Santa Klaus is coming for you
Aaah, las fiestas. Nada como dejarse arrastrar por el cálido abrazo de la Navidad y sucumbir a su espíritu metiéndose hasta el cuello en historias ambientadas en esa época del año. Son días para hacerse un chocolate calentito, quedarse en casa viendo el frío desde la barrera bajo una manta gordita y hacerse una buena maratón de cosas como Un Padre en Apuros, Cuento de Navidad o Love Actually. O incluso, por qué no, una buena historia de un asesino en serie vestido de Papá Noel.
Eso es, efectivamente, lo que nos trae Norma Editorial para el cierre del año. Hablamos de El Depravado, la nueva serie creada por James Tynion IV y Joshua Hixson, publicada originalmente por Image Comics. Una miniserie de 9 números, cuya última entrega está a punto de ver la luz en Estados Unidos el próximo mes de febrero, y de la que podemos leer su mitad inicial con este primer volumen del total de dos que compondrán la historia.
Una historia que, por supuesto, es de terror. Y es que ya sabemos cuál es el género fetiche de Tynion. El multipremiado guionista, que ha conseguido conquistar a crítica y público gracias a su excepcional labor en trabajos como Hay Algo Matando Niños, El Departamento de la Verdad, Wynd, El Armario o The Nice House on the Lake, siente una profunda afinidad por el canguelo y no ha dejado de cultivarlo de las formas más variadas. Este nuevo trabajo no es diferente, aunque sí en su compañero de armas. Joshua Hixson es el elegido para encargarse del arte al completo, un artista al que el género no le es extraño, pues ya lo hemos visto en las inéditas The Plot (Vault Comics) o Children of the Woods (Dark Horse), además de haber sido coautor de la serie Shanghai Red (Image Comics).
The Deviant, como se titula en su inglés original, nos lleva hasta Milwaukee junto a Michael, un joven autor de cómics aficionado al true crime que decide embarcarse en un proyecto muy particular: hacer una obra sobre El Depravado, un asesino en serie convicto que durante las Navidades de 50 años atrás sembró el pánico asesinando de manera horrible a varios chicos adolescentes. Para ello, Michael comenzará a entrevistarse con el preso, que lleva desde su encarcelamiento jurando ser inocente. En esas conversaciones el joven autor tratará no solo de profundizar en los crímenes, sino también en su propia identidad. Pero la cosa se pondrá complicada cuando alguien comienza a replicar el modus operandi del infame criminal.
Lo primero que se puede decir de El Depravado es que cumple con su requisito más básico: atrapa. James Tynion se nos aleja por una vez de las tramas sobrenaturales y se centra en una historia arquetípica de asesino en serie, y el resultado es notable. El guionista logra sembrar la intriga según vemos cómo se va desenvolviendo el misterio, lleno de tensión, hasta alcanzar un final de tomo que es puro cliffhanger y nos deja sedientos a la espera de ese segundo volumen que arroje luz sobre el caso.
Pero todo eso ni siquiera es lo más importante que se puede decir de la obra. Y es que con El Depravado Tynion aprovecha para sumergirse en unas cuestiones tan sensibles y delicadas como la identidad, la falta de referentes y los prejuicios. Según palabras del propio autor: “durante mi adolescencia, en un momento en el que me enfrentaba a atar los cabos de mi identidad sexual, la mayoría de las veces que encontraba ejemplos de homosexuales en las historias era a través de asesinos en serie, de su depravación sexual. El concepto de una persona que parece normal pero que esconde algo que está terriblemente mal dentro de ella”.
Esas demoledoras reflexiones decide Tynion canalizar hacia esta obra, una en la que el personaje de Michael sirve claramente de alter ego del autor, que a través de largos y afinados diálogos con los distintos personajes va dando forma a todos sus pensamientos e inseguridades. Y se nota ese interés personal, porque Tynion, gracias a su sensibilidad y a su enorme talento, logra atraparnos casi más con esas largas charlas que con la propia trama homicida. El guionista, que ya nos mostró en El Armario lo bien que se le da aprovechar una premisa de terror para retratar problemas muy humanos, sube aquí un peldaño más al convertirlo en una especie de trabajo terapéutico que resuena con fuerza para el lector con empatía.
No podemos olvidarnos tampoco del trabajo de Joshua Hixson, y es que el artista de The Plot realiza un trabajo espléndido para convertir El Depravado en una obra de terror sumamente inquietante. Hixson tiene un estilo aparentemente tosco, de trazo grueso y coloreado a brochazos, que pueden hacer parecer en las vistas cortas poco detalle. Sin embargo, es uno de esos estilos con un dominio tan grande de posturas y expresiones que cuando miramos la página en conjunto el realismo brota de donde en teoría no lo había.
La narrativa es soberbia, con alma cinematográfica, y punto y a aparte merece el coloreado, que aplica con un control sólido del aura de la obra, y nos regala en especial unas estampas hipnóticas y aterradoras en las escenas nocturnas bajo la nieve, con ese diseño de asesino en serie navideño que da escalofríos. En esencia, un trabajo para tener muy en cuenta a Hixson y ponerlo en el tablero de la primera división.
En definitiva, El Depravado es otro trabajo de terror sobresaliente de James Tynion IV, que sigue demostrando un nivel entre bueno y maravilloso, y un golpe sobre la mesa de Joshua Hixson, que demuestra una personalidad y un talento genial para el terror en todas sus formas. Siendo solo 9 números, el cuerpo pedía leérsela de una sentada, pero es de agradecer no tener que enfrentarnos a un carísimo integral para poder disfrutar de la obra. Esperaremos al segundo volumen con un ojo puesto en la chimenea, por si decidiera bajar por ella un Papá Noel más espigado y sangriento de lo normal…
Lo mejor
• El inquietante dibujo, y en especial el coloreado, de Hixson.
• Los excelentes diálogos.
• La cruda disección que hace Tynion sobre la identidad.
Lo peor
• Esperar a la conclusión.
Guion - 9
Dibujo - 9.2
Interés - 9
9.1
Aterradora
Tynion y Hixson nos entregan un aterrador cómic de asesino en serie con un poso muy profundo sobre la identidad sexual y los prejuicios.
