Edición original: Brain Boy 0-3 USA (Dark Horse comics).
Edición nacional/ España: Aleta ediciones.
Guión: Fred Van Lente.
Dibujo: R.B. Silva, Rob Lean, Freddie Williams II.
Color: Ego.
Formato: Libro rustica, 112 páginas.
Precio: 12, 95 Euros.
La editorial Dark Horse está volviendo a intentar crear un universo superheroico interrelacionado y coherente, un tanto en la onda de los de DC y Marvel, pero alejándose de las sensibilidades de estas majors para abrazar ese estilo de cómic algo mas adulto que la caracteriza. Bajo la iniciativa Black Sky, ha rescatado a algunos de los personajes más populares de su anterior intento durante los años 90 (X, Ghost) y les ha añadido añejos héroes poco conocidos por estos lares, publicados hace varias décadas por editoriales ya extintas. Así, aparte del Capitán Midnight, tenemos a este Brain Boy, cuyas historias vieron la luz en los años 60 en una breve colección de la mítica Dell comics que contase con los dibujos del gran Gil Kane.
Al igual que con Valiant, editora que ha conseguido cierto éxito con el reboot de su cosmos ficticio compartido de los años 90, Dark Horse ha contado con algunas figuras emergentes de la escritura comiquera como Duane Swierczynsky y Fred Van Lente. Es este ultimo guionista -de calidad muy contrastada a la vista de sus trabajos en Increíble Hércules, Archer & Armstrong, Action Philosophers, y Comic book history of comics– el que se ocupa de esta primera miniserie de Brain boy, lo cual resulta en una buena tarjeta de visita que nos augura que no vamos a estar frente a un mal tebeo. En USA ya se ha publicado otra titulada The men from G.E.S.T.A.L.T., también con guion de Van Lente.
Matt Price es un psíquico criado desde la cuna por Industrias Albright (lo cual conecta al personaje con el Capitán Midnight), una corporación asesora de seguridad que subcontrata al gobierno Estadounidense los servicios de gente con poderes mentales. Con ellos se realizan labores de guardaespaldas y guardianes de secretos para altos cargos políticos frente a espías de otras potencias que también poseen talentos telepáticos en un mundo en el que estos, sin ser comunes ni conocidos por el gran público, existen.
Brain Boy, como Matt odia que le llamen, es el más poderoso de estos dotados psíquicos del que se tiene constancia. Y él lo sabe. Joven, seguro de sí mismo, bien parecido, inteligente, acido e irreverente, consigue sin embargo despertar nuestras simpatías y no cargarnos ni despertar cierta repugnancia, como podría parecer de entrada considerando tal descripción. Ni es un bastardo egoísta, ni es ingenuo. Y tampoco es el típico personaje atormentado o solemne que solemos encontrarnos con este tipo de capacidades.
El título de esta primera miniserie, Psi Vs Psi, hace referencia a una popular serie de tiras cómicas de la revista MAD llamada Spy Vs. Spy dibujada por un disidente cubano entre los años 60 y 80. Y es que efectivamente, estamos ante una historia de espías, una que involucra figuras de la política internacional sudamericana. Si el archienemigo de la encarnación original de Brain Boy en los años 60 era un retrato deformado de Fidel Castro, aquí ése personaje es reconstruido, llevando su paralelismo hacia el de otro polémico dirigente de esa región del mundo. Pero Van Lente no cae en la caricatura ni la condena unilateral: Aquí los lapsos morales de todas las posturas políticas son puestos en solfa, repartiéndose leña en todas direcciones. Y todo, sin dejar de ser un tebeo de acción, sin olvidar en ningún momento su condición de entretenimiento blockbuster en el que las pistolas Glock se sustituyen por tremendos impactos telekinéticos.
Conseguir todo eso, es sin duda meritorio. No lo es menos complicar y gestionar con eficacia las tramas y peripecias de un relato considerando que hay agentes (entre ellos, el protagonista) que leen los pensamientos. Personajes así son elementos muy complicados de escribir manteniendo cierto grado de intriga sin que queden agujeros en la consistencia de la historia. Van Lente sale airoso de todos estos bretes, con esa escritura inteligente al tiempo que dinámica y divertida que suele caracterizarle.
La labor de los dibujantes involucrados -con un estilo algo cartoon pero sin caer en el infantilismo- es también encomiable. El aspecto gráfico está a muy buen nivel: es cierto que Freddie Williams II realiza un mejor trabajo en el primer capítulo que el de RB Silva y Rob Lean en el resto del libro, pero los lápices de estos están lejos de ser malos. Tampoco hay que olvidar las maravillosas portadas originales de Ariel Olivetti para cada número USA que vemos adornando las transiciones entre capítulos de este tomo.
Por supuesto, nada es perfecto, y tal vez a Van Lente se le pueda acusar de que sobrecarga un punto la obra con textos en primera persona del protagonista. El desconcertante por abrupto final del cómic en el tomo antes de mostrar los extras, también desluce un poco el resultado final del libro.
Por todo lo demás, es justo decir que esperaremos las siguientes miniseries de Brain Boy con interés.
Review Overview
Guion - 8.5
Dibujo - 7.5
Interés - 8
8
Valoración global
Prometedor debut que deja con ganas de leer los siguientes proyectos relacionados con el personaje.
He estado ojeando las previas que tiene Aleta en su web de este comic, del Capi Midnight y de X,
y la verdad es que, junto a las reseñas que les habéis dedicado en ZN, me han gustado mucho las tres.
Así que no descarto para nada hacerme en breve con estos tres primeros tomos, a ver que tal…
Pero yo le veo futuro a esto, si.
Por cierto, ya que hablamos de Aleta, una sugerencia, si me permitís:
¿Le podríais hacer una reseña a esto?…
http://www.aletaediciones.com/Galerias/astaroth_y_bernadette/galeria.htm
Y a esto otro, aprovechando que es el mismo autor…
http://www.lacupula.com/catalogo/wanda-wolfe
Y, si no es mucho pedir, ambas reseñas con profusión de imágenes que ilustren los textos?
Gracias
😉
Rockeros Saludos.