El Alto Evolucionador. La genética llevada a su máxima expresión

Wanda y Pietro. Pietro y Wanda. Los hermanos Maximoff. Dos personajes que han tenido unos orígenes complicados, tocados por autores como Roy Thomas, Mark Gruenwald, John Byrne o Bill Mantlo a lo largo de los años. Después de mucho batallar, conseguimos aclarar que eran hijos de Magneto y de su esposa Magda, huida de forma alarmante cuando Erik desató todos sus poderes magnéticos. Llegó a punto de dar a luz a las montañas de Wundagore donde fue asistida por Bova, una experta matrona. La singularidad de la situación es que este personaje es uno de los Nuevos Hombres, una especie creada por el protagonista de nuestra historia, el Alto Evolucionador. Magda huye temerosa dejando a los dos niños al cuidado de Bova y ésta, tras intentar que se hiciera cargo de ellos Robert Frank (el Zumbador de la Golden Age, que también había traído a su mujer que estaba de parto,  pero este bebé, desgraciadamente, no logró sobrevivir), acude a su creador para que tome cartas en el asunto. El Alto Evolucionador aparece ante una pareja de gitanos de la región, los Maximoff, que aceptan gustosos el regalo, creciendo como Ana y Mateo. Tras muchos avatares consiguen descubrir sus auténticos orígenes, por lo que estaban apercibidos de sus verdaderas raíces. O eso creíamos todos. Tras la conclusión de Avengers & X Men: Axis, donde héroes y villanos invertían sus papeles, han saltado a la palestra una serie de incógnitas. La más llamativa es que, durante el clímax del conflicto, fuimos testigos de que a Magneto no le une ningún parentesco con los gemelos. Todo un retcon que es necesario explicar. Otra de las consecuencias es el nacimiento de un nuevo equipo Unidad, donde Pietro y Wanda vuelven a compartir espacio bajo los designios de Rick Remender y Daniel Acuña. Para las nuevas aventuras de Uncanny Avengers se ha publicitado una portada donde tiene protagonismo el Alto Evolucionador ¿Sabremos la verdad de los hermanos a las primeras de cambio o tendremos que esperar lo nuestro para conocer de una vez por todas el dichoso origen de Mercurio y la Bruja Escarlata? Sin duda, el momento es excelente para conocer de primera mano la vida y milagros de Herbert Wyndham, luego conocido como el Alto Evolucionador. Comencemos con la génesis del personaje al que descubrimos en las páginas del Dios del Trueno.

La primera aparición del Evolucionador data de 1966 (fecha de portada) debutando en The Mighty Thor#134, obra y gracia de Stan Lee y Jack Kirby. El asgardiano regresa a la Tierra tras un enfrentamiento con Ego, el planeta viviente, en busca de Jane Foster, su amada. Ésta se encuentra en la región de Wundagore, ubicada en la zona de Transia, un paraje europeo con abundante pasado místico. Allí acompaña al Conde Tagar, servidor del misterioso Alto Evolucionador, cuando se produce un ataque repentino que es repelido por los Caballeros de Wundagore. La llegada de Thor se produce justo en el momento que se ha producido la derrota de los asaltantes, aterrados por los enigmas que asisten a la misteriosa montaña. El Dios del Trueno no se caracteriza por ser asustadizo por lo que va raudo y veloz a la búsqueda de su querida enfermera. Curioso que en ese número tengamos una aparición estelar de Pietro y Wanda, mucho antes de que fueran asociados a este paraje, aunque sea de manera tangencial y sin influir en la trama. Los Caballeros llevan a Thor ante su maestro y descubrimos una figura metálica de color rojizo haciendo experimentos con animales, transformándolos en fornidos ejemplares con forma semi-humana y renovado raciocinio. El hijo de Odín no quiere saber nada de extrañas maquinaciones y solo piensa en Jane Foster, a la que encuentra amigablemente departiendo con más de estos Nuevos Hombres. La mujer explica que el acorazado personaje no es peligroso, solo experimenta con la genética. En ese instante se produce un accidente dando lugar en vez de un mesurado Caballero de Wundagore a una Súper-Bestia. Transformado desde un lobo, el rayo desatado del Evolucionador hace que este espécimen sea un ejemplar con gran poder pero con un ansia de destrucción atroz.

Thor, ayudado de los autóctonos del lugar, se opondrá en buena lid a las intenciones del malvado animal evolucionado, que logra  acceder al laboratorio del genetista donde está el rayo evolucionador con el que podría crear su propia raza. El asgardiano, el Evolucionador, el Conde Tagar y los Nuevos Hombres luchan contra la Super-Bestia y sus nuevas creaciones, consiguiendo que queden aprisionados en una aeronave, que saldrá con destino a una galaxia deshabitada para formar su propia sociedad. Después de estabilizar la situación, el Evolucionador se descubre tras su armadura como un humano normal, Herbert Wyndham, y le cuenta su historia al Dios del Trueno. Hace muchos años era un humilde científico que trabajaba en el revolucionario campo de la genética. Pero sus avances eran rechazados por la comunidad científica, por lo que empezó a investigar por su cuenta, probando sus teorías con su propio perro en primer lugar. La suerte le sonrió en un momento dado, localizando una mina de uranio, convirtiéndolo en un hombre tremendamente rico. Se asentó en la región de Wundagore y siguió triunfante en su carrera de crear Nuevos Hombres. Este incidente le ha demostrado al genetista que sus experimentos no son del todo seguros por lo que decide no poner en peligro su planeta. Esto supone que toda la ciudadela del Evolucionador, con sus Caballeros de Wundagore, parte al espacio profundo en busca de un mejor destino ( The Mighty Thor135 ).

Este es el primer acercamiento al científico pero, como suele ocurrir, por retrocontinuidad sabremos más de su pasado. Lo más importante es que estuvo involucrado en los orígenes de diversos personajes que merecen ser explicados. Volvamos a sus raíces en la universidad. Allá por los años treinta era un prometedor estudioso en Oxford que vio impulsado sus investigaciones siguiendo las conclusiones de un misterioso Nathaniel Essex, que nosotros conocemos como Míster Siniestro, para dar forma a una máquina que acelera la evolución de los seres vivos. Como ya hemos dicho, el rechazo de la comunidad científica propicia que Wyndham separe su camino de la ortodoxia, siguiendo en sus trece de hacer avanzar la evolución. Pero no estaba solo, otro estudiante creía en su proyecto, Jonathan Drew. Éste era especialista en artrópodos, lo que viene a ser arañas varías, y le acompañó a su nuevo destino en Wundagore. La riqueza que acumularon al descubrir la mina de uranio les sirvió para construir su ciudadela en las míticas montañas de la región y seguir experimentando. Herbert traspasó la línea al evolucionarse a sí mismo, consiguiendo un estadio superior de inteligencia. La relación entre Jonathan y Wyndham se torció cuando la hija del primero se envenenó debido al uranio. Hablamos de Jessica Drew, que a la postre sería famosa por ser la heroína Spiderwoman. Para salvarla le propusieron un tratamiento experimental con sangre de araña y someterla a animación suspendida, que terminaría por otorgarle poderes. El origen de Jessica tuvo profundos cambios ya que en su primera aparición, Marvel Spotlight#32, Archie Goodwin nos decía que era un Nuevo Hombre directamente derivado de experimentos del Evolucionador. Esto fue reformulado cuando la Mujer Araña obtuvo cabecera propia, donde Marv Wolfman ya estableció a los Drew como colaboradores de Wyndham y a la pequeña como resultado de un fatal accidente. Para enredar la cosa un poquito más, tenemos la nueva interpretación de esas historias en tiempos recientes a cargo de Brian Michael Bendis. En esta trama nos obsequia con una imagen del científico a la que no estábamos acostumbrados. Aquí es un mando militar, un  anciano general,  responsable de un misterioso proyecto al servicio de la malvada Hydra. Nada de armaduras coloridas ni de extraños animales evolucionados y sí toda una patada a la continuidad tradicional.

Wyndham se quedó solo tras la separación de Drew, a raíz del ataque de un peligroso Hombre Lobo (causante de la muerte de Merriem Drew). La conclusión para el científico fue crearse una poderosa armadura para su protección debido a que no tenía intención de abandonar sus investigaciones. Se buscó un nuevo ayudante, Miles Warren (el Chacal), que se transformará en un villano arquetípico de Spiderman, responsable de las distintas tramas de clones que asolaron a Peter Parker durante un periodo que más vale no recordar. Poco a poco van dando resultado los estudios con la creación de los Nuevos Hombres, entre los que destaca Bova, derivada de una vaca. Este personaje será fundamental pues su buen hacer como partera le tendrá bien ocupada en un momento determinado. Como una simple casualidad del destino tuvo que hacer frente a dos alumbramientos casi consecutivos. Comienza aquí el controvertido origen de Mercurio y su hermana. Robert Frank y su mujer, Miss América, se ponen de parto en la región y acuden a la ciudadela del Evolucionador. Allí Bova hace lo que puede pero no consigue salvar ni a la mujer ni al recién nacido. Pero días antes había dado a luz en el mismo lugar una muchacha llamada Magda, asustada por un marido inestable. Ésta resultó ser la mujer de Magneto, madre de dos gemelos que dejó al cuidado de la mujer vaca por temor al Amo del Magnetismo. Bova intenta que Robert Frank, el Zumbador, acepte a los dos retoños, pero el saber de la muerte de su mujer no le deja fuerzas para afrontar la paternidad. Muchos años después, cuando ya eran conocidos superhéroes, Frank volvió a reclamarlos como sus hijos. Durante una temporada, Pietro y Wanda pensaron que eran hijos del velocista. Todo cambió con la aparición de Django Maximoff que demostró a ambos muchachos que habían sido criados como parte de una familia gitana, ofrecidos por el Alto Evolucionador, lo que los Maximoff consideraron un regalo divino. Bova fue la que puso en la senda correcta a Magneto, que andaba con la mosca detrás de la oreja, y apareció justo en el momento en que la Bruja Escarlata estaba de visita en Attilan, conociendo a su sobrina Luna, hija de Mercurio y la inhumana Crystal. En Vision and Scarlet Wicth#4 el Amo del Magnetismo hace gala de buenos propósitos para que sus hijos sean capaz de aceptarle, tras una vida llena de dolor y sufrimiento. Un duro envite que los dos hermanos afrontarán de manera cambiante a lo largo del tiempo.

Wyndham fue separándose cada vez más de su lado humano, como creador definitivo, lo que le hizo tomar el rimbombante nombre de Lord Alto Evolucionador. Además, instruyó a sus Nuevos Hombres en técnicas de combate y, siguiendo rituales medievales, acabó nombrándolos Caballeros de Wundagore. También empezó a ser consciente de la trascendencia mística de la región, entrando en contacto con un hechicero local llamado Magnus, que le advirtió de los malévolos poderes que se escondían en la montaña, el temible demonio Chthon. El evolucionador enseñó bien a sus Caballeros, para que siempre respetaran la vida humana y circularan por el buen camino, basándose en códigos de la caballería antigua. Aun así, alguno se salió de la senda correcta, como el llamado Inheritor que tuvo sus más y sus menos con el Goliat Esmeralda en The Incredible Hulk#149. Con una cada vez mayor cantidad de Nuevos Hombres tuvo lugar el incidente con Thor, donde un lobo acabó convertido en la Súper-Bestia. Como ya hemos reflejado, este hecho provocó un gran pesar en Herbert que decidió partir al espacio exterior, dejando en la Tierra a dos personajes tan relevantes como son Bova y Spiderwoman.

El científico tuvo que afrontar una rebelión de los Nuevos Hombres y trató de encontrar un aliado en Hulk, pero la acción del Gigante verde llegó tarde. Herbert tuvo que quitarse su destrozada armadura y evolucionar hacía un estadio inmortal ( Tales to Astonish#94-96 ). Esta acción le creo no pocos problemas al nuevo ente surgido, pues vagó por el cosmos infinito, llevándole hasta los bordes de la locura. Regreso a su ciudadela ya que sintió que su propósito en la vida le podría volver al camino de la cordura.

De nuevo es impactante reflejar la capacidad de creación de los autores responsables de la criatura. Stan y Jack, después de jugar a inventar y reformular dioses de todo tipo, pasaron al siguiente estadio al dar forma a la perversión del científico que juega a ser dios. La mezcla de misticismo, ciencia y elementos arcaizantes llega a su máxima expresión en el Alto Evolucionador y sus Nuevos Hombres (o Caballeros de Wundagore si se quiere). Lee y Kirby abrieron la lata de los truenos pero sería otro autor relevante el que condujese el concepto de megalomanía a un punto de no retorno al hacerle responsable de la creación de nada menos que un planeta.

En 1972 Roy Thomas recupera uno de los muchos conceptos que apuntaron Kirby y Lee en la colección de la Primera Familia y lo llevó a un nuevo nivel. En Marvel Premiere#1 tenemos la rutilante aparición de Adam Warlock, ideado por el Rey y The Man en los 4 Fantásticos como simplemente “El”. La creación del humano perfecto por parte del Enclave dio como resultado a este personaje que acabó emigrando a las estrellas. En este número el guionista trae de vuelta al Alto Evolucionador, viviendo en su ciudadela flotante desde que salió de la Tierra. Encuentra un extraño objeto vagando en el vacío y decide rescatarlo. ¿Un capullo gigante o un ataúd?, se pregunta Wyndham. De manera inmediata nota que tiene vida por lo que acomete la misión de descubrir el misterio de la vaina. Con sus avanzados aparejos consigue comunicarse de manera psíquica con el misterioso ocupante del capullo, lo que nos lleva a recordar el periplo del llamado “El” y como, tras un batalla con Thor, volvió a su estado inicial de vaina, perdido por el espacio hasta que el Evolucionador dio con sus huesos.

Es en ese momento cuando Wyndham le hace conocedor de sus intenciones: con un pequeño trozo de la Tierra se propone crear un nuevo planeta, a imagen y semejanza del nuestro, pero purgado de toda malvad, la Contratierra. Warlock no comprende los motivos del científico pero escucha pacientemente y es testigo del complicado proceso que es dar vida a un nuevo mundo donde desarrollar sus ideales. Lo que desconocía el genetista evolucionado es que estaba siendo observado por el Hombre Bestia, nombre definitivo de aquel que se rebeló en las montañas de Wundagore. Herbert queda exhausto después del increíble trabajo que supone dar forma y vida a un planeta, momento que aprovecha su antagonista para invadir la ciudadela y tomar los mandos de la maquinaria de Wyndham, mientras éste duerme un sueño reparador. El Hombre Bestia hace que surja en la Contratierra la figura del hombre asesino, por lo tanto la malvad vuelve a circular en el paraíso. El Evolucionador despierta para enfrentarse a su creación, dando lugar a un rudo combate en el que el científico está en desventaja. El misterioso ocupante de la vaina toma una decisión, ayudar al Alto Evolucionador contra los esbirros del Hombre Bestia. Consiguen derrotarlos pero el daño ya está hecho, pues han pervertido el sueño de un lugar perfecto para el nuevo mundo. El Evolucionador está dispuesto a poner fin a su experimento cuando una mano amiga accede desinteresadamente a darle otra oportunidad a la Contratierra. El llamado “El” ha contemplado valores positivos de la raza humana y quiere limpiar el mal que ha implantado el Hombre Bestia. Así pues, como un padre que envía a su hijo a salvar a todo un pueblo, teletransporta a Adam Warlock (debuta el nombre con el que será conocido para los restos), dispuesto a remediar la parte negativa del mundo recién creado. Y le da un regalo muy especial, una gema muy particular que portará en su frente, germen de las Gemas del Infinito.

La llegada de Warlock, aceptando el dolor que supone ser humano, provoca un gran shock en los habitantes del lugar, siendo la base de sus primeras aventuras el periplo por la Contratierra en busca de contrarrestar el influjo del Hombre Bestia. El Alto Evolucionador se posiciona como secundario observador desde su ciudadela, filosofando acerca de los acontecimientos presenciados para desaparecer rápidamente de la colección, dejando todo el protagonismo a la lucha entre Adam y el mal encarnado en los secuaces del Hombre Bestia. En este mundo a imagen y semejanza de la Tierra veremos versiones retorcidas de héroes como Reed Richards o de villanos como el Doctor Muerte. A pesar de que su creador se encargó de que este nuevo planeta fuese invisible a los ojos de la Tierra, pronto será visitado por personajes del Universo Marvel, siendo uno de los primeros el Increíble Hulk.

Roy Thomas se ha encargado de explicar la génesis de este proyecto repetidas veces. Lo primero a resaltar es que está basado en tres patas principales. Por un lado, el personaje de Warlock, una suerte de Jesucristo Superstar, el Hombre-Bestia, representando el mal en esencia ,y el Alto Evolucionador, el trasunto divino que nos falta para tener todas las representaciones de inspiración religiosa que Thomas y Gil Kane, dibujante de la historia, querían trasladar al lector. El guionista admite lo mucho que disfrutó al crear la Contratierra “como un invento del Alto Evolucionador, con una historia de miles de años ya intacta”. También cuenta las raíces de los intentos del científico de que la humanidad no adquiera ese instinto asesino que tanto nos caracteriza. Nos habla de un libro muy popular en EEUU en la época, African Genesis de Robert Ardrey, que leyeron con gran pasión tanto él como el dibujante. Lo cierto es que lograron introducir el concepto de la Contratierra en el Universo Marvel como un mundo con entidad propia, al que siempre quedará ligado por lazos muy cercanos su creador, el Alto Evolucionador.

Hemos apuntado ya que la Contratierra era invisible a cualquier tipo de avistamiento humano pero el cosmos es realmente grande y hay poderes incontestables con los que los trucos de Wyndham no parecen funcionar. El Evolucionador ve atacado su asteroide artificial nada menos que por el Destructor, el poderoso ente asgardiano. Suerte que por allí estaban los 4 Fantásticos. Bueno, en realidad habían seguido a Gorr, un Nuevo Hombre, con el que habían tenido sus más y sus menos. Los Imaginautas ayudan al humano en todo lo posible, dándose un duro enfrentamiento entre el Destructor y la Cosa, ataviado con un futurista exoesqueleto. La derrota del asgardiano no supone el fin de los problemas para la Contratierra. Su forma de vengarse es avisar a Galactus telepáticamente de la posición del planeta, por lo que el Devorador de Mundos tiene plato nuevo en el menú. Comienza entonces una saga donde los Fantásticos y el Evolucionador tendrán que hacer frente al deseo de Galactus de alimentarse con este planeta. El punto culminante de la historia será el enfrentamiento total entre un genetista aumentado de tamaño a niveles colosales y el Devorador, logrando la supervivencia de la Contratierrra únicamente al ofrecerle otros planetas para ser consumidos. Todo esto fue narrado en Fantastic Four#172-175, con autores como Bill Mantlo y George Pérez, aunque fue rematada por Roy Thomas y John Buscema.

El más preciado tesoro del genetista fue robado de sus manos, por lo que inició una búsqueda en absoluto solitaria. Aparte de Wyndham, tenemos la Cosa de los 4F, Alicia Masters, Dragón Lunar, Halcón Estelar de los Guardianes de la Galaxia y la entidad dorada “Ella”. Juntos descubrieron que la Contratierra fue sustraída por un alienígena llamado Esfingor con intenciones de entregarla a una raza extraordinaria conocida como los “Todopoderosos”. El Evolucionador accede a ver los propósitos que tenían para su alabada creación cuando es consciente de que es considerada como un experimento primitivo de poco calado ( Marvel Two-In-One 62-63 ). Aquello afectó al humano evolucionado; ver su insignificancia ante los poderes inescrutables del universo volvió a enloquecerlo e intentó acabar con su vida. El problema era su armadura, creada para proteger la existencia de Herbert contra cualquier peligro, incluido él mismo. Esto nos lleva al Hulk de Bill Mantlo y Sal Buscema. En Incredible Hulk#266 asistimos a una de esas historias impactantes, que no por breve no dejan de quedarse indefectiblemente grabada en la memoria. El Alto Evolucionador no puede autodestruirse por lo que piensa en el ser más poderoso de la Tierra, el Goliat Esmeralda. Para forzar a Bruce Banner a sacar lo peor de sí transforma a las dos personas que más aprecia el doctor, Rick Jones y Betty Ross, en dos simios, a los que irá modificando a peor para conseguir su objetivo de enfurecer al gigante. Toda la furia de Hulk se desata en unas viñetas donde la armadura del científico resiste contra la voluntad de su portador los salvajes envites de Hulk. Finalmente, la armadura queda desecha y el Evolucionador lo retorna todo a la normalidad. En unas tristes secuencias finales vemos el fin de Herbert Wyndham, involucionando hacia la nada más absoluta. O eso pensábamos en aquellos momentos porque el científico decidió volver, además con unas actitudes más agresivas, unas que nos llevarían a una guerra.

En el año 1988 Mark Gruenwald coordina una serie de especiales donde varios autores nos narrarían la historia editorial más trascendente para el personaje. Conocida como la Guerra de la Evolución incluía anuales y números especiales de colecciones tan distintas como X Men, Spider-man, Punisher, Vengadores, Nuevos Mutantes o Vengadores Costa Oeste. Veamos en qué consistían los nuevos planes de Herbert Wyndham.

El Alto Evolucionador retorna a la primera plana con un propósito firme, adelantar un paso evolutivo a la especie humana. Para ello ideó una bomba genética que, al estallar, lograse conseguir el siguiente paso de la evolución. Suponiendo que esto crearía recelos, organizó un ejército que incluía a sus fieles Nuevos Hombres pero también humanos corrientes dispuestos a asumir los preceptos del científico. Dividió a su gente en puestos bien específicos y diferenciados, cada uno con una misión: Sacerdotes (sus más leales Nuevos Hombres), Recolectores (encargados de recoger material genético), Purificadores (dispuestos a que razas no dignas no se reprodujesen), Eliminadores (estos tienen clara su función) y los Técnicos (la parte científica). El primer objetivo se fijó en aquellas razas malditas a las que el Evolucionador no considera dignas de generar descendencia. Los Purificadores deben encargarse de esterilizar a topoides, Hombres de Lava y Desviantes. El grupo de Factor X, entonces los cinco originales de la Patrulla X, acudieron en ayuda de estas razas. Los movimientos del científico llamaron la atención de gente como Apocalipsis o como Estela Plateada, con los que tuvo que batallar. Los Recolectores llegaron a secuestrar a Magma de los Nuevos Mutantes y se plantaron en el Área Azul de la Luna en busca de la Nieblas Terrígenas de los Inhumanos. Mercurio aguantó como pudo la situación hasta que llegó el resto de la caballería traída por Rayo Negro, entre los que destacan los 4 Fantásticos. Pero el Alto Evolucionador no se quedó aquí, mandando tropas a lugares como Tierra Salvaje, Wakanda y el nexo de las realidades, hogar del Hombre Cosa.

La última parte del plan de Wyndham era reactivar a Yocasta para obtener todos los datos de los archivos de los Vengadores. El robot consiguió liberarse de sus captores y enviar un mensaje de auxilio a la Hidrobase, centro de operaciones de los héroes más poderosos del planeta en estos momentos. Con los miembros actuales no disponibles se activa la reserva trayendo a personajes como el Capitán (Steve Rogers), el Halcón, Hércules, la Bestia de la Patrulla X, Hulk y Chaqueta Amarilla ( ahora Rita DeMara, una ex villana que participó en el Asalto a la Mansión). Consiguen localizar el origen del mensaje y acuden para liberar a Yocasta y, de paso, conocer de primera mano las intenciones del científico evolucionado. El equipo se dirige a Lemuria, la ciudad submarina de los Desviantes, para encontrarla bajo asedio de tropas atlantes comandadas por Attuma, rival histórico de Namor. El Capitán intercede entre las fuerzas enfrentadas y consigue hacerles entender a ambos bandos que han sido engañados por el Alto Evolucionador. Con la ayuda de Atlantes y Desviantes localizan la base submarina de Herbert Wyndham. Aquí tenemos localizado al responsable, siguiendo con sus experimentos, cuando se ve atacado por el grupo vengador. La batalla entre las dos grupos será sin cuartel. El genetista empieza a ponerse nervioso; sus planes están al borde de fracasar y los héroes no van a dar su brazo a torcer. Steve Rogers tiene la idea de evolucionar a Hércules a un estadio superior, lo que nos dará un rival capaz de plantar cara al desquiciado científico. La lucha entre tales niveles de poder se convierte en épica; tanto el hijo de Zeus como el Evolucionador se echan todo lo que tienen encima. El bueno de Herc consigue derrotar a Wyndham pero éste, en un último acto desesperado, arrastra hacia la nada al dios olímpico. Los dos dioses desaparecen sin dejar rastro. Los Vengadores explosionan la bomba en un lugar seguro y consiguen salvar, otra vez más, a toda la humanidad.

Para saber el destino del genetista y del vengador tendríamos que esperar al año 1989, más concretamente en The Mighty Thor#407, escrito por Tom DeFalco y dibujado por Ron Frenz. El Dios del Trueno se interna en la Galaxia Negra donde tendrá que batallar con los extraños organismos que la componen para salvar al Príncipe Poder y al científico evolucionado. En este oscuro enclave descubre que ambos se hallan presos de un Celestial, por lo que liberarlos no va a ser tarea fácil. El hijo de Odín consigue su objetivo y regresan a la Tierra, a las montañas de Wundagore, pero una vez aquí el Evolucionador decide que quiere investigar la Galaxia Negra y parte de nuevo a esos confines. Este es el preámbulo para uno de las ciclos más relevantes de la era DeFalco en Thor, conocido como la Saga de la Galaxia Negra. A partir del #417 tendremos de nuevo a Hércules y al asgardiano en esa galaxia, donde ya se encontraba haciendo avances en sus investigaciones Herbert Wyndham. De hecho, llevaría el concepto de Nuevos Hombres a un nivel más elevado al dar lugar a los Nuevos Inmortales. Pero lo más relevante será que vamos a ser testigos del nacimiento de un Celestial, gigantescas criaturas cósmicas con un poder casi omnímodo. Esta nueva creación se llevará consigo la Galaxia Negra ya que pasará a formar parte de este dios cósmico. El Alto Evolucionador quedará en estado de shock al contemplar tanto poder concentrado ( The Mighty Thor#424 ).

Estamos ante los últimos momentos de grandeza en cuanto a personaje de nuestro protagonista. Tras pasar de ser un científico con buenas intenciones pero sobrepasado por sus aspiraciones megalomaníacas en manos de Stan Lee o Roy Thomas, se convirtió en un desquiciado semi-dios con la Guerra de la Evolución. Después de esto se dedicó a figurar como secundario, con funciones variables según quien lo dirigiera, pero sin participar en grandes historias de relumbrón. Parece mentira que a un ser tan evolucionado le costara encontrar su hueco las distintas tramas de la Casa de las Ideas.

Lo cierto es que tras los drásticos cambios de personalidad ocurridos tras su paso a la villanía en la Guerra de la Evolución, al igual que los complejos niveles de poder que asume el personaje, Herbert Wyndham tiene un grave problema para encajar en algún hueco de la producción de la Casa de la Ideas. Será reservado para historias puntuales y con personajes que hasta ahora han tenido relación con él. Así, lo vemos aparecer en la serie de Warlock como guardián de las Gemas del Infinito, Warlock and the Infinity Watch (números 3 y 4). Recordemos que fue el científico el primero en darle un propósito al portador de la Gema Alma. Aquí veríamos una nueva colaboración entre ambos con el Hombre-Bestia de nuevo como antagonista.

Pero si hay una colección a la que está asociado el Evolucionador esa es Thor. Nació en las páginas del Dios del Trueno y durante la década de los noventa sus apariciones se verán casi reducidas a esta cabecera. En el año 1994 dirige los destinos del asgardiano el bueno de Roy Thomas, autor que había dejado una etapa memorable con Thor a mediados de los 70, acompañado a los lápices por M.C. Wyman. Thomas, después de unas aventuras alejado de Midgard, decide que el Dios del Trueno debe volver a la Tierra y allí se encontrará con un grupo de personajes con grandes poderes comandados por el Alto Evolucionador ( The Mighty Thor#472 ). Nace así el concepto de Godpack, un equipo liderado por Wyndham formado por la segunda raza de seres inmortales surgidos a raíz de los experimentos del científico: Ankar, Bellam, Blitziana, Loga, Luminor, Rigger y Zeffra. Lo curioso del caso es que Thor aceptará unirse a esta extraña formación para luchar contra amenazas como el Destructor, Hela, Lorelei o el sempiterno Loki. Esto hace que tengamos al Alto Evolucionador como secundario recurrente durante una buena cantidad de números ( Thor#472-473 y de continuo desde #475 hasta #489, más el Annual#19). Tras una épica batalla en el reino de Hel, con Hulk y el hijo de Odín involucrados, Thor decide quedarse en la Tierra y separar sus pasos del grupo del Alto Evolucionador. Se iniciaba un relevo en la colección y no había hueco para el científico en las nuevas tramas.

La imagen de villano sería algo recurrente para nuestro protagonista. Esa oscilación entre malvado y científico incomprendido es la base de su tratamiento a partir de ahora. Otra prueba la tenemos en una saga escrita por Bob Harras a mediados de los noventa en los Vengadores. Mercurio y Crystal se dirigen a Transia a visitar a Bova, muy enferma. Los dos vengadores piensan que el Evolucionador puede salvar a la mujer vaca por lo que dirigen sus pasos a las montañas de Wundagore cuando son atacados por los Nuevos Hombres. El aparente culpable de los ataques, Wyndham, detiene a sus creaciones y descubrimos al auténtico villano: alguien muy cercano a Bova llamado Fydor ha sido transformado por uno de los Acólitos de Magneto, Éxodo, en un terrible monstruo. La pareja vengadora y el Evolucionador luchan contra la malvada criatura y conseguir salvar a Bova ( Avengers 380-382 ).

Y no dejamos a Pietro de lado pues a finales de 1997 tuvo su única oportunidad como protagonista de una serie regular en su larga trayectoria editorial. Sus aventuras se ubican en la región de Wundagore y se pondrá al frente de sus famosos caballeros. Tendrá que enfrentarse a numerosos peligros, casi todos del entorno cercano a Magneto, ya que los Acólitos serán un continuo dolor de cabeza para Mercurio. El Alto Evolucionador será una constante en la serie aunque hay que decir que su papel no pasa de ser testimonial, a pesar de que la serie cuenta con gran parte de su legado como reclamo. Lo más destacable se produce en un especial, Heroes for Hire/Quicksilver’98, donde renuncia a su estado de divinidad y devuelve al Hombre Bestia a su estado original. Como detalle curioso a reseñar, hay que nombrar que tuvo una pequeña aparición estelar en Ka-Zar y que alguien que ha llegado a alcanzar las mieles de la deidad fuese capaz de caer rendido a los pies de Shanna llama poderosamente la atención ( Ka-Zar vol 2. #12-14 ).

En los últimos coletazos de su estancia al frente de la franquicia mutante, Alan Davis recuperó al personaje de nuevo, esta vez un Herbert preocupado por el estado evolutivo de la humanidad. Se comunica con la Patrulla X para darles parte de una decisión unilateral que ha tomado al observar el crecimiento de la raza mutante. Como albacea del potencial genético de nuestro planeta ha decidido que el Homo Superior debe ser eliminado. Todas las reservas de los buenos mutantes allí presentes son ignoradas y la supresión del gen X se produce de forma instantánea, afectando a todos los mutantes diseminados a lo largo del mundo. Para Wyndham es el único camino posible por lo que cree actuar de forma correcta. Lo vemos dialogar en su nave espacial con un ayudante, el Dr. Essex, que le alienta y le apoya en esta difícil determinación. Los distintos mutantes se ven asolados por los acontecimientos por lo que algunos van a intentar poner remedio a la situación. Mientras, observamos que el Evolucionador ha sido una marioneta en manos de Essex, o deberíamos decir Mr. Siniestro, que lo ha estado utilizando para sus fines. Los X Men consiguen vencer a su antagónico rival y el Alto Evolucionador se da cuenta de su error, volviéndolo todo a la normalidad. Fin de camino para Alan Davis en las cabeceras mutantes y fin de ciclo para Wyndham durante una temporada.

Para asistir a su regreso debemos volver a la vertiente cósmica donde Dan Abnett y Andy Lanning se acordarían del científico evolucionado en un conflicto a escala interplanetaria. Hablamos de Aniquilación: Conquista, un evento cósmico que juntó a varios de esos personajes que ya llevaban una temporada tratando la dupla D’n’A. Clara continuación de Aniquilación, donde una invasión de Annihilus puso en jaque al Universo Marvel, aquí tenemos a los peligrosos organismos de la Falange dispuestos a infectar todo el espacio vital Kree, con Hala, su capital, como punto más afectado. La línea de defensa principal ante la temible invasión la formarán distinguidos personajes como la nueva Quasar, Dragón Lunar, Ronan el Acusador, Peter Quill, Adam Warlock o el Súper-Skrull. El Alto Evolucionador se mantendrá en una línea secundaria, al lado de ilustres como Mapache Cohete, Groot o Mantis. Todos con el mismo objetivo, detener a la Falange y a su misterioso impulsor, nada menos que el robot genocida Ultrón. Por lo menos eso parecía al principio porque nuestro Herbert toma una extraña determinación en un momento dado:

Aviso de Spoiler El Ato Evolucionador se vuelve contra sus supuestos aliados, atacando violentamente a Adam Warlock, «su hijo»

Fundido en negro para el científico tras Aniquilación: Conquista, aunque Abnett y Lanning lo tendrían en cuenta para una mini serie especial que estaban preparando que iba a reunir al Dios del Trueno y al Hombre de Hierro, después de ser dos personajes no muy bien avenidos en tiempos recientes, titulada Complejo de Dios.

También hay que reconocerle una temporada como colaborador de Magneto durante la etapa de la Patrulla X de Ed Brubaker y , sobre todo,Matt Fraction. Los dos se disponen a trabajar en la sombra para recuperar los poderes de un Erik vacio de poder desde el Día de M. Para ello un Magneto ataviado con un traje confeccionado por el Evolucionador ataca a los X Men durante una exposición conceptual en San Francsico, donde lo mutante es tomado como algo lúdico. Mientras la batalla tiene lugar, Wyndham extrae energía del Celestial Durmiente, el componente definitivo que necesita para retornar los poderes magnéticos a su legítimo dueño. Así, gracias al Evolucionador, Erik vuelve a convertirse en el Amo del Magnetismo. Por cierto, durante su trabajo conjunto en su base situada en la órbita terrestre, ambos avistaron la poderosa bala en la que quedó atrapada Kitty Pride, hecho que le servirá a Magneto para que, haciendo un esfuerzo sin igual, consiga traerla de vuelta aunque no en perfecto estado.

Hagamos un paréntesis para dejar constancia de su aparición en un arco argumental de Lobezno Primera Clase. Logan, acompañado de su inseparable Kitty Pride, aterrizan en las cercanías de Wundagore buscando extraños impulsos electromagnéticos detectados por Cerebro. Son atacados por los Caballeros de la región, que conocemos bien, asustados ante la presencia probable de Magneto. Aparece el Alto Evolucionador y nombra a Lobezno nada menos que Caballero de Wundagore. En realidad no se enfrentan al Amo del Magnetismo, sino que es el Hombre-Bestia dispuesto a generar más conflictos en la región y uno de ellos es haber convertido a Kitty en uno más de los Nuevos Hombres. Gata Sombra asumirá un papel relevante como defensora de los oprimidos, Logan ha sido despojado de su rabia, mientras que Wyndham se queda a un lado pues no sabe que bando es merecedor de su apoyo. Solo que el Hombre-Bestia tiene claro quién es su enemigo y le ataca con gran virulencia. De hecho, es capaz de vencerle y sustraer su poderosa armadura. Ante esta situación desesperada, el mutante canadiense saca toda su fuerza interior para derrotar al Hombre-Bestia. El Evolucionador retorna a por su armadura, deshace el estado de Kitty y demuestra a Lobezno que dentro de él hay una parte caballerosa.

A pesar de que estas historias datan del año 2008, la serie “Primera Clase” no está ubicada en la actualidad. Se basan en el concepto de “Historias jamás contadas”, donde de forma imaginativa se pueden ir rellenando los huecos acerca de acontecimientos del pasado. Ésta trama, en concreto, habría que conectarla con los momentos posteriores a la muerte de Fénix Oscura, instantes que la cronología tradicional sitúa al Evolucionador fuera de nuestro planeta….En fin, volvamos a la mini-serie de Abnett y Lanning

Dan Abnett y Andy Lanning nos sitúan justo en los momentos en que se está intentado recuperar los pedazos de la caída Asgard, tras los sucesos de Asedio. En la zona trabajan los distintos dioses asgardianos con la inestimable colaboración de Tony Stark, el flamante Iron Man. En plena faena, el Hombre de Hierro sufre un ataque de Dinamo Carmesí, un rival tradicional de Tony pero muy alejado de su entorno. Por otro lado, Thor descubre la localización de la armadura del Destructor cuando es atacado por otro de sus malvados enemigos, Ulik el Troll. Ambos parecen imbuidos de un poder superior, de raíz mística lo que hace más complicada la tarea a nuestros héroes. La palma se la lleva Tony, apalizado por Dinamo y atrapado por el cerebro detrás de todo el entramado, el Alto Evolucionador. Éste pretende crear una nueva divinidad para el Siglo XXI y quiere utilizar a Stark como su material de base.

Thor, desconocedor de estos detalles, sigue en batalla con Ulik cuando hace su aparición otro nuevo villano, el alquimista Diablo. Todo parece un complot a gran escala que a ambos héroes les va a costar solucionar. Wyndham le cuenta sus planes al bueno de Tony, comentándole sus recelos acerca de las antiguas divinidades. Nadie mejor que Stark debería comprender esa situación y ser capaz de dar el siguiente paso en su evolución. A estas alturas, los villanos deberían saber que a Iron Man no se le debe dar la mínima capacidad de reacción ya que es capaz de dar la vuelta a la tortilla a la primera oportunidad que se le presenta. Y la puntilla la pone la entrada en escena de Thor, con lo que consiguen equilibrar la situación. Wyndham empieza a dudar de sus propósitos pero ahora es Diablo el que no pretende detener el proceso, convirtiéndose en el receptáculo de la nueva divinidad. El Hijo de Odín y Tony Stark consiguen reducirle, pero el Alto Evolucionador ha quedado sensiblemente tocado. Sus Nuevos Hombres se disponen a llevarlo a un lugar seguro, hasta nueva orden.

Esa vuelta a la acción sería casi inmediata pues Wyndham se convertiría en el leit motiv de la nueva cabecera de Estela Plateada. En el año 2011 se anuncia nueva serie regular para Norrid Radd, aunque su duración fueron escasamente cinco números. El equipo creativo elegido es Greg Pak al procesador de textos, que había realizado un gran trabajo previo en Hulk y en Hércules, junto a dibujantes como Stephen Segovia o Harvey Tolibao. El guionista decide centrar las aventuras del Heraldo de Galactus en la Tierra, además despojándolo de su poder cósmico. El surfista se encuentra haciendo el bien, como en él es costumbre, cuando es apresado por el Alto Evolucionador. Ante la mirada de Suzie Endo, una secundaria fundamental en toda la historia, Wyndham le arrebata los atributos entregados por Galactus en un tiempo ya tan lejano. El objetivo del genetista es conseguir parte de la consciencia cósmica para localizar la fuente del secreto del Devorador de Mundos. El plan del científico evolucionado es el más arriesgado hasta ahora, pues pretende evolucionar a los habitantes de la Tierra de la misma forma que se hizo con Norrid Radd, mediante puro poder cósmico. Eso implica buscar planetas muertos y para ello necesita un heraldo, la humana antes llamada Suzie Endo, ahora convertida en la Buscadora. Wyndham deberá ser derrotado por la acción combinada de Estela, la Fundación Futuro y el mismísimo Galactus.

Ya que hablamos de la Fundación Futuro, idea que Jonathan Hickman desarrolló en su etapa de los 4 Fantásticos, a Herbert también lo pudimos ver por algunos números de esa colección. Con todo el entramado del Consejo de los distintos Reed Richards interdimensionales, el Alto Evolucionador aparece como miembro del Consejo del Dr. Doom ( FF#3-5/#8-9 ).

La llegada del relanzamiento Marvel Now! también tuvo presente a nuestro protagonista, aunque fuera de forma tangencial. Para empezar, asume el rol de villano en una saga vengativa que se desarrolla en Tierra Salvaje ( Avengers vol.5#12-13 ). Un grupo de vengadores se desplazan a este extraño paraje para detener al Alto Evolucionador y sus malsanas intenciones.

Pero su mayor protagonismo en tiempos recientes lo ha tenido en el ya concluido último volumen de los Nuevos Guerreros. A cargo de Christ Yost y Marcus To, se esperaba con ansias este nuevo relanzamiento de uno de los grupos que más éxito tuvo en los noventa. Con nueva formación, que incluye a clásicos como Justicia o Speedball, junto a incorporaciones como la Araña Escarlata o el nuevo Nova, Sam Alexander, tendremos a Wyndham como antagonista básico de la cabecera. En sus doce números la amenaza a la que deberán enfrentarse los héroes son, de nuevo, los deseos del Alto Evolucionador. Empeñado en que la humanidad se ve asolada por un montón de especies no dignas, opta por la eliminación de todo aquello impuro, según sus criterios claro. Aquí pueden entrar tanto mutantes (que ya lo puso en práctica durante la época de Alan Davis) como Inhumanos. Se verá acompañado por los Evolucionarios, un grupo que ya presentó Yost durante su etapa en los X Men.

Y llegamos a Axis. Villanos y héroes invertidos, el grupo de Imposibles Vengadores roto por las consecuencias del evento y los hermanos Maximoff otra vez sin saber de su verdadero progenitor. Parece que lo vamos a descubrir en el nuevo relanzamiento de la serie de Rick Remender. No sabemos qué grado de implicación tendrá Herbert Wyndham, hasta que las incógnitas sean desveladas. Lo que sí que sabemos es que la figura del hombre que sobrepasa sus límites aspirando a ser Dios es un clásico en el imaginario contemporáneo. Y esa figura corresponde en el Universo Marvel al Alto Evolucionador. Un personaje que no ha sabido ser tratado por muchos guionistas, pues por sus diferentes matices daría para sugerentes interpretaciones. Parece que se impone la figura de villano, pero a este redactor le sigue pareciendo mucho más estimulante el científico convencido de sus actos, aunque estos generen profundas dudas éticas. No hay problema, el cómic representa un camino de ida y vuelta, por lo que esa puerta siempre seguirá abierta. De momento, estamos a la espera que nos aclare el origen de Pietro y Wanda. A ver si esta vez es la definitiva.