El futuro de Ed Brubaker, parte 2: Fatale, cine y televisión

Seguimos repasando el cambio de estatus en la carrera de uno de los guionistas más alabados de la última década. En la primera parte nos centrábamos en su despedida del Soldado de Invierno, que a la postre significará su adiós a los superhéroes al menos durante un tiempo bastante largo. Porque si bien nos descartaba volver a escribir sobre Bucky Barnes algún día en su anterior entrevista, no parece encajar demasiado bien en los planes que él mismo se traza. El objetivo de Brubaker es cerrar con honores su larga y exitosa etapa escribiendo sobre superhéroes y dedicarse únicamente a proyectos de autor. Su plan maestro consiste en tener dos cómics al mes de series cuyos derechos le pertenezcan por completo, y el resto de su tiempo dedicarlo a proyectos de cine y televisión en los que lleva tiempo interesado. De hecho, como también dijimos, puede que veamos una participación más que testimonial de Brubaker en el film Capitán América: El soldado de Invierno. Este cambio en su forma de trabajar ha venido alentado por varios factores. Primero, las oportunidades que le han ido surgiendo de escribir para cine y televisión. Segundo, el éxito de su serie Fatale, que se convirtió en la segunda más vendida de Image Comics detrás de Los muertos vivientes (hasta que llegó Saga de Brian K. Vaughan y la relegó al tercer puesto).  Y tercero, la muerte de su padre. Él mismo reconoce que los últimos tiempos han sido muy difíciles y que le costaba horrores escribir historias de superhéroes (de ahí que muchos notáramos un descenso en su rendimiento). No sólo siente que se le han agotado las ideas al respecto sino que nos confiesa que cuando estaba sentado junto al lecho de muerte de su padre “sonaba ridículo que escribiera historias sobre gente que se disfraza y que soluciona los problemas del mundo a golpes”. Por supuesto que no reniega de nada, le siguen gustando esos cómics pero ha llegado a un punto en que el siente que no tiene nada más que contar.

Por tanto, de aquí a finales de año ya tendremos esos dos cómics mensuales que Brubaker ha decidido como su justa medida. Por el momento seguirán siendo Fatale y Soldado de Invierno…pero ¿y después? Pues a la serie de Image Comics se le unirá otra (presumiblemente en la misma editorial) de la que todavía no sabemos nada pero que el guionista espera sea un bombazo. Habrá que esperar hasta noviembre o diciembre para conocer los detalles, aunque puede que veamos pronto más de un proyecto, ya que esos dos cómics mensuales no quiere decir necesariamente que sean sólo dos series. Y decía que la próxima serie seguramente será de Image porque Brubaker comenta que de los cómics que ésta publica le gusta casi todo: el precio, el diseño, la calidad del papel, etc. Así, el tiempo que antes invertía en superhéroes irá ahora destinado a diferentes proyectos en cine y televisión. En cuanto a la pantalla grande, a expensas de saber cuan involucrado estará en la secuela del Capitán América, ya sí tiene en proyecto en marcha. Se trata de la adaptación cinematográfica de Criminal, la serie de miniseries realizada junto a Sean Philips,  y en concreto de la primera de ellas, Cobarde.Brubaker ha tenido la suerte de poder escribir el guión de la película después de venderle los derechos a Hollywood, algo inaudito en este tipo de adaptaciones. El guionista sabe la suerte que tiene, y es que no hace falta que recordemos cómo han acabado algunos de estos proyectos. El director de la película será David Slade (30 días de oscuridad, Eclipse) y según Ed Brubaker tanto él como el productor querían hacer una película lo más fiel posible al original. Pero al mismo tiempo, Brubaker ha tenido la libertad de jugar con su mundo como quisiera, así que veremos nuevos personajes y algunos cambios. Tal y cómo suele manejar sus proyectos propios, esto puede ser todo un acierto teniendo en cuenta que, por mucho que sus cómics sean muy cinematográficos, el lenguaje de ambos medios es muy distinto.

Eso en cuanto a cine se refiere, pero ahí no terminan los nuevos proyectos de Ed Brubaker y es que también está preparando dos episodios pilotos para televisión. Uno de ellos será completamente nuevo y el segundo está basado en una idea que el guionista tiene para un nuevo cómic. Es decir, el modelo Mark Millar, vender los derechos antes de que el propio cómic salga a la venta. Y es que según Brubaker es el mejor momento en la historia para que un guionista de cómics trabaje en cine y televisión ya que según dice “todo el mundo en los estudios lee cómics”. Pudiera parecer que al autor intenta abarcar demasiado, pero según él, lo único que hará será invertir el tiempo que antes gastaba en escribir superhéroes en todos estos planes que ya ha tenido aparcados durante demasiado tiempo. Y aunque no pretenda ser el protagonista de ninguna huída masiva de las grandes editoriales, le encanta la idea de que pueda servir de modelo a más autores:

Más gente necesita que le recuerden que esto es algo que puede hacerse. Puedes trabajar para Marvel y DC para hacerte un nombre, hasta llegar a un punto en el que el público te seguirá de serie en serie. Si tienes una audiencia, deberías aprovecharlo creando algo que controles y poseas por completo. Básicamente, apuesta por ti. Puede que no siempre de sus frutos, pero cuando lo haga, estos serán para ti y para nadie más.

Y vayamos con Fatale, el último y más exitoso producto de la factoría Brubaker & Phillips, cuyas patentes empiezan a parecer inagotables. Desde que ambos coincidieran en 2001 en la muy recomendable Batman: Gotham Noir, éste ya es el cuarto proyecto en el que ambos se embarcan juntos tras Sleeper, Incognito y Criminal. Y no será el último. La complicidad entre ambos es tanta que el guionista declara que dentro de esos dos cómics suyos al mes quiere conseguir que uno de ellos sea siempre de Sean Phillips. Y es que para el guionista todo cómic que dibuja Phillips es al 100% de su gusto, exactamente, viñeta a viñeta como él lo había planeado. Y eso es algo que según él, salvo algunos números contados con Steve Epting en Capitán América, no puede decir de ningún otro cómic que haga, ya sea por el dibujante, la publicidad, el papel o el precio (si, se confiesa muy fetichista en estos aspectos).  Pero sea cual sea el próximo trabajo entre ambos, todavía les queda mucho que contar en Fatale, ya que Brubaker cree que llegará a tener unos 19 o 20 números. Ese abarca tres arcos argumentales y cuatro números unitarios que se situarán entre el segundo y el tercero. Cada uno de estos números estará situado en una época distinta y ampliará ese extraño mundo creado por Brubaker en la serie. Recordemos que el primer arco argumental, Death Chases Me, ya tuvo recopilatorio el mes pasado y que hace un par de semanas comenzó en Estados Unidos el segundo arco con el séptimo número de la serie.  Esta nueva historia se sitúa en una época distinta a la anterior y cuenta con un elenco de protagonistas casi totalmente nuevo, aunque obviamente se repiten algunos elementos que son los que construirán un escenario común (esquema que se repetirá para el tercer y último arco). La mayor de las constantes que se repetirá siempre es la presencia de esa enigmática femme fatale de nombre Josephiney que en el primer arco no sólo enamoraba a los protagonistas, sino al propio lector. En este segundo arco, situado en los años 70, el protagonista será un actor de películas de serie B llamado Miles y a diferencia del Hank del primer arco, su vida ya estará en deconstrucción antes de conocer a Jo. Por tanto, ¿cómo le afectará conocerla? En principio, lo que quiere demostrar Brubaker es que ese extraño embrujo que provoca Josephine también puede ser para hacer el bien en las personas.  A su vez, seguiremos viviendo la historia de Nick en el presente, que de hecho es con la que se abrió a nuestros ojos este universo en Fatale #1.  El protagonista seguirá en busca de Jo a la vez que huye de esa gente tan rara que le vigila, pero no será gasta el último arco argumental en el que se resuelva esta trama.

Muchos verán reminiscencias en fatale de las historias de H.P. Lovecraft y no es nada casual. Ed Brubaker comenta que está intentando mezclar en esta serie muchas de las cosas que le obsesionaban cuando era más joven. Esto es: las obras de Lovecraft, la película La semilla del diablo de Roman Polanski y los cultos satánicos que llevaron a diversos asesinatos en la América de los años 70. Si a todo ello le sumamos ese genuino toque noir tan característico que lleva acompañando al autor durante toda su carrera… ¿quién no querría leer Fatale?

Fuente: Comic Book Resources.