El día que cambié mis comics por dos series de TV

Porque eso es lo que leí anoche, muchachos, dos guiones para series de televisión. No me entendáis mal. Leí dos cómics estupendos. Uno de ellos, de lo mejorcito que he leído este año. Pero cuando los he terminado, lo primero en lo que he pensado no ha sido en que eran buenos cómics, he pensado: qué fácil sería hacer esto para la tele!!!

Y no es descabellado, en absoluto. En estos tiempos, dos factores convergen para convertir una idea lejana en algo mucho más que posible: Por un lado, el cine cada vez recurre más y más al mundo del cómic para contar historias (aunque está de más que lo diga, porque es algo que por aquí todo el mundo sabe y repite hasta la saciedad). Por otro, las series de televisión viven su edad de oro, gracias a la tele por cable y sobre todo (en mi opinión) al DVD. Asi que, si ya hemos demostrado que es rentable hacer una peli de un tipo en mallas al que pica una araña, y que las series sobre agentes de la ley de dudosa metodología son un éxito (The Wire, The Shield, etc…) ¿ qué nos impide empezar a contar la historia de unos tipos que se encargan de pararle los pies a los superhéroes que se pasan de la raya?. Demonios, si hasta el dibujante nos lo pone fácil: tenemos que conseguir a Simon Pegg para ésta. Y ya tenemos The Boys.

El primer número, escrito por Garth Ennis y dibujado por Darick Robertson nos pone en situación de forma contundente: una pareja pasea, y de repente un villano sale disparado arrollando a la jovencita…y dejando a su novio agarrando sus brazos amputados!! Gracias a…quien sea, hay un tipo duro, muy duro, que se preocupa por la humanidad. Y tiene amigos que son igual de amistosos que él. Además, lo que dice tampoco es una locura: «cuando tienes superpoderes tienes cosas más importantes que hacer que salvar al mundo tropecientas veces. Cada vez son más los que tienen poderes. Y llegara el momento en que los humanos dejen de importarles, Y si no, mirad el caso de esa chica. Hay que pararles los pies, maldita sea.»

Por supuesto, el comic es sórdido a niveles intolerables para la televisión (o el cine), asi que habrá que adaptarlo un poquito…o montarlo de manera que no se note tanto y sacar luego en DVD las escenas perdidas. Si, esa es buena idea…

Pero no solo de tiros vive el hombre. También tenemos el asunto del más allá que desencadenó Mr. Shyamalan con El Sexto Sentido. En televisión tenemos Médium, Ghost Whisperer, Tru Calling…sí, puede funcionar. Pero vayamos un poco más allá: hagamos una TV movie. La llamaremos Deadman.

Te despiertas en la cabina de un avión comercial. Eres el copiloto de tu hermano, puedes estar tranquilo. O no. ¿Qué demonios ocurre?¿Qué está haciendo tu hermano?¿Es que se ha vuelto loco? Todos los sistemas pitan, y la cabina se convierte en el infierno…y de repente te despiertas y estas junto a tu hermano cuando teníais quince años. Todo ha sido un sueño…¿un sueño…y por qué eres tan joven de nuevo?…entonces tu hermano te habla: » Tranquilo…sí, lo de la cabina es cierto…dicen que cuando mueres tu vida pasa en un instante…bueno, no es exactamente así… ” Et voilá, ya tenemos TV movie, o si la cosa va bien, episodio piloto (no pun intended)

Lo malo es que el cómic, de Bruce Jones y John Watkiss está contado de una manera tan deliciosa que va a ser difícil superarlo en la pantalla…no hay problema, de eso ya se encargarán los de marketing…

Y bueno, eso es todo lo que quería compartir con vosotros en esta calurosa tarde del sur.
Denny Crane.