El Hombre Hormiga y la Avispa (III): Entomología del Universo Marvel

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Continuamos nuestro repaso a la trayectoria de Hank Pym, su legado e importancia dentro del Universo Marvel centrándonos en la figura del Hombre Hormiga. Si es imposible hablar de Gulliver sin mentar a los Lilliputienses, o de Jane Goodall sin hablar de los chimpancés, Pym tiene en su haber el honor de haber sido el primer embajador de la era moderna en entrar en contacto con un mundo diminuto que se agita bajo nuestros pies siendo determinantes para el funcionamiento de nuestro planeta. Dada su importancia para el personaje, la naturaleza de sus poderes y gran parte del Universo Marvel, merece la pena que repasemos su impacto sobre este mismo. No en vano, todo empezó en una colonia de hormigas.

Desde que guionistas como Lein Wein, J.M. DeMatteis o, más recientemente, J.M. Straczynski comenzaron a introducir animismo o misticismo totémico en sus historias, lo que en principio no eran más que disfraces y apodos pintorescos evocando animales comenzaría a arraigarse a la esencia de los personajes hasta convertirse en parte de lo que los definía. Espíritus protectores de lo salvaje, presencias arcanas o impulsos primitivos resonando como ecos a través del tiempo, estas fuerzas nos han acompañado desde los albores de la humanidad eligiendo a sus campeones entre nosotros. Pájaros de fuego creacionistas, jaurías de lobos que nos acechan desde las sombras, feroces panteras que han mantenido a salvo una pequeña nación africana durante miles de años, reptiles antidiluvianos que perviven en los márgenes de nuestra sociedad, cazadores leoninos… ejemplos de motivos que dejaron de ser simplemente decorativos para convertirse en legados de poder que se remontan más allá de la palabra escrita. Y entre todas esas estirpes que dominaban el mundo mucho antes de que nos atreviéramos a salir de las cavernas, un grupo destaca por su numero y alcance. Hablamos de los vulgarmente generalizados como insectos o más correctamente denominados Filo Arthropoda.

Aparecidos trescientos millones de años antes de que existiera algo remotamente parecido a un dinosaurio, su expansión y diversificación ha sido tal que muchos expertos consideran que actualmente son la “especie” dominante de nuestro planeta por encima de la raza humanos. No en vano, suponen el 80% de la fauna de Tierra siendo el filo que mayor éxito biológico que haya visto la faz del planeta azul. En la actualidad no solo ocupan cualquier ecosistema posible, desde el placton que da vida a los océanos hasta la infinidad de especies que pueblan la superficie siendo responsables de funciones como la polinización o la eliminación de residuos orgánicos, sino que además son capaces de resistir las condiciones más adversas incluyendo un hipotético holocausto nuclear.

Pero en lo que respecta al Universo Marvel, la cosa va mucho más allá y los Arthropoda se extienden a través de las estrellas y las barreras del cosmos. Si al levantar los suelos de las viviendas suficientemente viejas nos encontramos con miriadas de criaturas diminutas medrando a sus anchas, algo similar ocurre cuando dirigimos la vista al conjunto de dimensiones que dan forma a la nuestra.



¡INVASORES DEL ESPACIO!

La Zona Negativa, el denso reverso de carga contraria anclado a nuestro universo, es uno de los principales caldos de cultivo en los que el phylo ha prosperado hasta convertirse en la especie imperante de la dimensión. En un intento de terraformar el planeta Arthros, los Tyannans implantarían unas esporas de las que, al ser afectadas por una extraña radiación (¿Las partículas Pym?) nacería Annihilus y una plaga de seres insectoides que se expandieron por toda la Zona Negativa consumiendo todo lo que encontraban a su paso. Especie de naturaleza agresiva y brutal, alcanzarían tal número que terminarían rebosando los límites de su propio mundo perpetrando la invasión de nuestro cosmos al mando de la Ola Aniquiladora.

Antes de dicha invasión, una amplia variedad de razas insectoides tremendamente evolucionadas habían sido catalogadas en los confines de nuestro cosmos. Posiblemente ninguna tan voraz y temida como El Nido. Genéticamente emparentados con los artrópodos de nuestro planeta, estas monstruosidades eslizoides se extienden desde el núcleo de su colmena consumiendo toda forma de vida a su alcance como parte de su ciclo reproductivo. Igualmente agresivas han demostrado ser razas como los Sidri, los Scatters, los primarios parásitos cerebrales Tyrmeanos, los salvajes Chnitt o los demoníacos Kkallakki, también conocidos como los devoradores de miedos. Los Descreados fueron gestados por una entidad artrópoda que fue inmediatamente asesinada por estos mientras que otros, como los empáticos Chr’Ylites, se mostraban predominantemente pacifistas. Ejemplo de estos últimos tenemos al miembro de los Saqueadores Estelares Sikorski.

De entre estas razas intergalácticas menos belicosas, podemos destacar a los Sligs de Ankara o los respetuosos científicos Flb’Dbi. Mientras que razas como los Vrellnexianos prosperarían mediante el comercio de esclavos intergaláctico, otras como los Sm’ggani o los Klklk se dedicarían completamente a la agricultura (aunque esto no les evitaría entrar en conflicto con Hulk a los últimos). De características bastante peculiares, los U’Sr’prianos que convirtieron a Ella en su diosa después de que esta limpiase su planeta, los Kt’kn a los que perteneciera el Sin Rostro o los itinerantes The Dance, son otras de las razas insectoides que abundan en el Universo Marvel.

El imperio Kree usaría los recursos genéticos de los insectos de la tierra para crear el Proyecto Perseguidor, cuyo objetivo era sintetizar guerreros implacables hibridados con ADN de cucaracha (¿Guiño a la literatura de Donald A. Wollheim?). Capaces de dar caza a cualquier objetivo que se les encomendara, fueron creados por el Cyber-Genetista Korath-Thak, quien mismo se convertiría en sujeto de pruebas de su propio experimento como segundo Perseguidor. Antes que él llegaría el Perseguidor original enviado para dar caza a la familia real Inhumana y, varios años más tarde, el actual miembro de los Vengadores Noh-Var, vástago de este proyecto en el que seguramente se inspiraría Morrison para otorgarle sus aptitudes naturales.

Mención aparte merecen las numerosas razas insectoides nativas del planeta Sakaar la mayoría de las cuales serían esclavizadas bajo el dominio de la estirpe del Rey Rojo viéndose abocados al borde de la extinción. Tras la destrucción de su planeta, parte de los supervivientes se trasladarían al planeta Tierra solo para ser desterrados a la prisión de la Zona Negativa. El miembro más conocido de estos probablemente sea Miek, antaño compañero de aventuras de Hulk, o sus diversos compañeros de colmena. Pero si por algo destacan los artrópodos de Sakaar es por su relación con los Insectivóridos del Micronauta Bug. Una de las numerosas razas del Microverso, fuertemente ligadas tanto a los insectoides de Sakaar como a los de la Zona Negativa, por este phylo parece haber conseguido superar las barreras entre dimensiones expandiéndose por todos los rincones deel multiverso.

Igualmente emparentados están los insectoides de la Dimensión Kosmos (fuente desde la que emanan las Partículas Pym) o la casta científica de los Timebreakers alojados en el panoptichron del Cristal de M’Kraan (centro de todas las realidades) son también idénticos a los anteriores, cabe hacerse la pregunta de hasta dónde está ligado este phylo con el dominio del tiempo y el espacio. Quizás sea necesario revisar el papel de Kang en este punto, pues, como futuro conquistador de Kosmos y piedra angular del multiverso, es la máxima autoridad en la materia y en más de una forma ha estado ligado e interesado en ellos. El tema va todavía más lejos si consideramos que los Guardianes del Tiempo, entidades primigéneas nacidas para velar por la integridad del tejido espacio-tiempo y más tarde sometidas por el propio Kang, son tremendamente parecidos a todos los citados. El «Tkl-tkl» se convertiría en su firma bucal caracterísca, y la voz compartida que extenderían por el universo.

No sin antes citar a Tenebrae, miembro de la Mergencia del Macroverso, aunque la relación más probable entre todos los elementos sea que la «alienígena» forma de los artropodos que nos rodean es especialmente propicia para crear criaturas de otros mundos, mirándolo desde ojos de la ficción cabe preguntarse si los secretos del universo no se ocultan más allá de los límites de las estrellas, sino en lo más profundo de la colonia de hormigas.



UN BIOQUÍMICO EN LA CORTE DE LA REINA COLMENA

De ser un entomólogo con una gran pasión por los insectos a disponer de las llaves de las dimensiones que conforman nuestra realidad hay un trecho enorme. Un día, Henry Pym es un bioquímico que, experimentando con las partículas que acaba de descubrir, queda atrapado en una colonia de hormigas convirtiéndose en el “primer” embajador humano entre los insectos. Años más tarde desarrolla un artefacto para comunicarse con ellos iniciando una cadena de descubrimientos que a ultima instancia ha terminado convirtiéndole en el nuevo Científico Supremo. Hay hechos puntuales que terminan determinando el camino que seguiremos durante el resto de nuestra vida, ¿cuánto peso tendría algo tan simple como el hobby por los insectos en su posterior trayectoria? Sea como fuere, lo que no cabe duda es que el germen de todo fueron los “insectos” y, como tales, forman parte en toda su dimensión de la mitología forjada a partir del personaje.

Sin haber tenido mucho más desarrollo aparte de para comandar legiones de diminutos insectos (mucho cambiaría si Pym apareciera al frente de la Ola Aniquiladora o las bestias del Nido gracias al dichoso aparatito) el casco del Hombre Hormiga ha sido sucesivamente utilizado por Henry Pym primero y sus sucesores en dicho rol (Scott Lang y Eric O’Grady básicamente) después. Recientemente empleado de forma más o menos regular por Amadeus Cho durante su etapa en los Poderosos Vengadores, es uno de los artefáctos más icónicos de la Marvel primigénea aunque demasiadas veces se le haya dejado en segundo plano frente a elementos como el Mjolnir o la armadura de Iron Man.

Detonantes del hallazgo de Pym, responsables de que cruzara su camino con Janet Van Dyme tras matar a su padre o de abrir un portal entre mundos usando a Atlas como vía de entrada, entre insectos terrícolas, kosmosianos y otras variantes han tenido un fuerte peso sobre el devenir de los personajes y la forja de su mitología.

Pero a pesar de que Pym tiene el conocimiento, hay que buscar en otra dirección para encontrar a la verdaderamente bendecida por las fuerzas de la Colmena-Mundo de la Tierra. Nos referimos a la (ex)esposísima Janet Van Dyme más conocida como La Avispa. A pesar de que seguramente pocas cosas debían interesarle menos a la casquivana hija del Doctor Vernon Van Dyme que los insectos y las partículas subatómicas, cuando esta le pidiera a Pym que usara su descubrimiento sobre ella para llevar al asesino de su padre ante la justicia, las habilidades de Janet sobrepasarían a las de su futuro esposo gracias a sendas alas insectoides en su espalda que le permitían volar por su propia cuenta.

Como la Avispa, no solo probaría mayor estabilidad que Pym liderando a los Vengadores durante una larga etapa, si no que, tras ser expuesta por segunda vez, su cuerpo evolucionaría a una segunda fase mitad humana mitad insecto. Se puede criticar la idea de Ben Raab cuanto se quiera, pero este hecho reafirma todavía más la teoría de la relación entre la distorsión dimensional de las partículas Pym y el Filo Arthropoda.



ARTRÓPODOS DEL PLANETA TIERRA

Antes de continuar con la pareja de aventureros es imperante que precisemos las características fundamentales de la población Arthropoda de nuestro planeta.

Llegados desde las estrellas embarcados en el interior de una roca muerta que colisionó contra la Tierra, los primeros artrópodos de la Tierra compartían un origen común con los eslizoides de El Nido y los Insectivóridos diseminados a través de diversas dimensiones. Alimentándose de todas las formas de vida que fueron apareciendo sobre el planeta, llegaron a desarrollar la Mundo Colmena, una consciencia colectiva conectando a su filo como un único organismo similar a la Uni-Mente Eterna. Considerándose a si mismos la “especie” dominante sobre la Tierra, su influencia sobre el mismo era tan constante como sutil congregando en sus estirpes el poder y conocimiento acumulado durante centenares de millones de años. Especies como los Psyklops alcanzarían un enorme grado de evolución rindiendo culto a los Dioses Oscuros hasta ser finalmente sustituidos por formas más primarias.

Sus problemas llegarían con con el nacimiento de la criatura a la que denominan “comida-hombre” la cual, en su ascenso, pondría en peligro el equilibrio que habían mantenido durante eones cortando los lazos sagrados de la Mente Colmena. Extendidos por todo el planeta Tierra, continúan operando desde las sombras manteniendo nuestro mundo en orden a salvo de amenazas externas e internas mientras el grueso de su población se oculta en las zonas más recónditas de nuestro mundo.

A pesar de que los artrópodos con los que convivimos día a día son de tamaño reducido, han sido vistas criaturas insectoides que van desde el tamaño de un utilitario hasta el de un bloque de pisos. Aunque suelen actuar como colectivos, por facciones o clanes familiares, algunos de ellos han alcanzado la individualidad como sucedería con uno de los más jurados enemigos de Hank Pym, el Escarabajo Escarlata. Similares son los casos de las hormigas gigantescas Grottu, Krang y Thok, las cuales se han enfrentado a la humanidad en diferentes momentos de su historia. Ninguno de ellos alcanzaría el poder de Tordenkakerlakk, la indestructible criatura mágica con forma de cucaracha que azotaría la dimensión Cloudsea, mundo mágico en el que eran comunes los insectos gigantescos.

La relación hombre/artrópodo es un proceso dubitativo fraguado mediante aquellos que desarrollarían cierta sensibilidad para comunicarse con la Colmena Mundo. Como resultado de la accidentada Operación Encrucijadas, Adriana Soria se obtendría el poder para controlar física y mentalmente tanto artrópodos como a humanos ligados a ellos. Así se convertiría en la Reina, quien atormentaría a Spider-Man durante su andadura totémica. Obsesionado con los insectos, el Entomólogo desarrollaría un sistema para comunicarse con ellos. Reclutado por el Mundo Colmena, se sacrificaría para poner fin a los vástagos de Sin-Nombre del Nido y Miek que ponían en peligro a los artrópodos de la tierra. No menos obcecado con ellos, el entomólogo ”Odd” John Judson desarrollaría un fluido capaz de convertir a los insectos en monstruosidades gigantes. El entomólogo August Hopper supo ver el poder que albergaban los artrópodos y decidió ponerse de su parte asumiendo la identidad de la Langosta tras desarrollar el Magno-Rayo (¿Nueva forma de aplicación de las partículas Pym?). Menos perversas eran las intenciones de la mutante Ana Levy, quien simplemente podía comunicarse con ellos (hasta el punto de ser el único alimento que su cuerpo era capaz de procesar) hasta perder sus poderes. Personajes como Libélula de los Ani Hombres, La Mosca Humana, Escorpión (Gargan) o la mutante Ángel Salvatore y sus hijos también parecen ligados a la Colmena Mundo de una forma u otra.



LA CONSPIRACIÓN DE LAS CUCARACHAS

Entre los insectos más recurrentes en la ficción, destacan sin duda las cucarachas, quienes, a lo largo de la historia del Universo Marvel han sido protagonistas de una serie de historias y clichés que han hecho que los compañeros de Marvel Appendix concibieran la teoría de la Conspiración de las Cucarachas (los que os manejéis con el inglés echadle un ojo, que tiene su gracia).

Uno de los principales sucesos que respaldan esta teoría es la destrucción del primer Helitransporte a manos de un enjambre de cucarachas mutadas por los experimentos nucleares de los años 40. Adquiriendo la habilidad de controlar cuerpos humanos accediendo por sus orificios mientras los consumían, apunto estuvieron de provocar un holocausto nuclear de no ser porque Hulka consiguió detenerlas. Sacrificando su habilidad para revertir a Jennifer Walters para ello, Hulka no era consciente de que, de vuelta a su casa, era acechada por algunas de estas criaturas.

En el número 22 de Mystery Tales (allá por los 50), un exterminador creaba un nuevo insecticida que, accidentalmente provocó que una cucaracha creciera hasta el tamaño de un elefante. Lejos de estar agradecida, el insecto lo mató en su huida (¿precedente de las partículas Pym? ¿De nuevo relacionadas con insectos? Si no, bien podría serlo del Sulfato Atómico). Un par de años antes, un grupo de cucarachas gigantes planeaban destruir a la humanidad empezando por aquellos especializados en eliminarlas. Antes, mutarían al joven Bill Stiles para que se uniera a su causa. Después de descubrir sus habilidades psíquica para comunicarse con ellas, Marcia Kenwell enviaría a las miríadas de cucarachas de su bloque a devorar a sus vecinos. Tras revelarle su amor hacia ella, Marcia les correspondería pidiéndoles a las cucarachas que se unieran a ella. Súbitamente asaltada por todas las cucarachas de Nueva York, apenas tuvo tiempo de gritar antes de verse ahogada en un mar de insectos.

Cuando el Padre Darklyte y su culto fueron exterminados por Hellstrom, la linterna de almas que les daba sus poder quedó destruida revelando en su interior un enjambre de cucarachas que escaparon de la escena. Enemigo de la Antorcha Humana y Spider-Man, en su último enfrentamiento contra estos, el líder de los Vanguardistas conocido como Pintor, explotaría dejando en su lugar un lienzo y un enorme manto de cucarachas. Cabe destacar igualmente que en el futuro de Hulk: El Fin, los únicos supervivientes de la tierra eran Banner y nubes de cucarachas sin fin. Más aún, durante recientemente finalizado Cable de Swierczynski nos encontrábamos con un futuro en el que el gobierno americano había sido usurpado por híbridos humano-cucarachas.

¿Lo más inquietante de todo? Que en 2004 la miniserie protagonizada por el Hombre Hormiga que Daniel Way y Clayton Crain tenían previsto publicar en el sello MAX (de la cual fueron mostradas cuatro portadas y varias páginas interiores) fue misteriosamente cancelada. ¿El argumento previsto? El descubrimiento de una conspiración internacional que implicaba a cucarachas controladas mentalmente. De entre los personajes ligados a esta aviesa amenaza oculta bajo nuestra sociedad, cabe destacar al Heredero del Más Allá (cucaracha evolucionada por el Alto idem), el morlock Litterbug creado por Geoff Johns y Shawn Martinbrough o la temible La Cucaracha, quien se convertiría en feroz enemiga de Howard el Pato después de hacerse accidentalmente con la Llave Cósmica.



ANIMISMO, MAGIA Y LEGADOS TOTÉMICOS

Aparte de la unión de su colectivo bajo la autoridad de la Colmena Mundo, el inabarcable y antiquísimo fondo biológico de la población artrópoda ha dado como resultado la creación de entidades metafísicas cuyo culto se ha expandido hasta los humanos. Caso especial es el de La Tejedora, diosa araña cuya red mantiene el orden natural de todas las cosas y que en África daría como fruto al dios Anansi. Reverenciada por todo el mundo, desde las selvas boscosas de latinoamerica hasta lo más profundo de África o toda la parte sur de Asia, su culto sería adoptado por un grupo de cruzados castellanos durante su peregrinaje a la Tierra Santa. Así se formaría la Sociedad de la Araña, liga que, desde las sombras ha estado velando por la paz de nuestro mundo desde el siglo XI. Posteriormente reconvertida en WebCorps, esta organización monopolizaría los servicios de los principales elegidos de la Tejedora en su propio beneficio.

A pesar de contar efectivos por todo el mundo, su “red” de ungidos esta presidida por la figura del Cazador y su Mago. Como campeón de su especie, el Cazador mantiene unida la red mientras que el Mago se encomienda en velar por él con su conocimiento. La lista sucesoria de Cazadores se pierde más allá del tiempo estando entre sus más recientes relaciones Mago/Cazador las desarrolladas entre Miguel Legar junto a Ezekiel o, posteriormente, el mismo Legar con Anya Corazón. Sin embargo, La Sociedad fue cayendo en la autoindulgencia y la falta de reacción perdiendo progresivamente los favores de la Tejedora durante los 22 años enlos que la organización fue dirigida por Ezekiel. Fuera de su cerco han aparecido los más importantes Cazadores y Magos de las últimas décadas. Entre ellos destacan Spider-Man y sus sucesores en el caso de los primeros y Madame Web o Arachné entre los segundos.

Esto nos conduce directamente a la facción de la Sociedad que, aún en el medievo, se desvinculara de esta para desarrollar sus propios métodos. Bajo el nombre de la Hermandad de la Avispa, mantienen una guerra interminable con la Sociedad de la Araña siendo presuntamente sus métodos más extremos y violentos que los de sus predecesores. Poco se sabe de esta misteriosa organización salvo que, en lugar de a la Tejedora, consagran sus oraciones a la Gran Colmena (¿Posible nombre cultista de la Colmena Mundo?). Con un organigrama parecido al de la su contrapartida, igualmente disponen de Mago y Cazador junto al servicio de los leales Zánganos. Depredadores místicos como la letal Shattra parecen fuertemente ligados a ellos (son bastante comunes los rituales para invocar a estas criaturas) mientras sigue sin estar claro si gente como el criminal nazi Enjambre está de alguna forma ligado a ellos.

La cuestión que nos ocupa es que en la relación Hombre Hormiga+Avispa encontramos un disposición clásica Mago/Cazador similar a la que pudiera verse entre Madam Web y Spider-Man. Él tiene el conocimiento, ella la fuerza. La senda recorrida por Hank Pym y Janet Van Dyme parece “empedrada” por una sucesión de hechos fortuitos que los han dirigido hasta la construcción de su legado y bien pudiera ser que, en comunión entre ambos, contasen con una sensibilidad muy específica para determinadas fuerzas de nuestro mundo. Siendo su esencia más científica que esotérica, este camino del misticismo totémico no acabaría de encajar del todo bien con la esencia de su mitología. Pero como reza el dicho, una ciencia suficientemente avanzada es indistinguible de la magia. Esta claro que su legado está fuertemente ligado al Mundo Colmena de la Tierra y sus diferentes prolongaciones a través del universo y las dimensiones colindantes, todo es cuestión de dar con la tecla adecuada para hilarlo.

Mención especial merecen los faerie, criaturas mitológicas que habitan en Avalon bajo el mandato de su rey Oberón. Sin haber tenido excesiva proliferación, si que a menudo se ha usado su imagen de féminas diminutas con alas de insecto ligada a la de la Avispa (de forma prácticamente idéntica). Aunque su posible parentesco no parece más la confluencia de temas muy dispares, cabe destacar que el aspecto de la X-Men Hada (mitad mutante mitad faerie) al perder una segunda esquirla de su humanidad era muy similar al de la Avispa en su forma mutada. ¿Habrá relación entre esta raza y los atrópodos Endopterygota? Quien sabe, pues bien podría ser la mutación de la muchacha la causa de este aspecto. Pero este está ahí y no deja de ser curioso que gente de tamaño minúsculo (!) desarrolle alas de insecto (!!) en su espalda. Entre los componentes de esta raza destacan Tink, Gwynn o el ya citado Oberón. La hechicera Morgana LeFay por su parte era mitad faerie mitad humana al igual que lo es la pupila de los X-Men Hada (cambiando lo de humana por mutante).



Y con esto terminamos nuestro repaso al impacto del phylo sobre la historia del Universo Marvel dejando la gran pregunta de cómo ha llegado unos simples insectos a expandirse desde los bordes más lejanos hasta el núcleo más lejano de la creación. La semana que viene continuaremos con otro de los grandes legados de Pym: Ultrón, la forja del nuevo hombre.

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alienigena
alienigena
Lector
2 octubre, 2010 12:09

Mi más sincera enhorabuena por el artículo. Reportajes como esten diferencian a Zona Negativa de cualquier otra página de comics en internet.
 

sergioaph
sergioaph
Lector
2 octubre, 2010 15:10

Pobre de mí, ver la imagen de la Avispa «mutante» me ha dado ganas de volver a leerme La Encrucijada. Seré masoca?

Ziggy
Lector
2 octubre, 2010 20:48

Vaya extenso analisis Daniel. Felicitaciones. Te deberian contratar como guionista (o al menos consultor) para la próxima continuacion de tierra X.

PEDRO ANGOSTO
2 octubre, 2010 21:08

¡Pero qué curre tienen tus artículos, Daniel! ¿Cómo se te ocurrió realizar un artículo como este, con todos los insectoides del universo Marvel?

PEDRO ANGOSTO
2 octubre, 2010 21:11

Ah, pero se te ha escapado un detalle importante:
Bicho, de los Micronautas, forma parte de la misma raza de Kosmos, los constructores de los Growing Men de Kang.
Es algo que estableció Busiek cuando los Thunderbolts viajaron allí. Fíjate que hablan igual con el -Tkl-tkl- repetido.
 
 

Mith
2 octubre, 2010 23:19

Muy buen artículo Daniel, felicidades!

Ocioso
Ocioso
Lector
3 octubre, 2010 0:10

PEDRO ANGOSTO ha comentado: ¿Cómo se te ocurrió realizar un artículo como este, con todos los insectoides del universo Marvel?
Creo que Daniel necesita echarse novia.
O novio.
O ambos.

Ocioso
Ocioso
Lector
4 octubre, 2010 23:36

Daniel Gavilán ha comentado: Pd: “Mrs Ocioso, ¿está usted intentando provocarme?”
Uy, no había visto este mensaje.
Pues la verdad, no creo que a mi señora le hiciese mucha gracia que me echara novio. O vete tú a saber, que a veces razona raro.
En cualquier caso es un momento tan bueno como cualquier otro para piropear tu trabajo, porque entre los artículos sobre bichos y los de X-Force te estás haciendo con el control de ZN. ¿Teneis costumbre de hacer primarias, o algo?