Edición original: The Trial of The Punisher 1 y 2 y Punisher v8, 1-6 USA
Edición nacional/ España: El Castigador vol.4 Panini Comics
Guión: Nathan Edmondson, Marc Guggenheim
Dibujo: Mitch Gerads, Leinil Francis Yu, Mico Suayan
Color: Mitch Gerads, Sunny Cho
Formato: Rústica, 184 págs.
Precio: 16,5€
Siempre he tenido la sensación de que aún no ha llegado el guionista capaz de explotar al máximo a un personaje como Frank Castle, y con esto no quiero que nadie me malinterprete, me encantó en su día la propuesta de Carl Potts, disfruté con la bizarra etapa de Rick Remender y como muchos creo que el que mejor supo entender al personaje fue Garth Ennis, pero si rascamos un poco sobre la superficie al final todas sus aventuras se reducen a lo mismo, a Frank haciendo frente de forma sanguinaria a un cartel / organización mafiosa / … no hay más, ni una evolución de su entorno, ni personajes secundarios que podamos tildar de recurrentes, tan sólo la misma historia de fondo contada una y otra vez en la que esta se salva o no en función de las dotes del guionista de turno.
Con el relanzamiento llevado a cabo por Marvel Comics, El Castigador fue uno de los personajes que se aprovechó para dotarlo de un nuevo equipo creativo, y el guionista escogido para ello sería Nathan Edmonson, quien comenzó a publicar sus primeros trabajos en el año 2009 principalmente en Image Comics donde aparecerían obras como: Olympus, The Light, The activity o Who is Jake Ellis? Con el relanzamiento del universo DC esta apostaría por darle la serie regular de Grifter en la que se encargaría del primer arco argumental junto a Cafu. Se podría decir que el año de su consagración ha sido 2014 en el que Marvel Comics apostó por darle nada menos que tres series regulares: La viuda Negra, El Castigador y Deathlock, todas ellas con un marcado tono urbano y de intriga y en las que ha devuelto la confianza que Marvel depositó en él con la mejor de las interpretaciones de estos personajes nada fáciles de escribir.
De su Viuda Negra ya hablamos hace unos días, un trabajo más que notable – por no decir excelente – en el que se dirige a un público que espera algo más que intercambio de golpes, ese tipo de lector exigente que comienza a estar hastiado del mismo tipo de historias superheróicas. Su Castigador digamos que contiene la misma esencia que sus trabajos anteriores, con ello no quiero decir que copie tramas, argumentos o forma de ejecutarlos, sino que busca tratar al lector como alguien inteligente y le ofrece algo más que una historia violenta en la que vemos saltar los casquillos, nos ofrece un problema real como es el de los cárteles en México, y de cómo poco a poco están cada vez obteniendo más poder, y eso lo mezcla de forma inteligente con dos armas secretas que tienen en su poder y que pueden amenazar Los Ángeles, por un lado algo que parece ser un arma química muy destructiva, y por otro lado cuenta con la ayuda de nada menos que Electro en su vertiente más adulta y pavorosa, hace tiempo que dejó de ser aquel villano ridículo de mascara amarilla y mallas verdes que podía ser detenido con una boca de incendio, ahora es una amenaza real, y una a la que Frank Castle no está acostumbrado a hacer frente.
El Castigador de Edmondson es mucho más que una campaña de exterminación de la amenaza de turno, la serie en sus manos se convierte en una interesante trama que perfectamente podría protagonizar John McClane en la que el cartel mexicano es tan sólo la punta del iceberg, y eso es algo de lo que Frank se da cuenta y no se gusta verse en una situación en la que es un mero instrumento de algo que se le escapa por completo, y precisamente ahí es donde el guionista lo borda, su Castigador tiene tintes adultos de la que fue una de sus mejores etapas (Punisher Max), pero también tiene un pequeño vínculo con el mundo más superheróico con la participación de Electro y la entrada en escena de Domino, pero lo que gusta es que ofrece algo distinto, y me refiero a ese componente de entramado de acción que sacan al personaje de su contexto de exterminador para convertirlo en una suerte de anti-héroe que en vista de que a la policía el tema le viene grande, y que no considera a alguien como el Capitán América capaz de hacer frente a una amenaza de este tipo, el es el único que queda para evitar que el virus químico se desate por todo los Ángeles.
Esta nueva serie funciona, y lo hace en buena medida por la inteligente propuesta de Nathan, allí donde otros se habrían empecinado en continuar la estela marcada por Garth Ennis, una estela exitosa todo sea dicho, el guionista se desmarca manteniendo la esencia del personaje pero demostrando que se pueden contar otro tipo de historias, ese tipo de argumentos a los que hacía referencia al inicio de esta reseña para los que creo firmemente que este tipo de personaje es idóneo.
A pesar de la importancia de Nathan, suyo es tan sólo el cincuenta por ciento de la clave del éxito, y es que si tan buen sabor de boca ha dejado este primer arco argumental es también en buena medida por la excelente labor del dibujante Mitch Gerads, quien con cierto rubor tengo que reconocer que era un auténtico desconocido para mi hasta la fecha y que con este trabajo se ha convertido en un artista al que seguir muy de cerca, con un trazo elegante a medio camino entre la corriente seguida por autores como Michael Lark, Stefano Gaudiano o Sean Phillips, y algunos detalles más cercanos al cómic superheróico, se muestra como el autor idóneo para este tipo de serie. Mitch ya trabajó con Nathan en The activity para Image Comics así que desconozco hasta qué punto el acierto hay que adjudicarselo al editor o es una sugerencia del guionista, sea como fuera, su inclusión en el proyecto resulta todo un acierto siendo una de esas veces en las que tan importante es la labor del dibujante como la del guionista sumando ambos por igual para que el resultado final sea excelente.
De momento Nathan me ha convencido con sus dos series, tanto La Viuda Negra como el Castigador resultan un soplo de aire fresco, un tratamiento adulto e inteligente de dos personajes que encajan como un guante en este tipo de propuestas. Tocará estar a ambas series, y a la espera de ver si su Deathlock resulta tan exitosa como estas dos.
Review Overview
Guión - 8.5
Dibujo - 8
Interés - 8
8.2
Valoración global
Nathan Edmonson y Mitch Gerads construyen una de las mejores versiones de Frank Castle que se recuerdan.
Gran reseña Raúl. Esta nueva etapa de Punisher también me ha llamado la atención y este primer arco argumental me ha gustado porque me ha recordado un poco al estilo de serie que hicieron en su día Carl Potts y, sobre todo, Mike Baron, en la que se intentaba mantener un grupo de secundarios con el que dar más dimensión a la serie y no sólo centrarse en las ansias de venganza de Frank.
Con lo que no estoy de acuerdo es con la apreciación de que en la etapa de Ennis no hubo evolución del personaje. En las sagas de Ennis aparecían una serie de personajes secundarios que el guionista utilizó para ir marcando la evolución del personaje, como su relación con la mujer soldado y su hija, y estaba claro que el camino que tomó Ennis sólo podía conducir a un posible final, el de la muerte violenta del protagonista. Que Ennis no se atreviera a llevar hasta sus últimas consecuencias lo que había ido construyendo en la serie, no quita mérito a la que es sin duda la mejor etapa del personaje.
Gran reseña Raúl, tambien un convencido de Nathan Edmonson. Me ha gustado el enfoque del guionista para un personaje que no es para nada santo de mi devocion. Solo me he interesado por la etapa de Ennis y esta la pille por probar, gustándome bastante enfoque y dibujo
me ha parecido mala,no,lo siguiente.
Veo que no t ha gustado mucho Frank 😀
En cambio a mi, que la personalidad tradicional de justiciero no me llamaba para nada, si ha conseguido atraparme. Saludos 😉
Habría preferido que el personaje siguiera en manos de Rucka…
Está alright, pero no para morirse. Mejor que la etapa de Rucka, pero todavía a eones de las de Garth Ennis.
Entretenido sin más. Incluso prefiero los Thunderbolts, con sus sinsentido y su falta de definición y todo.