ficción tiene, evidentemente, los rasgos del citado George W. Bush aunque, quizá por temor a la censura o debido al simple uso metafórico que pretenden hacer sus autores, su rostro no se llega a mostrar en las páginas interiores del cómic.

En Black Summer encontraremos contundentes diálogos, cargados de cinismo y de rabia y no carentes de cierta demagogia que Warren Ellis sabe encauzar de manera adecuada para que no sea demasiado directo y evidente su ánimo panfletario y anarquista. La acción desfasada y bárbara, con un tratamiento de la violencia descarnado y contundente y unos personajes totalmente pasados de vueltas, se pasean por un mundo definido por la estética cyberpunk y los gadgets imposibles de última generación conformando un futuro a medio camino entre nuestro presente y la ciencia ficción distópica. Warren Ellis ha cultivado a lo largo de su carrera un estilo propio que resulta inconfundible y que nunca deja indiferente e incluso, en obras menores como este Black Summer, escritas con el piloto automático encendido, sus planteamientos suelen ser lo suficientemente efectistas y llamativos como para conseguir atraer nuestra atención. En el caso concreto de Black Summer esto se traduce en un producto ameno, con un ritmo endiabladamente adrenalítico, que consigue exprimir al máximo las virtudes que Juan José Ryp demuestra sobre el papel. Unos lápices marcados por un dibujo «sucio» y visceral, con un nivel de detalle que roza la paranoia y que, en algunas ocasiones, resulta algo excesivo, provocando que algunas páginas y composiciones parezcan auténticos mosaicos construidos con miles pequeñas piezas que ofrecen una visión distorsionada y algo caótica de lo que esta ocurriendo realmente en sus viñetas. Aún así, Juan José Ryp , con un dibujo que acaba enganchando y donde evidencia echar toda la carne en el asador, demuestra estar especialmente dotado para la acción, tanto que acaba subliminando el trasfondo narrativo y crítico creado por Warren Ellis en la historia.

El autor de Transmetropolitan y Planetary, las obras más representativas hasta la fecha de Warren Ellis, tiene suficientes tablas como para jugar con habilidad con los diferentes puntos de vista de los personajes que baraja entre sus manos, mostrándonos algunos arquetipos de personalidades encontradas, sin tomar partido por ninguna de ellas, que acaban por componer un rompecabezas donde la ambigüedad de sus acciones y sus ideas se ofrece a un interesante al debate en el cual no acaba profundizando. El conjunto viene a completarse a través de una trama fluida y enérgica, cargada de una ironía efectista de trazo grueso, que acaba por definir a Black Summer como una obra fresca y entretenida cuyas pretensiones están sujetas a varias interpretaciones. En definitiva, para los seguidores de Warren Ellis, Black Summer será una obra que no les decepcionará aunque, en perspectiva, esté lejos de sus mejores trabajos. El autor no parece acabar de comprometerse con la historia, un relato que toca temas bastante importantes e interesantes pero por los que al final, a pesar del ruido que aparentemente hace, Warren Ellis pasa de puntillas sin aportar nada relevante al género ni a su propio currículo. Una historia, por otro lado, que puede ser una buena manera para acercarse y tomar un primer contacto con este peculiar guionista para aquellos que no lo hayan hecho ya, al tratarse de una obra corta y autoconclusiva que refleja bastante bien las filias y fobias recurrentes de su creador. En resumen, Black Summer, con la carga ideológica habitual que Warren Ellis imprime a sus relatos, destaca por su ácida crítica social y política, por sus desenfrenados diálogos y su acción vertiginosa, manchada de sangre, vísceras y sesos por doquier, y por sus ansías de crear polémica y llamar la atención cueste lo que cueste. Respecto a la edición de Black Summer por parte de Ediciones Glénat, enmarcada, como decíamos al principio, dentro de su colección Pop Corn, resulta en un producto sencillo, práctico, con los extras justos y necesarios y asequible a todos los bolsillos. Cosas todas ellas juntas que hoy en día son bastante difíciles de encontrar en las obras publicadas por las grandes editoriales españolas.

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alfeizar
alfeizar
Lector
1 abril, 2011 9:13

los cómics de superhéroes …..«un maldito hongo asqueroso”
En cuanto hace falta la pasta, lo de los superhéroes ni es maldito, ni es hongo, ni es asqueroso…
 

nenoskoda
nenoskoda
Lector
1 abril, 2011 9:35

Como tantos guiones de Ellis empieza muy bien y acaba siendo confuso y excesivamente alargado. Lo más destacable el dibujo de Juan Jose Ryp.

Hachas
Hachas
Lector
1 abril, 2011 11:25

Sangre y vísceras… es lo que vende…

punicher
punicher
Lector
1 abril, 2011 11:49

A mi lo cierto es que la historia me gustó bastante, aunque es cierto que comienza muy fuerte y que hacia el final la historia parece perder fuerza, en cuanto al dibujo de Juanjo Ryp solo decir que es una puta pasada!! no creo que haya muchos dibujantes con ese nivel de detalle, un crack!!

josemari
josemari
Lector
1 abril, 2011 11:59

Típica memez progre… pasando que es gerundio…

samanosuke
1 abril, 2011 17:31

Soy un gran fan de Warren Ellis, pero he de decir que ésta y otras muchas historias «menores» que escribe para editoriales independientes son bastante malas, en los mejores casos apenas son esbozos de ideas que apenas ha desarrollado y que ha colado a estas editoriales o al menos, las que ha colado a Avatar que son las que conozco, caso de este Black Summer, de Strange Kiss, Dark Blue… Aunque no es el único que se dedica a colar ideas desechadas en otras editoriales.

INCREDIBLE KURT
INCREDIBLE KURT
1 abril, 2011 18:55

WARREN ELLIS, es DIOS.´
El autor fue el que cambió para siempre la industria con The Authority y Planetary. Claro está que para MARVEL sólo su NEXTWAVE y a menor medidad THUNDERBOLTS, lograron algo de calidad a la que nos tenía acostumbrados.
En AVATAR, el saca historias que no puede contar en otras editoriales y funcionan. Black Summer no es la excepción y está bien.
En fin, en el cómics hubo un antes y un después gracias a autores como Miller, Moore, Waid, Morrison, Robinson, Ennis, Gaiman y WARREN ELLIS.
 

X-ternon
1 abril, 2011 18:59

Ellis muchas veces echa pestes del mainstream superheróico, pero la verdad es que todos estos tebeos que hace para Avatar parecen desarrollados con desgana, y de las cosas q hace para Marvel casi siempre tienen un pase y algunas veces están muy bien, a mi su Astonishing me está pareciendo una agradable sorpresa en contra de la opinión general. De todos modos creo que jamás lo veremos tan inspirado como en Planetary, Authority o Transmetopolitan

X-ternon
1 abril, 2011 18:59

Ellis muchas veces echa pestes del mainstream superheróico, pero la verdad es que todos estos tebeos que hace para Avatar parecen desarrollados con desgana, y de las cosas q hace para Marvel casi siempre tienen un pase y algunas veces están muy bien, a mi su Astonishing me está pareciendo una agradable sorpresa en contra de la opinión general. De todos modos creo que jamás lo veremos tan inspirado como en Planetary, Authority o Transmetopolitan

X-ternon
1 abril, 2011 19:02

Perdón por el repe. Samanosuke, estoy totalmente de acuerdo contigo

Lord Deu
Lord Deu
1 abril, 2011 19:06

Muy buen articulo pero…
En Black Summer encontraremos contundentes diálogos, cargados de cinismo y de rabia y no carentes de cierta demagogia que Warren Ellis sabe encauzar de manera adecuada para que no sea demasiado directo y evidente su ánimo panfletario y anarquista.
No estoy de acuerdo con esta frase, de hecho creo que ese afan panfletario de Ellis,  se termina comiendo en gran medida muchas de las buenas ideas de Ellis, que -como dijeron muchos- tienden a desinflanrse mientras hacen el recorrido de ideas a proyectos consumados.

Konshu
Konshu
Lector
1 abril, 2011 19:07

Pues a mí me gustó bastante.
No me parece que sean historias menores descartadas para las grandes, sino que gracias a la libertad en cuanto a violencia que les da Avatar, autores como Ellis y Ennis pueden descargar aquí toda su mala leche y contar las historias como quieren.
No creo que Black Summer pretenda ser un Watchmen, ni creo que se la deba comparar, ya que Watchmen inició un tipo de visión de los superhéroes que se ha vuelto tan recurrente que ya se lo puede considerar un subgénero en sí mismo (New Statesmen, Classwar, Winter Men, No Hero, The Mighty… y un largo etcétera).
Creo que sencillamente Ellis quería contar su historia y lo hace de una forma muy amena a unque un tanto bestia. A mí me gustó más que No Hero, que aunque partía de una propuesta más interesante, se me antojó corta y mal aprovechada.
En cambio, en Black Summer se le saca todo el jugo a la historia y mantiene bastante bien el pulso (aunque es cierto que el final baja un poco el nivel).  
Y Ryp se sale. Su estilo nunca me había gustado mucho, pero con este comic se me abrieron los ojos a su talento. Este hombre se deja la piel en cada página! Impresionante!
No es una obra maestra, pero sí un buen comic sin complejos para pasar el rato. Sin duda lo que más me ha gustado de Avatar de lo que he leído.

nenoskoda
nenoskoda
Lector
1 abril, 2011 19:12

muchas historias “menores” que escribe para editoriales independientes son bastante malas, en los mejores casos apenas son esbozos de ideas que apenas ha desarrollado y que ha colado a estas editoriales
 
Tienes mucha razón.
o he sido un gran admirador de Ellis pero ha ido dilapidando su crédito, especialmente en sus series para independientes.
Te lo venden como la opotunidad de ver desde el punto de vista del viejo bastardo algunos de los géneros más queridos por el aficionado: el Dr. Sleepless -una visión actualizada de Transmet,Wolfskin -la versión Ellis de Conan-, Tokyo Storm Warning -Mazinger Z desde el punto de vista de Ellis-, Black Gas -el fenómeno zombi desde el punto de vista de Warren… realmente me dejaron perplejo.
¿Ésto es todo lo que Ellis puede hacer cuando la editorial le da libertad total para escribir? Personajes poco o nada desarrollados, inicios prometedores que se diluyen en cuanto empieza el número 2, escenas alargadas hasta el aburrimiento, finales repentinos y decepcionantes… ¿Qué le pasa? ¿No tiene interés en esas series y las escribe en 15 minutos? ¿Sólo le interesa que una editorial publique esa serie para que una productora vea que la idea base es prometedora para hacer una película?
 Es curioso que diga que los supers son un hongo que impide que otros géneros crezcan a su alrededor cuando él, un autor de prestigio al que se le permite publicar sobre el tema que elija, malgasta la oportunidad de interesar en esos otros géneros- Un lector que se decida a probar la espada y brujería, o los zombis, o los robots gigantes, atraído por el nombre de Ellis,  huirá despavorido tras comprobar la bajísima calidad que derrocha en sus trabajos para independientes.
Parece imposible que sea el mismo guionista de, ya no digo Authority, Planetary o Transmetropolitan, sino de Ocean, Stormwatch o Nextwave.
 
 

nenoskoda
nenoskoda
Lector
1 abril, 2011 22:06

Típica memez progre… pasando que es gerundio…
 
¿Qué es lo que te parece un memez progre?

nenoskoda
nenoskoda
Lector
1 abril, 2011 22:06

Típica memez progre… pasando que es gerundio…
 
¿Qué es lo que te parece una memez progre?

samanosuke
1 abril, 2011 22:15

Algo le pasa hoy al cajetín de los comentarios: mensajes duplicados, no m deja votar con las manitas… ¡Exijo expresarme libremente con un pulgar en alto para nenoskoda! 😀

El hermano Vudú
El hermano Vudú
Lector
1 abril, 2011 22:20

A mi Ellis me ha gustado mucho, pero en los ultimos años lo veo con mas fracasos que aciertos y un tanto repetitivo. Lo de los superheroes estoy de acuerdo en que en el pasado con el comic code podian limitar otros muchos generos, pero hoy dia ves muchas mas tematicas que antes y desde luego no me parece precisamente él la persona idonea para realizar esa critica cuando vuelve muchas veces a los SH o realiza obras flojas en las independientes.
Este comic no me gusto en dibujo y el guion fue un buen comienzo que se desinfla luego.

Prometeo Moderno
Prometeo Moderno
Lector
1 abril, 2011 22:46

Totalmente de acuerdo con los comentarios anteriores.
 
Ellis desaprovecha la oportunidad de brindar un punto de vista diferente al género superheróico, más allá de que a modo personal, tanto «the authotity» como «Planetary» también son más de lo mismo, buenas ideas, interesantes planteamientos que luego se diluyen y terminan de manera insulsa o anticlimática.
 
Es una lástima, porque creatividad e ingenio no le faltan, pero se vé que le importa un carajo la industria que le da de comer, o al menos, por la cuál se le conoce en el mundo.
 
Que la «pose» de quemado con la industria a Alan Moore se lo podemos soportar, pero Ellis mientras  se quede en el «amague» de ser un guionista innovador, rupturista y profundo, no consigue otra cosa que quedar como una caricatura de artista comprometido con lo que hace.
 
Saludos y buen artículo!

J.Bizarro
1 abril, 2011 23:17

«Típica memez progre… pasando que es gerundio…
Igual que Wachtmen o V for Vendetta, no?
Pues a mi, a pesar de la evidente falta de ganas que le pone el sr.Ellis, cualquiera de sus «obras menores» para Avatar y similares me parecen muchísimo más frescas y originales que la mayoría de las grapas y one-shots de Marvel o DC.

samanosuke
1 abril, 2011 23:53

J. Bizarro pues te recomienda algunas grapas más que interesantes, como el X Factor de David o los trabajos de Abnett y Lanning, que además respetan a los personajes que escriben en Marvel.

Tildoras
Tildoras
2 abril, 2011 12:39

Secundo todo lo que diga Warren Ellis, con o sin su mala leche lleva totalmente la razón, sobre todo lo de que la saturación de los superhéroes ahoga las posibilidades de otros géneros.
 
La cosa es muy simple, hoy en día por suerte hay mucha variedad, pero los superhéroes siguen asfixiando las estanterías americanas, logrando que muchisima gente prefiera comprar su Spiderman del mes, sea bueno o malo, a darle una oportunidad a ese comic desconocido que hay dos baldas a la derecha. Por consiguiente muchisimos comics pasan desapercibidos y tienen malas ventas no porque sean malos sino porque la gente no les ha dado una oportunidad dado que tienen que comprarse los 300 comics de Invasión Secreta.
 
Totalmente de acuerdo con el comentario 20.  Cualquier cosa que hace Ellis por menor que sea me parece más interesante que cualquier cosa que hace Marvel o DC incluso cuando las escribe él mismo.
Ahora bien, es cierto que si declaras cosas así no deberías seguir escribiendo para Marvel o DC porque si no no eres consecuente, como sí lo fue Kirkman, que también estaba desencantado con ellas y decidió irse a escribir sólo sus propias cosas.

gerard
gerard
2 abril, 2011 15:17

Viendo lo pco que os gusta el comentario de alguien diciendo que es una memez progre se ve que efectvamete sois unos progres y me atreberia a decir que posiblemete muchos ademas sois homosexuales.

nenoskoda
nenoskoda
Lector
2 abril, 2011 15:18

¡Exijo expresarme libremente con un pulgar en alto para nenoskoda!
 
Gracias, majo!!

nenoskoda
nenoskoda
Lector
2 abril, 2011 15:40

Pues a mí no me parece que sus planteamientos sean originales en absoluto. Puede que algunas de sus ideas no se vean en el cómic comercial americano, pero están muy vistas en novelas de ciencia ficción, series independientes USA y cómic europeo. Sólo le añade unos toques de sexo raro, drogas y palabrotas y con éso parece que ya es un autor rompedor cuando lo único que hace es reutilizar ideas muy vistas.
 
Warren Ellis es un guionista inteligente e interesante, pero desde Planetary no hace nada que destaque (Incluso su Authority -que a mí me gusta mucho- fue superado en todos los aspectos por el de Millar). Viendo su página web me da la sensación de que incluso alimenta de forma artificial su imagen de tío raro y rompedor, como ha dicho Prometeo, un poco a semejanza de Alan Moore, aunque hay que decir que no le llega ni a los talones.
Se queja del cómic superhéroes pero curiosamente sus mejores trabajos de los últimos años han sido para Marvel (Nextwave, Iron Man Thunderbolts) y aunque publica miniseries con frecuencia, parece que o no le importa, o no puede, hacer nada interesante que no tenga nada que ver directa o indirectamente con los superhéroes.
 
Respecto a lo que dice Tildoras de que cualquier cosa que escriba Warren Ellis le parece más interesante que cualquier cosa que haga Marvel y DC… sólo mostrar mi total desacuerdo. Las series de Strange Killing, por ejemplo, son copias lamentables de Constantine que no llevan ni a la suela de los episodios que él mismo escribió del personaje. Por no hablar de Wolfskin, mil veces inferior a los episodios clásicos de Conan, siendo sólo un derroche de peleas y salvajadas sin argumento.
En general sus series para editoriales pequeñas quieren ser nuevas vueltas de tuerca de géneros existentes que aparte de mostrar un poco de mala leche quedan muy lejos de los originales que le inspiraron.
 
 

nenoskoda
nenoskoda
Lector
2 abril, 2011 16:49

Viendo lo pco que os gusta el comentario de alguien diciendo que es una memez progre se ve que efectvamete sois unos progres y me atreberia a decir que posiblemete muchos ademas sois homosexuales
 
Lo que te pregunto es que lo que te ha parecido una memez progre, si la opinión de Ellis o la serie…
Sobre lo de ser homosexuales no sé cuantos escriben en Zn, imagino que alguno sí que habrá. Estoy seguro ser progre y homosexual debe de ser algo estupendo, mucho mejor que ser un imbécil medio analfabeto. 

Batmito
Batmito
2 abril, 2011 20:49

«Viendo lo pco que os gusta el comentario de alguien diciendo que es una memez progre se ve que efectvamete sois unos progres y me atreberia a decir que posiblemete muchos ademas sois homosexuales.»
Y si lo fueramos que, gerard, ¿no deberiamos «atrebernos» a comentar nada?

Tildoras
Tildoras
3 abril, 2011 2:38

Acaban de anunciar a Warren Ellis para seis números de Vengadores Secretos. Sigh, como siga así no le pienso defender más.

J.Bizarro
4 abril, 2011 19:24

El comic de superhéroes, al ser lo más vendido del mainstream, depende en exceso de las ventas. Las historias pasan por un montón de manos que las capan y es normal que en el proceso se desvirtuen un poco. Es lo normal porque al fin y al cabo se trata de una industria que genera mucha pasta, aunque dependa tanto de la empatía del lector (como pressing catch xD). Creo que ese es el motivo por el que se empeña en perpetuarse reciclando hasta el infinito todo lo que funciona y genera ventas.
Al fin y al cabo el comic es cultura pop y como tal depende de las corrientes plásticas de cada momento. Eso es parte de su encanto y creo que Warren Ellis, con todos sus defectos como autor, sabe explotar esa empatía en el lector mediante la revisión y vuelta de tuerca de conceptos clásicos de cada género. Cuando leo su obra voy consciente de lo que puedo esperar, no pretendo encontrar una idea trascendental, sino más bien reirme un rato y pasarlo bien.

ulmman4
ulmman4
Lector
9 enero, 2013 23:14

 A mi me ha parecido floja la trama. Bajo mi punto de vista está poco desarrollada y coincido con el que comenta que parece hecha en 15 minutos. Además de ser poco consistente y creible. ¿En EEUU surje un grupo de pseudosuperhéroes «sociales»? ¿En EEUU? Por no hablar de sus «poderes» que parecen estar desarrolados por alguna agencia gubernamental y, sinceramente no veo posible que ningún gobierno estadounidense «invierta» en unos superhéroes «sociales».

En cuanto al dibujo, aún a pesar del nivel de detalle (O precisamente por eso), no me ha gustado nada.