La sociedad es un desastre, los secretos condicionan el progreso de la humanidad. Las organizaciones ocultas que trafican con secretos no tienen cabida. Este es el sentir de Leviatán y está dispuesto a lo necesario para cambiar el mundo. La premisa es muy buena, si a esto le añades un grupo de detectives del universo DC de lo más dispar y el innegable interés que provoca ver a Batman escrito por Brian Michael Bendis, este Incidente Leviatán se encuentra entre los cómics más buscados, al menos su primer número, mínimo se te antoja picar a ver qué tal. En la redacción DC de Zona Negativa hay disparidad de opiniones respecto a la miniserie, esta reseña será crítica con la obra pero tenéis este gran artículo de mis compañeros Víctor José Rodríguez, Jordi Molinari y Pablo Menéndez con motivo de su finalización en USA, con una valoración más positiva y también este reciente podcast con motivo del confinamiento. El primer evento (miniserie) de Bendis en DC ha tenido una gran cobertura en ZN.
El motivo por el cual se ha podido reseñar esta obra se debe a la iniciativa de ECC “Gracias por quedarte en casa” en la que de forma gratuita, permite leer gran parte de las novedades programadas para marzo y abril en su web. Una iniciativa que es de agradecer y que posibilita ir dando pasos hacia la normalidad en estos tiempos convulsos en los que vivimos.
La historia comienza con Lois Lane y Batman encontrándose en una derruida base secreta. A.R.G.U.S, D.E.O, Spyral, Cadmus, Kobra, Fuerza Especial X, ya no existen, quienes han trabajado para ellos han desaparecido, ni rastro de los edificios ni de las personas, como si nunca hubieran existido. Steve Trevor se encuentra en el lugar, como único superviviente de la catástrofe, cuenta a Lois y a Batman lo ocurrido y les da una base sobre la que investigar. Sin embargo el desenlace de la situación con Steve disparando a la periodista no está bien justificado, menos aún que falle el tiro, raro para lo cerca que están el uno del otro, todavía más para un militar entrenado. Green Arrow salva la situación abatiendo al eterno interés amoroso de Wonder Woman con una flecha eléctrica, en una entrada en escena a la altura del arquero. The Question también está en las ruinas de la Odisea, lo que era el recién inaugurado nuevo centro de A.R.G.U.S, investigando en las sombras.
En el segundo número Sam Lane, el “superespía” (así lo llama Bendis) sufre un atentado para acabar con su vida mientras se recupera en el hospital, Question está allí para frustrarlo. Batman habla sobre el caso con Capucha Roja. Plastic Man tiene un encuentro con Leviatán. El diálogo entre héroe y villano despierta el interés, dando buenas pistas sobre la identidad del enemigo, además de ser el “elástico” el personaje que mejor escribe el autor. Se revela que Jason es sospechoso de ser Leviatán. El aparente motivo que tienen los detectives para pensar esto, es absurdo pero siempre está bien que a uno de los guionistas estrellas de la compañía le gusten los mismos personajes que a ti. Capucha Roja está en la historia porque es un personaje que atrae a Bendis así que no me voy a quejar.
El tercer número narra cómo Jason escapa de los héroes mediante un incremento de poder, no han sido pocas las veces que le he visto sucumbir solo ante Damian y aquí escapa airoso y tranquilamente de todo el grupo. Definitivamente a Bendis le gusta Jason. Se narra su escape, con los héroes en la fortaleza de la soledad y es que esto es una constante en la serie, todo ya ha pasado. En el caso de la investigación se verbaliza, aquí al menos nos enseñan escenas de lucha para lucimiento de Maleev pero cada capítulo empieza con la situación que proponen las últimas páginas del número anterior, superadas, para después contar lo vivido. Esta dinámica se hace extensible hasta el último número.
Hasta aquí el repaso por tebeo, tan solo pretendía ser una muestra de cómo Bendis ataja la historia. Mostrando como la investigación real brilla por su ausencia, incluso la conclusión sobre la identidad de Leviatán parece dada (innegablemente) por el villano. Todo son deducciones que no se sabe de dónde vienen, que Bendis no te ha mostrado y que llevan a resoluciones que están lejos de ser tales, pues para ser los mejores detectives no son pocos los palos de ciego que dan. Solo en el último número se asiste a un pequeño proceso deductivo en el “Batanque” que es interrumpido por la anterior líder de Leviatán, ayudando de forma inequívoca a la resolución del misterio. Misterio que a esas alturas Superman ya tenía resuelto. Y sin estar en el grupo de detectives, digamos que es un afiliado a tiempo parcial.
Pero no será este el único grupo de detectives, si el primer grupo ya es extraño como formación (Batman, Robin, Plastic Man, The Question, Manhunter, Green Arrow, Lois Lane), el segundo no se queda atrás (Hombre Elástico, Deathstroke, Constantine, Zatanna, Harvey Bullock y la otra Question). Quien se encarga de formar este segundo grupo será Lois, detectives que no darán una buena noticia a la reportera y cuyo viaje desembocará en tragedia.
La identidad de Leviatán no decepciona en el sentido de que es alguien del cual puedes creer su evolución hacia su cometido y motivación respecto al mundo que pretende instaurar. Si conoces al personaje ahora con esta serie e investigas sobre él, verás que es perfectamente plausible su papel como Leviatán. También tiene el suficiente poso como para que se sienta bien hilado y no es lo suficientemente querido como para que moleste su conversión a villano. Ya no digo más sobre su identidad, ya os he dado alguna pista, aunque ni para los más eruditos es alguien que esté presente, así la revelación para muchos (entre los que me incluyo) carecerá del impacto que podría haber provocado.
Un cómic con muchísimo potencial que no termina de explorar al pasarse por alto lo más interesante (y lo más complicado de escribir) de un misterio, el cómo se resuelve; las pistas que se descubren a lo largo de la obra y que ayudan, tanto a los investigadores como a los lectores, a adivinar la incógnita. Solo he sentido algo de esto en el encuentro entre Plastic Man y Leviatán y con el mencionado momento al que asistimos en el último número dentro del vehículo. Aquí la respuesta te viene dada, porque en ningún momento te ha llevado por un camino verosímil para que pudieras acertarlo, como mucho intuirlo pero será por tu gran capacidad intelectual o un pálpito, de esos que dan muy de vez en cuando (nunca cuando compras lotería) que convierte percepciones en certezas que llegado el momento se manifiestan como ciertas, porque el autor no se ha preocupado de hacer una trama complicada pero coherente para desvelar su secreto a la vez que lo dota de interés.
Sobre Bendis escribiendo al murciélago se nota que lo quiere y que le gusta pero se deja detallitos que personalmente no me terminan de encajar. La Batcueva como centro neurálgico con lo paranoico que es Batman, el no tener inconveniente en llevar a su grupo de detectives o incluso al otro grupo investigador con, por ejemplo Deathstroke entre sus filas, son cosas que no casan con el personaje. No es gracioso pero parece tolerar con agrado las bromas. Un Batman alejado del atormentado justiciero es lo que parece darnos el escritor de Daredevil, en estas breves pinceladas con el caballero oscuro. Habrá que ver que nos ofrece cuando se haga con el personaje en su serie principal, algo que tarde o temprano tiene que pasar.
El dibujo es soberbio. Alex Maleev y su estilo dotan a la obra de personalidad propia, su entintado le viene muy bien al tono noir que quiere instaurar el guion. Con una composición de página atrevida y variada narra bien tanto los diálogos como la acción. Sin el arte del artista la obra carecería de gran parte de su magia. Especialmente bueno su Green Arrow o su color, de tonos oscuros para la investigación y brillantes y luminosos para los artificios tecnológicos de Leviatán que además plasma con meritoria imaginación.
Un cómic con aciertos que tiene su atractivo en la premisa y el grupo de detectives pero que no termina de aprovechar las situaciones que se podrían haber dado de la destrucción de las principales agencias de espionaje del mundo DC y que no trata bien lo que parece pretender ser su gran valor, la investigación. El dibujo de Maleev bien vale su compra.
¿Detectivesco?
Guion - 6
Dibujo - 8.5
Interés - 8.5
7.7
Brian Michael Bendis juega con los detectives del universo DC en una miniserie entretenida pero con un guion que sabe a poco. Como siempre gran trabajo de Alex Maleev.
Lo de Leviathan molaba como algo así centrado en Superman y su contexto más cercano… Una vez empiezas a hacerlo un minievento crossover perdió parte de su gracia, aunque es evidente que el tema solo está en su ecuador y falta por ver cómo se desarrolla el tema. De momento aprobado ráspado, un seis si ponemos en valor el dibujo. Espero, eso sí, que al final se quede todo claro para una buena generación el tema de las agencias. Cada vez que mencionan alguna en un cómic tengo que tirar de Google. En el arrowverso tienes ahí a ARGUS para líos metahumanos, al DEO para líos alienígenas y a la Oficina del Tiempo para sus rollos temporales. Algo más elaborado pero al mismo tiempo simple para los cómics me gustaría. Vamos, en la vida real sabes que el FBI se encarga de temas de seguridad interior y la CIA de amenazas exteriores.
Pues a mí me parece una serie espectacular, tiene ritmo y diálogos de siempre de Bendis y Batman es un soplo de aire fresco, a lo mejor no es tan callado como es normalmente pero me parece bien. Lo de Leviatán pues no tenía ni idea de quien era pero bueno la serie la he disfrutado ,para los que siguieran al personaje habrá sido una bomba ajajajaj
Es cierto que el interés se mantiene, pero es que este «evento» lo único que ocurrió fue desvelar la identidad de Leviathan, no se ha resuelto ningún misterio ni ha pasado nada. Ojalá Bendis pueda cerrar con naturalidad todas sus tramas.