Aquellos que tengan buena memoria y una vena nostálgica, recordarán el nombre de Andrew Wildman de los títulos de los cómics de Transformers (en sus cabeceras británicas y americanas) de finales de la década de los ochenta y de los noventa. Casi veinte años (y cuatro superproducciones cinematográficas) después, este veterano dibujante sigue siendo el autor más importante que haya dibujado las aventuras de Optimus Prime y compañía. Aprovechando su estancia en el Salón del Cómic de Barcelona, desde Dolmen quisimos hablar con él para charlar sobre los Transformers en particular y sobre los cómics en general. Obviando sus declaraciones off-the-record con su opinión sobre las películas, os dejamos a continuación con la entrevista que mantuvimos con Andrew Wildman. Entrevista publicada anteriormente en Dolmen 226.
Pedro Monje: Andrew, vamos a empezar con nuestra clásica pregunta. ¿Cuándo empezaste a leer cómics?
Andrew Wildman: Empecé cuando era muy joven y al principio lo que leía era básicamente cómics británicos. Pero lo que realmente me convirtió en un gran aficionado a los cómics fueron los cómics Marvel. Estamos hablando de finales de los sesenta o principios de los setenta, que es cuando tendría unos siete años más o menos. Me gustaban mucho Spiderman, Los Vengadores, Los Cuatro Fantásticos. Spiderman era mi personaje favorito con esa edad. Al final estuve leyendo cómics durante muchos años y enseguida tuve claro que iba a querer dedicarme a ello. Estudie diseño gráfico y empecé a mandar muestras de páginas a algunos editores del mundillo británico, que por aquel entonces eran básicamente 2000AD y Marvel UK. Al final fue Marvel UK la que me pidió que hiciera dos páginas para un cómic de Thundercats. Les gustó y estuve haciendo la serie durante un tiempo. Después de Thundercats hice algunas entregas de Ghostbuster. En ese momento el editor de Transformers en su edición británica vio mi trabajo y me preguntó a ver si estaba interesado en hacer la serie. No es que un principio me entusiasmara mucho pero el dinero me venía bien así que le dije que sí, que estaba dispuesto.
P.M.: Antes de seguir hablando de tu carrera, nos gustaría preguntarte primero por los artistas que más te influenciaron en un principio.
A.W.: De todos los cómics que leía cuando era pequeño, sin ninguna idea el que más me llamaba la atención era John Buscema. Por aquel entonces solía dibujar Los Vengadores y Conan y su trabajo era espectacular. Tenía una humanidad desbordante y sus personajes parecían real, tenían mucha expresión. También me gustaba mucho Barry Windsor-Smith, que también dibujaba Conan por aquel entonces y lo hacía muy bien. Ellos dos creo que fueron mis mayores influencias. Además también me gustaba Jack Kirby y Steve Ditko, pero no tanto como aquellos dos. Buscema era mi “dibujante Marvel” preferido.
P.M.: Pasamos directamente a hablar de Transformers, una serie a la que quedarías eternamente asociado. ¿Cómo recuerdas aquellos primeros días?
A.W.: No recuerdo aquellos primeros días en Marvel UK muy claramente. Recuerdo que lo primero que hice fue una historia corta de los Dinobots que salió en un especial navideño de la editorial. De ahí luego pasé a hacer las portadas de la serie de Transformers, aunque no sabía muy bien cómo eran los personajes y quién era cada uno. Por ejemplo, yo dibujaba a Soundwave pero no tenía ni idea de quién era Soundwave. Si es que no sabía ni quién era Optimus Prime y me limitaba a dibujar desde las referencias. A pesar de ellos les gustó mi estilo y me ofrecieron dibujar la serie.
P.M.: Cuando te hiciste cargo de la serie regular, desde el primer momento introdujiste matices antropomórficos en los Transformers. ¿Cómo fue la reacción?
A.W.: Me consta que la reacción inicial de la gente no fue muy buena, pero afortunadamente por aquel entonces (hay que pensar que yo empecé a dibujar esta serie a finales de los ochenta) todavía no existía Internet y la única forma de enterarme fue leyendo las cartas de los lectores, las que llegaban a la redacción. Pero llegaron meses después de dibujar las primeras páginas así que ya era tarde para cambiar el estilo. Pero a la mayoría de la gente sí que le gustó, y a mis editores, aunque siempre me encontraba con muchos me preguntaban “¿Por qué los Transformers tienen dientes?”.
P.M.: ¿Y qué es lo que te llevó a cambiar el acercamiento y el estilo de los Transformers?
A.W.: Pude hacerlo básicamente porque Marvel UK no tenía ningún libro de estilo ni indicación concreta. Cada dibujante lo encaraba como quería y mientras dibujaran a los personajes con grandes hombros. Había muchos estilos y de ahí surgió el mío, con una intención más orgánica. Si que puedo deciros que una gran parte de la inspiración surgió del Machine Man de Barry Windsor-Smith, que lo estaba publicando Marvel por aquel entonces. Fue una influencia en el sentido de que eran personajes metálicos pero tenían una componente humana. Aquello me gustó y pensé que podía adoptarlo en Transformers. Hay que tener en cuenta que los robots y los Transformers no se dañan de la misma forma que los humanos y tampoco se curan igual. Si tienes dos gigantes robots enormes peleando entre ellos o dos coches colisionando, se dañan y se estropean de una forma concreta. Les faltarán partes y piezas hasta que puedan arreglarse más adelante.
P.M.: ¿A qué se debió el cambio de Marvel UK a Marvel USA? ¿Fue algo inesperado?
A.W.: Sí, me pidieron hacerlo porque el dibujante regular de la serie en aquel momento, Geoff Senior, quería salir de la serie para dedicarse durante unos meses a hacer una novela gráfica de Death’s Head. Yo en un principio iba a dibujar cuatro números pero el segundo mes Geoff llamó a la editorial y les dijo que no quería volver a dibujar los Transformers. Yo no puse ningún problema porque claro, yo estaba dibujando para Marvel USA. ¿Qué más podía pedir?
P.M.: Tanto en Marvel UK como en Marvel USA yo siempre se te recuerda colaborando con el guionista Simon Furman y con el entintador Stephen Baskerville. ¿Qué tal era la relación con ellos?
A.W.: Con Stephen la relación siempre ha sido buena. Lo bueno de trabajar con él es que dibujara como dibujara, siempre iba a tener el mismo resultado. Si dibujaba algo de forma rápida, el se encargaba de rellenarlo. Si yo dibujaba con muchos detalles, el aportaba lo justo. El resultado siempre tenía el mismo estilo. Sabía de antemano que la página iba a quedar muy bien. Es un tipo muy agradable. Con Simon yo he trabajado muchos, muchos años. Y la relación con él es inmejorable. Lo bueno de trabajar con Simon es que el tipo no solo era guionista, sino que también era editor así que sabía exactamente decirme cuando decirme que tenía que cambiar algo de una forma completamente profesional. No podía hacer trampas con él. También es un gran tipo.
P.M.: Desde que dejaste la serie de Transformers de Marvel has acabado volviendo a dibujarlos en varias ocasiones, aunque siempre decías que era la última. La más importante posiblemente sea la última, Regeneration One, que continúa la serie dónde quedó colgada cuando Marvel USA dejó de publicarla. ¿Cómo surgió la posibilidad de trabajar en esta serie de nuevo?
A.W.: Todo surgió cuando IDW se puso en contacto conmigo para comentarme que iban a publicar esta serie. Querían saber qué pensaba y querían que les dibujara seis portadas. Yo en principio no iba a dibujar Transformers nunca más, pero acepté hacer las portadas con la idea de al acabarlas, ahora sí, dejar a los personajes para siempre. Pero les gustó mucho las portadas que hice y me preguntaron (y pidieron) si estaba interesado en hacer las páginas interiores. En un principio les dije que no, que estaba muy ocupado, pero no se rindieron y me preguntaron qué condiciones tendrían que cumplirse para que yo dibujara los cómics. Les dije, sin dudarlo, que tenían que estar Simon Furman, porque no estaba dispuesto a trabajar con nadie más. Y ahí es donde les dije que tendría que ser una serie que continuara lo que dejamos colgado en su día en Marvel USA. Y, para mi sorpresa, me dijeron que sí a ambas cosas y el proyecto salió adelante. En un principio iba a durar cinco números, pero cuando le convencieron a Simon para acabar la serie, él propuso que fuera de veinte números y que llegará al que sería el número cien original. Y así surgió el proyecto. Aunque no pude dibujar los últimos números de la serie, admito que ha sido todo un honor poder participar desde el principio.
P.M.: En algunos artículos de tu blog has escrito “No hay vuelta atrás”. Así que la pregunta es obligada, ¿esta vez te ves a corto/medio plazo dibujando de nuevo a los Transformers?
A.W.: [Risas] No, no. Esta vez no. [Risas, mientras la mujer de Andrew sentada a su lado asiente con la cabeza y responde con un “Never say never”] No creo, porque nosotros ya hemos podido acabar nuestra historia. Hasta ahora no estaba acabada pero una vez hecho, no veo motivos para regresar una vez más a Transformers. Estoy haciendo muchas cosas ahora.
P.M.: Perfecto. Regresamos un poco en el tiempo para hablar sobre tu etapa en Marvel post-Transformers. Por aquel entonces te encargaste de la cabecera de la serie de animación de X-Men, Spiderman 2099, algunos proyectos arácnidos… ¿Cómo recuerdas aquellos días?
A.W.: Tras el cierre de Transformers, mi mayor preocupación era tener que trabajo fuera como fuera. Lo primero que me ofrecieron fue hacer la serie de G.I. Joe. No es que fuera una gran alegría, pero al menos iba a poder dibujar a personas reales y no robots por todos los lados. Hice G.I. Joe durante un tiempo pero no me agradaba particularmente el aspecto militar de la serie, con pistolas y tanques por todos los lados. [La mujer de Andrew interrumpe para contar que por aquel entonces tenían un niño pequeño que nos preguntaba continuamente para qué servían las pistolas y por qué había gente disparándose continuamente entre ellos]. Sí, era muy difícil de explicar. Aquello duró un tiempo y tras ello me puse a dibujar X-Men: The Animated Series. Que conste que un principio yo iba a ser el dibujante regular de Quasar, pero ese proyecto no salió adelante y un editor me ofreció encargarme de la adaptación de la serie televisiva. Vale, no eran los “verdaderos” mutantes, pero para mí fue una gozada poder dibujar a los personajes. La mayor oportunidad para mí fue pasar de esa serie a la de la Gata Negra. Esa sí pertenecía a la continuidad real del Universo Marvel. Fue fantástico. Yo estaba dibujando el Universo Marvel. Y a Spiderman. Fue genial.
P.M.: Preparando la entrevista, hemos descubierto que también has colaborado intensamente en las últimas temporadas del Doctor Who y que has participado en el último especial de Navidad. ¿Cómo surgió esta oportunidad?
A.W.: Sí, también ha sido un honor. Todo empezó hace doce años, cuando estuve trabajando con una compañía de juegos ordenador, la que tiene los derechos de las series de 2000AD. Allí conocí a una persona que estaba tratando de hacer cortos para televisión y nos llevamos muy bien, aunque luego perdimos el contacto. Diez años después me llamó para ver si estaba interesado en trabajar con él en una serie de la BBC Three, con una temática de horror. Se titulaba The Fades. Mi trabajo consistía en hacer storyboards para la serie y la verdad es que quedaron encantados, sobre todo el director Jack Thorne. Seis meses después de acabar ese show recibí una llamada de Jack que me propuso colaborar en otra serie. Le pregunté: “Sí, por supuesto, ¿qué serie es?”. Y me respondió: “Doctor Who”. Evidentemente, para un británico que le guste la ciencia ficción como yo existen pocos honores mejores que trabajar en la serie de televisión de Doctor Who.
P.M.: Tenemos un par de últimas preguntas. La primera es sobre tu serie propia, Horizon, donde no solo dibujas sino que también guionizas. ¿De dónde sale esta idea? ¿Cómo surge el gusanillo de escribir tu propia serie?
A.W.: Es una idea que he tenido desde hace mucho tiempo. No os hacéis una idea de cuánto. Ha pasado por muchas iteraciones con el paso de los años, desde los noventa, y varios guionistas han llegado a estar involucrados en algún momento u otro, incluso Simon. Pero al final está escrito únicamente por mí. Está basado en dos cosas básicamente. La primera es en cosas que a mí me gusta dibujar y la segunda es que la historia está basada en entrenamiento y maduración personal por parte de profesionales.
P.M.: Antes de acabar, queremos saber qué cómics estás leyendo actualmente y cuales sigues regularmente.
A.W.: Lamento decepcionaros pero apenas leo nada actualmente. Ni siquiera leo nada de Marvel Comics, que es la editorial con la que crecí de pequeño. Quizá tenga que ver con el hecho de que ahora trabajo mucho más en series de televisión que en el mundo del cómic, pero la verdad es que los cómics ya no me atraen tanto. De vez en cuando, cada dos meses, me leo alguna novela gráfica, pero ya no es lo mismo. Quizá dentro de unos años…
da la impresión que quedó fastidiado del genero después de dibujar tanto robots.
Qué recuerdos! Esta serie, junto con la de GIJoe, fue de las primeras que coleccioné mes a mes (o cada dos meses al final) y me sirvió para engancharme a otras series que publicaba forum por entonces. Recuerdo con aprecio los números dibujados por este artista porque me pareció que mejoraba el apartado gráfico de la serie, haciéndolo más «moderno».
El Regeneration One del que hablan se ha publicado en España?
«El Regeneration One del que hablan se ha publicado en España?»
No, todavía no. Planeta es la que tiene los derechos así que e posible que lo publique ne algún momento, pero con la lentitud que publica los cómics de transformers no se…
Desde luego kaulso que están siendo bastante lentos.ya pensaba que no iban a seguir cuando veo que para febrero públican un primer tomo de robots in disguise.habrá que probarlo, a ver si se acerca en calidad a la excelente more than meets the eye.uno de los guiones más densos y divertidos que me he echado a la cara en mucho tiempo.
RID está bien, es más trama política que humor y aventuras, pero está muy bien hecho.
Lo de Planeta efectivamente va lento de cojones y a saber qué pasa con Regenration One (que es bastante floja) porque editorialmente están haciendo cosas muy raras (faltan un montón de comics entre All Hail Megatron y Renacimiento que no sé por qué no se han editado).
Yo era más de Senior pero coincido en que Wildman fue un subidón porque dio un estilo muy sorprendente (habla de lo de los dientes, pero también era rayante que los transfos tuvieran pupilas).
No es por nada, pero a mí Wildman siempre me ha parecido bastante malo.
Y sí, Regeneration One es un mojón. Da la impresión como si Furman hubiera dicho: «para lo que me queda en el convento me cago dentro».
Leches, ¿soy el único para el que la etapa mítica fue la de Bob Budiansky con un Don Perlin irreconcible baje las sublimes tintas de Akin y Garvey?
A mí también me gustaba más Budiansky que Furman y mis dibujantes favoritos de la serie eran Don Perlin y José Delbo.
Con Wildman los transformers parecían gente haciendo un cosplay con cajas de cartón.
Pues a mi me gusta muchísmo mas Simon Furman que Budiansky. Aunque he de decir que me gusta mas el trabajo de Furman en Marvel UK en que en la etapa final americana, que aun con todo no está para nada mal. Budiansky en cambio tiene algunos números buenos intercalados con morralla muy dura…
Comparar a Furman y Budiansky es como comparar la noche y el día. Son dos guionistas d caracteísticas tan diferentes…
A Furman se le daba bien la space opera y las tramas a largo plazo, con sus giros y una mayor épica.
Budiansky está en genarl peor considerado, pero a mi me gusta mucho. es más clásico muy de esa Marvelk
Comparar a Furman y Budiansky es como comparar la noche y el día. Son dos guionistas d caracteísticas tan diferentes…
A Furman se le daba bien la space opera y las tramas a largo plazo, con sus giros y una mayor épica.
Budiansky está en general peor considerado, pero a mi me gusta mucho. Es más clásico, muy de esa Marvel en que cada episodio era una h¡storia con su moraleja. De hecho, a este señor le alabo el que era capaz cada mes de presentarte a unos secundarios humanos muy bien definidos y que te interesara su vida. El factor humano en los primeros TF estaba curradísimo: Bomber Bill, Charlene, el mafioso que usaba a Megatron como pistola, El creador de Videojuegos que «mató» a Optimus Prime, Robot Master, el negro aquel de la copia de SHIELD aquella, la paleontóloga que descubría a los Dinobots, El Mecánico, el vendedoer de coches usados, los niños que se convertían en aventureros espaciales… es una lista interminable, todos tenían sus personalidades y objetivos y tenían una gran interacción con los Transformers, sirviendo para definir sus personalidades.
Eso es lo que me repatea de las películas. Después de la primera tenía esperanzas de que siguieran esa línea, pero en la segunda ya lo mandaron todo al carajo, estancándose en su humor chorras, sus transformers canijos, los de tamaño transatlántico o los que tienen pelo. Una pena. Toda aquella primera etapa fue muy grande, hasta que un poco perdieron el norte justamente hasta que llegó Furman y puso un poco de orden.
¿Dientes? ¿Y para qué puñetas tienen boca? ¿O nariz? Si el diseño óptimo de un robot de combate ya lo vimos en Los Increíbles, y no era ni humanoide…
De las películas mejor no hablar. Cogieron los nombres, las características de cada personaje y algunos conceptos e hicieron lo que le dio la gana.
Budiansky era bastante brillante. Hay que entender también que su objetivo era repartir el protagonismo entre personajes al tiempo que metía personajes nuevos y eso lo hizo con éxito. El número de Blaster en el Pozo de Fundición sigue siendo mi cómic preferido de transformers.
Furman efectivamente era otro rollo, pero hizo lo que el fandom pedía que era historias de robots pasando del elemento humano (Budiansky metió personajes humanos memorables, pero en general en los diferentes comics, películas y series animadas que han salido 30 años los personajes humanos han sido muuuuy pestosos)
Como olvidar a Wildman y sus Transformers con dientes… Hablando en serio, me parece un buen dibujante, sus dibujos de Spider-Man 2099 me parecen geniales, aunque sus dibujos de Transformers a veces parecen gente en trajes (http://www.tfarchive.com/toys/references/heads/images/prowl_marvel_wildman.jpg), me gustan