DeBolsillo publicará Batman año 100, Panini amplía el coleccionable Ultimate y próximas novedades de ECC Ediciones

Y como era de suponer, vuestros comentarios han sido leídos por Rubin. Creedme si os digo que hacia mucho tiempo que no pasaba tanta vergüenza, ante esto aviso, a partir de ahora tolerancia cero, a la primera descalificación baneo de por vida de ZN, y al que no le guste puede ir cogiendo puerta desde ya.

David me ha pedido que os transmita un mensaje que procedo a copiaros:

Hola;

Por alusiones, respondo:

He visto aquí verterse insultos hacia mi persona, incluso descalificaciones hacia mi trabjo, en la mayoría de los casos provenientes de gente que opina bajo pseudónimo.

Coherente, si señor…

Se me acusa de “cretino” y otras lindezas, y a esto yo digo:

Si decir lo que uno piensa sin tapujos, sin medias verdades, con sinceridad, es ser un cretino, pues si, lo soy.

Si opinar abiertamente, en público y sin esconderme bajo un pseudónimo en vez de decir una cosa en redes y lo que de verdad se piensa en petit comité, como es habitual en esta profesión, es ser un cretino, si, lo soy.

Si tener uno de los pocos muros de autor en FB de este país en dónde se permite y se fomenta sin censura el diálogo sobre temas variados de este medio, esté yo de acuerdo o no con lo que se opine, en el cual nunca se ha bloqueado a nadie por pensar diferente a mi o por llevarme la contraria, y en dónde siempre hay debate, movimiento y promoción del cómic es ser un cretino, pues lo seré.

Si ser de los pocos “autores consagrados” que se interesan por la obra de gente que está empezando y les ayudan a avanzar y a darse a conocer es ser cretino, peco de ello, si.

Si preocuparme por que la gente lea mi obra, sepa que exista, y por promocionar el cómic más de lo que la mayoría sabe o se molesta en hacer es ser un cretino redomado, acepto el término entonces.

Nunca he pretendido la perfección y no escondo mis defectos, soy más de Lee Marvin, como decían por ahí arriba, y peco en las formas a la hora de expresarme, me puede la pasión y soy consciente del error que ello supone, pero como, al igual que vosotros, no soy perfecto, pues peco de ello. Si eso es de cretinos, entonces es que igual lo soy.

No me creo ni Guarnido ni me considero como él, no me considero mejor que nadie ni peor, de hecho ni lo pretendo, estoy muy contento como estoy, con mis pequeños logros y virtudes y mis muchos defectos, con los que he aprendido a convivir, no quiero ni pretendo ser el Nº1 de nada, si así algunos me lo consideran, bienvenido sea, si otros piensan lo contrario, bienvenido también.

Vivo y mantengo a una familia haciendo tebeos, que no es moco de pavo, y aún encima los tebeos que me gusta hacer no los que impone una moda o un editor, con lo que me doy con un canto en los dientes, no pretendo nada más de lo que ya he conseguido hasta ahora.

No veo esta profesión como una competición contra nadie ni contra nada, yo voy a mi bola y no molesto, o no debería molestar, a nadie ni con mis éxitos ni con mis fracasos.

Tan sólo soy consciente, sin atisbo de la socorrida falsa modestia, de mis aciertos como autor y de mis defectos, y en base a ellos cimento mi obra, intentando que cada nuevo libro sea mejor que el anterior, evolucionar y aprender con cada nuevo trabajo, mis pretensiones, mi ansia por destacar son contra mi mismo, no contra los demás. ¿Es eso comportarse como un cretino? Culpable entonces.

Poseo gusto y modo de ver las cosas, como todo el mundo, que coincidirá con el de algunos y chocará con el de otros. Como todo el mundo. Y lo manifiesto, como todo el mundo, opino en función del mismo, como vosotros hacéis aquí, pero sin usar pseudónimo ni esconderme, claro, acompaño mis opiniones, gusten o no, con mi nombre y apellido. Si eso es ser un cretino, entonces lo soy.

Trabajar para una editorial española y luego conseguir que esa obra se venda a otros países, exportar copyright, vamos, no es lo mismo, ni comparable, a trabajar directamente con una editorial extranjera, o sea; exportar mano de obra, no obra. Ni por asomo. Ambos son casos bien distintos, meritorios y respetables ambos, pero infinitamente distintos.

Astiberri gestiona la venta de derechos de mis obras en el extranjero, y lo hacen muy bien, tanto conmigo como con otros autores de este país, pero no es sólo mérito de ellos que mis obras se vendan al extranjero, sino también mío, ya que por un lado participo activamente en la gestión y negociaciones de dichos derechos y, por otro lado, si la obra se vende es porque los editores que deciden comprarla la consideran buena y les gusta.

Aprovecho para comentar que es falso eso de que si una obra vende bien aquí se exporta y si no no, que he leído en los comentarios, por lo general, muchas obras, las mías y las de más gente, se venden al extranjero incluso antes de estar terminadas, ya que un guión y unas muestras de páginas son suficientes para que un editor cualificado sepa si ese libro le interesa o no.

Además, el que un libro funcione bien en un país no es garantía de que funcione igual de bien en otros; ahí está el caso de Arrugas, que en España o Italia es un superventas pero en cambio en Francia no. Y no pasa nada.

No voy de nada, ni me comporto en redes de diferente modo a como lo hago en mi día a día, si bien en el trato personal yo, como todo el mundo, expresamos emociones y entonación que le dan diferente carácter a una misma frase, cosa que no pasa al escribir en un teclado y, por tanto, se puede llevar a equívoco ni no se abusa del aborrecible emoticono de turno.

Es algo que nos pasa a todos.

Y, por supuesto, no se me ha subido nada a la cabeza ni desde El Héroe, ni antes ni después, por suerte o por desgracia he sido un chulazo toda mi vida, guste o no a quién sea, y no considero que ni con ello haga daño a nadie, ni, desde luego, tengo por qué disculparme por ser como soy con nadie.

No le pongo una pistola en el pecho a nadie para que me siga o para que disfrute de mi trabajo, tampoco se la pongo a nadie por decir que no le gusta lo que yo hago, me parece perfecto.

Lo que no entiendo es porque a mi se me tacha de cretino por lo que opino o dejo de opinar o por el modo en el que expreso mis opiniones, ¿En serio sois tan pulcros y perfectos como para poder juzgar la calidad humana y de trabajo de quién sea solo por lo que fulanito os ha dicho o lo que habéis leído de modo sesgado en redes sociales? ¿Máxime de una persona que no conocéis?

Si es así, sois DIOSES. Y creo que no es el caso.

Se tiende a ver más la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio.

En fin, que tengáis buena tarde, seguid a lo vuestro, que yo seguiré a lo mío, que es intentar hacer los mejores tebeos posibles dentro de lo que mi talento me permite, seguir mejorando, seguir abriendo camino tanto aquí como fuera de España a base de trabajar como un mulo y consiguiendo nuevos lectores para este medio que, no me cabe la menor duda, todos amamos.

Un saludo de este, vuestro cretino preferido!

d.