El universo DC de Alan Moore

 

Edición original: DC Universe by Alan Moore
Edición nacional/ España: ECC Ediciones
Guión: Alan Moore
Dibujo: Bill Willingham, Brian Bolland, Dave Gibbons, George Pérez, Kevin O’Neill, Rick Veitch
Formato: Cartoné, 304 págs.
Precio: 25€

 

Uno de los mejores guionistas de la industria del cómic – sino el mejor – es Alan Moore (Northampton, 1953). Suyas son algunas de las mayores obras maestras de la industria del cómic, y es que con aportaciones como La cosa del pantano, Watchmen, V de Vendetta, Supreme o la línea ABC ha conseguido que de forma unánime aclamemos cada nuevo trabajo suyo que se anuncie.

Aunque al pensar en su obra rápidamente acudimos a esas grandes etapas que han marcado la industria, también es cierto que hay una serie de historias cortas en cuanto a extensión que atesoran una calidad a la altura de las anteriormente mencionadas. Historias como La broma asesina, ¿Qué le sucedió al hombre del mañana? o Para el hombre que lo tiene todo rápidamente vienen a nuestra memoria y para muchos incluso algunas de ellas superan a sus obras mayores.

Con el objetivo de en primer lugar poner en el pedestal que se merece a estas historias menores – repito que en cuanto a extensión – y por otro lado, darlas a conocer a los lectores DC Comics decidió reeditarlas en una edición de lujo recopilando buena parte de ellas en un volumen que a su vez ha sido editado por ECC Ediciones en España en tapa dura con sobrecubiertas con un precio de 25€ siendo uno de esos casos en los que la calidad que atesora en su interior bien vale lo que cuesta.

Para comprender la dimensión de estas historias hay que ubicarlas en su contexto histórico, todas las historias publicadas en este volumen aparecieron en Estados Unidos entre 1985 y 1987, es decir, en cuestión de dos años Alan Moore escribió algunas de las mayores obras maestras del mundo del cómic, cuesta de imaginar un escritor que hoy en día y en el transcurso de dos años cree obras tan sublimes como las anteriormente citadas, sino que además lo compaginó con su inconmensurable etapa en La cosa del pantano (1982 – 1985), su visión del mundo superheróico en Watchmen (1986 – 1987) o su visión del lado más amargo de la sociedad en V de Vendetta (1988 – 1989). Tan solo imaginar el torrente de ideas vertido en centenares y centenares de páginas, de sensaciones, de nuevas formas de contarnos las viejas historias de siempre, y todo ello en tan solo siete años. Para cuando terminó la publicación de V de Vendetta ya se había forjado la leyenda que le acompañaría hasta hoy que le definiría como uno de los guionistas más relevantes de los que han pasado por la industria del cómic.

Centrándonos en el contenido que ofrece este volumen de poco más de trescientas páginas nos encontramos ante un festival de sensaciones y emociones, y lo hace arrancando con Para el hombre que lo tiene todo. Se trata de una historia corta de tan solo cuarenta páginas publicada en Superman Annual 11 en 1985. En ella somos testigos de cómo Batman, Robin y Wonder Woman acuden a la fortaleza de la soledad con motivo del cumpleaños de Superman. Encontrándolo de pie en estado catatónico y con una extraña flor anclada a su pecho. Pronto averiguarán que ha sido el villano Mongul quien gracias a dicho parásito a modo de flor le ha anclado al mayor de sus sueños, vivir en el que fue el planeta de sus padres Kripton, y por tanto que el Apocalipsis jamás hubiese tenido lugar. De esta forma la acción transcurrirá de forma paralela por un lado en las vivencias en la mente del hombre del mañana en la que veremos la relación con su padre, una idílica vida en familia y hasta un hijo de nombre Van-El. Por otro lado, la cruenta batalla entre los tres héroes que acuden al aniversario de Superman y Mongul quien les desvela sus cruentos planes para aislar a su archi-némesis. Kal-El lo tiene todo, o casi, algo no es como debería ser en esa vida que tiene, y su relación con su padre dista mucho de la que el querría que fuese, de esta forma el maestro Alan Moore nos hace reflexionar sobre esos sueños tan reales que a veces tenemos, sueños que aunque en ocasiones salpicados de gotas amargas son lo suficiente idílicos como para no querer despertarnos de ellos, ¿Que sensación nos queda al despertar y comprobar que esas vivencias eran tan solo sueños? Pues lo mismo le sucederá a Superman y en esta ocasión podrá hacer frente al responsable de su agridulce despertar. Aquellos que se acerquen por primera vez a Para el hombre que lo tiene todo se van a encontrar con una lectura agradable, inteligente y a la par bellísimamente dibujada por el maestro Dave Gibbons poco antes de que se embarcase en el que es su mayor éxito también junto a Alan Moore, Watchmen.

Aunque la lógica nos manda leer el volumen de forma continuada, sin saltos, para de esta forma ver la evolución del guionista, poco nos costará dar el salto a otra de las delicatessen que contiene este volumen, me refiero como no a ¿Qué le sucedió al hombre del mañana?, clásico imperecedero en el cual Alan Moore estará acompañado por nada menos que el dibujante Curt Swan entintado por otro maestro George Perez. Esta inteligente a la par que interesante historia fue publicada en septiembre de 1986 en dos partes distribuidas en las series mensuales que se editaban por entonces de Superman, Superman #423 y Action Comics #583. Al igual que con Para el hombre que lo tiene todo el guionista de Northampton juega con el Y si..?, mientras que en la anterior historia lo hacía jugando con lo onírico en esta ocasión lo hace trasladándonos a un hipotético futuro en el cual Superman ha dejado de existir. Pero parafraseando al título de la historia ¿Qué le sucedió al hombre del mañana? para responder a esta pregunta se presenta un periodista del Planet en casa de Lois Lane para entrevistarla acerca de su relación con el héroe y para intentar discernir porque desapareció de sus vida de un día para otro.

Con Lois como narradora descubriremos como Alan moore juega con el mayor del miedo de los héroes, que alguno de sus archienemigos descubra su identidad secreta y decida tomar represalias contra sus seres queridos, y esto es justo lo que le sucede a Clark Kent en un plato de televisión donde es atacado por unos muñecos dirigidos por el Juguetero y el Bromista. Ya no habrá nada más que hacer, su identidad civil está comprometida y no solo no podrá volver jamás a dicha vida sino que tendrá que poner a salvo a sus amigos más cercanos tras sufrir estos ataques, para ello, se los llevará a la Fortaleza de la soledad.

Lo que sucederá allí es el combate final de Superman, tendrá que hacer frente a sus mayores enemigos quienes aprovecharan la ocasión para terminar de una vez con su vida. Las sensaciones de peligro, el paternalismo mostrado por Superman hacia sus amigos especialmente Lois y Lana, y una batalla en la que contará con inesperados aliados, todo ello recogido en cincuenta páginas que forman la que para mi es una de las mejores historias del hombre del mañana. ¿Quereis más? No os lo contaré pero aguardad hasta la última viñeta.

Sin apenas tiempo de respirar y tras terminar la sensacional historia anterior nos damos de bruces con la joya del volumen, Batman: La broma asesina, y es que si la obra ¿Qué le sucedió al hombre del mañana? es probablemente una de las mejores de Superman, esta lo es de Batman. Para aquellos que no conozcan esta historia decir que en ella Alan Moore juega como pocos con tres personajes: James Gordon, el Joker y Batman, siendo el objetivo del villano la ruptura mental del comisario hasta volverlo tan loco como el está, para ello, no dudará en presentarse en su hogar y disparar a su hija Barbara Gordon dejándola invalida. Esta es una historia de superación, de adversidades, de ver cuanto es capaz de aguantar el ser humano hasta dejar de serlo, cuarenta y poco páginas en las que vemos la mayor de las maldades y un héroe que llega lo suficiente tarde como para salvar a aquellos que más quiere pero no para tener un último entente con su archienemigo.

Si la historia ideada por Alan Moore se podría tildar como una de las mejores de su carrera, no es menos magistral el trabajo que realiza el dibujante Brian Bolland quien realiza un nuevo ejercicio de demostración de como debería ser el dibujante perfecto de cómic. Alguien capaz de transmitir sentimientos tan difíciles como el miedo, la angustia, la aflicción creando en el camino algunas viñetas que quedarán para siempre en nuestra memoria como aquella en la que Barbara con los ojos abiertos como platos abraza a Bruce en el hospital, o en la que vemos a un James Gordon roto, desnudo, sentado en el carrusel o la famosa viñeta en la que vemos al Joker en su versión más pavorosa.

Como último apunte decir que la versión que se incluye en el volumen es la restaurada con los nuevos colores que bajo mi punto de vista han mejorado la atmosferica y el magnífico trabajo de Brian. Como no, os recomiendo fervientemente que leais la reseña que escribió mi compañero Jordi Pardo de esta obra.

Tras leer estas tres historias sin lugar a dudas uno se queda con la sensación de que ha valido la pena la inversión de 25€ que vale el volumen, por suerte para nosotros, se complementa con una serie de historias protagonizadas por Green Arrow, Green Lantern Corps, el Vigilante, La cosa del pantano, el Fantasma Errante o Clayface. Historias que aunque no son tan famosas como las anteriores en cada una podremos encontrar buena parte de la magia que hizo famoso al guionista inglés y que quien sabe, quizás las termineis incluyendo en vuetro top ten particular del guionista.

En definitiva, estamos ante una autentica joya de volumen, pocas veces en una antología de un autor podemos encontrar un nivel tan alto en las historias que se incluyen, y en esta ocasión nos encontramos ante algunas de sus mayores obras maestras, ¿Qué más se puede pedir?