Una versión creepy de Spiderman
«Gracias Petey. Sé que dije que sería como unas vacaciones, pero…..»
Esta obra es muy peculiar. No estoy exagerando nada. Varios aspectos avalan lo que os comento. En primer lugar, con sólo ver el equipo creativo ya tenemos indicios claros de qué vamos a encontrarnos. La escritora Susan K. Putney se une al legendario mago del terror Bernie Wrightson. La guionista probó aquí suerte con el género super heroico, siendo la novela de ciencia ficción su campo de abono (Against Arcturus).
Bernie Wrightson, conocido por los amantes del noveno arte, destacó siempre por el género de terror. Swamp Thing, con textos de Len Wein en el número 92 de la revista House of Secrets, suele ser la clara referencia del genial autor de Baltymore. Su trabajo posterior se desarrolla ilustrando historias de terror para la editorial Warren, incluyendo obras de Stephen King. El género de los super héroes también fue abrazado por el dibujante viniéndome a la cabeza Batman (The Cult) y El Castigador, por ejemplo; incluso aportó su buen hacer en el diseño de personajes para Los Cazafantasmas y en When Zombies Attack!!
Como podéis ver ambos autores no son del perfil típico para desarrollar una historia de Spiderman, lo cual, por lo menos, llama poderosamente nuestra curiosidad y atención.
En segundo lugar, solo con ver la portada de esta edición percibimos que algo no encaja del todo con las historias de El Trepamuros. La obra no engaña. Nada más empezar somos conscientes que nuestro arácnido favorito se va a ver de lleno en una peculiar historia hecha a la medida del dibujante. Sin embargo, dentro de esa comodidad, debo señalar que su Spiderman me chirría. Mientras los monstruos dibujados son espectaculares, nuestro arácnido vecino parece bizco. Bernie Wrightson, un grande entre los grandes, no consigue acertar con la máscara de Spiderman.
Por otro lado, el argumento es lineal y enfocado a una sola idea; ver como la némesis de la denominada “Espumadora”, una hechicera de un mundo mágico al que viaja Spidey, se va transformando en horrendas criaturas cada vez más poderosas permitiendo explotar la genialidad de un autor que se desenvuelve a la perfección con criaturas deformes y monstruosas. No hay más, así de sencillo.
Entonces, ¿merece la pena El Asombroso Spiderman: Hooky? Definitivamente sí, por tres razones obvias. La primera de ellas, Hooky está dirigida a los amantes de El Trepamuros. La segunda, inevitablemente tenemos un anzuelo con un cebo que difícilmente podemos evitar; Bernie Wrightson. Finalmente, la edición de SD Distribuciones es maravillosa. Hasta la fecha teníamos dos ediciones, una de ellas de 1990 de la mano de Planeta de Agostini en la colección Novelas Gráficas Marvel en su segundo número, y posteriormente, año 2006, Panini Cómics la publicó en Classic Spiderman en su tercer número. Ahora por 16 euros (lo sé es caro) tenemos una publicación digna, con sobrecubiertas y con un tamaño propio del formato de Novela Gráfica que permite el disfrute del dibujo como dios manda. La pega, no es papel poroso que tanto amo y adoro.
Por lo demás la historia es muy disfrutable, de lectura rápida, y que me ha recordado épocas pasadas en las que de crío me acerqué a la edición de Planeta con evidente desconcierto puesto que iba orientada a un público más adulto. Sí, hace 34 años estos monstruos y Bernie eran asociados a los dos rombos. Ahora, dentro de la cultura Terrifier esta historia es de blandengues como cierto famoso taxista mencionaba con evidente casposidad.
Lo mejor
• Los monstruos de Bernie Wrightson.
• Le edición.
Lo peor
• El guion.
Una monstruosa historia
Guión - 6
Dibujo - 7.5
Interés - 7
6.8
Una historia flojita pero llena de carga emocional e histórica.
Ostras yo me pille la novela gráfica hace mogollón de años cuando no sabia ni me importaban los autores. Solo que era de Spidey y el bicho molaba un montón. No sabía que era de Bernie Wrightson