Un chico y su perro
Celebrados en 2014, los Playstation Awards, los premios que Sony España otorga a sus desarrolladores patrios para ayudarlos a desarrollar su juego y ofrecérselo al público a través de Playstation, elevaron al nivel de juego del año a este Dogchild, desarrollado por Animatoon Studios y que presenta un arte cuidado, una trama centrada en un chico y su perro y unas mecánicas que alternan entre el control del personaje humano y de su gran aliado canino. Ya cuando asistimos a los citados premios nos dimos cuenta de que este juego resaltaba por encima de muchos otros buenos proyectos, sobretodo por el arte presentado. Un arte que recuerda en sus diseños a lo mejor de Pixar, con un acabado que pintaba muy bien en los videos. Sin embargo, una vez empezamos a jugarlo vemos que el juego aún hace aguas. Y es que aunque el arte es bueno, los gráficos no le hacen justicia. Lo primero de lo que nos damos cuenta es de que el acabado parece algo chapucero, un tanto descuidado, con un motor que parece no poder controlar y mover su propio juego. Primero cosa que no nos gusta.
La trama es simple: controlamos a un chico cuyo mejor amigo es un perro, entrenado para ayudarle en todo lo que precise haciendo gala de sus habilidades caninas. Enseguida entramos a formar parte de una extraña conspiración con corporación malvada incluida que hace desaparecer a las mascotas del barrio. Un argumento que tiene un toque inocente e infantil que nos ha gustado mucho, retrotrayendo al jugador a esas películas de los ochentas donde había que salvar el mundo, pero eso no impedía divertirse por el camino.
Por otro lado, las habilidades de nuestro compañero,
Hay retos que resultan agradables y ciertamente el juego divierte y engancha, pero en algunos puntos no podemos evitar tener la sensación de que se podría haber exprimido mucho mejor la fórmula y que está poco pulido. Parece como estuviéramos ante una versión beta, que promete mucho pero aún tiene cosas que pulir.
En general Dogchild es un juego entretenido que goza de un aura retro e infantil que resulta muy atractiva, sin ser un juego demasiado ambicioso ni pretencioso cumple con los estándares que nos esperábamos, aunque nos hubiera gustado tener mucho más. Lo más negativo que podemos achacarle es que en ocasiones parece un juego a medio terminar, que acusa cansancio en su recta final, y dado el empujón que le dieron los Playstation Awards no debería ser así. Pese a todo, es un juego que conviene probar, aunque sea por acercarse a los talentos españoles en el sector.
Valoración
Gráficos - 6
Jugabilidad - 7
Historia - 6.5
Sonido - 7.5
6.8
Valoración
El ganador de los primeros Playstation Awards es un juego bello y entretenido que no inventa nada y al que podría habérsele sacado mejor partido, pero recomendable a fin de cuentas.