Dos cómics que de Bizancio vinieron…

Pronto hará un año que conocí a José Mª Carrasco, un blogger-librero con la loca idea de crear una editorial virtual: Viaje a Bizancio Ediciones. Su motivación y zalamería nos llevo a unos cuantos a secundarle en su empresa –muy modestamente en mi caso– y así la red acogió la “salida” de algunos “libros” ilustrados y de una eléctrica “revista” sobre tebeos. Tiempo después José Mª compartía conmigo otra idea aún más loca: quería editar tebeos. En papel. Meses después aquella quimera se ha hecho realidad, transmutándose en tintas y colores en la forma de dos libros bien diferentes nacidos de madres distintas, aunque ambos también hijos de un mismo padre, su editor.

Rústica-B/N-152 págs. 16 €……..Rústica-Color-56 págs. 12 €

Desde el abismo se plantea, como un conjunto de historias surgidas de la desazón humana que tienen la finalidad de acompañar al corazón del producto, centrado en Max. Como toda obra coral, con historietas de extensión breve, los resultados son dispares. Queda –eso sí– una sensación global de desasosiego, casi de repulsión, que se adivina buscada y querida. A riesgo de ser políticamente incorrecto, me atreveré a reconocer que –en lo que respecta a esta parte– mis gustos se inclinan por las ideaciones de Pere Joan, las bellas tintas de David Rubín y el exquisito esmero que pone Esteban Hernández en todas sus historias, algo que recién he descubierto gracias a su fenomenal fanzine Usted. Por supuesto, el apartado dedicado a Max es soberbio: historieta inédita en España, artículo de Álvaro Pons y una extensa entrevista que busca descubrirnos al autor a partir de su obra Un perro en el grabado de Durero titulado ‘El caballero, la muerte y el diablo’, uno de sus trabajos más arriesgados hasta la fecha.

De cómo te conocí, te amé y te odié se sitúa en el extremo contrario del espectro cromático. Así pasamos de una negrura hecha de grises, a la vivacidad de los colores planos, de unos dibujos elaborados al más puro esquematismo, de la angustia existencial a la simpática espontaneidad del enamoramiento. Gaspar Naranjo –su autor–, a través de breves episodios que se distribuyen de forma creativa por las paginas del libro, nos invita a recorrer un paisaje que todos podemos reconocer; el de una historia de amor cotidiano que empieza y se acaba.

A pesar de sus diferencias, no obstante y como ya hemos observado, comparten una misma paternidad. Son hijas de un editor romántico que, henchido de ilusión, se atreve a ofrecer al gran público dos criaturas que huyen de cualquier pretensión de comercialidad para ser, sencillamente, sinceras. Que les acompañe la suerte, no les abandone la ilusión y todos los corazones verdaderamente románticos sepan descubrirlas.