El Barón es uno de los grandes villanos de Marvel. Que no haya sido utilizado en grandes cantidades refuerza esa afirmación pues en sus contadas apariciones ha dejado una huella indeleble en todos sus enemigos, que han sido muchos. Su portentosa inteligencia y su ansia de superioridad le han hecho transitar por caminos más complejos que los villanos tradicionales. Creado en los inicios de la Era Marvel como antagonista de los Vengadores, principalmente del Capitán América, el legado de los Zemo no ha dejado de crecer con cada nuevo autor que ha desarrollado el personaje. Porque Zemo no hay solo uno, es una estirpe legendaria que se extiende hasta el Siglo XV. Para nosotros han destacado dos, Heinrich, responsable de la caída en desgracia de Steve Rogers y Bucky, y Helmut, ineludiblemente unidos a los conceptos de Amos del mal y, sobre todo, Thunderbolts. DeMatteis, Stern, Busiek, Nicieza han sido los autores que lo han posicionado como uno de los grandes malvados de la editorial. Hecho reforzado por su porte aristocrático que por su sangre se ve obligado a mantener. En un momento actual en que su relevancia no es muy grande, nos encontramos con que Rick Remender anda planeando la resurrección de HYDRA y el barón aparece como cabeza visible de este proyecto. Llama la atención poderosamente pues Helmut nunca ha querido transitar por viejas sendas ya recorridas por su padre, pero está claro que la fuerza de la sangre siempre llama. Detalle éste que en el personaje de Zemo merece ser resaltado, por lo que le vamos a dedicar nuestro primer punto esta cuestión.
El malvado Barón Zemo fue creado como un movimiento de retrocontinuidad por parte de Stan Lee y Jack Kirby, necesitados de un villano potente para la recién estrenada cabecera de los Vengadores. Eran conscientes de que el gran supergrupo Marvel todavía no había tenido el antagonista ideal que suponían Magneto y el Doctor Muerte en otras cabeceras. Ante tal tesitura, el tándem creativo tiró por el malo maloso por excelencia, el villano nazi. Además, lo hicieron responsable de uno de los acontecimientos más traumáticos en la vida del Capitán América. Y para que todo funcionará a la perfección en el todavía tierno Universo Marvel , tuvo su participación en Sargent Fury and his Howling Comandos, serie que desarrollaba la vida y milagros de Nick Furia durante la II Guerra Mundial, con lo que la cuadratura del círculo para Zemo parecía completa. Realmente, no se puede negar que tanto Stan como Jack conocieran de primera mano cómo se las gastaban los oficiales germanos en la contienda, pues ambos participaron (en mayor o menor medida) en el conflicto armado. El hecho de plasmar a la aristocracia alemana como parte activa del alto mando militar nazi obedece a una percepción muy extendida que cabría matizar por las peculiaridades históricas de la propia nación alemana. Hagamos un breve interludio para conocer, muy someramente, esas peculiaridades.
Es un dato conocido que Alemania no existe como nación o estado hasta 1871. Tras un largo proceso lleno de vicisitudes, el Kaiser Guillermo I unificó los distintos territorios germanos tras la victoria ante Francia en la que se conoce como la Guerra franco-prusiana (1870-71). Antes de eso, existían distintos territorios (más de 300 se han llegado a contabilizar) bajo la denominación genérica de Sacro Imperio Romano Germánico. Todos y cada uno de esos estados eran dirigidos por un estamento nobiliario, portadores del poder durante la Edad Media y Moderna. La llegada de Napoleón a la zona redujo considerablemente la división territorial, dejándolo “solo” en 38 estados, donde emergen con fuerzas dos nombres: Prusia y Baviera. Aun así, todos los antiguos nobles y príncipes siguieron manteniendo sus títulos aunque bien diferenciados:
– Uradel : nobleza de la que se conocen registros anteriores al S XIV (Antigua Nobleza)
– Briefadel : concedida a partir de 1360 por cesiones o contratos, pero sin territorios; se le conoce como Nueva Nobleza
– Hochadel : Alta Nobleza
– Niederer Adel : la Baja Nobleza de toda la vida. Es decir, que tenemos los aristócratas que se hacían acompañar de manera rimbombante con su título como Barón, Príncipe o Duque ( Alta Nobleza), y otros que lo habían obtenido por méritos, carecían de tal privilegio y solo se les reconocía por unir la partícula aristocrática von a su apellido familiar
Es indudable que tenemos una proliferación de títulos nobiliarios como pocos territorios europeos. Todas sus prebendas se dan por concluidas con la Constitución de Weimar, que establecía Alemania como república tras la derrota en la I Guerra Mundial. El 23 de junio de 1920 se aprueba una ley donde todos los títulos de las familias aristocráticas germanas fueron prohibidos, en aras de buscar una pretendida igualdad entre alemanes. Eso sí, se les permitió convertir el antiguo título en apellido familiar que pasaría de padres a hijos, demostrando una importancia capital al legado de la sangre.
Como hemos comentado arriba, había un estado en ese conglomerado que sobresalía sobre el resto en cuanto a importancia, Prusia. Este territorio ha sido siempre conocido por un relevante componente militar donde sobresalían sus academias y donde la abundante nobleza primaba la formación castrense de sus más destacados integrantes. No es extraño entonces que gran parte de los estamentos de mando en el ejército estuvieran copados por aristócratas. Cuando Adolf Hitler llega al poder al obtener la mayoría del parlamento en las elecciones de 1933 (luego Führer tras la muerte del presidente Hinderburg) dará un impulso brutal a la carrera armamentística y militar, buscando revertir la situación creada tras el fin de la I Guerra Mundial y el Tratado de Versalles de 1919. Entre todos esos altos mandos que regían los destinos de la armada germana (la mayoría de origen noble) había afectos al nuevo régimen, por supuesto, pero también tenemos noticias de disidencias, como bien demuestra la llamada “Operación Valquiria” protagonizada por varios oficiales pertenecientes a la antigua nobleza donde destaca el conde von Stauffenberg.
Lee y Kirby debieron conocer, si no personalmente, por lo menos de oídas, todas esas referencias nobiliarias de sus enemigos alemanes en la guerra por lo que cuando se plantearon crear a un villano nazi como Heinrich Zemo, nombre de pila del Barón, no dudaron en darle esa pátina aristocrática. Y parece que se convirtió en tónica habitual, pues a muchos malvados relacionados con el nacional socialismo se les buscaron títulos y reconocimientos nobiliarios: Barón Von Strucker, Barón Sangre, Conde von Blitzkrieg….. Es importante señalar por otro lado que cuando Joe Simon y Jack Kirby dieron salida al villano nazi por antonomasia, Cráneo Rojo, se pensará en él no como un noble sino como un advenedizo que vio posibilidades de destacar en un nuevo régimen, pues de esos también tuvo la Alemania nazi, como bien podría ser el caso paradigmático de Joseph Goebbels.
El tema es que el Barón Heinrich Zemo es un personaje que le toco vivir en primera persona la época de gloria de Adolf Hitler. Asumió sus directrices y se propuso ayudar al Führer en sus intenciones expansivas. Pero Heinrich no cayo con el nazismo; la fuerza de su sangre le impulsaba a ser mejor que los demás, por lo que acabaría volviendo al momento Marvel actual (el año 1964) para rendir cuentas con su viejo enemigo, Steve Rogers, también retornado al tiempo presente tras un pequeño proceso de animación suspendida. Y ese es un detalle importante, porque tanto su ascendencia como su descendencia (de la que vamos a hablar más en profundidad) nos muestran que el legado de la sangre en la familia Zemo no es un detalle difícil de obviar.
Con este encabezado tan clásico de la Silver Age somos testigos del nacimiento en viñetas del Barón Zemo. Aunque gran parte de su potencial lo obtiene de la retrocontinuidad, al ser responsable de un hecho fundamental para el Capitán América, lo tenemos en tiempo presente incordiando a los Vengadores en Avengers#6. Como ya hemos dicho, el tándem Lee-Kirby buscaba un villano definitivo para el grupo e idearon a este aristócrata alemán que había luchado en la II Guerra Mundial contra Steve Rogers. Zemo seguía las órdenes del entonces mandamás nazi Cráneo Rojo: arrojar una enorme bomba en Gran Bretaña que pondría en peligro la vida de millones de personas. El capi y su inseparable sidekick, Bucky Barnes, conocieron la noticia y no dudaron en marchar en solitario para intentar desbaratar las intenciones del malvado Barón. Pero tamaña empresa requería un sacrificio grande ya que Heinrich vio venir a los héroes norteamericanos y lanzó el vehículo que llevaba a la bomba a su fatal destino. Tanto el abanderado como Barnes saltaron tras la aeronave, en un intento desesperado de inutilizar el artefacto. Consiguieron que explotara en el aire, librando a la población civil de una muerte segura, pero los dos héroes pagaron las consecuencias. Durante mucho tiempo se les dio por muertos pero ambos lograron sobrevivir: Steve en animación suspendida debido al suero de súper soldado y Bucky cayó en manos de los rusos que lo convirtieron en un asesino entrenado conocido como el Soldado de Invierno. Toda la historia de la vuelta a la vida de Steve la tuvimos en el mítico Avengers#4.
Después de este fracaso, Heinrich abandona con su familia, entre ellos su hijo Helmut, Alemania y se construye una base secreta en lo más profundo de las selvas de Sudamérica, desde donde tendrá tiempo para prepararse sus futuros planes. El Barón, nacido como el duodécimo de los Zemo, es un brillante genio científico entregado al mal, y ya había tenido encuentros previos con el Capitán América. Inventó el célebre Adhesivo X, pensado para fines militares y agresivos, solo que no contó con Steve Rogers que invadió sus laboratorios, dando como resultado de la pelea que el malvado nazi acabó recibiendo de su propia medicina, al terminar recubierto de Adhesivo X. Esto dio lugar a que su rostro quedase desfigurado, siendo obligatorio para él el uso de su característica máscara. También le veremos enfrentarse en la II Guerra Mundial con Nick Furia y sus comandos, a vueltas con otro invento suyo, el Rayo de la Muerte ( Sargent Fury#8 ) o tener un encuentro vía viaje en el tiempo con los 4 Fantásticos, que tuvieron que colaborar con los Invasores para recuperar un trozo de vibranium ( Fantastic Four Annual#11 ). Pero tras todos esos fracasos Zemo se propuso resarcirse.
Para ello se planteó un ataque combinado por la fuerza de varios supervillanos. Como genio estratega, consiguió los servicios del Caballero Negro ( la primera encarnación a cargo de Nathan Garret), el Fundidor, antiguo empresario rival de Tony Stark en el negocio armamentístico ahora reconvertido a villano, y el Hombre Radiactivo, originario de la República Popular China. Bautizados como los Amos del mal, y a vueltas de nuevo con el Adhesivo X, los Vengadores consiguen vencer en la escaramuza aunque es una batalla, no la guerra. Zemo recaba los servicios de dos villanos mitológicos como son el Verdugo y la Encantadora, rivales habituales del Dios del Trueno, unidos a los anteriores Fundidor y Hombre Radiactivo. Tras una nueva derrota, Zemo consigue escapar a duras penas (Avengers#7 ). El Barón será responsable de la creación de Wonder Man o recibirá la inesperada visita de Inmortus, amo del tiempo, que intenta controlar a los Amos del Mal, cosa que Heinrich no va a permitir.
El fin para el Barón Zemo lo tendríamos en Avengers#15, de nuevo enfrentado al Capitán América ya que tuvo la ocurrencia de secuestrar al entonces compañero de Steve, Rick Jones. En su base secreta de Sudamérica se produce la última lucha entre ambos, donde un golpe final del abanderado deja ciego al Barón, quedando sepultado en una avalancha. Fin de camino para el duodécimo portador del baronazgo de los Zemo. Pero la tradición y la fuerza de la sangre va a generar que tengamos un sucesor, por lo que aquellos que esperaban que la máscara y las actitudes de superioridad desaparecieran del mapa, no se imaginaban lo que se les venía encima.
La fuerza de un personaje como el Barón Zemo era un caramelo en manos de autores que gustaban atar cabos como hobby personal , amantes de la Golden Age y la retrocontinuidad bien entendida. Esta definición le vendría como anillo al dedo a uno de los grandes del comic-book americano, Roy Thomas. En Captain America#168, entonces en manos del bueno de Roy, tenemos el debut de un villano que se identifica como Fénix, nada que ver con Jean Grey ni sus posteriores encarnaciones. Consigue raptar a Steve Rogers y tenerlo suspendido sobre un material que ya conocemos, el Adhesivo X ¿ De qué me suena? Ahh si, del Barón Zemo. Por lo que gran revelación de este número es descubrir que el viejo enemigo del Capitán América tiene un hijo que va a seguir su senda, primero disfrazado con la personalidad de Fénix. El Halcón, entonces inseparable compañero de Steve Rogers, accede a la factoría donde el Centinela de la Libertad se halla preso del pequeño de los Zemo, dando el tiempo suficiente para que el Capitán se libere y se enfrente cara a cara con Fénix. Como si fuese una cruel broma del destino, Helmut, nombre de pila del hijo del viejo enemigo del abanderado, termina cayendo en el tanque de Adhesivo X, por lo que los héroes dan por muerto y enterrado al descendiente del antiguo barón.
Pero no estaba muerto. La consecuencia de su caída al tanque fue el quedar desfigurado, tal como había quedado su padre, por lo que el uso de la máscara se vuelve un imperativo para Helmut. Su vuelta a la circulación viene dada por Jean Marc DeMatteis en su larga y alabada etapa, acompañado en el aspecto gráfico por Mike Zeck, al frente de los designios del Capitán América. En los números 270 y 272 el Centinela de la Libertad recibe diversos ataques, todos perfectamente orquestados y conocedores de la vida privada de Steve Rogers. Es Alimaña el que confirma al Capitán de que existe un plan y que tiene nuevos amos cuya única directriz es destruir al abanderado. Para obtener respuestas debemos esperar hasta el #275 donde las sombras del ayer van a alcanzar a Steve Rogers. Éste hace una visita a SHIELD para conocer el estado de la cuestión de sus últimos atacantes, entre los que destaca, como ya hemos adelantado, Alimaña. De vuelta a su vida cotidiana, una constante en la etapa DeMatteis, acompañado de su pareja, Bernie Rosenthal, y su casera se encuentran con una desagradable pintada en la sinagoga del barrio. Una gran esvástica roja en la puerta del templo nos deja bien a las claras las intenciones de los vándalos. En un interludio vemos la sombra de una figura que observa melancólica una antigua foto familiar. En otro interludio vemos a los responsables de las pintadas y no se van a detener ahí. Una nueva organización neonazi se levanta, lo que va a provocar enfrentamientos con sectores antinazis. Steve tiene que intervenir pacificando los ánimos ya que el odio no se combate con el odio. Por otro lado, tenemos al nuevo Barón Zemo, del que sabemos que es el instigador de este recién creado movimiento nacional socialista, pero además mediante un truco consigue rescatar a Alimaña de las garras de SHIELD. Por tanto, ya tenemos a la cabeza pensante tras los ataques al Capitán América.
Steve Rogers es rápidamente requerido en la organización de Nick Furia para informarle de las últimas noticias, muy malas para él porque aparte de la fuga de Alimaña se ha producido el rapto de su amigo de la infancia, Arnold Roth, que el Barón ya había utilizado anteriormente para hacerle la vida imposible. Tras seguir los pasos de un extraño robot, el Capitán cae en la trampa urdida por Zemo, dejándonos el guionista la asociación de dos antiguos antagonistas del abanderado, Arnim Zola y el Barón. Difícil papeleta para Rogers. Empezamos por saber que el actual portador de la máscara es el hijo del clásico villano nazi, aquel que conocimos como Fénix. Nos relata su milagrosa huida a través del tanque de Adhesivo X, con un traje preparado en caso de accidente, pero al carecer de la parte superior quedó horriblemente desfigurado. En una viñeta legendaria a cargo de un soberbio Mike Zeck, vemos el terrible rostro del mal. Y si teníamos dudas de sus intenciones, de una posible vuelta a la filosofía de su padre, el nazismo, el guionista nos deja bien claro sus objetivos: nada de revivir el Reich, dominar el mundo o chorradas varias, solo destruir la vida del Capitán América. Así que jaque mate para Zemo, ya que Zola se va transformando en distintos peligros que han ido acechando al Capitán, dejando ver su verdadera identidad: Primus, un metamorfo capaz de adoptar la forma de Steve Rogers. Ahí tenemos el plan, este Primus con la forma de Rogers va a poner patas arriba la reputación del Centinela de la Libertad. Steve consigue escapar de su cautiverio ayudando incluso a los sicarios de Zemo, haciendo que se vuelvan aliados más que enemigos. Zemo ve la situación perdida por lo que intenta huir, sin ser consciente de que un inesperado polizón se ha colado en su nave y no tiene buenas intenciones. Por otro lado, Steve debe acabar con el engaño de Primus y recuperar su vida.
El buen trabajo realizado por DeMatteis con Helmut propició que el personaje pasase de ser el “nuevo Barón”, el hijo de Zemo o Fénix a convertirse en el Barón Zemo a secas, sin más explicaciones. Alejado ya de motivaciones arcaicas heredadas de su padre, su objetivo será vengarse de sus enemigos, con el capitán a la cabeza. Y si lo vemos retirarse es para preparar su siguiente plan, uno que plantea un ataque directo al corazón de los héroes más poderosos del planeta.
DeMatteis nos dejó un Barón de nuevo como villano terrible y Roger Stern lo recogió para llevarlo al siguiente nivel. Sterno, tal como era conocido cariñosamente en la editorial, estaba realizando una de las mejores etapas en los Vengadores, tal y como se le ha reconocido unánimemente a posteriori. Un guionista capaz de bucear en las motivaciones interiores de cada uno de los personajes que trataba, creando dinámicas de grupo de lo más interesante y, por supuesto, amenazas más grandes que la vida, que para eso se juntaron los héroes, para acometer peligros que por separado serían imposibles de solucionar. Roger Stern nos va a traer de vuelta la mejor versión del Barón, como gran estratega y malvado manipulador. Para ello se va a vale de otros supervillanos, tal como hizo su padre en tiempos al reunir la primera encarnación de los Amos del Mal.
Stern cocina esta gran historia como debe hacerse, a fuego lento, presentando algunos villanos que de manera fortuita se van encontrando con miembros de los Vengadores, como la Doctora Karla Sofen más conocida como Piedra Lunar, además de contemplar las distintas rencillas y suspicacias entre héroes. A pesar de que los Vengadores parecen centrados en otros asuntos, como el tema Atlantis para Namor, no dejan de aparecer enemigos con los que luchar, algunos recientemente escapados de cárceles alta seguridad.
La gran constatación de que lo que había sucedido en episodios anteriores no era casualidad lo tenemos en Avengers#273, donde apreciamos ya las cartas sobre la mesa. La aparición del Barón Zemo en toda su grandeza, con un plan milimétrico y manejando a sus secuaces como piezas de reloj suizo, nos advierte de que algo gordo está tramando. Una de esas piezas es Piedra Lunar, la más complicada de doblegar como el mismo Zemo reconoce. Pero su arma secreta es Apagón, capaz de generar masas sólidas de materia extradimensional, controlado en apariencia por la doctora Sofen. No son los únicos; el grupo reunido por Helmut incluye gran cantidad de villanos resentidos con los Vengadores: la Brigada de Demolición al completo, Hyde, Titania, Hombre Absorbente, Tiburón-Tigre, Arreglador, Chaqueta Amarilla (la versión femenina, Rita DaMara, que se había hecho con la tecnología del Doctor Pym), Goliath, junto a los ya citados Piedra Lunar y Apagón. El Barón busca, con buen criterio, actuar de una forma consensuada, con ataques desde distintos puntos, para acabar definitivamente con los Vengadores. Un plan ambicioso que comienza por dejar al mayordomo de la Mansión, Jarvis, totalmente solo, sin el miembro de guardia, que en este caso era un Hércules al que Zemo había sacado de la circulación. Empieza entonces un ataque directo a la base de los héroes más poderosos del planeta por parte de estos nuevos Amos del Mal. Consiguen reducir todos los sistemas de seguridad y apresar al mayordomo. Zemo puede entrar a la Mansión desde donde seguirá repartiendo las órdenes de su calculado plan. La caída de Vengadores es paulatina: el Caballero Negro y la Capitana Marvel son los primeros. Pero es el Dios Olímpico Hércules el que se lleva la peor parte, recibiendo una de las peores palizas que se recuerdan en un vengador. Tal es el castigo que se le da por muerto.
Llegados hasta punto el guionista nos ha dejado claro que la amenaza de Zemo y sus secuaces ha llegado a niveles de código rojo. La Mansión permanece aislada gracias a los poderes de Apagón, por lo que el barón puede seguir lastimando a los Vengadores. El punto de inflexión es la captura del Capitán América, que se ve arrastrado a los pies de Helmut, algo a lo que su padre ni siquiera llegó a acercarse. El castigo es brutal por parte de los Amos de mal: su base y sus objetos personales manipulados, y Jarvis utilizado como saco de boxeo, imágenes terribles de un equipo derrotado. Por si había alguna duda acerca de las malsanas intenciones de los villanos, Titania y el Hombre Absorbente acuden al hospital donde descansa Hércules para rematarlo. Suerte de que allí estaban la Avispa y Hank Pym como Hombre Hormiga. Este suceso marco el punto de inflexión para los héroes pues a partir de aquí empieza una paulatina recuperación que les va a llevar a levantarse de nuevo. La Capitana Marvel consigue escapar de la prisión que le había dado Apagón, el Doctor Druida capta los pensamientos del Caballero negro, por lo que obtienen poderes místicos que buena falta les van a hacer y Thor consigue regresar de Asgard tras ser avisado por la líder del grupo, Janet. Las fuerzas parecen más equilibradas, máxime cuando Steve Rogers y el Caballero Negro consiguen escapar de su cautiverio para enfrentarse a los villanos. La llegada de Thor no se encontraba en los planes de Zemo, por lo que el astuto barón, al no tener todas las variantes controladas, piensa en la retirada. Pero nuestros héroes ya están lanzados y la afrenta ha sido muy grande como para dejarla pasar.
Un duelo singular, preparado al modo del antiguo far west, entre Zemo y el Capitán vuelve a sacar los abundantes trapos sucios que tienen en común. El poder la sangre que fluye por el aristócrata y su deseo de venganza del que considera responsable de la destrucción de su familia es la motivación última de este ataque a la Mansión de los Vengadores. El capi también lleva su dolor por las afrentas de su padre, responsable de la muerte de Bucky ( entonces no podíamos imaginar que “ no estaba muerto, estaba tomando cañas”). La entereza de Rogers es lo que le ha permitido llegar hasta allí, a pesar de todas las humillaciones sufridas por parte de los Zemos. Un barón desestabilizado cae al vacío, quedando su cuerpo inerte a la vista de todos. Aun así, no se le puede negar a Helmut un pequeño punto de consolación. Tras la derrota definitiva de los Amos del Mal toca pasar revista a los desperfectos y el Centinela de la Libertad, que mientras haya vidas en juego no se preocupa de lo material, ha sufrido pérdidas irreparables: las escasas pertenencias que lo unían con el tiempo del que procede han sido destruidas. Un duro golpe para el hombre bajo la máscara.
Por la forma de relatar espero que se haya transmitido la absoluta admiración que este redactor siente por la etapa de Roger Stern en los Vengadores y por este “Asalto a la Mansión” en particular. Toda una etapa repleta de historias brillantes y desarrollo de personajes antológicos. Don Roger además se atrevió a tocar el sagrado reposo del guerrero de los héroes más poderosos del planeta. Desde su formación como equipo, los Vengadores siguieron el sistema de grupo institucionalizado, con sus estatutos, reuniones, cambios de líder y base de operaciones. Podían luchar a lo largo y ancho del mundo, e incluso de la galaxia, pero hasta ahora nadie se había atrevido a tocar su sancta sanctorum hasta semejantes niveles. Tenía que ser Zemo el que planease una jugada tan arriesgada. No hay que negar que pese a que los Amos han fallado en el intento, los héroes se dan cuenta de han sufrido un envite importante y que a partir de aquí nada será igual. Tal como le dice Monica Rambeau a Steve : “ tenemos que ayudarnos a recuperar lo que podamos del pasado y reconstruir el futuro”. Desde luego, un momento final el de Avengers#277 que llega a tocar en lo más profundo del lector encariñado con estos personajes. Un último detalle para resaltar la valía de esta trama, que se puede resumir en dos palabras: John Buscema. Parafraseando al gran Stan Lee, Nuff Said. Creo que con esto queda ya todo dicho.
A pesar de que Stern dejó un villano que había subido al Olimpo de los malvados al infligir un gran daño a los Vengadores, no hubo muchos autores que se atrevieran a desarrollar el potencial de Zemo. Porque el barón no murió al caer al precipicio, como se puede suponer. Tendremos noticias de él brevemente en la larga etapa de Mark Gruenwald con el abanderado. Sabremos entonces que se había retirado a la selva, a su refugio secreto, donde habría contraído matrimonio con una mujer llamada Heike, que se tenía por descendiente de la familia y que por tanto se hacía llamar Baronesa Zemo. Utilizada por primera vez en un especial de Spiderman, Fear Itself, del año 1992, sería aprovechada por Gruenwald para conformar un auténtico clan Zemo, eligiendo a veinticinco niños dignos para continuar el legado de la sangre. El Capitán América tomará cartas en el asunto. Acompañado por su entonces colaboradora Iguana, liberarán a los chicos del influjo de los malvados aristócratas. Esa vuelta a los valores nazis, más propios de su padre que del responsable del asalto a la Mansión de los Vengadores, no suponía ninguna mejora para alguien que se supone que siempre tiene que ser mejor. Zemo aguardaría en las sombras su momento, uno que le va a llevar a maquinar su plan más perfecto hasta la fecha y dejar en nuestra retina uno de esos instantes inolvidables en el cómic de superhéroes.
El cómic superheroico a finales de los noventa había pasado por las necesarias fases de consolidación como género. Tras una etapa donde se hablaban de cifras millonarias en ventas pasamos a una clara crisis de identidad por parte del mismo. Crisis provocada por la especulación y por una forma distinta de concebir el cómic. En un intento de hacer madurar el género se había optado por un giro hacia tramas más oscuras ( el llamado grim & gritty) y por recargar al dibujo hasta límites insospechados. Esa se podría decir que era la tónica general en los noventa. Pero, como si habláramos de la entrada inicial de un tebeo de Asterix, teníamos un grupo de irreductibles guionistas que seguían pensando que los valores de los cómics clásicos eran todavía válidos en la época. Nadie mejor que Kurt Busiek representaba ese tipo de guionista. Ya había demostrado sus facultades en la estupenda Marvels ( y lo sigue haciendo en la actualidad, nada más hay que seguir su Astro City para darse cuenta) y fue el encargado principal de traer de vuelta a los principales personajes de la editorial tras el fallido intento de Heroes Reborn. Fue precisamente durante esa ausencia de los puntales de Marvel, tras caer víctimas de Onslaught, cuando Busiek puso en marcha una idea que lo catapultó a primera plana. En principio, no parecía nada revolucionario presentar un nuevo grupo de superhéroes, llamado Thunderbolts, del que su aspecto de formación “clásica” no era quizás lo que los seguidores demandaban dado la salida del universo 616 de 4 Fantásticos o Vengadores. El revuelo organizado alrededor de la publicación del primer número, donde predominaban las opiniones negativas, dio un giro de 360 grados cuando los lectores llegaron a las páginas finales y uno de los grandes cliffhangers del cómic de supers salió a la luz. Lo ponemos en spoiler pues esta es una de esas lecturas que si alguien no ha vivido merece ser preservada en el anonimato:
Aviso de Spoiler |
Bofetada antológica que todavía, después de tantos años, conserva su fuerza. Siguiendo con el aviso a navegantes, a partir de este momento será complicado mantener las virtudes de la serie sin destriparla (solo un poco) por lo que avezado lector, avisado queda.
Kurt Busiek tenía muy clara su idea y como desarrollarla. En Marvel extrañamente decidieron darle cancha, probablemente más preocupados por el buen funcionamiento de su reluciente maniobra de Heroes Reborn. Para redondear el equipo creativo se le asigna en tareas gráficas el talento de Mark Bagley, un profesional como la copa de un pino, no tan alabado por ciertos grupos de fans pero que ha demostrado una entrega sin igual en las colecciones que ha trabajado. Se encargó se diseñar las ideas del guionista y perfilar estos personajes que, ideados entre Busiek y el editor, Tom Breevort, nacían para dar nuevos bríos al solitario panorama post-Onslaugh: Ciudadano V, Meteorito, Atlas, Pájaro Cantor, Match-1 y Tecno. El bueno de Kurt ha declarado que este concepto no se le ocurrió en tiempo presente. Al guionista le llamaba la atención la salida y entrada de nuevos miembros en una formación tan prestigiosa como Vengadores. Busiek no paraba de preguntarse como de fácil le podía resultar a un villano adoptar el porte de héroe e infiltrarse. A partir de ahí, el escenario da para infinitas situaciones. Ya trabajando para Marvel, y esperando que algún día le asignaran los héroes más poderosos del planeta, barruntó una trama donde los miembros clásicos abandonaban la formación, dejando al Capitán América como único integrante. Éste se haría con nuevos compañeros para descubrir que eran ¡¡ los Amos de Mal!! camuflados con nuevos trajes y con terribles propósitos. En palabras del propio autor: “ ¿Qué haría el Capi en esa situación? ¿Escaparía para reunir otro grupo de Vengadores que lucharía contra esa amenaza o encontraría insospechados aliados entre los villanos, los cuales habían descubierto que les gustaba ser héroes? ¿Se encontrarían los villanos con que el plan se había vuelto en su contra, al ver que algunos de sus miembros se habían reformado de verdad y habían cambiado de bando? « Las respuestas a estas preguntas tardarían en llegar y no sería hasta después del movimiento editorial de entregar a Jim Lee y Rob Liefeld las riendas de las principales cabeceras cuando se le abrieron las puertas de ese proyecto. No sería tal y como lo había pensado para Vengadores, sino que sería desarrollado en una serie nueva, titulada, como ya hemos visto, Thunderbolts. Hasta el propio Busiek comprendió que esta idea tendría mucho más sentido en el Universo Marvel post-Onslaught, al verse privados de los héroes más rutilantes. La maquinaría se puso en marcha y se pensó en foguearlos antes de dar salida a la colección propia. El primer paso fue en presentarlos en Incredible Hulk#449 ( finales de 1996) donde, casualidades del destino, el guionista de la cabecera, Peter David, había pensado en enfrentar al Goliat Esmeralda a un grupo de villanos haciéndose pasar por héroes. David aceptó descartar a los suyos y utilizar a los Bolts para enfrentarse a Hulk. Después de este trámite, fueron el principal reclamo de Tales of the Marvel Universe (fecha de portada 1997), donde se hacía énfasis en los héroes a los que se iban a destacar en el Universo 616.
Así, se nos introduce a este grupo como la gran esperanza de los supers, debutando en abril de 1997, con Ciudadano V y su equipo; en realidad hablamos de Zemo y su panda de Amos de Mal: Meteorito es Piedra Lunar, Tecno es Arreglador, Atlas es Goliath, Pájaro Cantor es Mimi Aulladora y Mach-1 es el Escarabajo. Busiek es un guionista gran conocedor de la continuidad y alguien que hace sus deberes antes de ponerse al lío. Destaca en el grupo que casi todos participaron en el célebre “Asalto a la mansión”. Tanto Piedra, como Goliath y Arreglador, fueron parte activa de la trama, mientras que Mimi fue utilizada por el Barón junto a Gárgola Gris para instigar a los Vengadores. Solo el Escarabajo se queda fuera de esa legendaria historia. Lo importante es que ya tenemos a la formación de malvados intentando jugar el papel de héroes, solo que el público corriente no es consciente de ello, lo que da lugar a que comiencen a ser reconocidos y apreciados, sacando a la luz el gran valor de la colección: la idea de la redención. El guionista teje una gran cantidad de aventuras e historias en paralelo donde juega con esa idea, haciendo que sintamos apego por algunos de estos antiguos villanos. Por supuesto, no para todos existe esa posibilidad, como bien atestigua la persona de Zemo. Los Thunderbolts es un concepto tan jugoso y tan bien construido que se merece un post en condiciones, espacio del que un servidor no dispone aquí, por lo que la narración del relato se va a centrar en lo que respecta al XIII Barón de la casa Zemo, a la espera de que alguien de lustre como se merece a la trayectoria de los T’bolts.
Ya hemos visto al grupo en su máximo expresión, pero ¿cómo se formaron? La pregunta obedece a las inquietudes de la joven Jolt, unida al equipo y única que de verdad cree estar haciendo lo correcto. Y la respuesta tiene que ver, por supuesto, con un genio maquiavélico del mal como Helmut. Habíamos dejado al último de los Zemo en Sudamérica, oculto, con su mujer (recuerden la endogámica pareja, la Baronesa Zemo) encerrada en la cárcel y él frustrado al no encontrar el momento de actuar. Localiza a un antiguo colaborador ubicado en otra dimensión, Goliath, del que percibe que está pasando por un gran sufrimiento. Rápidamente piensa en rescatarlo ¿Motivo altruista? No, es una situación perfecta para que le deba gratitud de por vida. Se pone en contacto con el genio controlador de todo tipo de aparatos, el Arreglador. Necesita de su conocimiento de la tecnología. Zemo tiene un momento de claridad, está reuniendo de nuevo a los Amos del Mal. Con el fichaje de Mimi Aulladora y el Escarabajo se produce un hecho trascendental: los héroes de la Tierra caen ante Onslaught. El nuevo proyecto Thunderbolts se activa. Todos consiguen rescatar a Eric Josten, Goliath; ya solo falta el último miembro, la doctora Karla Sofen, a la que liberan de una importante prisión de alta seguridad, La Bóveda. La narración de este anual es un brillante ejemplo de la calidad de la serie, donde el doble lenguaje es una constante: las heroicas palabras de Ciudadano V chocan con las intenciones terribles a cargo del Barón Zemo.
Volvamos a hablar de Kurt Busiek. Como ya hemos apuntado antes, se dedicó a hacer bien sus deberes para preparar esta colección. Para empezar, le dio una gran importancia al alter ego del Barón. Ciudadano V es un personaje añejo, de la era pre-Marvel, un oficial británico nacido como John Watkins, que además formó un batallón llamado V en su honor. Este luchador por la libertad contra la tiranía nazi debutó en Daring Mystery Comics#8 allá por 1942, en pleno conflicto mundial. Busiek prepara un número especial, Thunderbolts Distant Thunder, donde tiene previsto atar muchos cabos sueltos, aparte de dejarnos las motivaciones de los miembros fundamentales del equipo. En el especial el guionista se preocupa en explicarnos el porqué del Namor amnésico encontrado por la Antorcha Humana en Fantastic Four#3, el destino de Ciudadano V y, sobre todo, mostrarnos la relación entre Heinrich y su hijo Helmut. El XII Barón habla con su primogénito de un viejo enemigo llamado Ciudadano V, que se atrevió a rebelarse en sus propias líneas para fomentar la rebelión anti-nazi. Algo lo suficientemente importante para que Zemo en persona se encargue. La reunión entre padre e hijo discurre plácidamente cuando un grupo de indígenas subyugados por Heinrich se rebela. Helmut toma nota de las actitudes de su padre, al que ve como gran líder a seguir. Por supuesto, la piedad y la compasión no se encuentran entre ellas. El pequeño de los Zemo saborea la sensación de poder y control, algo que con el tiempo asumirá como propio. ¿Y Ciudadano V? Muerto a manos de Heinrich, como muestra de que hay que aplastar todo aquello que porte esperanza a la gente. De todas formas, veremos en la colección revivir con fuerza la figura de V, más allá de la perversión que supone el traje en manos de Zemo, donde se forma un batallón que honra ese nombre, en busca y captura de criminales.
La farsa de los Bolts como héroes no podía durar eternamente. Máxime cuando se produce el retorno de los héroes tradicionales al Universo 616. En esos momentos ya había una clara diferenciación entre los miembros que tienen intención de redimirse y los que no. La salida pública de la verdad provoca que Zemo abandone el manto de Ciudadano V, lo que no es óbice para que la actitud del villano varíe. Para Helmut, estos siempre serán sus Amos del mal, su proyecto, sin importar que muchos de ellos busquen reintegrarse en la sociedad. Y si se rebelan, ya se las ingeniará Helmut para controlar a los mismísimos Vengadores en persona. El caso es que muchos de ellos escapan del influjo del malvado Barón, produciéndose un relevo en el liderazgo con la entrada de Ojo de Halcón. Lo que no significa que el antiguo líder no monitorice sus acciones, junto a su inseparable Tecno, para cuando tenga que reclamarlos. Kurt Busiek tampoco se olvida definitivamente del personaje, aunque su influjo haya bajado mucho en la serie. Le dedica un especial en 1998 que involucra al Capitán América como parte importante del anual. Zemo está retirado en su castillo de Sudamérica junto con la versión robótica del Arreglador, sometiendo indígenas como hacía su padre. Hasta allí dirige sus pasos Steve Rogers, que se encuentra con la versión actual de Ciudadano V (con desconocido portador del manto bajo la máscara), que curiosamente está organizando la resistencia indígena contra el Barón. Esto da pie a que el guionista nos cuente una vieja historia de la II Guerra Mundial, cuando V y Rogers se conocieron luchando contra el XII Barón. En tiempo presente, la unión de Ciudadano V y Capitán América acaban con la tradicional base de la familia y liberan a los esclavizados trabajadores. No es el fin de Helmut, que tiene más bases escondidas, desde donde irá haciendo el seguimiento a los T’Bolts.
El bueno de Kurt abandona sus creaciones tras treinta y tres números, dejándolos en las muy eficaces manos de Fabián Nicieza. Escritor tristemente recordado por poner voz a los desmanes de los dibujantes hot de los primeros noventa, no se puede negar que con su contribución a la colección de los villanos redimidos encontró la madurez en su escritura. Con el importante legado de Busiek a sus espaldas, supo labrarse un camino propio con los Thunderbolts, dejando importantes cambios en la formación y tocando pilares básicos del ya clásico equipo. Para el argentino, Zemo será un personaje en el que pondrá especial mimo, pero en sus primeros movimientos no lo tendrá mucho en cuenta. De hecho, será el responsable de acabar con su vida al plantear un ciclo donde Azote, personalidad que asumió el antiguo Nómada auspiciado por Henry Gyrich, pondría fin a sus andanzas. En un intenso duelo que dura todo un número vemos al XIII Barón Zemo perecer ante el asesino gubernamental. Menos mal que el tiránico villano tiene a Tecno como servicial aliado, ya que gracias a él, la personalidad de Zemo es transferida a un agonizante James Watkins III, descendiente directo del primer Ciudadano V, que actuaba como parte del batallón que honra a la memoria de su ancestro. Tras recibir un reluciente cuerpo, adopta el manto de Ciudadano V de nuevo y pasa a formar parte de un grupo gubernamental controlado por Gyrich llamado The Redeemers (Los Redimidos o Redentores, según traducción en nuestra lengua), donde coincidirá con personalidades conocidas para él como el Arreglador, el Escarabajo, Meteorito o Jolt. Nicieza afronta el tramo final de la serie de los más Buscados de Marvel con un carrusel de acontecimientos: una lucha con Gravitón en el que Los Redentores pasaron a mejor vida y Ciudadano V volvió a reunir a los T’Bolts, acabando también el malvado villano capaz de controlar la gravedad con ellos, salvándose Zemo por muy poco al refugiar su consciencia en la mochila del Arreglador; y una saga en la Contratierra donde la contrapartida del barón es un héroe con el rostro intacto ( al que transporta el Arreglador la personalidad clásica que porta en su mochila). Aquí los Thunderbolts deberán conquistar este planeta en aras de poder salvarlo. A pesar de las buenas intenciones de Nicieza, supone fin de camino momentáneo para el grupo de villanos redimidos. Pero como todos sabemos, los grandes conceptos siempre tienen segundas oportunidades.
Los Thunderbolts fueron uno de los grandes descubrimientos que nos otorgó la tan denostada década de los noventa. Los dos autores que mostraron su potencial, Kurt Busiek y Fabián Nicieza, todavía rondaban por la editorial en el año 2004 y ambos unieron fuerzas para desempolvar los personajes, donde destacará por su especial fuerza, la caracterización del Barón Zemo. Para darle la notoriedad necesaria plantearon su siguiente movimiento, una mini serie de seis números, como una colaboración con los Vengadores, por lo que con la ayuda de Tom Grummet y Barry Kitson en la parte gráfica, dieron salida a un nuevo intento de reflotar los Thunderbolts. Un nada desfigurado Helmut, tras adoptar el cuerpo de su contrapartida de la Contratierra, lidera la nueva encarnación de T’Bolts formada por Piedra Lunar, Arreglador, Pájaro Cantor, Atlas, Ventaja (personalidad de Dallas Riordan, vieja conocida del grupo) y Brezo Negro. En su nueva base, situada en el Mar del Norte, el grupo se encuentra trabajando en el proyecto de “El Liberador”, un aporte muy particular de la nueva personalidad de Helmut que clama querer defender al mundo de sus múltiples peligros. Obviamente, con el historial de Zemo es normal que muchos recelen de sus intenciones, tanto gente de su propio grupo como elementos externos. Entre ellos, los Vengadores, que van a provocar una lucha directa entre ambas formaciones con el poder del Liberador de fondo. La clave de la historia la tenemos en Piedra Lunar que estaba almacenando poder, ya que era la primera que desconfiaba de Zemo. Totalmente descontrolada por el poder de sus piedras de origen Kree, la pelea titánica será el reducirla, cosa que consigue la conjunción de fuerzas de los dos supergrupos. Con las dos piedras libres, un de nuevo desfigurado Barón por el discurrir de la batalla, las recoge para clamar venganza, ya que sus intenciones eran buenas y la intermediación de los Vengadores ha dado al traste con sus nobles pretensiones. Destacar como detalle que en esta mini serie los guionistas nos presentan al primero de los portadores del apellido Zemo, lo que nos recuerda un detalle importante que no debemos olvidar, el poder de la sangre. Nobleza obliga.
Los Thunderbolts vuelven a la arena superheroica con nueva formación (con miembros veteranos como Atlas pero también recientes como el Hombre Radioactivo o Demonio Veloz) y liderados por Pájaro Cantor, uno de los personajes más queridos por los aficionados. Para reforzar el carácter de novedad se pone el adjetivo New, aunque dirijan sus destinos dos conocidos como Fabián Nicieza y Tom Grummet. Durante cerca de un año de andadura, nada supimos del Barón tras su desaparición con las piedras lunares. En New Thunderbolts#12 tenemos su esperada vuelta, de nuevo malvado y manipulador, ya que utiliza la Comisión de Actividades Superhumanas, formada por Henry Gyrich, Carol Danvers o Hank Pym, responsables últimos de los nuevos T’Bolts, para sus fines. Nicieza también se detiene en la historia personal del nuevo Espadachín, manto que ahora porta Andreas Strucker, mutante que junto a su hermana formaba Fenris, ya que su poder dependía del tacto entre ambos. Con su hermana muerta a manos del Barón Zemo, sigue indagando en su árbol familiar al acceder a instalaciones de HYDRA donde se encuentra en reposo suspendido el Barón Von Strucker, su padre aparentemente muerto a manos de Gorgón (recuerden el ciclo de Mark Millar sobre Lobezno).Descubrimos aquí que muchas de las maquinaciones que ha sufrido Andreas son obra de Helmut Zemo y asistimos a la asociación entre el mayor de los Strucker y el XIII Barón de los Zemo.
El malvado villano encapuchado sigue con su plan al presentarse ante los Bolts, por fin, además trayendo bajo el brazo una imponente arma, Karla Sofen totalmente controlada por el Barón. El grupo se parte entre los que apoyan a Zemo y los que luchan enconadamente contra él, siendo relevante el sacrifico de Genis Vell, antiguo Capitán Marvel, ahora miembro de los Thunderbolts. De pronto, todo este ajetreo se debe parar pues los Más Buscados de Marvel deben afrontar el conflicto que está asolando la actualidad: la Guerra Civil. Con Zemo asentado placenteramente de nuevo en el liderato del grupo que siempre ha considerado su mejor creación, su siguiente paso será intrigar en los diferentes bandos implicados en Civil War. Todo en aras de un plan mayor, uno que le va a llevar a un enfrenamiento con fuerzas ancestrales casi imposibles de derrotar. El Gran Maestro es uno de los Primigenios del Universo Marvel, seres extraterrestres casi inmortales que formaron parte de las primeras razas en el principio del cosmos. Al ser entes cuasi divinos se dedican a sus placeres personales que suelen denominar sus apodos. En este caso, no encontramos con un jugador compulsivo, habituado a jugar con los seres más poderosos del universo. Este primigenio ha tenido la insensata idea de retar al Barón Zemo, que con sus Piedras Lunares, se siente en posición de aguantarle el reto. Así, a la vez que juega con la Comisión o se inmiscuye en los planes de Hank Pym o Reed Richards, su jugada maestra (valga la ironía) es conseguir información valiosa que le facilita a Steve Rogers, su más odiado enemigo, con tal de que, cuando llegue el momento, todos los héroes de la Tierra confíen en Zemo y cedan sus poderes para que éste pueda derrotar al Gran Maestro. A medias de la guerra, se desarrolla la partida todavía pendiente entre Helmut y el Primigenio. Por la parte del ente cósmico tendremos la vuelta del Escuadrón Siniestro, creado por Roy Thomas en plena Silver Age, mientras que los T’Bolts serán la fuerza de choque del imprevisible Barón. El Capitán América y sus seguidores deberán hacer una pausa en la refriega superheroica y ceder sus poderes a Zemo. En una batalla campal, Helmut derrota al Gran Maestro, solo que no espera el siguiente golpe, ni de dónde le viene. Pájaro cantor, que había sufrido acercamientos y alejamientos a la figura de Zemo, acaba destruyendo con su grito sónico las dos Piedras Lunares que le daban su poder, creando una gran fisura cuántica por la que se acaba perdiendo el maquiavélico villano. Con este aciago destino desparece de la circulación el XIII Barón de la casa Zemo. A los Thunderbolts que todavía se mantienen en pie les espera una prueba de primer nivel, pues Norman Osborn está próximo a agarrar las riendas de los Más Buscados de Marvel para convertirlos en un auténtico escuadrón de la muerte.
El equipo creativo responsable de esta última andadura de Thunderbolts, Fabián Nicieza y Tom Grummet, todavía dedicarían un especial a Helmut Zemo donde destacan la importancia sobre el personaje de su estirpe legendaria. Recordemos que fue el argentino junto a Busiek el que nos presentó al primero de los llamados Zemo, un administrador de un pueblo conocido como Zeulniz, situado al sur de Leipzig. Todo un árbol genealógico que se remonta a más de quinientos años. En la mini serie de su presentación, La Causa de la Justicia (aquella que se planteó como un vs. Los Vengadores), Harbin Zemo nos parecía al principio un valeroso guerrero que se ganó su status nobiliario al defender él solo una villa de un ataque enemigo, para mostrar al final su verdadera cara como un desquiciado y prepotente señor feudal, una vez que adquirió su título nobiliario. Nicieza sigue ahondando en el tema familiar y de la estirpe al presentarnos a un investigador del tiempo presente que está realizando su tesis doctoral sobre la familia Zemo. Con los ojos de este historiador, llamado Wendell Volker, recorremos el periplo de la familia, al mismo tiempo que mediante flashbacks observamos pequeños momentos que definen los caracteres y personalidades de muchos de ellos. Llama la atención que este Volker busque respuestas en la dinámica temporal cuántica, que le muestra un intrigado Reed Richards. La idea del investigador, de la que es testigo el lector, es que Helmut no murió en el vacío provocado por la destrucción de las Piedra Lunares, sino que se perdió en el espacio-tiempo. Su propósito con esta investigación es traerlo de vuelta al presente y para ello se resalta el poder de la sangre. Vemos a Helmut pasearse por diferentes épocas, interactuando con sus antepasados, de los que conoce sus grandezas y miserias. El S.XV, el XVIII, el XIX y, como no, la Segunda Guerra Mundial; el vaivén temporal no para. En el gran conflicto armado se encuentra con Herman, su abuelo totalmente convertido al credo nazi, luchando contra Union Jack. Sin lugar a dudas, el momento determinante es un cara a cara con su padre, antes de que se convirtiera en el gran villano que lo instruyó. Toda esa admiración que le profesaba se convierte en reafirmación cuando Helmut remarca su propia grandeza frente a su progenitor. Volker, en el presente ,consigue realizar un sangriento ritual que provoca el retorno de Helmut al momento actual; así descubrimos que el historiador es un personaje que pertenece al linaje de los Zemo. Finalmente, el Barón consigue hacerle entender que se puede renunciar a ese influjo de la sangre, que tanto le ha marcado hasta ahora.
La definición y grandeza de este villano ha sido, sin lugar a dudas, el influjo de la tradición. Nicieza supo verlo perfectamente y deja en esta serie la mejor versión de lo que representa Zemo. Un tirano autoritario dispuesto a cualquier cosa para conseguir sus fines pero que también ha bordeado las zonas grises con su pretendido lado heroico. Está claro que siempre que ha ayudado ha sido para demostrar su superioridad, rasgo del que han hecho gala los Zemo desde el siglo XV. Su gran inteligencia le ha permitido manipular a todos aquellos que le han rodeado para demostrar que él ha nacido para ser mejor. Y como reconocimiento final al guionista argentino, decir que se ocupó de hilar todo el árbol genealógico de los Zemo, desde el primero hasta el decimotercero de ellos, información de la que todos ustedes disponen al final del tomo recopilatorio.
Tras la vuelta de su viaje espacio-temporal, se supone que Helmut se quedó junto a su nuevo ayudante, Wendell Volker, a la espera de un gran plan que gestar para demostrar su superioridad. Realmente, ese plan se hizo de esperar pues Zemo tardó tiempo en volver a la carga. La vinculación con los Thunderbolts y la calidad de las historias desarrolladas por Busiek y Nicieza hicieron que pocos guionistas se atrevieran a contar nuevas historias sobre él. Jim McCann lo utilizó en una mini serie protagonizada por Ojo de Halcón, como villano en la sombra, enfadado por haberle usurpado el liderazgo de los Bolts en el pasado. Para darle donde le duele al arquero de Marvel, envía a su hermano, Barney Barton, para que consume su venganza (Hawkeye: Blind Spot 1-4) Huelga decir que este retrato de Zemo se aleja bastante de la grandeza mostrada hasta el momento.
Ed Brubaker volvió a recuperar al villano para enfrentarlo al Capitán América, del que llevaba un tiempo rigiendo sus destinos de forma brillante. Lo llamativo de este encuentro, que podría considerarse ya un clásico, es que nos encontramos en plena Edad Heroica y el traje de las barras y estrellas lo llevaba en esos instantes Bucky Barnes. Toda una situación insospechada pues el antiguo Soldado de Invierno se encuentra con la nueva encarnación del personaje que acabó con su vida, aparentemente, durante la II Guerra Mundial. También lo utilizaría más adelante, casi al final de su etapa, como parte de un entramado de HYDRA que el Capitán América (está vez sí, Steve Rogers), el Halcón, Sharon Carter y Dum Dum Dugan se encargaron de neutralizar. Estamos ya en los postreros días de la colección a cargo de Bru, que parecía cansado y con falta de fuelle, por lo que una trama que en tiempos podía haber destacado se queda en un simple “pues bien, pues vale”. Nada grandioso para Zemo.
Recientemente hemos sabido que los cadetes que superaron la dura prueba a la que les sometió Arcade en su Mundo Asesino se han reunido de nuevo para infiltrarse en la última encarnación de los Amos del Mal. Hablamos de Avengers Undercover de Dennis Hopeless, continuación de la exitosa Vengadores Arena. No vamos a entrar a destripar una historia cuya publicación está próxima en nuestro país. Solo recordar que el foco de la historia está situado en los jóvenes personajes protagonistas más que en el maquiavélico villano. También en Indestructible Hulk ha hecho alguna aparición estelar como antagonista durante la colaboración entre el Gigante Esmeralda y Daredevil, ambas colecciones escritas entonces por Mark Waid.
A modo de colofón, traemos a Rick Remender que ha decidido reconstruir HYDRA y para ello ha puesto al frente al Barón Zemo, un modus operandi más propio de su padre que del propio Helmut. El caso es que ha ido recolectando variados y conocidos villanos del antiguo capitán, Steve Rogers, a los que tendrán que enfrentarse Sam Wilson ( que ya bastante tiene con su chorra-inversión en Axis) junto a su sidekick predilecto ( no tiene otro) Nómada. Todavía es pronto para ver el camino por el que va transitar esta nueva organización y, por ende, el decimotercer Barón de los Zemo. El guionista, eso sí, ha declarado que piensa llevar la trama a la vieja forma de los espías, rollo Bond y todo eso. Esperemos que el cambio le siente bien al barón, que hace tiempo que se ve falto de grandes historias. No está mal recordarles a los guionistas que Zemo ha nacido para ser mejor.
Articulo del señor Porras, esperare a leerlo cuando llegue a casa y disponga de tiempo. Ya de primeras se merece una lectura reposada.
Todo lo que se haya escrito sobre Zemo después de Nicieza es basura y el culpable es Brubaker, que nunca debió de utilizarlo y encima al final de su etapa cuando Bru ya no tenía ni ganas, ni interés, ni na de na.
Zemo ya había sido redimido por Nicieza llevándolo hacia una cierta heroicidad y haciéndolo reconocer que el Capitán America tenía razón.
Peeeeero luego tiene que llegar Marvel y devolverlo al status quo, porque ¿para qué van a evolucionar los personajes?
Puestos a añadir algo, tarea casi imposible, aprovecho el único resquicio que ha dejado Arturo: ¡la auténtica voz del Barón Zemo!
El número 168 del Capi, ese en el que Zemo se vistió raro, tuvo una versión con disco-libro:
http://images.wwcomics.com/images/large/CARcd_168.jpg
Puedo presumir de tener ese tebeo….pero no el disco. Anda que no molaría.
Tildoras: «Brubaker, que nunca debió de utilizarlo y encima al final de su etapa cuando Bru ya no tenía ni ganas, ni interés, ni na de na.»
Cierto, lo de Bru fue una involución en toda regla. Supongo que pensaron que la serie de Thunderbolts no le importaba a nadie y daba igual cargarse lo que habían hecho ahí. Por eso le dejaron usarlo a su niño bonito.
Lo peor que hizo en su etapa. Una cagada en toda regla.
Enorme artículo, otra vez, Mr. Porras.
«Todo lo que se haya escrito sobre Zemo después de Nicieza es basura y el culpable es Brubaker, que nunca debió de utilizarlo y encima al final de su etapa cuando Bru ya no tenía ni ganas, ni interés, ni na de na.
Zemo ya había sido redimido por Nicieza llevándolo hacia una cierta heroicidad y haciéndolo reconocer que el Capitán America tenía razón.
Peeeeero luego tiene que llegar Marvel y devolverlo al status quo, porque ¿para qué van a evolucionar los personajes?»
COMPLETAMENTE DE ACUERDO, la Marvel tiene la manía de coger a cualquier villano que empiece a desatacar o molar más de la cuenta y cambiarle de bando, sin importar sus circustancias originales.
Al perder esa raíz, que es la base de la motivación del personaje, y ,por ende, la causa de que guste, este pierde la gracia y finalmente se le devuelve a su estatus original (con los héroes pasa tres cuartas partes de los mismo….)
a este paso Craneo Rojo va ser agente de Shield 😛
Fue incluso peor lo que le hizo a Tarantula Negra metiendolo en la serie de Daredevil… Con lo que me molaba en Spiderman
Pues yo no estoy para nada de acuerdo con la crítica al tratamiento de Zemo por parte de Brubaker, todo lo contrario. Zemo, en esa saga, da a un paso adelante y somete a Bucky a su castigo no porque hayan decidido volverlo malo desde Marvel, sino para, a su retorcida manera, comprobar si Bucky es digno de llevar el manto del Capitán América. Implícitamente hay una declaración de orgullo y admiración de Zemo hacia Steve Rogers, todo ello analizado desde la óptica egomaniaca de Helmut.
Normalmente no comento pero…tengo que dar a Ocioso las gracias porque desconocía el audiolibro (o audio comic como fuere) un gran descubrimiento, por si alguien no lo ha visto y tiene curiosidad como yo, lo he encontrado en youtube: https://www.youtube.com/watch?v=62xMmUQQHgs
Por otra parte también dar las gracias a Arturo Porras por el artículo y recordarme que tengo en pendientes a los Thunder (en el artículo hay spoilers sí, pero como ya me los habían destripado en el pasado…).
PD: Ya se que lo del audio comic es una chorrada pero…que coño, me ha gustado, si hay más de este tipo de cosas del Capi decidlas.
¡Hala, qué pedazo de curro de nuevo, Arturo!
Un día te va a dar algo. Haz algo un poco más ligero la próxima vez, hombre. No sé… Consignar todas y cada una de las apariciones del Doctor Muerte, por ejemplo.
(Sigo pensando que todos estos artículos merecen ser recopilados en un Quien es Quien en el Universo Marvel. O algo por el estilo.)
Pues a mí nunca me gustó el que Nicieza fuera volviendo bueno a Zemo.
Con villanos tan atractivos, suele pasar que los guionistas se «enamoren» demasiado y caigan en el error de dignificarlos más de la cuenta. Creo que Busiek le cogía mejor el punto (aquel genial tambores lejanos del mes flashback).
Lo de Nicieza estuvo bien llevado y estuvo bien que superara por fin la sombra de su padre, pero se pasó de volverlo bueno. Al final era casi un personaje más blanco que gris. Yo estoy contento con su regreso al bando de los malos.
Y para que el personaje vuelva a sus días de grandeza… HAY VOLVER A PONERLE LA PIEL DE ARMIÑO!! Un tío que iba de rosado y morado con un armiño y una diadema doradita era un tío muy seguro de sí mismo. Zemo es un extraño caso en el que el máximo horterismo en un diseño funcionaba contra todo pronóstico.
Genial artículo, King Arthur.
Meyol: por si alguien no lo ha visto y tiene curiosidad como yo, lo he encontrado en YouTube
Que bueno. Parece que alguien ha tenido el humor de montar el audio con las viñetas del tebeo. ¡Que voces mas Hanna-Barbera y cuanto redoble de timbal para recalcar las frases mas intensas!
En la columna de la derecha de la página de YouTube pueden verse otros montajes similares. Al parecer hubo unos cuantos audio-libros mas de distintos personajes.
Buenas a todos y gracias por comentar. Especialmente las menciones personales: Antonie, Maese Ocioso, Meyol, Retran, Khonshu, muy agradecido por sus palabras.
Primero, todo un detalle Ocioso el mostrarnos el tema del audiolibro. He enlazado el video en youtube que ha puesto Meyol y me lo he chupado como un campeón. Cierto toque añejo ha hecho que me guste la experiencia. Probare con otros montajes parecidos.
Yo no sería tan osado, tal como dice Tildoras, de que todo lo posterior a Nicieza es basura. A pesar de ser un defensor a muerte de Brubaker en el capitán, su última parte baja bastante el listón. Y ese Zemo no queda en buen lugar. A ese respecto, yo creo que el culmen del personaje es Nacido Mejor. Estoy expectante ante lo que pueda hacer Remender con él y con HYDRA, pero si fuera el editor les daría a todos los implicados la obra de Nicieza. Define perfectamente aquello que le hace grande y lo diferencia del resto de villanos: el deseo de ser mejor y la influencia del legado de la sangre. El XIII Barón jamás ha tenido afecciones por temas nazis, auqnue se le ha relacionado con HYDRA. No ya desde la etapa en Thunderbolts sino desde que lo recuperó Thomas. Su única motivación es que el Capitán había roto su familia feliz. Y lo recuerdan muy bien tanto DeMatteis como Stern.
Khonshu, discrepo contigo en el aspecto que fue Nicieza el que volvió bueno a Zemo. Donde más cercano ha estado al heroismo fue en la serie de «La Causa de la Justica», que hiceron a pachas Busiek y el argentino, donde al final se descubría que estaba en el camino correcto. Luego Nicieza tiró por la indefinición en su tramo final de los T’Bolts. Eso sí, me gustan más los Bolts de Busiek.
Wodan Ymir no puedo contestar al tema de Tarantula pues no he leido el «run» de Bru en Daredevil. Una de mis muchas lagunas. Encantado de conocerte.
Por último una cuestión personal. Se ha hablado de su salida en la etapa de Brubaker con el capi, de Nicieza, de Busiek ¿pero es que nadie se acuerda de Asalto a la Mansión? Es que soy un bicho raro y esa joya de los Vengadores no le interesa a nadie? En fin, me parece extraño.
P.S señor Retranqueiro, me halaga con sus palabras. No creo que sean mis escritos tan importantes como para recopilarlos. Eso si, yo sigo piano piano y voy rellenado personajes poco a poco 🙂 . También le digo que este post ha sido liviano. El que estoy preparando para salir en breve …. ese si que me está costando sangre, sudor y lágrimas ( metaforicamente hablando claro, que no soy masoca). y como aviso a navegantes ( viejo amigo Drummer) corto, lo que se dice corto, no va a ser
El ataque a la mansion me lo leí con 8 años, en un retapado que me regalaron estando ingresado en el hospital por cualquier cosa. No lo puedo tener mas mitificado. Mi aventura favorita de los vengatas y billete del tandem Stern-Buscema directo al olimpo de equipos creativos de la historia. No lo puedo tener mas mitificado.
Zemo quizás siempre me ha gustado por esto. Aunque los villanos de corte clásico como Muerte o Craneo están hechos para molar.
De los audiolibros recuerdo uno del Hombre Cosa de Gerber bastante majo
En cuanto a Zemo, es un personaje que me fascinó gracias a Nicieza -bastaba verlo entrar en escena, soltando una de sus parrafadas, y uno leía aquellos bocadillos como si estuvieran escritos con una voz única diferente a la de cualquier otro personaje-, y concuerto con Arturo en que su momento cumbre fue la mini-serie Nacido Mejor.
Aun así, tampoco le pongo pegas a lo que se ha hecho después con el personaje como citan Meyol y Khonshu, pero con un gran pero: La primera saga de Brubaker con Zemo fue bastante lúcida, sí. Pero apartir de esa primera aproximación, se dedica a humillarlo una vez tras otra, primero con Pecado toreándole en el preludio de Miedo Encarnado, y luego como asociado en el jaleo de la Reina Hidra para ser derrotado de la forma tan desangelada y triste como lo fue.
Es gracias a Hopeless con el que el personaje vuelve a tener destellos de brillantez, congeniando ambas facetas del personaje (el héroe y el villano) de forma que me pareció extremadamente inteligente. De lo que haga Remender con él la verdad es que tampoco tengo demasiadas esperanzas, dado a que ya ha dado señas de que su visión del misma es previa a los Thunderbolts y el Asalto a la Mansión, y que tampoco es un personaje al que le tenga demasiada estima. Y aunque con Batroc no lo hizo mal, me da que Helmut va a estar ahí para hacer bulto y poco más.
para mí, realmente, son dos personajes totalmente diferentes
Hombre, es que realmente son dos personajes diferentes 😆 Tanto como podrían serlo Wonder Man y Wonder Woman
Enhorabuena por el artículo señor Porras. Y deseando que llegue el próximo. Por lo que ha dicho ¿este es corto?. No me imagino como será el próximo.
Señor Brodie, dese por convidado a unas cervezas virtuales!! Ya me parecía que me he iba a quedar solo en recordar el Asalto de Stern.
Daniel, intesante lo que comentas de Avengers Undercover. He pasado de entrar a analizar la obra pues está proxima a aparecer en España y no veo conveniente destriparla. Respecto a Hopeless, decir que solo en un número dio motivaciones a Arcade y logro quitarnos la imagen de villano patético que ultimamente le acompañaba. Genial. Asi que todos a pillar Vengadores Encubiertos!!
Dynamo, esperaba sus palabras tras su comentario inicial. Celebro que le haya gustado. Eso sí, me gustaria aclarar mi comentario respecto a si es largo, corto o todo lo contario. No creo que un artículo largo sea mejor que uno corto o viceversa, para empezar. Simplemente, hay personajes que tienen más bagaje y cuesta más sintetizar Con este Zemo tenía claro cuales eran los momentos relevantes del personaje, lo que facilita la tarea. Pero con el que hallo ahora, pues es más complicado. Mucha información, muchas apariciones más complejidad para sintetizar. Tambien puedo decir que un poco más largo que este me va a quedar aunque no tengo intenciones de que sea una biblia en pasta 🙂
Es que El asalto a la Mansión no hace falta ni mentarlo. Se da por supuesto que es una obra capital y uno de los momentos cumbres del personaje.
«Khonshu, discrepo contigo en el aspecto que fue Nicieza el que volvió bueno a Zemo. Donde más cercano ha estado al heroismo fue en la serie de “La Causa de la Justica”, que hiceron a pachas Busiek y el argentino, donde al final se descubría que estaba en el camino correcto.»
Justo mentas la historia de Busiek que menos me gusta. De todas formas creo que ahí el tratamiento que da al personaje es ya más en sintonía con el trabajo de Nicieza.
«El XIII Barón jamás ha tenido afecciones por temas nazis, auqnue se le ha relacionado con HYDRA»
Bueno, en realidad sí que estaba muy en sintonía con el ideario Nazi antes de los Thunderbolts. Herencia de la gran influencia que una figura paterna ausente e idealizada de una forma muy retorcida. Precisamente fue en Thunderbolts y, sobre todo en Nacido Mejor, donde deja atrás esas caducas creencias.
Y Nacido Mejor está genial, pero para mí el momento cumbre del personaje son los 12 primeros números de Thunderbolts.
De acuerdo en todo, señor Porras. En ningún momento he querido decir que cuanto más largo mejor es un artículo. En esta casa he leído articulos de todos los tamaños y por regla general todos han sido una alegría para la vista. Por mi parte sólo queda quitarse el sombrero ante el trabajo que hacen todos los redactores.
Para quitarse el sombrero, como siempre, para imprimirlo y leerlo tranquilo.
Sólo un apunte y una duda:
Decir que Nicieza es un «Escritor tristemente recordado por poner voz a los desmanes de los dibujantes hot de los primeros noventa» es ponerle muy bajo, teniendo en cuenta que fue responsable único de los New warriors, una serie que hemos alabado muchas veces por su calidad y que aun recordamos, siendo lo mejor de Marvel en la época.
Y la duda ; tengo alergia a los formatos reducidos y poco a poco me he ido haciendo con los diferentes volúmenes de su edición en España, desde las grapas de, Forum a los tomos blancos y morado y de la misma editorial, hasta los cinco volúmenes rojos de Panini. Mi pregunta es ¿aparte de eso y los dos crossovers con Vengadores y la límited de Nacido mejor hay algo más para terminar la etapa de Busiek y Nicieza? Lo que viene después es un nuevo comienzo con otros autores y que parte casi de cero, no? O estoy equivocado?
Nicieza, sin ser un genio, era un tío muy solvente y entretenido. De hecho, su peor trabajo fue el más famoso: sus X-men. En X-Force, Cable Blood and Chrome,casi todos sus Thunderbolts, la primera mini de Dientes de Sable… etc. solía estar a un buen nivel.
Su mejor trabajo fue sin duda sus New warriors, una de las mejores series de grupo de la historia. El propio Nicieza considera los 25 primeros números de la cabecera su mejor obra.
Yo también guardo un muy buen recuerdo de la primera mini de Masacre, la que lanzó definitivamente a la fama a Madureira. Hace años que no la releo, pero la recuerdo con un ritmo endiablado.
Y para mí su joyita olvidada y cómic que no entiendo que no se haya reeditado con las películas es éste:
http://www.captainamericalibrary.com/superhero-library/Img/Covers/AOCA/AOCA-001-m.jpg
Una obra entretenidísima y que creo que influyó mucho en las versiones modernas comiqueras del Capi y en El Primer Vengador.
Igualmente Arturo. Llevo ya tiempo por aqui, pero siempre tiendo al modo ninja inconscientemente. A ver si voy cogiendole el gustillo a eso de comentar.
Buenas, que tal? ¿Que hay alguien??
Nada, que pasaba por aquí, vi la puerta abierta y algo de luz y entré por si había alguien, pero ya veo que no.
Ya de paso, me he leído el artículo de Mr.Porras por si me gustaba y tal… 😉
Felicidades por el trabajo bien hecho, Maestro. Solo eso que decirle.
Y Mr.Khonshu, totalmente de acuerdo con su apreciación y afirmación sobre esto
http://www.captainamericalibrary.com/superhero-library/Img/Covers/AOCA/AOCA-001-m.jpg
Y cierto es que estamos en el momento ideal para una reedición en condiciones de esta maravilla.
Pero no desesperemos, que el Capi está y estará de moda, visto el futuro que nos tienen preparado en el cine los de Marvel. Y seguro que Panini también estará al loro con estas «pequeñas» joyas por redescubrir.
¿Verdad que si, Panini?
Rockeros Saludos.
Gracias de nuevo por los últimos comentarios¡¡
Khonshu, sin intención polemizar porque sí, mantengo mi comentario. Puede ser que su aparición en la etapa Gruenwald si que caiga en ese estereotipo, con los niños seleccionados bla bla. Pero desde Thomas, como vengativo hijo despechado, pasando por Dematteis, que le hace montar un movimiento neo nazi solo para atrapar al capi hasta Stern, que lo muestra ya en su máxima expresión pero alejado de cualquier ideología, no se le aprecia vinculación con Hydra o el nazismo. Para mi, mostrarlo así es una involución después de lo pasado por Thunderbolts.
Dynamo, usted y yo nunca hemos tenido problemas en enterdernos 🙂
Gracias Dhaldon. De nuevo matizar esa frase, aunque creo que Khonshu en su comentario ha dado en el clavo. No cre que Nicieza sea mal guionista, aunque tampoco me parece lo mas de lo mas. Con esa frase quería decir que su nombre se suele asociar al galimatías mutante de los primeros noventa ( recordar que el ponía voz a las historias de Liefeld). Respecto a los bolts, si tienes todo la etapa nicieza y busiek, la siguiente es la de Warren Ellis, continuando la numeración. Antes hay una etapa de Jhon Arcudi pero que no se parece a lo anterior.
Sr. Baldrocker, muy agradecido por sus halagos. Espero que como buen amante de la calidad se halle en su poder el tomito de MH donde se recopilo el Asalto a la Mansión. O en su defecto el tomo de MG de Stern donde se incluye la saga.
Ahora sí señor rockero, si nadie tienes nada mas que decir podemos cerrar la puerta
Pues mire usted. Mr.Porras, se halla en mi estantería (en una de ellas) el MG del Asalto…
A esto añádale el resto de todos los MG´s aparecidos hasta el momento, los 2 MasterWorks,
los dos TochoGolds y los 4 ¿o son 5? CES de Busiek y Pérez.
Incluya aquí el Siempre Vengadores: La Guerra del Destino.
Y quizás, alguna cosita más que se me olvida…
En fin, debilidad que tiene uno por los Vengatas, ya ve usted.
Y a la espera estoy del MG que sale este mes; otro para febrero, creo recordar y, bueno, del plan gral.
de Panini para el 15.
Y todos leídos y releídos, eh! que no los compro yo pa hacer bonito. Que también 😉
Apagando luz. Cerrando puerta.
Rockeros Saludos.
encontrandome la puerta cerrada 🙂 me descuelgo un momento por la ventana para decir que sí,que otro fantabuloso articulo del gran arturo ¡.
y me sumo a los que velan por tu salud por esos despiporres de trabajos que te marcas.
¡¡y encima avisas que el proximo será aún más largo ¡¡
menudo insconciente.si no fuera por lo que disfrutamos con ellos….. 😉
p.d: apunten otro al que EL ASALTO A LA MANSIÓN le parece lo mejor que se ha hecho….en marvel en general.
passssada de saga,rediez.
frankbanner49: ¡¡y encima avisas que el proximo será aún más largo ¡¡
Tras Baron Zemo, un tipo que lleva en activo desde los años 40 y se ha muerto varias veces, vendrá un monográfico sobre Duchess of Dawn, que aunque de momento solo se ha muerto una vez lleva en activo mucho mas tiempo y tiene una continuidad muchísimo mas complicada.