Como se ha visto en esta entrada, ya han salido los nominados a los premios Eisner y, aunque el confinamiento lo hará todo algo diferente, tenemos un puñadito de obras pertenecientes al mercado independiente norteamericano que han llamado la atención del jurado. ¿Han acertado con sus nominaciones?, ser jurado no es fácil, más todavía dentro del mundo del arte, así que dejemos eso un poco en la mente de cada uno o en los comentarios que podéis poner más abajo (personalmente me ha parecido más bajo que otros años). De hecho ha pasado algo curioso, dos nominados en esta categoría, Kieron Gillen y Scott Snyder, se quejaban por Twitter que no estuviera nominada aquí mismo Costas Salvajes (cuya reseña podéis leer aquí). Cosas que pasan.
El tema es que, aprovechando esas nominaciones, vamos a meternos un poco en las series que destacan como mejores en varias categorías, realizando una serie de entradas que veréis en los próximos días. La primera, la de hoy, se corresponde con las nominadas a mejor serie nueva. ¿Cuáles son?, ¿qué nos cuentan? y ¿qué tal están?.
ONCE & FUTURE de Kieron Gillen y Dan Mora
Once & future es una que ya había llamado la atención antes de salir dada la calidad general de su escritor Kieron Gillen, parece que 2019 ha sido un buen año para BOOM! Studios a nivel cualitativo, de hecho logran meter varias series en esos premios Eisner 2020, con guionistas conocidos como Matt Kindt o Brian Azzarello, pero también en ventas, con más unidades vendidas que Dark Horse y posicionándose en quinto puesto. Además su reciente trato con Netflix parece que puede impulsar más a la editorial independiente. Concretamente esta Once & Future fue uno de sus cómics más vendidos el pasado año y estuvo en sus meses de estreno dentro del top 100 de ventas. Y es que parece que Kieron Gillen ya ha conseguido el favor del público, no es para menos, en su historial tiene Phonogram, The Wicked + The Divine o el segundo volumen de Jóvenes Vengadores, tres obras maestras de la actualidad. Por aquí ya hemos hablado mucho de este magnífico escritor y tenemos todo dicho, parece que él no y quiere seguir rompiendo un poco los esquemas a los diferentes mitos o iconos, porque eso es básicamente Once & Future, una vuelta de tuerca a la famosísima leyenda del Rey Arturo.
En general la serie tira bastante de tópicos, en ese aspecto se aleja de las más relevantes obras del autor, ya que nos pone en la piel de un hombre que no sabe que su familia se dedica a cazar monstruos, averiguándolo cuando su abuela se ve forzada a volver a la acción. Esta parte es una aventura sencilla con acción y toques de humor, lo bueno de la serie es cómo retuerce los tan admirados mitos artúricos, donde el rey resulta ser el gran villano a batir. Los autores juegan con las historias fantásticas clásicas de Gran Bretaña para dar algo de cuenta de la realidad actual de las islas, ya comienzan utilizando la figura de Arturo para realizar una crítica al nacionalismo, al racismo o a la xenofobia , y lo hacen de manera ligera pero que recuerda en parte a grandes obras como Sandman o The Unwritten, dando gran importancia al lenguaje y a la interpretación de las mismas. Uno de los puntos fuertes es el dibujo de Dan Mora, al que conocemos bien del Klaus de Grant Morrison, que hace un trabajo muy bueno, bien definido, con una narrativa impecable y un tono clásico que da el punto justo que necesita la serie.
A día de hoy Once & Future lleva seis números publicados en Estados Unidos y ya sabemos que alguna editorial tiene comprados los derechos de publicación en nuestro país, así que seguramente no tardaremos en verla. ¿Es buena?, sin duda, ¿Recomendable?, por supuesto, pero quizás demasiados tópicos para mencionarla como la mejor del año.
SOMETHING IS KILLING THE CHILDREN de James Tynion IV y Werther Dell’Edera
Si decíamos que Once & Future fue uno de los éxitos de BOOM! Studios el pasado año, hay que añadir que solo hay dos colecciones que se posicionaran por encima de ella en ventas, una de ellas es esta (la otra y más vendida es un nuevo número uno de los Power Rangers).
Estamos ante otro caso de autor conocido ya que James Tynion IV fue una figura importante en DC, trabajando en Batman o La Liga de la Justicia entre otros, pero ya tuvo un buen puñado de series cortas dentro de BOOM! Studios, concretamente seis, y una larga, bastante recomendable por cierto, publicada en España por completo, titulada The Woods. En esta ocasión se une al dibujante Werther Dell’Edera, al que conocemos por su trabajo en Briggs Land, la serie de Brian Wood. Allí su dibujo no era gran cosa, por suerte el autor ha evolucionado considerablemente hacia un estilo diferente a lo habitual y con un toque oscuro que añade una atmósfera muy oportuna a la colección, sabiendo mantener la tensión en todo momento.
Lo que sí tuvo esta serie es que llamó mucho la atención nada más salir por sí misma, por su historia y sus buenas críticas, añadiendo que James Tynion IV ya se ha forjado una carrera a tener en cuenta, pero lo cierto es que con Something is killing the children se supera a sí mismo.
La historia nos lleva a un pueblo de Estados Unidos, comenzamos con un grupo de niños jugando a “verdad o reto” en casa de uno de ellos, momento que aprovechan para contar el momento más terrorífico que han vivido, para que nos entendamos es un estilo a Stranger Things, ambientado en el presente, pero el parecido acaba cuando hacemos un pequeño salto temporal de unos días para descubrir que han muerto todos menos uno. La historia de Something is killing the children no inventa la rueda, ni lo intenta, ya que pronto vemos al monstruo y entra en escena una misteriosa chica que se dedica a cazarlos, pero gana enteros por la atmósfera oscura y deprimente que rodea a la obra, por la desesperación que consigue transmitir y por sus personajes, muy bien trabajados y muy distintos entre ellos. Empezamos por el niño, James, superviviente que, lejos de ser acogido por su comunidad, es tratado como un paria, sospechoso de asesinato de sus compañeros aunque la policía lo descarta y al que solo cuida un director de colegio joven e inexperto pero con mucho corazón. Seguimos por familiares de los niños fallecidos, que quieren venganza, y por los inspectores de policía, que no solo quieren resolver ese crimen sino que tienen pendientes un buen puñado de desapariciones en los últimos meses. Pero la palma se la lleva Erica Slaughter, una cazadora de monstruos muy joven, pero con mucha experiencia, y su peluche Octo con el que habla.
Something is killing the children es una serie que tiene acción pero no es de acción, no hay ni una pizca de humor, prima el terror, los asesinatos y las relaciones que se van construyendo entre los personajes. A día de hoy han salido seis números y son todos absolutamente recomendables. Veremos cómo evoluciona, pero se merece estar aquí sin lugar a dudas.
UNDISCOVERED COUNTRY de Scott Snyder, Charles Soule, Giuseppe Camuncoli y Daniele Orlandini
Aunque si hablamos del bombazo del año, del número uno que más ventas a alcanzado, como serie nueva, desde el mercado independiente, llegando a entrar en el top 10, hay que hablar de Undiscovered Country. Tampoco es de extrañar teniendo en cuenta la fama de sus guionistas, está claro que Image dio en el clavo justo en el mismo año que terminaba una de sus obras más importantes, The Walking Dead. ¿Será su sustituta Undiscovered Country?, pues siento decir que la respuesta es un rotundo no. No es una mala serie pero está muy por debajo de la gran obra de Robert Kirkman.
Al volante tenemos ni más ni menos que la unión de dos escritores que han dado alguna alegría dentro de las dos grandes. Por un lado está Scott Snyder, conocido guionista de Batman, entre otros héroes de DC, que ha realizado trabajos para el mercado independiente como la recientemente publicada en España Wytches. Por otro está Charles Soule, autor que relanzó a los Inhumanos, guionista de Daredevil y del que podemos destacar su Carta 44 en Oni Press, que sacó Norma hace unos años en España. El dibujo es de Giuseppe Camuncoli, que pasó por Spiderman, Hellblazer o Darth Vader, que realiza un trabajo muy interesante sobretodo en lo que a diseño de personajes extraños, al estilo Mad Max, se refiere. Con entintado de Daniele Orlandini, con quien ya había trabajado, y color del premiado Matt Wilson, entre cuyas obras se encuentran Paper Girls o The Wicked + The Divine. Con todo esto estamos seguros que ya estará licenciada para ser publicada en nuestro país.
Los autores nos llevan a un futuro no muy lejano donde Estados Unidos ha construido una barrera impenetrable a su alrededor, de manera que hace treinta años que nadie sabe de ellos. Ahora el mundo los necesita, están afrontando una terrible pandemia que, junto al cambio climático y la superpoblación, da como resultado que a los humanos del planeta les quede poco para desaparecer. En el país de la tarta de manzana parece estar la gran solución a todos los problemas así que, tras recibir una invitación, un grupo variopinto se disponen a explorar y buscar respuestas. Se trata de una serie muy estadounidense, lo importante es lo que ocurre allí y la solución parece que vendrá del país, es cierto que se alejan de utopías, de hecho Estados Unidos está en una extraña situación postapocalíptica, y si bien sus protagonistas son de diversas partes del mundo, los fundamentales son dos hermanos cuyos padres los sacaron de allí antes del aislamiento. Además parece que lo que los autores quieren ofrecer es un paseo por algunas partes de la historia del país, hitos y logros, pero está todo muy en el aire ya que la información se da con cuentagotas y los primeros números solo cuentan la llegada del grupo así como su encuentro con ese páramo destruido y controlado por crueles asesinos. Es una serie extraña, imaginativa en su planteamiento, con muchas rarezas (como que los protagonistas tienen que hacer un viaje en espiral por el país para llegar a su meta), pero me ha dejado bastante indiferente más por sus diálogos y sus personajes que por la trama en sí. Lo curioso de esta nominación es que en 2019 solo había dos números a la venta, a día de hoy cinco.
INVISIBLE KINGDOM de G. Willow Wilson y Christian Ward
Representando a Dark Horse tenemos Invisible Kingdom, concretamente dentro del sello Berger Books comandado por Karen Berger, la famosa editora de Vertigo en DC, a la que le debemos la publicación de algunas de las mejores obras de la historia del cómic y que parece que sigue haciendo un buen trabajo seleccionando material ahora en la editorial del caballo negro.
También seguimos con autores a los que ya conocemos. G. Willow Wilson es una escritora que ha desarrollado gran parte de su carrera en Marvel y DC, de hecho esta es la quinta vez que algo suyo ha sido nominado a estos premios, la primera de hecho en esta misma categoría con Air para Vertigo. A ella le debemos, junto con otros, la existencia de la nueva Ms Marvel así como una colección de esta, digna de los mejores elogios. Por otro lado tenemos a Christian Ward al dibujo, un autor que se sale de lo habitual por su aplicación del color sobre su propio dibujo, es algo minimalista y sin embargo demuestra una narrativa capaz de contar una pelea entre naves espaciales, porque sí, de eso hay algo aquí. En España se ha publicado su serie de Rayo Negro para Marvel.
En Invisible Kingdom nos llevan a un universo futuro, con seres bípedos pero de distintas especies y con sus peculiaridades, eso sí, sin rastro de humanos. Es una historia de ciencia-ficción centrada en principio en dos mujeres, una es Grix, piloto y comandante de una pequeña nave de carga, con su tripulación en la que se incluye su hermano pequeño del que se hace cargo. Todos ellos trabajan para Lux una de las grandes corporaciones que ostentan el poder del universo, pero, tras un aterrizaje forzoso descubrirán algo que les hará dudar aun más de ellos. La otra mujer es Vess, una chica joven que decide tomar un camino espiritual y unirse a Siblings of severity, una enorme congregación religiosa que se posiciona en contra de las grandes corporaciones, instruyendo a sus adeptos en el poder del trabajo y el esfuerzo propio como forma de trascender hacia el reino invisible (Invisible Kingdom). A Vess la nombran guardiana de la información y no tarda mucho en descubrir algo sucio dentro de la congregación. El primer arco es de presentación, al principio la obra es algo densa, hay muchos personajes aunque la acción se centra en ellas dos y el mundo es grande, eso hace que el primer número no sea una sorpresa sino que se trata de una serie que gana con su avance, al final del primer arco uno ya está dentro y a tope. Es bastante directa al tratar temas como el racismo o la corrupción, leyéndose así una critica a la sociedad actual sin miramientos, añadiendo ese toque de religiosidad como algo personal y pacífico que a G. Willow Wilson tanto le gusta. Actualmente hay ya diez números disponibles, dos arcos argumentales completos, y resulta una lectura muy recomendable.
LA OTRA SERIE: DOCTOR DOOM de Christopher Cantwell y Salvador Larroca
Ya que solo hay una nominada más pues qué menos que mencionarla aunque no tenga que ver con el mercado independiente. Marvel cuela su nueva serie sobre el Doctor Muerte aquí, con uno de nuestros dibujantes más veteranos en Estados Unidos al frente, el gran Salvador Larroca, y una nueva adquisición de la casa de las ideas llamado Christopher Cantwell. Pero metamos el gancho indie en este punto porque Cantwell es un autor del que no nos cansaremos de recomendar sus series en Dark Horse, dentro del sello Berger Books, la primera ya publicada en España, Podía Volar, cuya reseña podéis leer aquí. La segunda Everything, muy reciente (ejem-y que quizás debería estar también en esta categoría o en la de limitadas-ejem).
VOTACIÓN PERSONAL
Esto es como todo, va por gustos, pero mi apuesta personal iría hacia
Así que Karen Berger terminó en Dark Horse…ayayay, la mejor editora de los últimos 40 años, gran signo de como entienden las cosas en DC hoy en día.
«No es una mala serie pero está muy por debajo de la gran obra de Robert Kirkman.» Comparar así una serie que lleva 5 números (bueno, salía hoy el 6) con una acabada de 193…Pobre Soule y Snyder jaja
Buah la verdad que de lo nominado solo leí el primer número de «Something is killing the children» y tenía buena pinta e «Invisible Kingdoms», porque cuando salió me sorprendió la portada y que no la hubiese pedido por previews, que también pintaba maneras. Del resto nada…cada día tengo menos tiempo de leer la actualidad en USA. A ver si leo todo los disponible de algunas para ver que se cuece. Tarde o temprano al menos va a caer la compra de la de Gillen y las 2 comentadas anteriormente lo más seguro.
Raro que no apareciese ninguna de Lemire, llevaba 3 años seguidos en esta categoría jaja
Jajaja, sí, la comparación es un poco rara, lo decía más que nada por las ventas y porque, sin ser mala serie, me decepcionó un poco.
Un saludo.
Pues no he leído ninguna todavía, yo voy leyendo cuando salen en España… A no ser que no salgan.
Me inquieta el término independiente teniendo a los primeros espadas tanto en guión como en dibujo… Este sería el término más acertado?
Sí, el término independiente no se refiere a la fama de los autores ni a las ventas, sino a si la editorial es una empresa independiente o si depende de otras que sean sus dueños, ya que esto puede marcar pautas dentro del proceso creativo que se exijan desde posiciones externas a la realización de la obra de arte. Digo obra de arte porque no se usa solo en el cómic sino en el arte en general.
Un saludo.
Cuidado Igor! Que vendremos los que criticamos la inclusión de Valiant en esa definición dentro de esta web…
🙂
Jajaja, claro! Es que no es indie y si te fijas en la web las noticias y novedades de Valiant las publicamos en una sección separada, que hago yo de manera irregular 😛
Querido Igor, tenemos diferentes formas de ver lo que es independiente y lo que no. Para mí independiente sería que por ejemplo tu y yo sacasemos un cómic por nuestros propios medios, sin una maquinaria de ventas de derechos a cine, TV, etc.
El término académico lingüístico sin duda llevas razón, pero moralmente, la independencia de la industria de image cómics no la veo.
El tema es que si una compañía da derechos sobre su obra a los autores pero sirve de trampolín a la venta de los mismos a otros medios que se mueven con muchas mejores ganancias para los autores no veo donde está la independencia.
No sé si me he explicado bien, aunque me dirás que es otro debate.
Buenas, no, a ver, lo que yo he puesto es la definición de editorial independiente, no es lo que yo opino. La palabra «independiente» dentro de las industrias creativas tiene ese uso desde mediados del siglo pasado y lo que viene a decir es que no hay nadie de otra empresa que les pueda obligar a tomar decisiones, como sí pasa en las industrias creativas dependientes.
Lo que tú dices es una influencia, evidentemente todas las empresas, dependientes o independientes, hacen estudios sobre la rentabilidad de los productos que implican ventas de derechos y muchas otras cosas (yo los he hecho, me dedico al sector cultural de manera profesional) pero eso no las hace depedientes sino que es un factor interno, la decisión final siempre la tiene la editorial y no terceras personas. Dentro de las editoriales independientes Image es la más independiente de todas por su estructura en pequeños estudios y su diversidad de editores, de hecho su forma se parece más a la de una cooperativa que a la de una empresa.
¿Qué hay una maquinaria? Sí, bueno en realidad son contactos con beneficio mutuo que solemos tener todos los que curramos en esto, no solo en editoriales, las diferentes industrias creativas se alimentan unas de otras, pero el tema es quién toma la decisión de formar parte de ello o no. Si eres independiente puedes afianzar o romper las relaciones a tu gusto.
Un saludo, siempre es agradable charlar de estas cosas.