El regreso del supergrupo mágico de Valiant
«Recuerdo a estas bestias»
Hoy toca volver a los mundos de Valiant con un tomo, publicado hace poco por Moztros, titulado El Libro de las Sombras, al que la editorial ha tenido a bien anteponer el nombre de Shadowman pues, aunque se trata de una miniserie grupal, en realidad es el final de la etapa de Cullen Bunn con dicho personaje.
Sobre la período del guionista estadounidense con Shadowman ya hablamos en su momento (podéis leer la reseña aquí) cuando Moztros publicó en un solo tomo toda la colección. Bunn tiene mucha tendencia a afincarse en el género de terror, lo cual le vino muy bien a este personaje y, dentro de la variada obra que él tiene, demostró algunas de sus mejores capacidades creativas. Así que era de esperar que El Libro de las Sombras fuera un cierre por todo lo alto.
En lo que se refiere al apartado gráfico, tuvo dos dibujantes muy buenos, Jon Davis-Hunt y Pedro Andreo. En este caso se acompaña de otro español, Vicente Cifuentes, al que hemos podido ver afincado en el género superheroico de DC (Injustice, Wonder Woman…). En este sentido tenemos un dibujo que le da un tono más superheroico que los anteriores artistas de Shadowman, potenciando la acción frente al terror, pero su trazo encaja muy bien con lo que Bunn cuenta, sabe manejarse en las escenas de lucha, de las que el tomo está plagado, con lo que a Eternal Warrior le va como un guante, pero no me acaba de encajar con otros personajes. Probablemente sea una cuestión de gusto, pero creo que el color de Nick Filardi no está muy bien escogido. Demasiado vivo para una historia que se debería haber tratado desde un punto mucho más oscuro. En todos los sentidos.
Partamos de la base de que El Libro de las Sombras es un cómic ágil y entretenido. No es un “mal cómic”, pero es demasiado básico, la acción no está bien desarrollada y la sensación que queda al final es la de haber leído una gran pelea “porque sí”.
Quienes sigan la historia de Valiant reconocerán el título, vinculado a un gran evento (por su calidad más que por su tamaño) que se publicó en España hace unos años. Hablo de Book of Death, una historia liderada por Robert Venditti que unía varios héroes pero que se centraba en Eternal Warrior, en forma de road movie y dejando un regusto sobresaliente. El Libro de las Sombras (Book of Shadows), por desgracia, no se acerca de ninguna manera a aquel magnífico tomo.
El Libro de las Sombras nos muestra a Shadowman y su reciente aliada, Perséfone, investigando una serie de muertes en diversos pueblos, lo que les lleva inmediatamente a luchar contra una horda de seres que parecen hombres-lobo. Sin previo aviso, a esa lucha se unen Punk Mambo, que ya aparecía en la anterior serie y que de hecho tiene una propia escrita también por Bunn, la Doctora Mirage y Eternal Warrior. Un grupo variado, con todos los ingredientes para molar pero que, seamos sinceros, no lo consigue.
La primera mitad del cómic es una pelea en la que se desvela quién es el malo, sin ninguna gracia. Quizás por ello ya lo pone en la contraportada del tomo. La segunda parte es otra pelea con una resolución que se ve venir a kilómetros.
Es entretenida, sí, pero poco más se puede decir de esta obra. Se centra mucho en Shadowman, aunque no hace avanzar al personaje. Sí que desarrolla algo más a Perséfone, de ahí su dependencia con el tomo previo, aunque la llena de tópicos, sin mucha reflexión o diálogo. La Doctora Mirage está ahí para solucionar las cosas, Punk Mambo para decir frases cortantes y Gilad consigue una espada. Eso y un villano sin chicha, ni mucha planificación, sirve para hacernos pasar un rato entretenido de encefalograma plano, muy alejado del tipo de minieventos que solía ofrecer Valiant.
Si algo me resultó sorprendente es su unión con el universo Valiant. Si normalmente solemos decir que un nuevo número uno de la editorial supone que cualquier lector se puede acercar, en El Libro de las Sombras no paramos de encontrar referencias a colecciones pasadas. Obviamente de forma principal a la de Shadowman, pero es una serie que depende mucho de haber leído las colecciones de Eternal Warrior y la Doctora Mirage. De hecho quien no las haya leído puede perderse hasta el punto de que toda la trama del villano y su solución vienen de aquellas colecciones. Ahí es donde se le puede sacar un poco de jugo, a la hora de ver una cierta continuidad, pero tampoco se explica ni se da importancia a las consecuencias. Una pena que lo que debía de haber sido el broche dorado a una etapa muy buena se haya quedado en un cómic entretenido pero meramente anecdótico.
Este cómic es de los que cierra la etapa de DMG dirigiendo Valiant, ahora hay que esperar a que los planes de Alien Books se materialicen, que empiezan este mismo mes, y a ver quién se ocupa de Shadowman y de estos personajes mágicos en un futuro.
Lo mejor
• Es una historia de acción entretenida.
Lo peor
• Es todo demasiado rápido, le falta desarrollo.
• Está lejos del nivel del anterior tomo de Shadowman.
Guión - 6
Dibujo - 6.5
Interés - 6.5
6.3
Funciona si buscas entretenimiento ligero, pero no como cierre de la gran historia que nos habían ofrecido en el anterior tomo de Shadowman.