Doomsday.1 #1-4

 

Edición original: Doomsday.1 #1-4.
Guión:John Byrne.
Dibujo:John Byrne.
Entintado:John Byrne.
Color:Leonard O’Grady.
Formato:Grapa.
Precio:3,99$.

 

«La Tierra pudo haber esquivado una bala el 21 de diciembre de 2012, pero a nuestro pequeño planeta azul le esperan cosas peores. Siete aventureros a bordo de una estación espacial internacional observan con horror cómo casi todo el mundo es diezmado por un estallido solar. Y su única elección es volver a la superficie, ¡y enfrentarse a todo lo que allí les espera! «.

Este nuevo curso hemos dedicado sendos especiales a John Byrne en nuestra subsección Al Detalle. Como viene siendo habitual, éstos van acompañados de reseñas de sus obras, pero en esta ocasión hemos optado por las más recientes porque parece ser que lo más actual de este autor es lo menos conocido por nosotros, los lectores. Así que mientras nos mantenemos a la espera de la tercera parte de John Byrne al detalle (a no ser que surja algún imprevisto, saldrá mañana), retomamos una de las miniseries de la nueva etapa de IDW Publishing.

Doomsday.1 es un título que nos hace recordar a uno de los primeros éxitos de Byrne, pero en realidad tiene muy poco que ver con aquella serie de Charlton que vio la luz entre 1975 y 1976 bajo el nombre de Doomsday +1. De eso os hablaremos en las consideraciones previas. Ahora, a modo de introducción, os adelanto que por primera vez puedo hablar de una obra de Byrne sin hacer referencia a sus anteriores trabajos. Y es que Doomsday.1 es una miniserie de 4 números que nos narra una historia apocalíptica, completamente independiente de todo lo que Byrne ha escrito y/o dibujado hasta ahora. Por fin nos encontramos con un tema que ha tocado en ocasiones, pero del que aún tiene mucho que decir. Por fin estamos ante una historia que va más allá del ejercicio de nostalgia. Aunque algo de eso hay, por supuesto. Si Byrne no retomase sus filias, no sería Byrne.

Con eso de no querer adelantar conclusiones me he vuelto muy críptico. Mejor que nos dejemos de tonterías y vayamos al grano…

Doomsday.1 es un claro homenaje a Doomsday +1. Recordemos parte de lo que dijimos sobre esa serie en Mundo independiente: John Byrne al detalle, parte 1 (1971-1986):

«George Wildman ofreció a Byrne los interiores de una serie que iba a ser escrita por Joe Gill y que llevaría por título Doomsday +1. Byrne aceptó encantado y se encargó de los lápices, tinta y rotulación de los primeros números. En los créditos del #4 al #6 figura como Byrne Robotics, y el #5 incluye a una tercera persona: Bruce Patterson, quien ayudó a entintar aquel ejemplar.

Aunque la cabecera duró 6 números, un séptimo ejemplar fue escrito y dibujado pero se publicó, dividido en dos, en un fanzine de CPL/Gang Publications llamado Charlton Bullseye. Curiosamente, las reimpresiones de Doomsday +1 que se iniciaron en el #7 contaron con ventas tan elevadas que Tom Sutton recibió el encargo de un número 13. Las ventas descendieron estrepitosamente y el proyecto fue cancelado, pero reaprovechado mucho después (por allá por 2008) para el #6 de Charlton Spotlight.

Por lo que respecta a la historia, Doomsday +1 narra las aventuras de un mundo apocalítico en el que un tirano sudamericano llamado Rykos lanza sendas bombas nucleares a Estados Unidos y Rusia. Los gobiernos de esos países piensan que la bomba proviene de sus enemigos de la Guerra Fría, de manera que Rykos consigue que estas dos potencias mundiales inicien una batalla nuclear que desencaderá el apocalipsis. Poco después, un cohete espacial con solo tres tripulantes es lanzado al espacio. Los terrestres vuelven a la Tierra cuando los niveles de radiación descienden, y viven miles de aventuras, a la vez que se encuentran con varios supervivientes«.

¿Qué tiene que decir John Byrne sobre Doomsday.1 y su relación con esta historia pasada? Según lo que dijo aquí, se trata de la «apasionante historia de siete astronautas aventureros que observan con horror, a bordo de una estación espacial internacional, como casi toda la tierra es aniquilada por una titánica explosión solar«. «He estado pensando durante algún tiempo que me gustaría revisitar un escenario post apocalíptico, como el que se vio en mis primeros trabajos ‘dramáticos’ en cómics, pero esta vez sin los elementos fantásticos tan obvios de la serie original (sirenas, aliens robots, mamuts congelados, etc). Cuando partes y trozos de esta nueva serie empezaron a filtrarse en mi cabeza, supe casi al momento la forma que la palabra revisitar iba a tomar, algo cercano al estilo ‘todo nuevo, todo diferente’. Y en el momento en el que garabateé algunas imágenes a mi ‘equipo’, ¡supe que lo tenía!»

Así que Doomsday.1 no es Doomsday +1. Y Byrne tiene razón. Ya se notan las diferencias solo con el resumen de las historias. En la primera estamos ante un apocalipsis nuclear, ahora vivimos una catástrofe natural. En la primera los malvados están bien definidos al inicio de la historia, ahora el mal surge de la naturaleza humana. En Doomsday +1 hay elementos fantásticos. Ahora, no. El hecho de retomar un título de los años setenta es un guiño a lectores adultos y fanáticos de Byrne, pero no hay más. Y esto está tan claro que en los créditos de Doomsday.1 se lee «creado por John Byrne«. Gill no aparece por ninguna parte.

Doomsday.1 nos narra la historia de siete astronautas que se encuentran en órbita mientras la Tierra sucumbe ante el peor desastre natural de toda su historia. Prácticamente todo queda calcinado hasta tal punto que incluso los océanos se evaporan en su práctica totalidad (si bien luego se vuelven a llenar por obra y gracia de la lluvia). De manera que hay un nuevo orden mundial en el que los escasos supervivientes deberán hacer de todo para seguir con vida. Y entre esos supervivientes están los privilegiados astronautas, que descienden al planeta cuando éste ya ha pasado lo peor. La miniserie en sí está dividida en cuatro historias cortas independientes las unas de las obras, a pesar de la continuidad, pues nos muestran cuatro momentos bien diferentes de la vida de estos hombres del espacio. Y los saltos temporales son considerables, ya que el .1 parece ser indicativo de año y no de día. (Sí, al final de la miniserie se publicita una continuación que acabará en .2 y narrará lo acaecido en el segundo año).

Como sucediera con anteriores trabajos de Byrne para IDW Publishing, Doomsday.1 es un ejemplo perfecto de accesibilidad. A pesar de que se presentan a muchos personajes, todos están perfectamente definidos desde el primer momento y es muy fácil saber qué van a pensar o cómo van a actuar. Seguramente esto sea así porque Byrne recurre a tópicos, y de esos que él domina tan bien, pero hay que reconocer que es muy agradable comprar un tebeo en el que no te encuentras perdido, a pesar de no haber leído nada sobre él anteriormente. Y también es muy acertado hacer un buen uso de la caracterización, pues eso permite que Byrne se centre en lo que realmente importa: el estudio de la naturaleza humana en épocas de crisis. Desgraciadamente, es en esto en lo que Byrne más falla. Por un lado hila unas historias muy interesantes en las que la crueldad – o la bondad, dependiendo del caso – están a la orden del día. Los relatos de Doomsday.1 son duros e impactantes, como corresponde a una historia apocalíptica de tal magnitud. Sin embargo, el desarrollo de los personajes que inicialmente funciona tan bien, llega un momento en el que se queda estancado; y eso significa que las historias de Byrne no tienen ningún efecto en los protagonistas. A partir de cierto punto, éstos se mantienen inamovibles en sus personalidades, algo impensable después de algunos sucesos como

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A nivel gráfico, Doomsday.1 es muy atractiva. Byrne nos regala algunas de sus mejores viñetas de los últimos tiempos. También muestra alardes de originalidad ya que la temática le permite enfrentarse a situaciones que no controla del todo. Y sale airoso de ellas. También juega con el ritmo con la redistribución del texto, siendo más denso donde debe explicar historia, y menos cuando debe jugar con los sentimientos. El experimento le sale muy bien. De hecho, las páginas mudas de Doomsday.1 son lo mejor de toda la obra, lo cual no es ninguna sorpresa ya que Byrne ha demostrado en más de una ocasión que sabe narrar perfectamente sin ayuda de la palabra escrita. Son muy pocos los autores que saben llegar a su nivel de expresividad. En definitiva, Doomsday.1 es una experiencia gráfica muy satisfactoria. Eso sí, las previas que os incluyo no son muy demostrativas de esto ya que son de las primeras páginas y, dado que estamos ante 4 relatos diferentes, éstas se utilizan para situar al lector, ergo, son más explicativas que otra cosa.

Doomsday.1 no es una obra perfecta. Tiene unas ideas muy potentes y un buen desarrollo, pero también tiene algunas lagunas argumentales. Supongo que esto último se debe a la configuración de la serie, a lo que se suma la ambición del autor, y es que cuatro números son muy pocos para definir a decenas de personajes y/o para explicar al dedillo un nuevo orden mundial del que poco o nada conocemos. Doomsday.1 nos muestra pinceladas de muchas cosas. En algunos casos habríamos necesitado un desarrollo más profundo. Aun así, si situamos en una balanza los aciertos y los errores; en esta ocasión ganan los aciertos por goleada. Doomsday.1 no es un título pensado única y exclusivamente para los seguidores de Byrne; es una cabecera que puede disfrutar cualquier tipo de persona que tenga algo de interés por el género apocalíptico. Además, es apta para casi todos los públicos ya que, a pesar de la dureza de lo que aquí acaece, Byrne no se ensaña con lo malo. No nos muestra violencia gratuita ni desmembramientos (aunque sí vemos las consecuencias de esos actos). Seguramente el fallo que os incluí en el spoiler se debe precisamente a eso, a la voluntad del autor de hacer que este tebeo pueda ser leído por cualquiera.

 Mundo independiente: John Byrne al detalle, parte 1 (1971-1986)
 Mundo independiente: John Byrne al detalle, parte 2 (1986-1991)

 Reseña de The High Ways #1-4
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