El Capitán Trueno. El último combate

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Edición España: Ediciones B
Guión: Ricard Ferrándiz
Ilustraciones: Joan Boix
Portada: Joan Boix
Precio: 15 € (Álbum en tapa dura a todo color)

 

Pocos son los personajes del tebeo español que han alcanzado la popularidad del Capitán Trueno. Desde su creación, por parte del guionista Víctor Mora y el dibujante Ambrós, el Capitán, Goliath y Crispín se convirtieron en un referente obligado a la hora de explicar la historia de la historieta (valga la redundancia) en los oscuros días del gobierno del innombrable. Sus hazañas, a caballo entre las películas de Errol Flynn, las novelas de Sir Walter Scott y los avatares del medioevo hispánico, hicieron soñar a varias generaciones de españolitos, marcando para siempre los derroteros de la creación de tebeos en España. Mora repetiría el esquema del trío protagonista en series como El Jabato o El Corsario de Hierro, aunque en estos casos la bisoñez de Crispín era sustituída por el carácter cómico de Fideo de Mileto o de Merlini el Magnífico. Si alguna vez se hiciera por estos pagos algo parecido al proyecto World Newton, no sería sorprendente averiguar que el Jabato, el Capitán Trueno y el Corsario de Hierro son parientes. El justiciero diestro con la espada y sus leales camaradas dejaron una huella imborrable en un extenso número de lectores, algunos de los cuales se convirtieron a su vez en autores de tebeos. Dos ejemplos de una larga lista de “herederos” del Capitán y sus sosias se encuentran, por un lado en el Maese Espada de Alfonso Usero (ambientado en el S. XV) y por otro en la Tríada Vértice de Carlos Pacheco, Rafaél Marín y Jesús Merino (ambientada en el rico universo de Iberia INC).

Varios fueron los intentos de relanzar al Capitán Trueno en tiempos más recientes. Desde las nuevas aventuras que publicara Cómics Fórum hasta los dos álbumes que vieron la luz en los noventa, algo había que no terminaba de funcionar, dándose explicaciones para todos los gustos, colores y sabores, que han ido desde la vinculación del personaje a un tiempo demasiado concreto (y cada vez más lejano) hasta la necesidad de que otro guionista tomara el relevo de un Víctor Mora con un estilo muy distinto del que gusta en estos días. No es lugar aquí de reflexionar sobre el asunto, pero si bien los intentos de crear cosas nuevas han sido infructuosos, no ha pasado lo mismo con las sucesivas reediciones que, en los formatos más diversos, han contado siempre con el favor de un público que, en muchos casos, se ha encargado de dar a conocer a generaciones posteriores las aventuras de su héroe preferido. Por todo ello, no es de extrañar la existencia de una asociación como la de Amigos del Capitán Trueno, que publicó Zargoff el Belicoso, una historia inédita del personaje con guión del propio Mora y dibujos de Paco Nájera, copiando el formato cuadernillo de la edad dorada del tebeo. Tampoco sorprende que en 2006, coincidiendo con el cincuentenario de la aparición del trío protagonista, la afición asisitiera complacida a un libro homenaje realizado por la esposa de don Víctor, a un álbum donde se narraba la juventud del Capitán Trueno (el memorable Silencios, de Alfonso López y Pepe Gálvez) y a un nauseabundo “homenaje” denominado Bajo el bramido del Trueno, donde Francisco Ibáñez hacía que Mortadelo y Filemón “felicitaran” al Capitán y a su compañía por medio de una técnica que, decían algunos críticos, recuperaba lo peor de los procesos creativos de la difunta Bruguera. Quizá no hubiera mercado para una serie regular, pero sí para proyectos especiales, como había sido Silencios y como es este Último Combate.

Ricard Ferrándiz y Joan Boix pertenecen a esa generación que se asomó a las aventuras del Capitán, Crispín, Goliath y Sigrid, siendo por ello que con este trabajo dan merecido homenaje al héroe y a su mundo. Todo ello se comprueba a través del cuidado esmero que han decidido dar al producto, del cual dan sobrado testimonio la ambientación y las referencias a los elementos empleados, tanto históricos como ficticios. El Capitán y Goliath ven como sus cabellos se van tornando blancos, mientras que Crispín es ya un adulto que ha formado una familia. No dan los autores una madurez excesivamente feliz al caballero, como tampoco tuvo una juventud excesivamente grata en Silencios. La región bulle con el conflicto múltiple que enfrenta al Papado con los cátaros, al Rey de Francia con el Conde de Tolosa y a los Reyes de Inglaterra y de Aragón un poco con todos, un poco con ninguno. Los tres camaradas verán cómo la persecución de los cátaros occitanos, declarados herejes, tocará a su puerta y les llevará de cabeza a una última batalla.

La historia demuestra, sin lugar a dudas, el cariño que los autores han volcado en los personajes y en su mundo. La caída del Capitán Trueno está a la altura de su dimensión como héroe y como mito, y quien haya crecido, madurado y hasta envejecido leyendo sus hazañas no podrá evitar un cierto punto de emoción. Sin embargo, hay que reconocer que las páginas del álbum se quedan cortas para todo cuanto acontece. Crispín tiene muy poco protagonismo y Goliath sigue siendo el mismo de siempre, como si los años no hubieran restado fuerza al brazo de blandir el “toma-toma”. Por otro lado, la decisión de Boix de emular el estilo clásico no resulta muy acertada, por cuanto hay ciertos aspectos que se resienten. ¿Debe Crispín seguir vistiendo como un juglar cuando ya es un adulto? ¿Realmente han envejecido sus dos camaradas? En este punto me parece más acertada –y arriesgada- la jugada de Silencios.

Para concluir, El último combate es un tebeo que la afición al Capitán Trueno disfrutará, hasta el punto de dejarla con ganas de más. Ahora que la película del personaje está en marcha, se abre una oportunidad única para relanzar a tres de los héroes más populares e imperecederos de la historia del tebeo. Veremos si hay suerte.

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michino
michino
7 septiembre, 2010 9:17

Pues que quieres que te diga, yo prefiero recordarlo vivo y inmortal. Para realista ya esta la vida y no el capitan trueno, por mi parte no pienso leerlo, no sea que me caigan los lagrimones.

jorgenexo
jorgenexo
7 septiembre, 2010 9:39

Yo lo hojeé y no tenía especial buena pinta, la verdad.

MDIAZ
7 septiembre, 2010 12:05

Pues no puedo estar más en desacuerdo con Luis.
A mi no me gustó nada. Me dejó con mal gusto. Y con ganas de que no repitan experimentos de estos.
Las muertes de Sigrid y El capitán son absurdas.
¿tan dificil es hacer una aventura como las de toda la vida??

Konshu
Konshu
Lector
7 septiembre, 2010 12:54

Para los morbosos que no pensamos leerlo… pongan en spoiler cómo la palma trueno, por favor, que me ha picado la curiosidad.
Imagino que ahora que están preparando la película, habrá algún proyecto con el Capitán cociéndose, porque si lo único que hay en kiosko es una serie con el prota viejo y que muere, pues como que no se aprovecha mucho el tirón del film. Aunque viendo cómo va quedando la película… dudo que enganche al personaje a nuevo público.
 

erviaj
erviaj
7 septiembre, 2010 12:58

es una chorrada como un piano,lo que pasa es que trueno como a otros personajes miticos como el guerrero del antifaz son personajes politicamente incorrectos en la epoca de la alianza de civilizaciones
y tal……..

billyboy
billyboy
Lector
7 septiembre, 2010 13:44

Yo no entiendo la moda esta de tener que darle un final tragico a un protagonista,parece que si un personaje de comic es popular hay que contar su muerte en combate,en lugar de una muerte apacible en la cama o algo asi,y ni siquiera eso,para contar su ultima batalla no hace falta matar al protagonista,con una simple imagen de el personaje siendo mayor observando a sus nietos uno ya se siente bien.

Israel Fdez.
Israel Fdez.
Lector
7 septiembre, 2010 14:40

En casa lo compré porque mi madre es fan y tenemos los originales (yo soy más fan del Guerrero del Antifaz, pero la riada del 57 se llevó los originales de mi padre).
 
Al menos agradezco al autor del artículo que reconociera que hay otros personajes españoles de aventuras grandes, como el ya citado Guerrero y Roberto Alcazar y Pedrín (que peliculón saldría de ewtos últimos, con cierto presupuesto, claro está).

Avenger_Fan
Avenger_Fan
7 septiembre, 2010 14:45

Es absurdo querer relanzar a un personaje para que llegue a un publico nuevo… matándolo. Y si no es para los nuevos sino para los fans de siempre pues también la estás pifiando. Hasta el fondo.

Avenger_Fan
Avenger_Fan
7 septiembre, 2010 14:50

«…como el ya citado Guerrero y Roberto Alcazar y Pedrín (que peliculón saldría de ewtos últimos, con cierto presupuesto, claro está)»
Y un director extranjero que con los de aquí harían alguna basura tipo «Alatriste», «Torrente» o  «El  corazón del guerrero»… El presupuesto no lo es todo. Miedo me da la que estan haciendo con «El Capitan Trueno»…

Tachuela
Tachuela
Lector
7 septiembre, 2010 20:54

>>>A la hora de reeditar, hay que reconocer que Ambrós era mucho mejor dibujante que Vañó o que Gago, y quizá por ello su obra haya envejecido mejor.>>>
 
Una pena que el trato de la editorial al dibujante no fuese acorde a la calidad de su dibujo… Bruguera, la editorial que más vendía pero no la mejor 🙁

Gaeta
Gaeta
8 septiembre, 2010 0:57

Es que las editoriales y el tema de los derechos de autor son un tema del que se podría hablar laaaargamente.
 
Y sin embargo nadie lo hace diciendo las cosas por su nombre ni poniendo los puntos sobre las íes. Curioso…

Avenger_Fan
Avenger_Fan
8 septiembre, 2010 10:51

P. D. Lo de “Alatriste” puede entenderse, pero “Torrente” y “El Corazón del Guerrero” son productos que, en sus respectivos géneros, están a la altura de cualquier producción extranjera.
«El corazón del guerrero» y «Torrente» no son ni serie b de lo malas que son! Te puedes reir con ellas pero objetivamente son malas. El problema de las peliculas y las series de aqui es que no hay directores competentes. Hacer una pelicula es contar una historia y no todo el mundo lo cuenta de la misma manera. No se trata de medios ni de presupuestos ni FX… es que, sencillamente, aquí no hay nivel.

Israel Fdez.
Israel Fdez.
Lector
8 septiembre, 2010 14:51

la hora de reeditar, hay que reconocer que Ambrós era mucho mejor dibujante que Vañó o que Gago, y quizá por ello su obra haya envejecido mejor.
 
Hombre, mejor que Vañó si, que Gago no, en mi modesta opinión. Esos duelos que duraban a veces dos cuadernos, ese manejo del cuerpo humano creo que es irrepetible.
 
Lamentablente nunca sabremos como hubiera dibujado el hombre si en su mejor etapa no hubiera tenido que dibujar chorrocientas páginas a la semana. Para mi, no obstante, lo mejor del Guerrero era el guión, de los primerops 300 números quiero decir.
 
Encima son tebeos para editar en blanco y negro, como fueron diseñados, sin ese horrible color añadido de Editorial Valenciana y esos dibujos pequeñitos.

Israel Fdez.
Israel Fdez.
Lector
8 septiembre, 2010 14:55

Del Guerrero del Antifaz hay un proyecto de aficionado que lleva varios años gestándose. Y de Roberto Alcázar y Pedrín ¿de veras aguantarían un lifting?
 
Del Guerrero he visto algo. Al tipo le falta llenar el traje, creo yo. El Guerrero tiene un cuerpo como Batman, y el de la película está algo fofo.
 
Y lo de Roberto Alcazar estoy convencido de que podría salir una película entretenidísima, porque los tíos igual te liquidaban a una banda de gansters que a una invasión alienígena. ¡Y todo a cachiporrazos!
 
Creo que dependería mucho del carisma del chavalín que hiciera de Pedrín, verdadero protagonista de los más de 1200 números de la colección.

Tachuela
Tachuela
Lector
8 septiembre, 2010 15:17

>>>Lamentablente nunca sabremos como hubiera dibujado el hombre [Gago] si en su mejor etapa no hubiera tenido que dibujar chorrocientas páginas a la semana.>>>
 
Ojo, que precisamente Ambrós también tenía que sacar 10 páginas semanales de el Capitán Trueno en sus mejores años más la doble página del Pulgarcito. Afortunadamente contó con un entintador que le ayudó.
 
Es a lo que me refería antes. Al principio Ambrós se encargaba de 10 páginas cada 15 días. De pronto tiene éxito, y los de Bruguera pasan la serie a semanal. Y al cabo de los años, cuando se sabe que el Capitán Trueno tiene ventas de millones de ejemplares (¡ese tipo de tiradas no las ha visto ni Mortadelo!) Ambrós no recibe ninguna compensación por parte de Bruguera. «Sigue dibujando, esclavo». ¿Qué tipo de fidelidad esperaba la editorial con ese trato? Y con la sistemática destrucción de originales que hacía la editorial, ahora tenemos las ediciones que tenemos, que no se aprecia la línea del dibujo, parece todo dibujado con un edding 1200.
 
Que lo pueden colorear con photoshop todo lo que quieran, que no importa. Lo que hay que hacer es meterle una restauración bestial a todas las páginas de arriba a abajo.
 
Y sin embargo, la gente sigue comprando…

Avenger_Fan
Avenger_Fan
8 septiembre, 2010 17:08

Celda 211 es la nueva Tesis, es decir, una pelicula sobrevalorada que hasta no hace mucho a cualquiera por la calle le preguntabas por buen cine español te nombraba Tesis y 3 mas. Ahora Celda 211 entra en dicho grupo, pero repito super sobrevalorada. Es una pelicula normalita, una historia interesante algo novedosa para lo que es el cine español pero con aspecto de Tv movie.

Hachas
Hachas
Lector
8 septiembre, 2010 17:35

Ke manía de hacer envejecer y lastrar al personaje con problemas serios, pero si era un tebeo de aventuras donde sus protagonistas nunca morían pese a cualquier peligro!!! Ya de paso que hagan a Crispín homosexual, a Goliath le va el sadomaso y tras la muerte de Sigrid el Capitán pilla una depre de caballo y se hace adicto al opio y al hachís sarraceno. Es como hacer que muera Mortadelo (ya se cachondeó de esto el propio Ibáñez). Madre mía, ¿cómo serían Zipi y Zape actuales? ke miedo…xd

Tachuela
Tachuela
Lector
8 septiembre, 2010 19:15

>>>En todo caso sería algo que, en cuanto a historia, habría que echarle en cara al novelista, ya que es una adaptación.>>>
 
Ojo, que el libro tiene detalles totalmente diferentes de la película, protagonistas diferentes, y un desarrollo y un final que cambian bastante.

Avenger_Fan
Avenger_Fan
9 septiembre, 2010 15:42

Luis, yo no machaco Celda 211. Como he dicho antes tiene una historia interesante y es novedosa para lo que suele producir el cine español de lo cual me alegro porque hace falta mas variedad pero es que, al igual que Tesis (que también fue muy novedosa por la trama) se está sobrevalorando mucho, en mi humilde opinion.
Pero tambien veo compresible que a muchos le parezca una obra maestra ya que es una pelicula que sobresale (y mucho) de la mediocridad del resto de films de aqui.

Avenger_Fan
Avenger_Fan
10 septiembre, 2010 0:57

ansa un poco la visión negativa que se tiene del cine español, cuando al menos hay quien se atreve a hacer otras cosas.
Te comprendo y tienes parte de razón. En mi caso, hace tiempo que ya di por perdido al cine español y cada vez que sale el tema salto como un resorte. Es algo cansino, para qué negarlo…  pero es que como aquí no existe la autocrítica y la gente afín al cine español (actores, directores, la academia, etc…) suelen darse tanto autobombo que duelen los oidos! Dentro de ese mundillo no hay ni una sola voz que diga la verdad, nada de autocritica, hay demasiado amiguismo/compadreo que dan ganas de vomitar… Cuando Amenabar diga publicamente que la ultima producción de Almodovar o Medem es una mierda pinchá en un palo será el primer paso para que haya mejores peliculas.
 

Avenger_Fan
Avenger_Fan
10 septiembre, 2010 13:19

Yo creo que «Lope» y «Aguila Roja» se han hecho para aprovechar el vestuario de «Alatriste» porque que costó mucha pasta xD

Avenger_Fan
Avenger_Fan
10 septiembre, 2010 22:33

En realidad, el vestuario -o gran parte- del de “Alatriste” venía de “El Reino de los cielos”
De verdad? No sabía eso… pero vamos, 5 siglos separan las épocas de una película de otra. Ni se parecen en estilos. Eso si, cuando me la puse durante el rodaje me quedaba de puta madre. Es flipante 😀

Juan
Juan
Lector
11 septiembre, 2010 15:05

Don Luis: creo que se confunde ud. Lo que se aprovechói del reino de los cielos fue el atrezzo (carromatos y demás enseres) no el vestuario, evidentemente. Defentos narrativos aparte, la drección artísitca y el vestuario de «Alatriste» está muy bien.
Y los decorados de «Águila Roja» se notan no tanto por la calidad de los materiales que por la fotografía.
Y sí, cansa esa actitud de si es española la película seguro que es mala.