Con la resaca ya superada en USA, llega el momento de encarar la publicación en España de este evento que une a todo el Universo DC bajo un mismo paraguas, cuyo objetivo editorial radicaba en llenar el vacío de publicaciones que se iba a producir durante la mudanza de las oficinas de DC Comics. Cambiarse de costa no es tarea fácil y se tomó la decisión de crear este evento que responde tanto a razones logísticas como editoriales y se aleja bastante de las artísticas. Puede que dicho así suene algo frívolo, pero no olvidemos que en los ochenta se publicó el primer gran evento de este tipo y su principal función era la de apoyar el lanzamiento de una serie de juguetes relacionados con los personajes.
Una vez metidos en contexto tan solo nos queda dedicarle un tiempo a este primer número de la edición española, llevada a cabo por ECC, de uno los crossover más complejos de publicar desde un punto de vista editorial. Su serie troncal está flanqueada de una inmensa cantidad de miniseries colaterales donde se visitan a decenas de personajes y momentos de su historia, por lo que el problema de cómo enfocar ordenadamente esta oleada de series es cuanto menos titánico. Puede que de primeras pueda parecer que ECC ha tomado la decisión equivocada, pero si analizamos detenidamente como han englobado todo el evento, vemos que pocas opciones tenían al respecto. Tal vez lo ideal hubiera sido recurrir a la grapa para la serie troncal, pero eso es algo que me hace entrar en el terreno de la opinión personal y no estamos aquí para esto.
A lo largo de este mes vamos a visitar la gran mayoría de estos números donde se agrupan tanto la serie central, como las miniseries de dos números dedicadas a los personajes más relevantes de DC. Valoraremos, intentando ser justos, sin entrar en comparaciones que resultan muy obvias para cualquiera, la calidad global de la obra, diseccionando aquellas miniseries que tengan más relevancia y merecen más la pena, para intentar determinar si este evento cumple con la función editorial ya comentada o por el contrario fracasa al no haber detrás una sólida base artística que lo respalde.
Ya se hizo un trabajo previo desde la sección de actualidad donde se habló mucho de todas las series y se recordaron, mediante artículos, las historias de los personajes involucrados. Con este repaso a modo de reseña de las ediciones patrias esperamos se consiga cerrar el círculo alrededor de tan controvertido proyecto editorial.
Tras esta introducción solo nos queda entrar en materia y empezar con la vivisección de la obra que no ha dejado a nadie indiferente.
Tras el final de la serie semanal
Algo simple, sin dobleces, fuegos artificiales, bombo y platillo, recuperación de personajes de antaño que despiertan la nostalgia… nada puede ir mal. Suena fantástico, ¿verdad? Pues no es así.
Siendo justos, la serie central, la que nos narra los acontecimientos principales de Convergencia, arranca con un potente número cero que nos sitúa de golpe en un escenario totalmente distinto al que podríamos esperar de un evento de estas características. Una puesta en escena críptica, capaz de dejar al lector con ganas de seguir leyendo al no abrir la serie con lo que de verdad quieren contarnos, sino que se queda en una introducción sobre la que planea el concepto central de esta Convergencia, acercando a hoy los grandes momentos de muchos personajes de DC, con el fin de despertar la nostalgia. No es por casualidad que en este arranque de la serie podamos ver de nuevo una de las más míticas y potentes imágenes que se han dado en los comics de DC. La nostalgia es la mejor de las herramientas de venta. Si accedes a los recuerdos de la gente, a esos que marcaron sus vidas, que les dejaron huella, consigues un cliente y si ese cliente es lector de comics no es descabellado decir que muchos de los momentos fijados en su memoria estarán relacionados con cuando leyó aquella historia al lado de la ventana de su cuarto mientras fuera llovía sin cesar. Era domingo, hacía frío y sobre la alfombra de su cuarto estaban desperdigados varios comics. No eran suyos, sino de su hermano, pero como él no estaba a nadie le iba a importar que los ojeara un rato. A fin de cuentas no había nada mejor que hacer… Y lo que tan solo fue algo para matar el tiempo, acabo por ser una afición con la que ese entonces niño ha crecido hasta hacerse adulto. ¿Os suena? Pues con ese arma debajo del brazo llega Convergencia y aun con esa herramienta no consigue su objetivo.
Comenzamos bien para que la cosa se vaya diluyendo número a número. No es algo que pase de golpe, sino de manera suave, sin darnos cuenta, pero ocurre debido principalmente al caótico guion del que hace gala
Si el primer número nos invita a pensar que estamos ante algo importante,
¿Significa eso que estamos ante un mal cómic? ¿Es
La verdad es que depende mucho de cómo lo miremos. Si somos ese chico o chica que descubre los comics por primera vez y que no conoce a muchos de los personajes que aparecen, esto es la puerta de entrada a un nuevo mundo lleno de héroes, villanos y aventuras de proporciones inmensas. Su imaginación se inflamará, disfrutará de la lectura y querrá saber más de todos esos tipos que visten mallas y parecen empeñados en detener los malvados planes del villano de turno.
Es importante señalar que estamos hablando de la serie central, no de los especiales que van a gravitar a su alrededor, por lo que no hablamos del lector curtido que quiere hacer un viaje en el tiempo a sus recuerdos y a la ya mencionada nostalgia. A fin de cuentas, y permitirme el inciso, yo mismo me subí a esto de leer comics gracias a un evento de cuestionable calidad como es
En cambio, si lo vemos como lectores curtidos, con años de lecturas a las espaldas, este evento fracasa estrepitosamente por no ser capaz de aportar nada interesante para este tipo de lector ya consolidado. Por ello, se trata de una obra que tiene demasiadas buenas intenciones, mal planificada, mal enfocada y mal ejecutada para ser capaz de llegar a todo un amplio espectro de lectores, pero aun así considero tiene un público objetivo al que puede llegar a resultar atractiva. Y con esto no estamos juzgando al lector que pueda o no gustarle este evento, tan solo evidenciamos que hay momentos y momentos en la vida de un lector de comics y dependiendo de ese instante este evento puede resultar muy interesante.
Por último solo quedaría hablar del apartado gráfico que siendo en todo momento correcto y de una calidad más que interesante, resulta poco uniforme a los largo de estos primeros cuatro números con tres ilustradores como son
Una primera parte que arranca con fuerza, se estanca en su desarrollo y muestra signos de agotamiento ya en el ecuador de la historia. Argumentos mal resueltos, grandilocuencia excesiva, situaciones demasiado guiadas que derivan en situaciones forzadas, hace de este evento un arma de doble filo con la que muchos se harán el harakiri al terminar de leerlo.
Guion - 5
DIbujo - 7.5
Interés - 6
6.2
Valoración
Una obra para un publico muy concreto. Discreta en realización, discreta en conceptos y discreta en repercusiones. Una lectura inercial en la que poco o nada hay que destacar.
Gracias, como siempre, don Gustavo por el análisis de este supuesto evento, no creo que lo que yo diga aporte nada, ni bueno ni malo, a lo que ya se dijo en su momento de esta serie.
Desde su mismo nacimiento, ya está muerto, porque decir que va ha ser algo para rellenar 2 meses de mudanza ¿? que igual se plantean traer el anterior universo, el cual se cargaron así porque si, no me parecen argumentos de peso para comprármelo y gastarme 15 € en algo sin sentido en lo que ni los mandamases de D. C. confiaban.
Un saludo y gracias de nuevo.
Pues a mí me dan pena los de ECC. Es un marrón muy gordo tener que publicar todo esto con las malas críticas que tiene (y lo buenas que son las del evento de su competencia más directa). Espero que puedan compensarlo económicamente con lo que saquen con las reediciones de material antiguo.
Totalmente de acuerdo. Creo recordar que es la primera vez que no completo todos los tomos de un evento DC. Únicamente me estoy haciendo la colección troncal y las grapas que compro habitualmente, y que estos dos meses incluyen historias de Convergence relacionadas con el personaje.
Lo demás, mal que me pese, lo he dejado en la estantería de tienda. Y, la verdad, es que me ha dolido menos de lo que pensaba (la vocecita del coleccionista compulsivo que vive en mi cabeza es muy pesada, pero esta vez no ha dado mucho la lata).
La sensación es que las Secret Wars, pese a ser lo que son, me cuestan menos de llevar a casa. Será porque la grapa mola o por la calidad general de los trabajos, pero, pese a ser fan DeCeero de toda la vida, he de reconocer que me sentaré a leer las Secret Wars mucho más ilusionado que con estas Convergencias.
P.D.: ¿y si este evento se lo hubieran encargado a otra persona que no fuera el insufrible de Scott Lobdell? ¿Se habría salvado o es un concepto insalvable en si mismo? ¡Eh, eh!
Pues la verdad es que en la miniseries duales que salen a raíz del evento de Convergencia, hay alguna muy interesante. El problema es que al editar ECC dichas series por paquetes en forma de tomo, se corre el riesgo de tener que pagar por series de dudosa calidad para poder disfrutar de los que si merecen la pena.
De todas formas vamos a analizar dichos tomos a los largo de todo el mes e intentar rescatar las pepitas de oro que hay entre todo este mar de incertidumbre.
No todo es descartable de primeras. 🙂
Por otro lado el evento por planteamiento en si mismo no falla, falla como se desarrollan los acontecimientos, guiados y muy simplistas, tal y como son los trabajos de Lobdell. En manos de otro guionista estoy seguro que los resultados hubieran sido muy distintos, pero eso, por desgracia, queda para llenar horas de tertulia comiquera con los amigos.
Sobre que es mejor Secret Wars o Convergencia… es como hablar que es mejor si las Secret Wars originales o Crisis. Cada una en su momento perseguía un objetivo bien distinto y cada una ha logrado con el tiempo alcanzar su particular nivel como obra dentro de la historia.
Y muchas gracias por vuestros comentarios y nos vamos leyendo en sucesivas reseñas de Convergencia.
No perdamos la fe en DC, nunca!! 😉
Honestamente no creo que con otro autor se hubiese salvado la serie. Al menos en mi opinión personal, DC ya ha saturado las posibilidades de colisiones de realidades. Crisis lo hizo bien, y todo lo que vino después simplemente no pudo estar a la altura y jamás estará a la altura. Pensémoslo así: si el próximo evento trata de héroes revividos saliendo como zombis, tendrá que ser mucho mejor que Blackest Night para que nuestra percepción de ella sea positiva (y en ese caso es más sencillo, porque Blackest Night no es tan buena como Crisis).
Aparte de eso, quizás se pudieron mejorar un par de cosas: el abordaje fue demasiado directo, faltó cierto build-up, cierta intriga al comienzo (aun cuando el número 0 es el mejor, pero es el mejor por lo que implica en la historia de Superman, no por lo que vendrá, por el suspenso, etc.). Y, por supuesto, lo que falla casi siempre: las implicaciones del evento a nivel terrenal… ¿qué pasa, qué siente, cómo repercute todo esto en la gente normal? No se sabe, no repercute, no existe gente normal…
De todas formas, creo que DC debe dar un paso hacia adelante la próxima vez que haga un evento (en 2046, supongo (?)) y probar cosas nuevas, no volver a lo mismo una y otra y otra y otra y otra y otra vez, apelando a la nostalgia y haciendo remakes camuflados a-la-Hollywood… El comic, en el acierto o el error, siempre fue innovador… al menos hasta 2006.
Saludos!
Ya sé que soy de los pocos defensores de Scott Lobdell, pero es que precisamente los números que carecen de su presencia – es co-escritor, la serie ES de Jeff King -, su ausencia se nota para mal. Vamos, que si el autor hubiera tirado todos los números por él mismo, podría haber resultado peor.
Otra discusión, ya que en el Convergencia #0 lo co-escribió con Dan Jurgens, es que si junto a él la cosa hubiera mejorado más que junto a Scott Lobdell. Y sería difícil predecir, pues Jurgens es muy irregular, desde trabajos que a uno le sorprenden como otros que sólo puedes maldecirle…