Introducción
Ya llevamos unos días con la dichosa aplicación que se nos come el tiempo para fastidio de amigos y familia… pero es que qué gozada es bucear y dejarse llevar por los enlaces, buscadores, recomendaciones y la imaginación en la aplicación que pone una buena parte (no todo, ya hemos llegado a los límites) del catálogo de DC.
Para calmar las ánsias de los redactores más ánsias, hemos perpetrado esta entrada llena de curiosidades y maravillas, cosas raras, joyas escondidos, placeres culpables, filias inconfesables… en la que exponemos algunas de las piezas que más nos han llamado la atención de la aplicación.
Estan todas las que tienen que estar, pero no todas las que podrían estar… o como sea la expresión…
Entrad y disfrutad.
Bat Lash (2008)
Bartholomew «Bat» Aloysius Lash es el personaje central que le da nombre a esta miniserie de los 2000. Los padres de la criatura fueron Carmine Infantino, Joe Orlando, Sheldon Mayer y Sergio Aragonés. Debutó en Showcase en 1968. Luego tuvo su propia colección (no está en el Infinite) y fue deambulando por los títulos de DC dedicados al Western.
En 2008 la editorial decide recuperar al personaje en una miniserie con guiones de Aragonés, diálogos de Peter Brandvold, dibujos de John Severin y portadas de Walter Simonson.
Bat Lash tiene trazas de antihéroe y aquí no lo es menos enfrentado y acorralado por los poderes fácticos. La historia viene a ser una especie de Romeo y Julieta del far west con indios, intentos de violación, racismo, luchas de poder… y mucha violencia. Todo ilustrado por el clásico John Severin con su estilo rugoso que nos recuerda a Corben cuando solo se dedica a la tinta convencional.
Un western adulto, violento, trepidante, con su subtexto y de una calidad bastante interesante.
Una joyita.
Red Tornado (1985)
Tornado Rojo, el personaje creado por Gardner Fox y Dick Dillin en 1968 en las páginas de la JLA donde murió y resucitó dos veces, tuvo una miniserie en 1985 escrita nada menos que por Kurt Busiek, por orden de Giordano que quería darles más publicidad a personajes menos conocidos de la JLA. Busiek había debutado hace muy poco en el medio cuando se le presentó esta oportunidad y al dibujo le acompañaba Infantino.
Fue una miniserie de 4 números que salió junto a Crisis en Tierras Infinitas y, en vez de meterse de lleno en ella, decidió contar su propia aventura. Una historia donde nos ponen en situación contándonos quién es el protagonista, su día a día y una amenaza que solo él puede derrotar.
Dibujado por Infantino quien no necesita presentación y es un gusto verle en buena forma con su manera de dibujar al héroe anguloso con fuerza y los primeros planos dramáticos, no así la tecnología donde se resiente un poco, pero tampoco molesta, junto a un Busiek que, aunque sea primerizo demuestra ya buenas tablas y saber manejarse en una aventura con una presentación, nudo y desenlace muy pensado para el personaje y con un final ya establecido (al estar Crisis de por medio y la posterior -y van- muerte de tornado en la famosa Maxi-serie).
No es la quinta maravilla, pero tiene ese encanto de cómic clásico en el que pasas un buen rato, va directo a la trama y da una oportunidad de que se conozcan personajes secundarios que no suelen tener mucha presencia en series grupales.
Stalker (1975)
A mediados de los 70 y a la estela de la moda de Conan, todas las editoriales tenían la necesidad de incorporar colecciones de espada y brujería. Infantino necesitaba llenar la lista de este tipo de series con un par de títulos. Levitz se ofreció al ser fan del género y se le sumó Ditko que en esos momentos estaba buscando un proyecto. Para completar los nombres legendarios se le sumó Wally Wood a las tintas.
Pim, pam, pum.
La serie duró apenas 6 números y sin formar parte de Hall of Fame del catálogo de DC ni de las mejores obras de Levitz, conforma una serie de entretenidas aventuras con guerreros, brujos, damiselas, hechiceras, demonios y dragones. Dibujo magnético y personalísimo.
Stalker es un guerrero que ha cambiado su alma por la inmortalidad. La trama de la colección trata sobre como el protagonista intenta recuperar su alma enfrentándose a todo tipo de peligros.
Aventuras de espada y brujería que mezcla una cantidad de referencias importantes que van desde Conan al Príncipe Valiente, aunque desde un estilo mucho más centrado en la aventura y el entretenimiento puro. Bastante menos artístico y trascendental que el segundo.
Nos puede recordar, también a la europea y coetánea Thorgal.
Los fans del género y de los autores, lo van a gozar sin complejos ni manías.
Mad Magazine
La legendaria revista Mad se encuentra también en el catálogo de DC. Podemos encontrar decenas y decenas de números y especiales de una publicación histórica del cómic mundial y del humor americano.
Parodias, ironía, sátira, desparpajo y crítica social… la revista ha tenido idas y venidas, pero desde hace unos años DC la ha recuperado para que no se pierda el patrimonio del humor más loco.
Políticos, deportistas, actores, músicos, famosos en general y… superhéroes, sí, superhéroes… son algunos de las “inocentes” víctimas de esta publicación que no se toma nada, pero nada en serio.
Se trata de una oportunidad de conocer su humor, sus personajes, su estilo, su capacidad para trascender… mediante números y especiales de casi cualquier tema.
Si bien es cierto, que está muy centrado en el día a día de Estados Unidos y a pesar de la capacidad colonizadora de la cultura yanki, hay cosas que pueden quedar lejos al lector europeo. Sin embargo, vale la pena bucear en la sátira desacomplejada de autores como Sergio Aragonés, Harvey Kurtzman o Charlie Kadau por decir algunos nombres al tun-tun.
Muy recomendable.
The Outsiders (1985)
Batman dio un portazo a la Liga de la Justicia para formar un grupo de gente algo peculiar, de héroes nuevos más algún veterano. Alguno de ellos con un carácter especial… o porqué no decirlo más claro: ultraviolento.
Los Outsiders.
Batman y los Outsiders son un grupo antológico dentro de DC que protagonizaron una de las series más interesantes precrisis.
El equipo se rompió en el numero 32. Batman se volvió a enfadar (tras unos números increíbles de Alan Davis) y dejó el equipo. La serie se renombró para llamarse Adventures of the Outsiders y de paso ser la probatura de una nueva serie:
The Outsiders.
Con guion de Mike W. Barr y el regreso a los lápices de Jim Aparo. Esta nueva colección narró las aventuras del grupo “en solitario”. Si bien, con Batman como líder el protagonismo solía caer en manos de los personajes menos conocidos, en esta nueva serie Barr se centra mucho más en las personalidades de Halo, Looker, Katana, Geo-Fuerza, etcétera.
Los chicos se han emancipado.
Tramas más complejas de lo que parecen, subtextos interesantes donde se tocan aspectos como el feminismo, el racismo, la manera de confrontar el sistema, etcétera.
La serie duró 30 números y la acabó Erik Larssen como dibujante (muy rudimentario, todavía)
Prácticamente todos los números están inéditos en castellano. El DC Universe Infinite es una oportunidad para gozarlos.
Lois Lane (1986)
Lois Lane, la reportera más famosa de los cómics, incansable y arrolladora, quien también es la eterna mujer de Superman, creada por Jerry Siegel y Joe Shuster protagonizó cómics variados desde su creación. Bizarros, amores imposibles, etc. En 1986 el año en que la madurez del cómic entró con Watchmen y DKR Lois tuvo una miniserie de dos números de 53 y 48 páginas respectivamente, bastante más cruda con lo que acostumbra el personaje.
Escrita por Mindy Newell la que fue la primera mujer acreditada como escritora de Wonder Woman, guionista de algunos números de la Legión o Amatista por poner unos ejemplos nos cuenta una historia sobre asesinatos de niños con unos impactantes dibujos y portadas de Gray Morrow famoso por sus tiras de prensa de Tarzán (aludiendo a las novelas Pulp) donde nos da unos de sus trabajos más interesantes en el comic-book, en su trazo no deja de estar presente la sensación de perdida y malestar. Acompañado con colores complementados a la perfección del legendario editor y escritor Joe Orlando.
Una historia dura, que no se anda con tonterías. Una declaración de intenciones que, existe por una razón. Mindy Newell explica al final del cómic en una carta editorial que la historia se publicó para resaltar la enorme cantidad de niños desaparecidos en EE. UU. Ofrece consejos sobre cómo mantener a los niños a salvo y analiza la importancia de educar a los niños y a los padres sobre el tema.
Un cómic diferente y olvidado, que nos muestra un problema real con la suficiente inteligencia de no caer en el sensacionalismo, quizás el final no guste a todo el mundo, pero demuestra muy bien cómo es el periodismo, los giros de ciertos casos y sus posibles resoluciones.
Una joya a descubrir.
Sword of Atom (1983)
Siguiendo con la espada… rarísima joya entomológica de continuidad.
Después de descubrir que su mujer la engañaba con su socio,Ray Palmer, el Atomo, se refugia a ahogar sus penas en la selva amazónica donde reducido (y atrapado) a talla microscópica vive una serie de aventuras más cercanas a la espada y brujería que a la ciencia ficción.
Esta serie se ubica en la ciudad imaginaria de Morlaidh, donde Atom se ve mezclado con las intrigas del rebelde Taren y la princesa Laethwen.
Guiones de Jan Strnad y dibujos del legendario Gil Kane.
Una golosina entomológica de muy breve recorrido que se publicó en 1983 y que apenas duró siete números repartidos en dos miniseries (Sword of Atom y Sword of Atom Special) que hará las delicias de los adoradores de la DC precrisis.
Si bien el guion es un poco convencional, pero con el nivel de trepidancia mínimo para pasarlo bien, Kane hace un despliegue de su arte al nivel que sus fans están acostumbrados. El hombre de las mil contorsiones y el millón de escorzos, que repartió su maestría por cientos de tebeos y que en ese momento tenía su dibujo más barroco y extremo, o sea, el mejor, es la superetrella de estos números.
Imperdible.
Teen Titans (1996)
Recoger el testigo de Wolfman y Perez era una carga muy pesada, tras los eventos de Hora Cero y con el éxito recogido con Superman, DC mandó al bueno de Dan Jurgens. Toda parte tras los eventos de la Crisis Temporal, donde Ray Palmer había rejuvenecido y era ahora un adolescente. Este personaje haría de punto de unión con el resto del Universo DC y haría de líder de la nueva encarnación, que por el resto fueron todos miembros nuevos.
Los personajes de Risk, Hot Spot y Prysm no llegaron a tener un gran impacto, quizás el primero destacando un poco más. Sirvieron de carnaza para que Tom King hiciera su aquello en Héroes en Crisis. El personaje que, si destacó y se ha mantenido hasta día de hoy, con mayor o menor trascendencia, es el personaje de Argent. Uno al que si que le supo dar profundidad y evolución.
El dibujo de Jurgens no está tan liefelcizado, es un cómic muy divertido que llegó hasta el número 24 y con especiales cruzándose con sidekicks distintos, como Capitán Marvel Jr. o Tim Drake.
Para intentar enganchar con los fans de los titanes y que no se sintiesen totalmente perdidos, tuvimos como entintador a George Perez, que es verdad que dotaba al cómic de una atmósfera conocida, pero el dibujo de Jurgens y el no encajaban tan bien.
Doctor Mid-nite (1999)
En 1999, cuando la JSA volvió por todo lo alto con Robinson, Goyer y Johns conocimos una nueva iteración del Doctor Mid-nite que nada tenía que ver con la heroína de Infinity Inc, Beth Chapel. Resultaba ser, Pieter Cross, creado unos meses antes en una serie limitada del mismo nombre de tres números por Matt Wagner y JK Snyder III, dibujante que solía colaborar con Wagner en algunas de sus obras más personales.
Estamos hablando de una obra que perfectamente podría pasar por el sello Vertigo. Críticas a la gentrificación mediante drogas a las masas y una historia con un dibujo en ocasiones lisérgico y claustrofóbico que va mutando a más superheroico en consonancia con la historia, mostrando como lo extraño y decadente va poco a pooc dando paso a la normalidad, la regeneración y la extirpación del veneno al que nos infunden las altas esferas .
Cada página de Snyder III es una maravilla pictórica donde ninguna viñeta es igual, un estilo expresionista y bello en ocasiones como Sienkiewicz o Duncan Fegredo en Kid Eternity. El guion de Wagner es simple pero efectivo. Trata de crear un médico Bondiano y urbano con toques de un carismático héroe de la época Pulp en una ciudad decadente.
Tres números que merecen mucha la pena, aunque sea por ver el trabajo artístico de Snyder III y de paso descubrís una pequeña obra que actualizaba un viejo héroe de la Golden. Si era tu favorito de la JSA moderna, ya sabes de donde salió.
Todo ventajas con el Infinite.
Batgirl (2000)
Existen ciertas cabeceras que siempre están en publicación, aunque con algunos momentos de pausa, pero que es difícil no darlas por sentado. De entre todas las relacionadas con los personajes bajo la estela del murciélago, Batgirl es una cabecera constante y a la vez con su peculiaridad, pues el protagonismo va saltando entre personajes. Pero como pasa con el resto de líneas, siempre hay un primer volumen, y este es el primero, sí, en el año 2000.
Cassandra Cain llevaba un par de años desde su concepción en Tierra de Nadie por Kelley Puckett. Sería este mismo el encargado de guionizar la serie y Damion Scott el encargado de dibujar, siendo mucho más cartoon que actualmente en Ghost-rider.
Kelley Puckett supo reflejar la discapacidad de forma muy inteligente y novedosa, es normal que muchos autores actuales hayan crecido con sus historias y sirvan de inspiración. Se marcó un precedente sobre como nuevos personajes podían llegar a incorporarse en el universo del murciélago, sobre todo personajes femeninos, racializados y con discapacidad. Una tarea que para comienzos de los 2000 era titánica, pero que supo abrirse hueco.
A medida que fueron pasando los números llegaron muchos dibujantes y Kelley Puckett acabaría abandonando la serie para que llegara Chuck Dixon a recoger el testigo. Duró más de setenta números. Las influencias de esta etapa están más vivas que nunca, pues Kelly Thompson en sus Aves de Presa no esconde sus referencias, pero sin duda, es con la nueva cabecera de Batgirl donde no para de hacerse una mención directa a todo lo que ocurrió en estos números, siendo una lectura muy aconsejada para adentraros.
Dog Moon (1996)
Dog Moon es un cómic y a su vez muchas cosas.
Una canción, un poema, un sueño ilustrado por los ángeles, una historia de amor y de muerte, incluso puede parecer alucinación por consumo de estupefacientes, pero desde luego no deja indiferente a nadie.
Lo amas o lo odias.
Este comic en formato prestigio de 64 páginas del sello Vertigo está dibujado por Tim Truman y escrito por el cantautor y poeta Robert Hunter quien compuso muchas canciones del grupo Grateful Dead –algunas de ellas bajo los efectos del LSD– lo cual explica muchas cosas tanto de esas letras como de este comic.
Dog Moon, es principalmente un poema narrativo; se nos cuenta la historia de dos hombres que tienen el inusual trabajo de buscar a los muertos. Conducen durante la noche en busca de los muertos para llevarlos de vuelta a la base a cambio de un cobro. Los muertos deben dar su nombre, lo único que pueden decir los que han fallecido. Si no lo dicen, no tienen transporte y deben vagar en el limbo. Hasta que en una ruta se encuentran a una mujer y todo cambia.
Resulta muy curioso ver mientras la trama avanza y todo se va complicando entre el narrador y el protagonista descubrir como la historia y el arte de Truman van abriéndose desde los caminos más oníricos posibles donde cada página bellamente ilustrada -el verdadero motor de la obra- hasta el horror más apocaliptico, sensual, hipnótico y hermoso de las viejas revistas de comic.
Tampoco quiero decir mucho de la obra, es una experiencia que en ocasiones puede parecer lenta y desde luego una excentricidad del autor. Seguro que a cada uno le transmite unas sensaciones distintas.
Solo está disponible en el Tier Ultra al ser de Vertigo. Si lo tienes, merece la pena echarle un par de lecturas.
Zatanna (2010)
Grant Morrison tras 7 Soldados de la Victoria y tras lo ocurrido con Crisis de Identidad y Catwoman, habían dejado a la maga Zatanna Zatara en un estado un tanto extraño de continuidad. A pesar de ser una heroína clásica, estaba en un momento de moralidad complicada, no tanto como cierta otra maga de la editorial rival.
Si existe un autor que sea capaz de recoger la complejidad de un personaje y reducirlo a sus bases para empezar a construir desde ahí, es Paul Dini (que me perdone Mark Waid). Stephane Roux fue el artista titular, pero en tan solo 16 números pasaron artistas como Cliff Chiang, Jesús Saiz o Víctor Ibáñez.
La trama es simple, un mago malvado, cosas raras ocurren con la magia y un giro emocional con el que atacar a la buena Zee. Lo importante es el corazón de un Dini sobresaliente, un apartado artístico muy movido, pero con dibujantes de una calidad elevada. Es un cómic imposible de odiar, con el corazón en su sitio y divertido.
Este cómic supuso un despegue como no lo fue la obra de Morrison para el personaje. Tras llegar Flashpoint y acabar esta línea, Zatanna fue líder de Liga de la Justicia Oscura y se publicó la novelita gráfica de Zatanna/Canario Negro que si llegó a ser publicada por ECC.
Raven (2016)
Marv Wolfman y Raven suelen ir de la mano, al fin y al cabo, es su creador. Pero desde que en el año 80 comenzara a mostrarnos su trasfondo, hasta que en 2016 hiciese esta miniserie, el personaje había pasado por muchas manos y se había cambiado mucho la percepción del personaje.
Rachel desde el 2003 había impactado en la cultura popular más allá de los cómics, gracias a la serie de Cartoon Network y las películas animadas. Esta visión más relajada, con su pelo característico y mucho más infantil y desenfadado caló mucho. Al contrario que con cómics como los de Neal Adams por esos años, supo converger las visiones originales y de autores posteriores.
La trama era mucho más cercana al slice of life, con Raven yendo al instituto y quedándose con una parte de su familia relacionada con su madre Angela. Esto lo lleva a una trama mucho más terrenal, pero que mantenía la versión de sus poderes con el Ser-Alma más búho que cuervo de los Nuevos 52, algo que incluso la artista Alisson Borges supo implementar muy acertadamente, aunque el tono no fuese mucho con el de la obra.
Posteriormente, en Renacimiento, la miniserie continuó con una maxiserie llamada Raven: Daughter of Darkness con Pop Mhan a los lápices y que salía el mejor personaje de DC: Traci Thirteen, pero eso es otra historia.
Galaxy: The Prettiest Star (2022)
Hemos hablado de muchas series de décadas pasadas, pero también hay muchas cosas modernas que se nos puede haber pasado por el radar y que son joyas ocultas que poder leer en la aplicación. Obras juveniles/infantiles como Zatanna and the House of Secrets o Amethyst nunca han sido impresas por ninguna de las editoriales españolas, ni con Hidra en su momento. Pero uno de las mayores sorpresas fue: Galaxy, The Prettiest Star.
Escrito por Jadziah Axelrod y dibujado por Jess Taylor, es un cómic autoconclusivo sobre Taylor, una alienígena encerrada en el cuerpo de un chico terreste. La primera vez que se muestra como realmente es fue gracias a la confianza y sentimientos que despertó por Katherine, una chica de metrópolis.
Una historia de amor sáfica y trans, donde las alegorías con claras al verse reflejada las propias vivencias de la autora. El personaje de Galaxy, así como conceptos talescomo la ciudad libre A-Town, son en este cómic la primera vez que aparecen, pero que luego autoras como Nicole Maines, o la misma Jadziah, recogerían en distintas cabeceras.
Hay pocos cómics juveniles con un mensaje tan bonito y con un final emotivo, que además como epílogo tiene un pequeño texto que podría ayudar a más de un joven queer, sobre todo en momentos tan complicados para los infantes trans. Tanto Jadziah como Jess son activistas trans muy reconocidas en el panorama independiente, de la costa este americana por la parte de Jadziah y de la inglesa por parte de Jess.
Pocas veces lo que puede ser una obra alegórica trans acaba siendo tan abiertamente eficaz en el tema, rompiendo esa expectación alegórica para la denotación explícita.
Blood and Shadows (1996)
Este cómic de Vertigo es muy particular, tiene muchos relatos fuera de los cómics que forman historias similares y contradictorias entre sí.
Joe R. Lansdale novelista de terror, policiacos y algunos cómics creó un personaje de pesadilla y sádico llamado comúnmente “el Dios de la Navaja”. Este monstruo nació en la novela The Nightrunners saliendo en varias antologías después.
Lo peculiar es que Landscale fué lo que escribió en una antología de Batman llamada The Further Adventures of Batman: Subway Jack: A Batman Adventure. En ella el cruzado de la capa se enfrentaba a una especie de Jack el destripador. El propio autor quiso enfrentar a Batman con el sádico Dios Navaja y, al no poder hacerlo, creó años después esta serie de cuatro números fuera de todo universo con este peculiar personaje.
Ante todo, quiero avisar que Blood & Shadow es un cómic muy explícito, con escenas perturbadoras no aptas para todo tipo de público.
Esta serie es una interpretación en parte de la novela que he comentado. Se nos cuenta la investigación sobre un asesino en serie en la actualidad, un Western a modo de flashback con un hilo en común. El Dios Navaja. Una especie de hombre del saco que trasciende más allá del tiempo a lo Pennywise.
El cómic es un viaje de pesadillas, algunas ideas a día de hoy están ya vistas pero no deja por ello de ser entretenido, es un placer culpable para quien busque horror a lo Clive Barker, por ejemplo. El dibujante Mark Nelson se echa el cómic a la esplada dándolo todo con su arte macabro, body horror, viñetas inclasificables y, como no, humor negro.
Se nota que querían seguir contando más historias con este ser en mente pero nunca pudo materializarse una secuela y eso hace que acabe de manera algo abrupta. No desentona porque la idea principal persiste.
El miedo siempre vuelve de una forma u otra. Nuca desaparece del todo, solo cambia de forma.
Como final comentar que al ser de la Línea Vertigo este cómic solo está disponible en el Tier Ultra.
…. y estas son algunas de las rarezas que nos han sorprendido de la aplicación de DC Universe Infinite…
Wow, magnífico! Que envidia. Me voy a pillar una tablet sólo para acceder a infinite de una vez. Maravillosa entrada, en la que me habéis descubierto alguna que otra joyita…
Gracias, Kike. Estamos impacientes para ver tus reacciones en el DC Universe Infinite.
Gracias, Enrique. Me alegro que te haya gustado y tenemos ganas de ver que joyas ocultas y placeres encuentras.
Que buenos hallazgos. Los que me llaman más son el de Dr. Medianoche, Dog Moon y Blood and Shadows gracias.
Muchas cosas interesantes. Ojalá podamos ver alguna de ellas por aquí en el futuro. Recuerdo que Planeta llegó a decir en su sección de consultas que quería publicar el Átomo de Gil Kane, ojalá la nueva editorial que se encargue de publicar DC en España nos la pueda traer.
Saludos y gracias por esta magnífica entrada.